Partida Rol por web

- De acuerdo- dije encogiendome de hombres miendo esperaba a que terminara de hacerme el peinado tenia ganas de ver como me quedaba.

Mientras Elizabeth estaba distraída hablando con los otros chicos Anabeth aprovecho y le lleno el pelo con coletitas, le había quedado bastante ridículo, parecía una niña perturbada. Elizabeth no se había dado cuenta, pero mientras conversaba con el Ventrue pudo escuchar las risas de Anabeth que estaba detrás de ella.

- Ya has terminado- pregunte emocinada- A ver- fuy corriendo al baño para ver aquel peinado tan absurdo- Jooooooo, este no me gusta, porfa peiname bien-

Anabeth le quito las coletas y le volvió a cepillar el pelo. – A mí me gustaba, era muy original. A ver qué consigo hacer ahora. – Cuando te alisa el pelo, con unas manos rápidas y hábiles te hace una trenza. – Si no te gusta siempre puedo raparte el pelo al cero.

Aquello me gustaba mucho mas, me quedaba bien ademas estabamos de camino a una zona donde las trenzas eran normales- Gracias esto me gusta mucho-

No hay de que, es un placer.- La chica le mostro una sonrisa a la niñita, estaba contenta de que le gustara el peinado.

- jooo tu eres muy guapa a ti te quedaria bien cualquier cosa- pongo morritos en plan enfado de niña pequeña

No te quejes, tú también eres una niña muy mona, lo único es que no crecerás mas… es el problema de ser inmortal, y de que te convirtieran siendo tan pequeña. Igual Caín puede solucionar eso, ¿Por qué no se lo preguntas?

- Ya lo hice- confieso- Pero hasta que no terminemos la mision no podra ayudarme, pedense que con magia podria arreglarlo, pero solo puedo crear fuego y cosas asi, no puedo hacer mucho-

Bueno, igual puede hacerlo en un futuro, seguro que puede modificar su maldición a su antojo… igual puede hasta quitarla completamente.

- Las maldiciones no pueden ser modificadas, son impuestas y la unica manera de cambiarlas es romperlas, pero creo que si dejara de ser un vampiro moriria-

Igual no puede modificarla del todo, pero cuando estuve hablando con el si puede modificar unas cosas, fue amable conmigo y me conto muchas cosas. – Anabeth estaba dando una información que no le había dado ni a Eric.

- Si, tambien fue amable conmigo y me permitio recuperar la magia, era algo que habia soñado desde que me transformaron en vampiresa, pero tambien parece un hombre preocupado, algo le da miedo-

¿Pero no te devolvió la magia para siempre no? Solo es un préstamo… - se quedo callada unos segundos cuando dijiste que temía algo. - ¿Caín teme algo? ¿No es el hombre más poderoso de todos? Yo creo que solo debería temer a quien le maldijo…

- Todo el mundo tiene miedo de algo, se dice que el verdadero poder de una persona se mide con respecto aquello a lo que el teme, Cain, es un hombre poderoso asique su temor tiene que ser horrible, pero tiene un nombre muy bonito la verdad, no me imagino nadie con ese nombre que pueda ser tan horible- deliberadamente no digo nada respecto a lo de mis poderes, se que son temporales y eso no me gusta.

¿Te refieres al nombre de Caín? ¿O por lo que me ha parecido a mi te refieres al nombre de su temor? Si conoces eso igual le molesta…

- Seguramente tratara de matarme la próxima vez que me vea, pero no importa yo creo que en el fondo es buena persona y no se molestara conmigo ademas no pienso revelarselo a nadie- para eso ya le habia dado la información a otra persona.

Esperemos que sea tan bueno como tú dices, como se enfade podrá causar muchos problemas… estoy segura.

- Creeme si te digo que lo se, segun parece cuando se enfada es incontrolable, pero no se enfadara, soy una niña buena y guardare su secreto-

Esperemos que sea cierto… con su poder y sus acompañantes… no creo que podamos negociar con el… sobretodo después de lo visto en el castillo. – Anabeth parecía asustada por lo que podía hacerles a ellos.