Partida Rol por web

Linaje Halliwell

Episodio 1: Piloto

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11/09/2013, 22:57
Penny, Penélope Halliwell

Cuando la tía Paige empezó a hablar la mueca de desprecio no tardó en instalarse en la cara de Penny. Si La Mansión y El Libro de las Sombras han sido destruidos tiene que ser por algo. Y yo creo que ese algo es el hecho de empezar de cero. - Las palabras se repitieron en la cabeza de Penny con un marcado tono despectivo y burlón. - Ahora va a resultar que tenemos que sentirnos agradecidos por ello, no te fastidia

Decidió centrarse en el discurso de su tía para ver si podía sacar algo más en claro. Pero no necesitó mucho tiempo para darse cuenta de lo egoístas que estaban siendo tanto sus tías como su madre en estos momentos. ¿Hacer su propio Libro de las Sombras? ¿Sustituir a Wyatt? ¿Empezar con largos y duros entrenamientos? Lo estaban flipando. Eso iba a hacerlo por encima de su cadaver. Ellas se habían destrozado la juventud luchando contra una La Fuente y contando con el apoyo y el legado de decenas de generaciones Halliwell. ¿Y ahora querían que ellos hiciesen lo mismo empezando desde cero? Puro egoísmo.

Y entonces, sacaron el libro. A pesar de su desconfianza y reticencia, Penny no pudo evitar echarse hacia adelante con cierta curiosidad. Ese libro tenía algo, algo que le atraía. Molesta, se concentró en controlar sus impulsos. Ocho puntas. Ocho primos. Ocho Halliwells.... Ni de coña - concluyó para sí. Aprovechó el silencio de su madre para pasar un rápido vistazo a sus primos, centrándose especialmente en P.J. y Kat. Iban a necesitar mucho más que ese royo escéptico para hacerla trabajar con ellas. Girar la mirada de nuevo hacia Phoebe y descubrir lo cerca que estaba le sobresaltó. Y por un momento no entendió que es lo que estaba ocurriendo. Por ello, cogió el libro, sin ni siquiera ser consciente de lo que eso suponía. Y antes de poder preguntárselo, la conversación volvió a ponerse en marcha.

Escuchó en silencio las últimas explicaciones de su tía Piper y por un momento no supo que hacer o qué decir. Si volvía a dar su opinión podía arriesgarse a recibir otra bofetada. Por inercia llevó sus ojos hasta su hermana mayor. En el fondo deseaba que lo hiciera, sería una excusa perfecta para enfrentarse a ella. Tardó varios segundos, pero acabó optando por la opción mas sensata... y aburrida. Se dio la vuelta, dándola espalda a sus familiares y echó a andar hacia la salida. Y entonces se dio cuenta de lo que tenía entre las manos. El dichoso libro de ocho puntas. Enfadada tensó la mandíbula y apretó los dientes, sin saber exactamente qué hacer. Pero su indecisión duró poco. Se giró de nuevo hacia sus primos y, en silencio, echó a andar hacia su primo Henry, pasándole el libro que acababa de darle su madre. Cuando su primo lo cogió, echó a andar de nuevo hacia la salida. Sin palabras, sin despedidas. No había olvidado todo lo ocurrido justo antes del ataque. Y no tenía intención de hacerlo.

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12/09/2013, 10:43
Kat Mitchell

Asintió a la pregunta de su hermana mientras un incipiente dolor de cabeza empezaba a anidar entre sus cejas. Escuchó a su familia sin decir palabra, cada vez más aturdida conforme la adrenalina iba desapareciendo de sus venas. Parecía como si pocos conceptos fueran capaces de hacerse un hueco en su agotado cerebro. Un libro para ocho...desaparecido...La Fuente...luchar...funeral...Wyatt, y la única verdad de todo eso es que en esos momentos no era capaz de afrontar esos pensamientos inconexos, necesitaba un sueño reparador para ver las cosas desde cierta perspectiva.

Su tía Piper les instó para que se fueran, no sin antes ofrecerse a responder sus preguntas. ¿Tenía preguntas? Puede, pero la verdad es que podían esperar. Penny fue la primera en hacer caso a la sugerencia de su tía. O a seguir el mismo camino de antes de largarse y dejarnos en la estacada, claro, puede que todo esto sea demasiado para ella pero, ¿y para quién no? Aunque al menos yo he querido ayudar desde siempre

- Me voy a ir también, hoy he tenido guardia y necesito dormir y comer para funcionar mejor - le susurró a su hermana antes de levantarse y, en un súbito impulso, acercarse a Henry y abrazarlo -. Nos vemos luego - posiblemente el abrazo se prolongó más de lo que al chico le hubiera gustado pero en ese momento necesitaba que supiera que estaba contenta de que él estuviera bien y seguro, no como Wyatt, concluyó con tristeza -. Nos vemos en el funeral.

