Partida Rol por web

PREVIAMENTE, EN SOMBRAS DEL PASADO

La muerte de Lobo Gris fue la que dio inicio a todo. El Gran Maestro del Kai moría por causa de una letal y fulminante enfermedad en la ciudad de Ruanon, donde era uno de los consejeros privados del Barón Derek Vanalund.

El Gran Maestre del Kai, el superior de la Orden, llamó a los más jóvenes Señores del Kai recién nombrados: Águila Certera, Buho Sabio, Serpiente Silenciosa y Zorro Plateado. Y les encomendó la misión de averiguar las causas exactas de la muerte de Lobo Gris. Para ello, viajarian a Ruanon, donde se instalarian con la excusa de que uno de ellos sería el sustituto del recientemente fallecido Maestro en el Consejo Privado del Barón.

De esta manera llegaron a la opulenta Ruanon, capital del comercio y de los minerales preciosos, y a la residencia del Barón, la fortaleza conocida como La Mano, en la colina que domina la ciudad. Alli se hizo cargo de ellos el Mayordomo de la Fortaleza, Roanan, y conocieron al jefe de la guardia de Palacio, Weyland Thorne.
Esa misma noche velaron el cadaver de Lobo Gris, mientras los dos sacerdotes de Kai que les acompañaron en el trayecto preparaban el cuerpo para el viaje que lo llevaría a reposar en la cripta del Monasterio del Kai. Las primeras sospechas comenzaron al ver los extraños síntomas que presentaba el fallecido. ¿Envenenamiento? Además, la inseparable capa verde que todo Señor del Kai lleva consigo había desaparecido... Además, entre los efectos personales del Maestro encontraron un anillo de plata fina sin inscripciones, cosa extraña, ya que los Señores del Kai no son dados a llevar joyas o abalorios de ningún tipo.

Al día siguiente, mientras el cuerpo de Lobo Gris viajaba hacia el Monasterio, tuvieron la oportunidad de conocer mejor la Fortaleza de La Mano y la ciudad del Ruanon, a medida que tenían un primer contacto con los principales protagonistas de esta historia durante el banquete que se celebraba en su honor.

Antes de eso, tuvieron tiempo de recorrer el Palacio.
En la Torre de la Biblioteca descubrieron que Lobo Gris se llevó un libro hace diez años que jamás devolvió, el libro trataba sobre los linajes nobles de Sommerlund y no existen copias conocidas.
Además, Águila Certera, que había ido a mandar un mensaje al Monasterio por medio de un pájaro mensajero, presenció la llegada de un cuervo blanco, un ave que sólo se utiliza para la comunicación directa entre el Rey de Sommerlund y el Barón de Ruanon.
Más tarde, Zorro Plateado tuvo un combate de entrenamiento con el Herdero de la Baronía, Aladar Vanalund, en el que vieron que el Heredero luchaba con las técnicas de un Señor del Kai.
También pudieron ver cómo Weyland Thorne ponía a la guardia de Palacio en alerta después de recibir un mensaje de alguien llamado Hansen.
En sus preguntas sobre Lobo Gris, sacaron poca información. Al parecer, el Maestro del Kai no residía de forma permanente en La Mano, sino que poseia algún refugio fuera de la ciudad de Ruanon, pero nadie parece saber donde. Además, sólo se relacionaba con los miembros del Consejo Privado del Barón, y aparte de en La Mano, el otro lugar que visitaba cuando estaba en la ciudad era la Catedral de la Diosa Ishir.

En el banquete, conocieron a la Familia Vanalund: Derek Vanalund, Barón de Ruanon; su hijo Aladar, heredero de la Baronía; su hija Irina, sacerdotisa de Ishir; y Dan, el hijo menor, estudiante para aprendiz en la Hermandad de la Estrella de Cristal.

