Partida Rol por web

Es consciente de que tienen que ganar tiempo porque si no tal vez no salgan de esa. Parece que el intentar que el deforme les exlique sus planes no ha funcionado, así que lo intenta con la profesora.

- ¿Qué hace aquí? ¿Qué significa esto? - pregunta airada - ¿Para qué nos necesitan? - no sabe si con eso bastará, así que prueba otra cosa. Gira la vista hacia Anne e Izzie, intentando provocarlas para montar un pollo - Y vosotras, ¡zorras! ¿Esta es vuestra idea de triunfar en la vida? ¡Sois patéticas! ¿Os pone la sangre? Oh, por eso pasabas de Vance, ¿eh Izzie? ¡Prefieres follarte a un vampiro! ¿Tanto te moló Crepúsculo?

Ambas solo tendrían que extender la mano para coger una antorcha... (y ahora que te fijas, las dos tienen navajas y Annie una estaca guardada en el pantalón).

RESPUESTA A LA EDICIÓN: Los postes empiezan a soltarse pero aún no están (falta por lo menos un minuto si quieres hacerlo disimuladamente).

Y avisa a las otras de alguna manera clara porque igual se cabrean con tus palabras y no pillan lo que intentas hacer... :D

Antes de que se cabreen de verdad y los dejen morir desangrados o despellejados o a saber, Elizabeth concentra su mente todo lo que puede para hablar con Anne y con Izzie.

- ¡Chicas! ¡No os cabreéis! ¡Seguidme el rollo, necesito tiempo! ¡Cuando veáis estamparse a los vampiros que están a vuestro lado, coged rápido las antorchas que tenéis cerca! ¡ Las navajas no servirán, utilizad la estaca o el fuego! ¡Estad preparadas, va en serio!

Espera y desea que las animadoras le hayan creído, sino están perdidos. Aunque se suelten rápido aun tendrán a dos vampiros cerca y necesitaran de la ayuda del resto para que nada más liberarse no mueran desangrados.

Annie, Izzie, Casey: Prácticamente nada más entrar en la sala oís a Elizabeth gritaros una bordería...

Cita:

Seguida de algo muy diferente:

Cita:

 Pero estas últimas palabras no las ha gritado, las habéis oído en la mente... cosa que después de todo lo que ha pasado en las últimas horas, no os sorprende demasiado, ya que por los que sabéis, tanto Elizabeth, como Andrew, como Casey tienen algún tipo de poder mágico.

-¿Y por qué tienen qué llevarme? Sé caminar yo solita, ¿eh?-le espeto al vampiro que ha...¡ew! ¡besado a la profe! algo ofendida, aunque con el corazón apenas latiendo de lo encogido que lo llevo en el pecho. Luego miro a la profesora.-¿Cuándo he dado yo problemas por desobediente? ¿eh?

No son ganas de putear; realmente estoy bastante harta de ser tratada como la carnaza, porque aún me llevan sujeta como si fuera a hacer algo. De poder, ya hubiera salido corriendo por mi propio pie, porque cada vez más y más adrenalina se me está acumulando en las venas por el miedo.

El lugar a donde llegamos no se diferencia demasiado de un maldito plató de peli de miedo de bajo presupuesto, con todo dispuesto para el tal ritual en el que yo tendría que tomar parte. Moore y Keks ya están en dos de los tres extremos del triángulo, y la última nos grita nada más entrar.

Claro, que yo no me doy por aludida, hasta que oigo la segunda parte en mi propia cabeza. Miro fijamente a Liz para asegurarme de que no está hablando; ¿qué demonios significa esto? ¡Espera, que la pelirroja era bruja! ¿Ha sido telepatía? ¡Yo quiero! ¡Vamos a intentarlo!

...Espera, ¿cómo se supone que va ésto? Voy a intentar pensándolo mientras la miro.

"Liz, no seas dramática; dicen que nos dejarán marchar de vuelta a casa si les ayudamos con el ritual."

Claro, problema: sabiendo esto, ¿qué van a hacer Annie e Izzie? Las tengo al lado, y no molaría nada intentarlo y quedarme sola. Mejor veo qué deciden ellas y ya me meteré; entreteniendo soy bastante buena.

Hace un sobreesfuerzo para no poner los ojos en blanco cuando escucha a Casey, todo lo que tiene de buena parece que lo tiene de ingenua también. Intenta atajar el problema excluyendo a Casey del plan, concentrándose otra vez para comunicarse con ellas.