Se despidió de todos con un gesto antes de encaminarse ella también hacia la salida.

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12/09/2013, 17:10
P.J. , Prudence Johnna Halliwell

- Vaya, eso si que no me lo esperaba. - pensó P.J. cuando su tía sacó el libro con el símbolo de ocho puntas en la portada.

Escuchó atenta a sus tías y finalmente asintió. Estaba de acuerdo en que sin Wyatt todos tenían que dar un paso al frente y contrarrestar a La Fuente con todas sus fuerzas. Aunque también era cierto que le preocupaban algunos de sus primos así como su hermana pequeña. Nunca había sido su fuerte el esforzarse y ahora la estaban pidiendo eso mismo. La miró fijamente pero sin ningún rasgo de odio en los ojos. Tan sólo preocupación y resentimiento por no poder ayudarla.

Observó como su madre le entregó el libro a Penny y esta a su vez se lo dió a Henry.

- Será mejor que nos vayamos. - dijo ligeramente apesadumbrada. No obstante no podia permitir que ese sentimiento saliera a la luz así que lo controló para continuar. Todavía hay mucho por hacer y poco tiempo para ello.

Salió del P3 tras Penny. Tenía que hablar con su hermana de todo lo ocurrido esa noche.

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14/09/2013, 00:04
Pat, Patricia Halliwell

Antes de que Phoebe pudiese contestar a su hija mediana Tam, que se había alejado con su hermana cuando ésta empezó a vomitar, soltó un discurso bonito, motivador y positivo ante el mutismo de todos, cuando acabó de hablar su madre cogió el testigo y comenzó a intentar infundirles ánimos.

Si la mansión y el Libro de las Sombras han sido destruidos ha sido por algo, Pat repitó las palabras de su tía mentalmente, no creo que haya sido para empezar desde cero, el Bien a pesar del gran poder de Wyatt se había debilitado. Sin él ¿quién queda?, un puñado de jóvenes inexpertos, había que igualar la balanza y tenemos que hacerlo entre todos.

Perdida en sus cabilaciones no oyó el resto de lo que dijo su tía, sólo acertó a centrarse de nuevo cuando vió como sacaban un gran tomo negro con un símbolo blanco en su cubierta, lo único que se ha salvado de la casa, murmuró sin darse cuenta cuando escuchó la explicación de su madre, vió como ésta daba unos pasos y se lo daba a su hija menor, ocho puntas, ocho primos, adquirir el poder, ¿no lo tenemos ya?, Piper les dijo la hora del funeral y les instó a preguntar si tenían alguna duda. Pat abrió la boca para preguntar pero demasiadas ideas inconexas se acumulaban en su mente, y la volvió a cerrar sin haber dicho nada, Penny hizo amago de irse, volvió le dió el libro a Henry, se dió la vuelta de nuevo y sin decir nada a nadie se fué hacia la salida. Kat siguió el mismo camino y P.J. se apresuró detrás de ellas, ¿ya está? se preguntó a sí misma Pat intentando tirar del hilo de sus pensamientos para sacar algo claro, puso sus manos en las caderas y su mirada se paseó por la sala.

Sus ojos se detuvieron cuando se posaron en el “Nuevo” Libro de las Sombras, estaba en manos de Henry y sin darse cuenta se fué acercado a él, con la mirada fija en el símbolo de ocho puntas. Cuando llegó a su lado se detuvo, estiró el bazo y acarició el cuero negro que eran sus tapas, lo sintió cálido y frío a la vez. Retiró la mano y miró a su primo con una sonrisa de disculpa y cara de no saber porqué lo había hecho, sentía un hormigueo en la mano, y se giró mirando a su madre y a sus tías.

- ¿Te quedas con la daga tía Piper? - preguntó, más por hacer algo que no fuese salir corriendo de allí, que por tener verdadero interés.

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15/09/2013, 02:51
Henry Jr. Mitchell

La relativa calma de su familia no le ayudó a salir de la perplejidad. La Fuente... ¡La Fuente! Wyatt le había explicado que el bien y el mal se necesitaban para vivir, que siempre se creaba un equilibrio. ¿Es por eso que había vuelto La Fuente?

Henry quería sentarse, pero no podía. Había tomado la opción de permanecer fuerte, de ser el seguro y eso tenía que hacer. Pero era tan complicado...