La Guardia Personal de Baron (tambien conocida como la Guardia Roja por el color de sus armaduras; los mejores caballeros de la Baronía cuya misión es proteger al Barón y a su familia) : Sir Alistair Grey, Primera Espada de Ruanon y comadandante de la Guardia Roja; Sir Brendan Furia y Sir Tydon Anskar, un gigante encapuchado que también oficia como verdugo de la Baronía.

El Consejo Privado del Barón: El Maestro Dragair, consejero principal y Mago de la Hermandad de la Estrella de Cristal de Torán; el Maestre Clian, Sanador y Tutor de la Casa de Ruanon; Sir Jester Crow, Capitán de los Caballeros de Ruanon; el Hermano Luanus, Sacerdote Primado de Ishir y Courtland Tiddar, representante del Gremio de Comerciantes.

En ese mismo banquete de bienvenida conocieron al joven Ingeniero Jefe de las Minas de Ruanon, Radan Marr, y también oyeron por pimera vez hablar del Fantasma. Al parecer los sirvientes de La Mano murmuraban sobre que el espectro de Lobo Gris vagaba por la fortaleza de noche, inconfundible debido a su capa del Kai. Parecían ser simples chismorreos...

Pero las complicaciones no tardaron en llegar, y esa misma noche, cuando Zorro Plateado recibió una nota en su habitación que le pedía acudir a una reunión para recibir información sobre Lobo Gris. Se trataba de una trampa, claro, cuando unos matones aparecieron que el Señor del Kai derrotó sin muchas dificultades. Pero no pudo descubrir nada ya que al único que quedó vivo lo mató el Fantasma.
Fuera quien fuera, iba ataviado con la capa del difunto Maestro del Kai y portaba una extraña ballesta de doble rail, y desapareció sin dejar rastro, dejando a Zorro Plateado con la sensación de que le estaban sometiendo a una prueba...

No fue lo único extraño de la noche. Tanto Águila Certera como Buho Sabio fueron contactados en sus sueños por una presencia malévola, algún ser con grandes poderes psíquicos. Este ser afirma conocer quién mató a Lobo Gris, y les llevó en sueños a la cima de la Torre de la Guardia.
Águila Certera cortó la conexión psíquica, debido a que la presencia era de naturaleza malvada, pero Buho Sabio continuó, hasta que fue incapaz de romperla. Afortunadamente, una tercera persona (Buho sólo recuerda el rostro de un hombre joven) intercedió y cortó la conexión psíquica.

La Mano / Interior del Palacio
Horario: Mañana

Esta mañana os despertáis tras un poco reparador descanso. Hoy no os apetece entrenar en el Bosque de Ishir, (en vuestras mentes todavía resuenan los ecos de lo sucedido la pasada noche) en lugar de eso pasáis directamente a desayunar al salón anexo.

Tenéis entonces la visita del Barón Derek Vanalund, escoltado de cerca por sir Alistair Grey.
El Barón os pregunta por lo de anoche, se interesa por vuestro estado y os asegura que ha dado orden de que esos siniestros hechos se investiguen al detalle. Se excusa ante vosotros por lo sucedido y porque sin duda os habéis llevado la impresión equivocada de Ruanon. Espera que eso pueda cambiar con el tiempo.
Por otra parte, tras lo de ayer, os sugiere que descanséis de tanto ajetreo. Toda la gente del palacio está a vuestra entera disposición.

En ese momento aparece el jefe de la guardia, Weyland Thorne, que os saluda respetuosamente y pide permiso al Barón para hablar, ya que dispone de nueva información sobre lo sucedido.
Observáis a Weyland Thorne, está ojeroso y lleva el mismo uniforme que ayer. Tiene la pinta de no haber dormido en toda la noche. Al ser el jefe de la guardia, el intento de asesinato que ayer sufrió Zorro Plateado es en parte responsabilidad suya, al no haber sido capaces sus guardias de detectar a los asesinos antes de que actuaran.