- ¡Claro, confiemos en los vampiros! Ok, Casey, tú quédate quietecita pase lo que pase. Anne, Izz, realmente necesito que los entretengáis dos minutos, por favor! ¡Confiad en mi!

Utiliza con estas palabras todo el poder de persuasión que tiene, aunque en el fondo sospecha que las animadoras no son del tipo confiado ni de quedarse quietecitas.

Trago saliva. Y le dedico una mirada, esgrimo una sonrisa ligeramente amarga. No era la visión más positiva que podría haber tenido. Mis ojos recorren nerviosos toda la sala, localizando armas, objetos y demás, quiero distraer mi mente de auqellas imágenes tan horribles. No puedo permitir que le pase nada a Eliz. Y entonces me percato de que aún seguimos "conectados". Exteriormente, asumo una posición de rendido, mientras me comunico abiertamente con ella, fascinado por el hecho de poder hacer estas cosas. Esto es increíble, Eliz... No sabía que tuvieras todas estas capacidades, estos dones... En fin, eso ahora no importa. Ya tendremos tiempo cuando salgamos de aquí de llevarlos a la práctica. Jijijijiji. Perdón, no he podido evitarlo. Ahora el tono de mis pensamientos, es más serio, aunque no tan preocupado como me mostrara la primera vez que nos vimos rodeados. Esta vez, parecía mucho más seguro de mí mismo. Cielo, escúchame. Sé que ambos hemos visto... Eso. No me gusta que consideres esa posibilidad. Ahora bien, si pasa algo... quiero que tú te salves. No, no, no. No quiero negativas. Eres realmente la única que sabe de esto, que puede salvarnos de una forma eficiente y certera. Jamás habría pensado que los vampiros invadirían mi vida, de hecho, no los consideraba muy reales, hasta ahora... Tú sin embargo, ya sabías lo del plano demoníaco o infernal, o lo que sea. Me callo unos instantes, de pronto, llegan los demás, y Eliz reacciona. Si pudiese, la habría callado, pero tampoco tenía cómo hacerlo. Levanto la vista hacia los demás. Observo cómo proceden, hasta que quedan en sus posiciones actuales. Mientras tanto, puedo sentir cómo los postes empiezan a aflojarse. Estoy a punto de sonreír, pero me contengo. Eliz, no liberes los postes hasta que veamos la reacción de las chicas. Opino que ahora... Es Wash nuestro amigo, y que Miller no tardará en llegar montado sobre una de esas arañas. Espero. Mis pensamiento dejaban de ser conversación para volver a fundirse en mis vicisitudes mentales, por lo que rápidamente desvío la atención de nuevo hacia Eliz. Sólo quiero que me prometas que si tienes la oportunidad, te marcharás. Me ocuparé de que ninguno de estos hijos de puta con mandíbulas altamente desarrolladas te alcance. Tenlo por seguro. Inspiro.

Te quiero, Elizabeth. Realmente aún no sé qué es, pero... Espero tener la oportunidad de salir vivo de aquí para invitarte a cenar. Expiro. Y sonrío. Sonrío ampliamente, mostrando una incomprensible mueca de felicidad. Alegría. Placer. Es una sonrisa casi enfermiza, por su estaticidad.

Esto va a ser una pelea, pero no contra los vampiros... Cómo te convenzo de que salgas corriendo cuando te lo diga?- piensa/habla con Andrew - Por favor, no te arriesgues...- le implora. Tiene la mente ultra concentrada, primero comunicándose con las animadoras y luego continuando la conversación con Andrew. No sabe si molaría o no tener durante más tiempo este poder, igual es un poco estresante. - Ahora escu... qué haces con esa sonrisa?? Que nos pillan!- Elizabeth tiene que reprimir las ganas de sonreir ella misma, esta situación se está convirtiendo en extremadamente bizarra, pero no puede evitar tener la mente puesta en Andrew.- La cena suena bien, si. Pero déjame que cambie de tema un momentín - dice intentando que a él no le moleste que aparte esas cosas de su mente - Les he dicho a las animadoras que cuando empuje a los vampiros cojan las antorchas, con un poco de suerte nosotros podremos coger los braseros y atacar mientras ellas también lo hacen. Pero si sólo podemos salir nosotros corriendo... Bueno, igual tenemos que hacerlo y volver con armas...- empieza a estar incómoda por toda la situación, no quiere dejar a nadie atrás, pero tiene miedo de que el resto no cooperen.