Decidió abandonar todos sus pensamientos e intentar concentrarse en la conversación que se desarrollaba a continuación. Hablaron de la muerte de Wyatt, un funeral, un libro... ¿Un libro?

Los ojos de Henry se enfocaron en ese volumen. Las tapas llamaban su atención, pero el símbolo mucho más. Parecía notar algo en él, como si le atrajera. Pero fue el libro quien terminó por acudir a él; o, mejor dicho, fue Penny la que decidió entregárselo.

Antes de poder abrirlo, Kat le abrazó. Henry le devolvió el abrazo cortésmente y pensó que ella se retiraría, pero no lo hizo. El joven se quedo sorprendido. No había permitido en años que sus hermanas le tocaran, y ahora estaban ahí, creando algo distinto...

Aunque jamás lo reconocería, el momento se pasó sin que se diera cuenta. Se quedó mirando a Kat mientras se marchaba, momento en el que Pat se acercó hasta el libro para tocarlo. Miró a los ojos a su prima, intentando transmitir que sabía por qué lo había hecho.

Henry sintió una necesidad. Tenía que abrir el libro. Estaría en blanco, pero tenía que verlo.

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19/09/2013, 04:46
- Narrador -

Cuando Henry abrió el libro por la primera página, el símbolo que había en la cubierta comenzó a dibujarse solo en la primera página.

Las tres Embrujadas se miraron entre sí. Sabían lo que estaba pasando y quien dibujaba aquello, pero no dirian nada, pues tarde o temprano sus hijos terminarían por conocer a su Bisabuela.  Cuando el dibujo terminó de formarse, dos palabras se escribieron por arte de magia al pié de éste: "Linaje Halliwell"

De sobra era conocido el Poder de Tres, todos habían oído hablar de él y de lo poderosas que habían sido sus brujas, y la de veces que habían usado el Poder de Tres para salvar sus vidas. Ahora un nuevo poder estaba por llegar, un nuevo don estaba aún por adquirir, pero para eso, los ocho primos debían de trabajar como uno solo y eso era lo que esas dos palabras querían representar.

De pronto, el símbolo y las palabras comenzaron a brillar, iluminando la estancia de un color blanquecino y muy brillante. Las tres tías y Leo tuvieron que poner su mano en sus ojos para no quedarse ciegas, y los primos sintieron como aquel brillo regaba cada poro de su piel, hasta la de Penny, que a pesar de encontrarse la más alejada y apunto de irse, aún pudo apreciar lo que había sucedido. Incluso una ligera vibración hizo sacudir las copas de la barra, las botellas de la vitrina y los cristales del suelo. Algo estaba sucediendo, el libro estaba adquiriendo su poder.

Y finalmente, unas últimas palabras se terminaron de bordar en la parte de arriba del libro:

"El libro de la Sangre", ese sería su nuevo "Libro de las Sombras". Un nombre un tanto siniestro, al igual que el de sus tías, pero con una carga familiar muy importante. La Sangre que los unía a todos, la sangre de las Embrujadas, la sangre de una herencia mágica nunca antes dada; herencia de luces blanca, de cupidos y de brujas. Una familia bien completa con unos poderes aún por dominar y con una sangre muy poderosa.

Notas de juego

Es un buen momento para que expliquéis y roleeis todo. Lo que sentís o lo que queráis, incluso por si queréis hablar antes del funeral.

El próximo turno, sino hay nada inesperado debería darse en el funeral. Así que fundido en negro y pasaríamos al siguiente capítulo.

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19/09/2013, 11:55
Tamara Mitchell

Tam se había levantado tras su hermana, preocupada por ella, si había tenido guardia esa noche quería decir que no había dormido nada, así que pensó que debería llevarla ella a casa. Después se tomaría el día para prepararse para el funeral. Aunque tenía muchas preguntas sobre todo a su tia Piper, necesitaba poder controlar su poder lo antes posible para no hacer daño a nadie.

No dejaba de darle vueltas a las palabras de su madre y su tia, ¿Por qué destrozarlo todo para empezar de cero? Menuda forma de terminar con algo. Normalmente era partidaria de finalizar las cosas, las relaciones, para poder avanzar, pero aquello era demasiado. Tampoco entendía ni estaba de acuerdo con la negativa de ayudar con sus conocimientos, eran valiosos, siempre lo habían sido, ya fueran de hace 40 años o de hace 200. Renunciar al pasado nunca era bueno, por mucho que quisieras empezar de cero. Pero no iba a discutirlo allí, no era tampoco el momento.  Tal vez hablaría con su madre primero, a solas...