Thorne os explica que tras el ataque, dos guardias de las murallas vieron a sombra oculta por una capa del Kai se movía a toda velocidad por los tejados, con una seguridad y habilidad insultantes, sin hacer ruido. No tuvieron tiempo ni de apuntar con sus ballestas antes de que desapareciera de su vista.
Weylad os dice : No me importan los rumores que corren entre los criados del Palacio. Les aseguro que lo que mis hombres vieron no era ningún Fantasma, sino a un hombre de carne y hueso.

Thorne continúa con sus noticias. Al parecer la guardia de la ciudad ha reconocido a los asesino de ayer como matones de los bajos fondos de Ruanon. Chusma de prisión, habituales de asuntos sucios. Ahora mismo están interrogando a todos los que conocían a estos maleantes para saber algo de quién los contrató, pero todavía no tienen nada. Lo que sí parece que está claro es que tuvieron ayuda desde dentro del Palacio. Esas sabandijas no serían capaces de planificar todo ellos sólos. Weyland también os informa que a partir de ahora, todo aquél carromato que entre o salga de La Mano será revisado por la guardia para evitar que se cuelen más “sorpresas” como las de anoche.

El Barón asiente ante la información del jefe de la guardia, al cual le pide que siga con sus investigaciones y que en cuanto descubra algo más le informe a él y a vosotros inmediatamente.
Dicho esto, el Barón se despide de vosotros y sale del salón seguido de su escolta. Weyland Thorne también os deja sólos.

Fuera, el sol se eleva poco a poco entre un cielo plagado de nubes. El día comienza.

La Mano / Gran Patio
Horario: Mañana

Decidido a no demorar el recorrido por la ciudad, Águila Certera pide a un criado que le lleve hasta su montura, que resulta encontrarse con el resto de las de los Señores del Kai en las grandes cuadras situadas en el patio principal de La Mano. Águila se alegra de poder volver a ver a su montura; Torrente ha sido tratado con mimo por los criados. El animal también se alegra de verle, de eso se da cuenta enseguida.

Lo que no le hace tanta ilusión es la escolta que os han asignado: nada más y nada menos que un sargento y siete hombres de la guardia de palacio, todos con sus correspondientes monturas. Con tanta gente detrás vais a parecer un desfile, pero bueno, qué se le va a hacer, el Barón os los asignó como escoltas para vuestra seguridad (debido al incidente de la noche anterior) y sería un insulto rechazarlos.

La Mano / Muralla Exterior
Horario: Mañana

Buho Sabio sube unas escaleras de piedra que le conducen a la muralla exterior, arriba, mientras un ligero viento le agita la capa. Contempla desde aquí los tejados, tratando de imaginarse al Fantasma saltando de uno a otro ayer, en mitad de la noche.
No es nada fácil moverse por esos tejados. Un paso en falso podría haber hecho que cayera a un patio interior y se matase. Sin duda debe tratarse de alguien extraordinariamente hábil para moverse de esa manera. Eso o... que conociese muy bien la geografía de La Mano....

Dispuesto a hablar con los guardias que vieron ayer al Fantasma, Buho pregunta a algunos de los guardias que patrullan por la muralla. Éstos le informan que los hombres que vieron al intruso ayer por la noche no están de guardia ahora mismo, sino que están en la sala común de la Torre de la Guardia.

El Señor del Kai alza la mirada hacia la Torre de la Guardia, lo que le recuerda el sueño-visión de la noche pasada, causandole un escalofrío que le recorre el cuerpo.

con la intencion de no dejar aun aliado solo decido a compañar a aguila para salir de la ciudad y lo acalzo , aun que de igual manera me sorprende ver ala escolta asignada o.O

Águila suspira resignado al ver la comitiva que lo sigue para que no se pierda mientras saluda de forma efusiva a Torrente.

Ojalá pudiéramos escabullirnos para perdernos por estos parajes amigo...
¿Viste alguna cosa que te llamara la atención en las cuadras?

Tras conversar con su animal, Águila saluda con la cabeza a Serpiente Silenciosa.

¿Dónde deberíamos ir amigo?