Mis ojos permanecen clavados en Eliz tras esa visión. Trago despacio la saliva, sin apartar mis ojos de la joven pelirroja. Esas imágenes, me habían causado un pequeño shock. Eran muy vívidas y reales, aun así... Ya habíamos vivido una situación tal vez igual de difícil, y nos habíamos salvado. Eliz te ha salvado, que es distinto. Poco a poco, la seriedad, la expresión vacía de mi rostro, se va tornando en una mueca más divertida. Asiento a Elizabeth, mirando al frente, para no despertar ningún tipo de sospecha.

Y sorpresa: Más vampiros, más alumnos, y una profesora. Derriere... Será zorra. Por eso estaba así en el autobús... No quería que nadie se quedara atrás, se diera cuenta de nada de lo sucedido. Al empezar a llegar los demás, me dejo caer un poco, procurando relajarme lo suficiente, para parecer cansado a los ojos de nuestros nuevos acompañantes. Observo detenidamente la situación, y quiénes quedan vivos. Escucho en silencio todo lo que dicen, sintiendo una extraña fuerza, que parece rodear los postes. Me preparo a sonreír, pero recuerdo que eso podría delatarnos. No eran muchas las opciones. Y seguía creyendo que Miller aparecería de un momento a otro, quién sabe si cabalgando una de esas arañas. Esa visión, aunque no lo fuera, me gustó mucho más. Lo que no comprendía era... qué clase de Don tenía Casey. Teníamos poco tiempo, y parecía que sólo Eliz y yo, queríamos hacer algo por salvar las vidas de todos, no sólo las nuestras. Calculo probabilidades, aunque no sirve de nada. Es un reflejo mental. Son cinco vampiros, una profesora que a saber si es un gusano por dentro con colmillos venenosos... Y ese tipo al que le tengo unas ganas que no me lo creo ni yo. Darthok. Qué nombre más horrible... 

Escupo al suelo, cuando todos han tomado posiciones, y se disponen a lo que sea. Sin olvidar lo que Eliz nos ha comentado. Levanto la vista hacia Derriere, con una amplia sonrisa en el rostro. - ¿Qué, profesora? ¿Le gusta la necrofilia? No lo sabía... Aunque claro, siendo de Biología... normal que se interese por estas cosas - Miro a Darthok, sin borrar la sonrisa de mi rostro. - Y tú, muerto viviente... ¿Te ponen las vivas o qué? ¿Acaso los muertos.... - Señalo con la cabeza hacia sus genitales - ...? - Empiezo a reírme. No. Empiezo a desternillarme. Poco a poco, me voy tranquilizando, dando aún algún que otro espasmo de risa. Pretendía provocarles un poco, para desestabilizarlos. Mover sus posiciones tal vez. Hecho esto, mis ojos van a parar a Annie. La miro. Necesito leer algo en ella, en su gesticulación, en su tono de voz. Quería comprender de qué lado estaba. A Izzie, la miro de refilón. Era peligrosa si se lo proponía. Por último, Casey. No lo entendía. ¿Qué clase de Don tenía esa chica si era la última en completar el ritual?. Mis ojos vuelven hacia Anne Marie, buscando los suyos. Sólo quiero contacto ocular, la expresión de sus ojos, no ya de su cara. Me vuelvo hacia Casey. - ¡Ey, Casey! ¿Qué está pasando? ¿Por qué nos tienen prisioneros? - Vuelvo a lanzar una mirada a Anne. A Izzie también, de soslayo. Esta vez, es a Anne a quien me dirijo. - ... ¿Por qué? - Niego para mí, hay algo que me perturba de una forma importante. No se dan cuenta... - ¿Desde cuándo alguien que hace rituales demoníacos, mata compañeros de clase, se rodea de muertos y se tira a un vampiro, o un muerto, como queráis, le perdona la vida a nadie? Chicas, os están engañando... Y no creo que vayan a haceros dueñas de lo que sea que os hayan ofrecido. Meros peones. Son meros peones. - Miro a Izzie. Le guiño un ojo, y luego, vuelvo a sonreír. - Está vivo. Así que antes de que pueda pasarle nada más... Vayamos a ayudarle. - Ella sabía de quién estaba hablando. O esperaba que se lo imaginara, y acertara. Miller, Miller, Miller. Por último, dirijo la mirada a Eliz y le sonrío, encantado. Después vuelvo mi vista hacia los demás. Sabía que me había ganado unas pocas leches como mínimo. Tiempo, era tiempo. Y si puedo, sentado como estoy en el suelo (si lo estoy), recojo con una de la manos arena, un puñadito de arena.