Kat se marchaba, así que se fue con ella, cuando se abrazó a Henry, se sintió tentada de hacer lo mismo, pero ya le había agobiado al entrar, sabía que no se sentía comodo con esas muestras de cariño. Cuando correspondió tan claramente al abrazo de Kat, se sintió algo celosa, le hubiera gustado participar en aquel abrazo también. Ella también estaba afectada por la muerte de Wyatt, también quería un abrazo, pero tenía que ser positiva y fuerte por ellos, por sus primos también, por todos. No podían hundirse todos o sería muy difícil de salir adelante.

Entonces miró el libro, una extraña sensación le llenó el corazón, tal vez se trataba solo de un presentimiento, no era experta en eso, pero se fiaba siempre de sus feelings. Después, cuando Henry lo abrió comprendió que había notado la magia que en él estaba impregnada. Tuvo que cerrar los ojos por la luz cegadora, a pesar de que deseaba ver qué pasaba. Entonces sintió con más fuerza aquella sensación y se dio cuenta que ya no había vuelta atrás. Quisiera Penny o no, ahora eran brujas.

- Libro de la Sangre, leyó en voz alta sin darse casi cuenta, pues estaba junto a Henry y el libro cuando se mostraron las letras. Se sintió orgullosa de pertenecer a esa familia, al Linaje Halliwell, aunque comprendió que su vida ya no volvería a ser nada de lo que había sido hasta ahora.

Se volvió hacia su tia Piper, creo que voy a necesitar tu ayuda para controlar mi poder, o al menos unos cuantos consejos. Voy a llevar a Kat a que descanse, dijo más bien a su madre, luego vuelvo para ayudaros.

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19/09/2013, 12:33
Melinda Halliwell

Melinda aún no se podía creer lo que estaba sucediendo a su alrededor. Aún no terminaba de asimilar que su hermano se haya ido para siempre. Se abrazó a su madre, quien había hecho que el brujo ardiera entre las llamas del infierno. Suspiró pesadamente, sin fuerzas ni ganas de mantenerse fuerte... Podía hacerlo ante cualquier situación menos cuando se trataba de alguien tan cercano e importante. Necesitaba tiempo para asimilarlo y superarlo, poco a poco. 

Fue con su hermano Chris para cogerlo del brazo y poder marcharse de allí, ya que él lo estaría pasando como ella. En ese momento, vio el libro y su atención se centra en éste. Esa marca no la había visto, y, si lo había hecho, desconocía de su significado. Entonces, comenzó a brillar con intensidad, escribiendo unas letras que formaron el título del libro "El libro de la sangre", ¿se referiría a la sangre de la familia, al linaje Halliwell? No lo descartaba. 

Parecía que sí, que en ellos caía la responsabilidad de continuar el linaje. Ellos serían los encargados de devolver el equilibrio y de proteger al mundo del mal que habita en él y que desconoce casi por completo. 

Abrazó con fuerza a Chris y le susurró:

-Sí... ahora nos toca a nosotros. Hagámoslo por él, por Wyatt.-volvió a refugiarse en su hombro y soltó las lágrimas que antes había intentado contener. No se separó de él y esperó a que él decidiera salir para hablar un rato a solas y prepararse antes del funeral. 

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20/09/2013, 07:29
Pat, Patricia Halliwell

Pat oyó a su primo abrir el libro antes de obtener contestación y no pudo reprimir las ganas de mirar, sus ojos se abrieron desmesuradamente cuando la primera página, que estaba en blanco, comenzó a escribirse sola. Aaaahhh, aspiró aire rápidamente, reteniéndolo en su interior hasta que quedó claro que había acabado el fenómeno. El símbolo de la cubierta copiado de nuevo y una simple frase que lo decía todo, Linaje Halliwell... todos somos uno, somos Halliwell, susurró Pat al leerlo, de repente los trazos en el papel empezaron a resplandecer cada vez de forma más potente hasta que tuvo que entrecerrar los ojos, no lo sintió como un ataque cegador si no como un baño de luz y cuando oyó tintinear las copas, botellas y demás cristales, le pareció que se formaba una agradable melodía.

El brillo murió de golpe haciendo que Pat abriese los ojos al máximo para recuperar la visión normal, un último mensaje se había escrito encabezando el conjunto anterior, un nuevo libro mágico acababa de nacer ante sus ojos y tenía nombre, y tenía dueños. Unidos por la sangre de nuestras madres, sangre de un linaje muy potente mezclada con sangre mágica, pensaba en su padre y en Leo, sangre destinada a grandes obras. Su prima Tam dijo el nombre del libro en voz alta y un escalofrío le recorrió la columna vertebral.