Buho Sabio que debia de armarse de valor para entrar a la Torre de de guardia, podia ser que alguna detalle de esa pesadilla pudiera encontrarlo alli; de esa manera accede a ella tratando de encontrar alguna respuesta en el testimonio de los guardias y en el lugar mismo

Ciudad de Ruanon / Catedral de Ishir
Horario: Mañana

Los rastrillos se alzan, las pasarelas se tienden, las puertas se abren y al poco el grupo formado por Águila Certera y Serpiente Silenciosa junto a su escolta está descendiendo la colina de La Mano, hacia la radiante ciudad que se extiende ante ellos, con la bandera de Ruanon agitándose al viento, orgullosa, desde lo alto de multitud de edificios.
Su destino es el Barrio Viejo (el casco antiguo), que aunque ya no es el barrio más rico de Ruanon, sí que posee una de las joyas arquitectónicas de todo Sommerlund, la Catedral de Ishir.

Pronto llegan ante ella, es alta y majestuosa, y se ve el esfuerzo y el oro que se ha gastado en ella. Fue construida para impresionar. (Nota del Director: Es, de hecho, la Catedral de Notre Dame de París, pero realizada con marmol blanco). Frente a la impresionante fachada de marmol blanco adornada con estatuas y espectaculares vidrieras de cientos de colores hay una bonita plaza decorada con cuidados jardines y con una hermosa fuente de la que surge agua clara de manantial sobre la cual descansa una estatua de tres metros realizada en mármol representando a la diosa Ishir. Frente a dicha estatua, en actitud de rezo, ven a alguien conocido: Irina Vanalund, ataviada con una sencilla túnica blanca como la nieve y sencillos adornos de plata, que la identifican como sacerdotisa de Ishir.

Los dos Señores del Kai descabalgan de sus monturas y se acercan a ella. Afortunadamente, su escolta se hace cargo de los caballos y se conforman con permanecer a una distancia prudencial. Al llegar a su altura, Irina se levanta una vez terminada su oración y se vuelve hacia los dos. Águila y Serpiente observan que sus grandes ojos verdes están ligeramente enrojecidos (¿estaría llorando?), pero si es así, su deslumbrante sonrisa lo desmiente. Les saluda con una inclinación de cabeza.
Sed bienvenidos, mis señores. Me alegro mucho que hayan decidido a aceptar mi invitación para visitar la Catedral.

Irina se acerca a los guardias, que se ponen firmes al momento, y le dice al sargento que va a acompañaros durante un rato, por lo que les pide que permanezcan aquí.
Con todos los respetos, mi señora, pero su señor padre nos dio órdenes de escoltar y proteger a los Señores del Kai. Dice el sargento.
Irina le mira directamente, sonriente. ¿Acaso no creeis que no me basto sóla para escoltar y proteger a estos muchachos? Suspira teatralmente. Pero si no lo creeis quizás debiera hablar personalmente con mi padre... ¿qué le parece?
Apenas podeis contener una sonrisa al ver cómo la joven muchacha logra que el duro sargento de la guardia, terriblemente avergonzado, le de la razón a regañadientes.
Irina se vuelve hacia vosotros, con una sonrisa traviesa en los labios. Si tienen la bodad de seguirme...

Seguís a la hija del Barón a la Catedral, mientras os habla de que ella, como tantos otros servidores de Ishir, viven en un monasterio anexo a la Catedral, de acceso sólo para los sacerdotes, sacerdotisas y sus servidores, protegido por miembros de los Caballeros de Sommerlund. Esta es también la residencia oficial de la Suma Sacerdotisa Dayia, hermana mayor del Barón Derek Vanalund y tía de Irina, que desde hace décadas es la guía espiritual de Ruanon.