Seguimos a la profesora hasta aquella cueva. Todo esto es cada vez máaaaas raro. Respiro hondo antes de encararme a la situación. Un montón de vampiros, ese tipo uugghhhh quien demonios es ese tio? Es... es asqueroso! Por favor!

"Genial, así que Miller sólo es un cebo... pues vaya mierda, esperaba que tuviera algún valor más pero por lo visto no. Y que le ha hecho pensar que nos iba a preocupar el imbécil ese?! Bueno vale, esto es absurdo, ya hiciste el trato..."

-Bitchy, vas a tener que pagarme mucho por esto, si sobrevivimos...- murmuro, para que lo oiga mi amiga.

Miro a nuestro alrededor, el pentáculo ese extraño en forma de triángulo, Moore y Keks colgando de palos y esos restos no-humanos en el medio. Me quedo absorta unos segundos mirándolos, tratando de reconocer que es. Tiemblo levemente al ver que es, casi puedo sentir por todas las fibras de mi ser lo que emana de esa calavera...

"No, no, no... esa "Cosa" no debe levantarse o estaremos muertas. Odio tener razón con estas cosas, es en lo único que NO me gusta tener la razón. Sabía que esta tipa nos traicionaría, o mejor dicho, es tan estupida que cree que esa cosa la va a salvar, nos va a devorar a todos en cuanto se levante... Las cosas como esa no razonan ni distinguen amigos de comida!".

-Gracias Sr... no he entendido su nombre- respondo, automáticamente, ante la presentación de aquel vampiro horrible, el peor de todos, con diferencia. Sonrío friamente mientras hago uso de toda mi sangre fría para no vomitar cuando ese ser repulsivo nos mete un repaso de arriba a abajo.

"Debemos de ser su no sé... shaitan con queso fundido y pastel de manzana?" Me estremezco levemente. Cierro los ojos por unos segundos para retomar el control de mi misma y hacer lo que hay que hacer, salvar a estos tres tontainas. Por su culpa estamos todos metidos en esta mierda de embrollo cuando podriamos estar Izzie y yo disfrutando de un día maravilloso en el centro comercial.

Abro los ojos repentinamente cuando oigo los berridos de la cretina de Keks. Estoy a punto de decirle a la profesora Derriere que vale, que Keks se podía quedar fuera del trato, cuando oigo su voz de nuevo diciendo todo lo contrario, haciendome desistir. Me quedo extrañada y pensaría que me he vuelto loca si no fuera por todas aquellas absurdas partidas de superhéroes en casa. Sí. Esto es definitivamente telepatia. La pelirroja es telépata. Que bien. No es momento de replantearme la realidad y el porqué eso está existiendo en estos momentos así que simplemente lo arrincono dentro de mi mente. Algo más para la saca de fenómenos freaks.

"Oh, claro y tu eres muy de fiar... verdad? Te pasas la vida mirándonos por encima del hombro y creyéndote mejor que todos nosotros y ahora quieres que te hagamos caso. Pero la que está atada ahora mismo a un poste a punto de morir eres tú. Eso que te dice ratita? La próxima vez no juzgues un libro por su portada, estúpida", le respondo mentalmente. "Por tu bien espero que sea una buena jugada, Keks."

Casi, repito, casi me dan ganas de estrangularla y acabar con el problema de raíz.
"Vale, si lo llego a saber no hago el trato para salvar a esta panda de idiotas" me lamento mentalmente. Trato de recuperar rápidamente la calma mental.

Le lanzo una mirada a Izzie, de nuevo. Seguidamente, miro hacia donde está Moore, colgando como un choricillos y zas! cruzo la mirada con él, por alguna razón está buscando contacto visual o eso me parece a mi. Parece un cachorrillo suplicante. Otro que se cree que somos imbéciles. Suspiro resignada.

"Bueno, está claro que he hecho un gran trabajo al respecto... en fin".

Pongo mi mirada más fría, no sin escaparseme cierto reproche y sonrío de nuevo. Show must go on.

-Dueñas? quien te crees que somos? Malicia Do'Urden?- me burlo de él, esperando que fuera realmente un friki como Jack o como John, ellos me habrían entendido, ellos habrían captado lo que significa. Tengo mis serias dudas acerca de Moore y de su capacidad intelectual. Quizás le he sobrevalorado. Pero es ya demasiado tarde. No importa, sí sé que Izzie me entenderá. Entenderá qué esa es la orden.