- Ya no hay vuelta atrás, en realidad, nunca la ha habido - su cara se contrajo en una sonrisa triste y miró a sus hermanas que estaban a punto de salir, pero se habían detenido y estaban mirando como todos el libro abierto.

Su mirada recorrió a sus primos, su familia, unos más extraños que otros pero todos queridos, y se detuvo en Chris y Melinda, abrazados, apoyándose mutuamente, sin poder decir ni hacer nada que no fuera intentar asimilar la pérdida sufrida. Podía imaginarse lo que estaban pasando, sintió formarse un nudo en la garganta y notó como sus ojos se humedecían, ahora no, se dijo mentalmente, todavía no es el momento, parpadeó repetidamente, ahuyentó las lágrimas y tragó con esfuerzo. Oyó a Tam pedirle ayuda a Piper para controlar su poder y asintió a sus palabras.

- Sí, yo también necesitaría ayuda - le repateaba pedirla, pero había que dejar el orgullo atrás si querían vivir -, nunca se me ha dado bien controlar los poderes absorbidos. Quizás deberíamos juntarnos todos y aprender los unos de los otros - mientras hablaba miraba alternativamente, a sus familiares, y a la lejanía de la pared del fondo -, a mí me iría muy bien saber manejar los vuestros y teneros cerca, si hay otro ataque sólo tengo mi cuerpo para defenderme y hoy no me ha salido muy bien. - media sonrisa amarga, no se había sentido muy útil, pero tenía la intención de que eso cambiase.

Se quedó un momento en silencio, buscando algo en su mente que le chirrió en su momento, pero que con la aparación del Libro se le olvidó, su mirada vagó por los presentes y se detuvo en Piper con la daga todavía en la mano, ¡eso es!, por fin recuperó la laguna.

- Tía Piper, la daga... - calló, no supo cómo expresarlo en voz alta y cogiendo aire optó por soltarlo de golpe esperando que la entendiesen - Los cuatro que vinieron tenían poderes, ¿no? entonces ¿por qué venir a matarnos con dagas? y unas dagas tan elaboradas, - su voz fué bajando de intensidad y acabó la última frase en algo un poco más alto que un susurro - y por qué a nosotros cuatro precisamente. Penny nos ha puesto sobreaviso a todos y Kat ha sido la que nos ha dado el tiempo necesario para ganarlos.

Pat no entendía la elección de los objetivos, ni porque no les lanzaron alguna bola de algo, a pesar de su esfuerzo reciente a Pat todavía se le escapaban muchas cosas del mundo mágico.

Notas de juego

Un pequeño cambio en la última frase que digo, que se me habían cruzado los cables ;D

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20/09/2013, 10:44
Penny, Penélope Halliwell

Cinco segundos más de tiempo y lo hubiese conseguido. Ya estaba junto a la puerta, observando con total claridad la delgada línea blanca que se dibujaba junto al suelo. Sentía cómo la llamaba, cómo le pedía que le alcanzara. Que abriera la puerta y le liberara. Pero había sido demasiado lenta, y nunca se lo perdonaría.

Fue una luz más potente y más clara la que se encargó de detenerla. Algo sorprendida y sobresaltada se giró al momento. Aunque lo primero que le llamó la atención no fue la escena que estaba teniendo lugar junto al libro, sino la cercanía de su hermana P.J. y de Paty. ¿La estaban siguiendo? ¿Es que no había tenido suficiente con humillarla delante de todos? La presión en el pecho y la cabeza volvió a incrementarse; y con ella, las ganas de encararse a su hermana mayor.

Pero no tuvo oportunidad. Como siempre, llegaba demasiado tarde. Y fue la extraña sensación que sintió cuando la luz terminó de posarse sobre ella la que se convirtió en la protagonista de sus pensamientos. Por un momeno se sintió bien. Fuerte, decidida y poderosa. Sobre todo, poderosa. Sin miedos, sin temores, sin amenazas, sin rechazo ni dudas. Pero el momento duró poco. Porque fue sustituido por el enorme enfado que volvió a brotar al darse cuenta del nulo control que tenía sobre su vida y sus actos. Un control que perdía por momentos, y cuyas riendas estaba cogiendo el maldito deber y ligado familiar.

Ya no hay vuelta atrás, en realidad, nunca la ha habido... - Las palabras de su hermana Pat se instalaron en su cabeza con fuego. Parpadeó repetidamente para recuperarse del fogonazo mientras intentaba asimilar esas palabras. - Pues yo no necesito ayuda, no quiero ayuda - mormosteó enfadada, en un tono tan bajo que quedó ahogado por la conversación del resto de familiares. Pero esta vez no se movió. Lo tenía fácil. Estaba a escasos metros de la puerta y ahora todo el mundo estaba pendiente del dichoso libro y la daga. Pero, a pesar de su reticencia y enfado, no pudo evitar tener curiosidad sobre el último objeto. Su hermana tenía razón, ¿por qué utilizar dagas? ¿Por qué no matarlos de una forma más rápida y sencilla?

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20/09/2013, 13:06
P.J. , Prudence Johnna Halliwell

La luz cegadora que emitió el libro cuando fué abierto hizo que P.J. cerrase los ojos por un instante. Un instante que pareció prolongarse en el tiempo en el que se encontró en paz consigo misma como nunca antes había estado.

Cuando la luz cesó escuchó a su hermana y a sus primas hablar.

- Por Wyatt. - murmuró casi sin darse cuenta.

Luego reaccionó.

- Si quereis practicar no tengo problema en hacerlo. - comentó. De hecho creo que nos vendrá bien a todos para mejorar más.

Tras estas palabras se dira hacia Penny.

- Creo que todavía no te he dado las gracias por salvarme la vida. - digo abrazándola. Si no fuera por tí esos demonios podrían haber acabado con nosotros uno a uno. Gracias Penny.

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20/09/2013, 21:57
Penny, Penélope Halliwell

El abrazo de P.J. le cogió por sorpresa. Tanto, que necesitó varios segundos para elevar sus brazos y corresponder su gesto. No entendía el comportamiento de su hermana. Ella no había hecho nada. Sí, había tenido una visión y les había avisado justo antes de que los demonios llegasen. Pero eso había supuesto nada. Estaba segura de que, de todos modos, hubiesen conseguido defenderse con éxito.

Aun así, optó por no romper ese momento 'mágico' que se había creado. Estaba segura de que su madre se sentiría muy feliz de poder ver una escena como esa. Fuese o no verdadera. - No ha sido nada, P.J. - contestó a su hermana nada más separar su cuerpo del de ella. - No he hecho nada - se dijo para sí. Nerviosa, apartó la mirada de su hermana y se centró en los demás. Nunca le había gustado que la observaran de esa forma.

- ¿Podemos marcharnos o vamos a hacer algo más con... 'eso'? - preguntó indecisa señalando hacia Henry y el libro. Por primera vez desde su llegada al P3 su tono de voz no estaba cargado de ironía, resentimiento y desprecio. Esta vez tan solo mostraba cansancio y un atisbo de tristeza. - Sino... yo me iré ya. Tengo muchas cosas que hacer antes de... del funeral. Pero no terminó la frase. Sentía que, si lo decía en voz alta, todo lo que estaba pasando ya no tendría marcha atras. Aunque, ¿realmente la tenía?

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22/09/2013, 02:19
Henry Jr. Mitchell

Henry casi dejó caer el libro al ver cómo se estaba escribiendo sólo. El mismo símbolo de la portada, agregando dos palabras: "Linaje Halliwell"

Con demasiado temor, Henry movió la mano para tocar aquellos trazados, pero el libro comenzó a brillar. A él, que lo tenía en la mano, lo deslumbró totalmente. Cerró los ojos tarde, aunque veía la luz en el interior de su cabeza. Pero no sólo la veía, si no que sentía cómo se expandía por todo su cuerpo, cubriendo esa tristeza que notaba tras la pérdida de su primo y de todos sus problemas. Sintió fuerzas y energía, pero no sólo eso. Sintió como si su primo apoyara la mano en su hombro, transmitiéndole la seguridad que sólo él sabía dar.

Parpadeó con velocidad cuando la luz cesó y pudo ver el nombre del libro. Antes de poder reaccionar, su hermana había aparecido a su lado y habló, consiguiendo que Henry diera un pequeño bote debido al susto, provocando la caída del libro, que pudo recoger a tiempo.

Tam, menudo susto dijo Henry mientras sonreía tímidamente. Esperaba un abrazo de su otra hermana, pero no llegó. Aunque se sintió tranquilo, por otra se quedó desilusionado. ¿Qué había pasado para que Tam dejara de atosigarlo como siempre?

Esa pregunta desapareció de su mente cuando Pat habló.

Creo que no era por nada en especial. Vendrían a matarnos y arrebatarnos el poder.

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23/09/2013, 12:27
Kat Mitchell

No fue hasta que se dejó caer en el asiento del conductor de su coche que se dio cuenta de que su hermana la había seguido. En su interior, se sintió satisfecha por ello, como en los viejos tiempos en los que eran inseparables. Le dirigió una sonrisa cansada a la vez que se inclinaba para abrirle la puerta del copiloto.