-Maniobra Gebbler- le susurro, medio sonriendo, como si fuera una broma personal entre ambas y no una clave. Bueno, en cierto modo era ambas cosas.

-Y tu, Keks, cierra esa bocaza de putón, te va a servir de poco cuando esto termine- respondo, poniendo la mayor de mis sonrisas maliciosas. No queriais a un arpia?- Debería dejar que esos vampiros se despachen contigo, sinceramente- pongo mi mejor pose de animadora arpia, la misma que usa Theresa, la capitana del equipo de cheerios de la escuela.

Primero, ese vampiro es muy feo. Segundo, Keks es más retrasada de lo que pensaba. Y tercero, ¿por qué Moore parece un chino cabreado?

Eso es lo que piensa Izzie Morgan tras la conexión telepática-rara con la pelirroja. A estas alturas no es que le asombre mucho que puedan llegar a hacer aquello; al fin y al cabo, tiene cosas más importantes en las que pensar. Por ejemplo, en que no quiere acabar como Malicia Do'Urden o ser violada por aquella reina con colmillos que la ha horrorizado besando a Derriere. Porque la morena, quiera o no, sigue viéndola como la profesora de biología que, por lo tanto, no puede tener ningún tipo de gesto vagamente sexual.

"Qué, ya no te ríes como antes, ¿eh, irlandesa? Claro, como la señorita ahora necesita nuestra ayuda..."

Está a punto de soltarle una de las típicas cancioncillas que suelen utilizar las animadoras durante los partidos. Algo así como I'm sexy, I'm cute, I'm popular to boot. I'm wanted, I'm hot, I'm everything you're not. Pero se calla. No es la situación. Ahora mismo la prioridad es salir de allí con vida, no dejarle claro a Keks que es una zorra seguramente con el pelo teñido. Y es que, por mucho que crea que su idea es simplemente una soberana estupidez (¿hachas? ¿Antorchas? ¿Wash siendo un zombie que todavía se lamenta de no poder volver a tirarse a Banks en los vesturios?), es lo único que tienen. Bueno, quizás no sea lo último, porque siempre existe el plan B, sea cual sea, pero por algo se llama Plan B.

Así que esta es la situación, piensa Izzie. Empalarlos con astillitas hechas con ramas a lo Vlad Tepes y cruzar los dedos para que esos malditos chupasangres sean unas nenazas. Comentarios despectivos para Romeo y Julieta versión friki incluidos, claro está. No zombies, no manuales que al final no te sirven de nada. Nanai.

Y entonces, Annie se lo susurra. Maniobra Gebbler. Siempre funciona, aunque en vivo supone que será bastante más difícil, sobretodo cuando cinco armarios dentudos acechan. Después de eso nunca entenderá por qué los vampiros se molestarán en hacer pesas después de morir, pero ahora no tiene tiempo para esas chorradas.

- Será divertido cuando le desgarren ese precioso cuello pálido -suelta una risita, dándole un pequeño codazo a Annie. Después mira a Keks-. Zorra. Yo misma te arrancaré el corazón después de esto si hace falta.

No le sorprende mucho que las animadoras piensen que es ella la que más ayuda necesita. Le da exactamente igual ahora mismo. No tiene ganas de discutir, así que se limita a transmitirles lo último que se le ocurre antes de que el poste se suelte completamente.

- Vale, podéis fiaros de mi o no, pero cuando os diga agachaos, que no quiero haceros daño. Y por cierto - no puede evitar añadir - si creéis que lo que he dicho en voz alta iba en serio, es que sois cortas. ¡Sólo quiero que salgamos todos de aquí!

- ¿Y por qué no lo haces tú misma, so puta? Tan valiente que eres y tanto que hablas... gallinita - sonríe maliciosamente. Por dios, como esto no funcione... bueno, casi mejor que me maten, porque si no tendré que escucharlas de vuelta a casa.

La profesora contempla vuestros intercambios de insultos verbales con una sonrisa en la boca...

  Bueno chicas, si queréis a la pelirroja muerta al final de esto es vuestra decicisión... yo creo que se lo ha merecido....

Y si queréis asistir a un buen número de desmembramiento... o desollamiento, dejarme a mí, puedo quitarle toda la piel dejándole las pecas... mientras todavía está viva...

Cuando en ses momento...