- Sube, que te llevo.

En esos momentos le apetecía conducir, distraer su mente con acciones mecánicas del cuerpo y no pensar en su primo recién fallecido, en demonios o en libros extraños que parecían proféticos. ¿Cómo puede la vida cambiar tanto en una hora? sin mediar palabra, arrancó su viejo coche con un suave rugido del motor y se incorporó al tráfico en dirección a la casa de su hermana.

- Hay tanto por hacer - pensó en voz alta, consciente de que su hermana debía estar dándole vueltas a algo similar -. Voy a llamar a mi jefe un momento, espera - apretó el botón de rellamada al último número que ella había marcado y puso el manos libres para que la voz de su jefe y ex-novio inundara el vehículo -. Harry, soy Kat - soltó justo cuando se oyó el ruido de descolgar el teléfono. Ni siquiera espero a que él contestara para seguir hablando -. Ha pasado algo ho-horrible - su voz se quebró en última palabra y tuvo que hacer una profunda inspiración para controlarse -. ¿Te acuerdas de Wyatt, mi primo? Ha, bueno, ha habido un accidente y ha fallecido - acabó con voz apagada -. Esta tarde será el funeral. Me gustaría tomarme unos cuantos días libres para ayudar a mi familia; en estos momentos estamos todos destrozados y mis tíos necesitan todo nuestro apoyo.

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23/09/2013, 21:54
Tamara Mitchell

Sonrió a su hermano al ver que le había asustado, perdona, era normal, habían pasado muchas cosas en tan poco tiempo que estaban todos alerta. Le sonrió, pero no quiso agobiarle más, así que le susurró, vigila a mamá, me voy con Kat.

Ellos siempre habían sido fuertes, pero eran circunstancias excepcionales y aunque tanto Henry como Kat eran siempre positivos y fuertes, Tam se sentía como si tuviera que protegerles, quizás porque su poder era el más violento o tal vez por eso era su poder. Tam era una protectora por naturaleza, le gustaba proteger a los débiles, a los animales, al Medio Ambiente, a la Madre Tierra, al Mundo mágico, cómo no iba a proteger ahora a su familia, primero a sus hermanos y padres, pero eso se extendía también a sus primos y tios.

Tam se marchó en silencio detrás de su hermana e hizo un gesto a su madre y a sus tías, con un claro significado, ahora vengo.

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23/09/2013, 22:00
Tamara Mitchell

Tam siguió a Kat, en otras circunstancias la habría llamado, o le habría gastado una broma, pero no tenía ahora humor para ello, sabía que su hermana tampoco.

Cuando se subió al coche, le tocó en el cristal. Hubiera preferido conducir, pero al menos la acompañaba, así que estaba conforme con ello. Se le veía cansada y cuando habló con su jefe se le cortó la voz, Tam seguramente tampoco podría hablar con normalidad, de hecho no le había dicho más que un: Vamos a tu casa.

Esperó sin decir nada a que terminara la conversación, ¿qué iba a decirle? Sabía que poco podría consolarla, pero a la vez tenían que hablarlo. Miró a la carretera algo evadida pero tratando de prestar atención, aunque le costaba más de lo que admitía.

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23/09/2013, 23:45
Pat, Patricia Halliwell

Antes de que su madre o alguna de sus tías respondieran a la pregunta, Pat vió como P.J. y Penny se abrazaban, parece que están haciendo las paces, al menos momentáneamente, pensó a la vez que un pequeño pinchazo le atravesaba el pecho, no se podía decir que estuviese celosa pero sí que le hubiese gustado estar más cerca y formar parte de ese momento. Al separarse las dos mujeres, por primera vez desde que habían llegado, Pat no percibió en su hermana pequeña esa agresividad injustificada hacia todos sólo vió abatimiento, no sabía si por la muerte de su primo, por la presión de la tarea que se les venía encima y parecía difícil de evitar, o simplemente porque su vida iba a cambiar sin pedirle permiso.

Entonces la voz de su primo hizo que volviera a mirar al frente, supongo que fué por eso, pensó al oírle pero de inmediato algo le chocó y la pregunta se le escapó con un murmullo, ¿arrebatarnos el poder? Me he perdido algo, voy a tener que hacer clases intensivas de magia y todo cuanto la rodea, siguió mentalmente mirando hacia los mayores en busca de repuestas.

Parecía que ya estaba todo dicho, esperó un poco a que alguien le contestara algo más aclaratorio o a que todos se marcharan. Ahora que la adrenalina estaba disminuyendo notaba como empezaban a flaquearle las piernas, no estaba segura de poder conducir y no quería que la viesen así.

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24/09/2013, 05:24
Leo

Leo sonrió cuando sucedió todo aquello. Ya había visto el nacimiento de la unión de las tres hermanas como Embrujadas y ahora había visto a sus progenitores unirse bajo el nombre de Linaje Halliwell. Sin duda para el anciano mortal, aquello se había convertido en sentimientos cruzados. Por un lado sabrían de una vez por todo lo que había tenido que pasar su hijo mayor, podrían disfrutar de una vez por todas la herencia mágica que tenían y aprender a convivir con ella. Pero por otro lado... por otro lado aquello les podría causar pena y sufrimiento, y recordó que quizá podrían sufrir el mismo destino que Wyatt. Negó con la cabeza después de su sonrisa.

Luego suspiró profundamente, en el fondo lo tenía claro, ser hijo de las Embrujadas y tener semejante herencia mágica debía ser un don, Un don que compartir con el resto de personas, mortales y criaturas mágicas que lucharían para derrocar a la nueva fuente.

Ha llegado la hora, es vuestro momento. Nosotros podremos haceros de guías y ayudaros en todo cuanto necesiteis. Se atrevió a decir Leo. Pero en la escuela de Magia hay mucha información. Aunque aprender a usar vuestros poderes es algo muy complicado y que solo con el tiempo y controlando vuestras emociones, lograréis hacer. No os preocupéis, al principio a ellas también les pasaba lo mismo. Dijo señalando a vuestra madre y tías.

En cuanto a los cuatro hombres que os han atacado, y teniendo en cuenta la daga que usaban, me atrevería a decir que eran Brujos y que habían venido a robaros vuestros poderes. Por alguna razón sabían lo que iba a pasar en este momento. Pero aún así, no lo han logrado. Está claro que contáis con la protección del linaje... y entonces su rostro se entristeción, por alguna razón, la protección del linaje había abandonado a su hijo...

Notas de juego

Podemos seguir roleando en esta escena, tanto vuestros momentos privados, como los comúnes. Es decir todo aquello que se desarrolle antes del funeral, cerraré cuando vea que no hay nadie que siga posteando...

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24/09/2013, 10:20
Kat Mitchell

Cuando finalizó su llamada siguió conduciendo en silencio, con el cambio de dirección correspondiente para llegar a su casa. Si normalmente ese trayecto lo hubiera realizado en diez minutos, ese día tardó quince; tal fue la lentitud con la que conducía en ese momento que los coches le adelantaban. No le importaba, cuando llegara a casa tendría que afrontar la realidad y sentía que, cuanto antes llegara, antes se encontraría en el funeral y antes tendría que despedirse para siempre de Wyatt.

Por desgracia, ningún trayecto es eterno y antes de que se diera cuenta estaba tirando las llaves en la mesilla del recibidor e invitando a su hermana a que se sirviera lo que quisiera de la nevera. Ella simplemente se tumbó en el sofá de la pequeña salita atestada de plantas que era su comedor y se cubrió los ojos con el brazo.

- Tam, Wyatt ha... - tragó saliva, notando como las lágrimas empapaban su antebrazo nada más salir, sin opción a deslizarse por su cara -. Todo va a cambiar tanto a partir de ahora - dijo con voz lastimera. Tam sabía perfectamente que a ella le encantaba la magia y que siempre había querido ayudar a Wyatt pero ahora se iban a encontrar que no tenían tiempo de ser introducidas a ese mundo con suavidad, sino que los peligros y quizás las muertes estarían a la orden del día.

 

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25/09/2013, 11:13
Tamara Mitchell

Tam ordenaba sus pensamientos mientras iban en el coche, no quería decir nada y tampoco lo hizo. Mandó un par de SMS a Imala, y pensó en llamar al colegio pero lo postpuso para más tarde.

Miraba a su hermana y sabía lo que sentía, lo sentía ella también, si bien de diferente forma y de igual a la vez, era como si pudiera diferenciar su dolor y a la vez sentir el de Kat. Sentía que su unión con ella era completa en aquel momento.

Cuando llegaron a su casa, Tam siguió a Kat como si fuera una sombra, en silencio, ligera, cuando se echó en el sofá ella se sentó a su lado en el suelo y puso su cara junto a la de su hermana, las lágrimas ya salían sin parar... lo sé... susurró balbuceando, y abrazó a su hermana para consolarse mutuamente, pues ambas estaban tremendamente tristes por la muerte de Wyatt y la sensación de no haber podido hacer nada, o tal vez de poder haber hecho más pero haber confiado en que él era capaz solo.