Cuando van a entrar en la Catedral, empieza a salir mucha gente, todos ataviados con vestimentas de calidad. Irina les explica que acaba de terminar la misa de la mañana, oficiada, como es habitual, por el Hermano Luanus.
Sin más, entráis en la Catedral y no podéis dejar de asombraros ante su magnificiencia. Pocos edificios pueden comparársele en todo Sommerlund. Nunca habiáis contemplado nada parecido. Avanzáis entre la gente mientras Irina os explica la gran devoción por Ishir que hay en Ruanon. (Nota del Director: Para hacer un símil, es como la devoción por la Virgen por parte de los andaluces).

No tardáis en llegar hasta el altar mayor, donde Irina saluda a un hombre muy delgado de pelo rubio corto y ojos claros, ataviado por una amplia túnica blanca. Su único adorno, un anillo de plata con un gran rubí rojo engarzado. Se os presenta como el Hermano Luanus. Se trata del Sacerdote Primado de Ishir (tras la Suma Sacerdotisa, el clérigo de más rango) y también pertenece al Consejo Privado del Barón.
Os saluda afectuosamente y os invita a pasar a una sala anexa donde os sentáis para charlar en unas cómodas sillas ante una mesilla que unos sirvientes llenan con dulces para picar y vino suave para degustar.

La Mano / Torre de la Guardia
Horario: Mañana

La Torre de la Guardia se alza ante Buho Sabio.
Parece diferente ahora de tal y como la vio durante el sueño de anoche. Avanza hacia la entrada.

En la sala principal de la torre encuentra a bastantes guardias. Se trata de una sala común donde pueden pasar el rato cuando no están de servicio. Al verle aparecer por la puerta se ponen firmes, pero Buho se apresura a decirles que no se preocupen, que sólo pasaba para saludar, y eso es lo que hace, saludando a cada uno de los guardias. Puede ver a dos sargentos de la guardia (un joven alto y un cincuentón bajito y algo fondón) que le dan la bienvenida y le dicen lo honrados que se sienten que un Señor del Kai como él quiera pasar un rato con la guardia de Palacio.

Buho deja que le vayan explicando los entresijos de la guardia, cómo se organizan en diferentes turnos a lo largo del día y como cada grupo de guardias tienen sus rondas de vigilancia asignadas. Cuando les pregunta por los incidentes de ayer, le dicen que de momento la guardia tiene orden de doblar las rondas y de estar alerta ante cualquier cosa sospechosa. También habla con los guardias que ayer vieron al Fantasma, pero lamentablemente no saca nada útil del relato que le cuentan.

Le llevan a los pisos superiores de la Torre, donde están los barracones principales (aunque no los únicos) de la guardia. Aquí duermen y hacen vida muchos guardias, aunque hay otros (los que tienen familia) que viven en la ciudad. Siguen ascendiendo y te llevan al piso donde se ubica la armería. Aquí se guarda de todo, y perfectamnete organizado y catalogado. Armas de todo tipo, armaduras, etc, mucho de lo cual sólo se usaría en una situación de guerra. Todo el armamento, le dicen, es suministrado por el Acuartelamiento de los Caballeros de Ruanon. Hablando de armas, los sargentos quedan impresionados ante la hechura de Vendaval, su arco encantado, aunque ve que los guardias utilizan sobre todo ballestas. Ballestas simples. Cuando pregunta por ballestas de doble rail, te dicen que dichas armas no se utilizan en la guardia. Son instrumentos muy personalizados que sólo algún maestro armero, como quizás haya alguno en la ciudad, puedan diseñar.

Parece que los sargentos han dado por concluida la visita, aunque las escaleras siguen hacia arriba. Cuando pregunta inocentemente por el piso superior, se miran entre sí, con cierto aire de nerviosismo.
Bueno... arriba no hay nada... bueno, no exáctamente, sólo está Hansen... No es importante, de verdad que no...

Buho sonríe de oreja a oreja, poniendo cara de no haber roto un plato en la vida mientras pregunta quién es Hansen. ¿Hansen? ¿Dónde has oido antes ese nombre?
El sargento joven le dice que Hansen es sólo un guardia que suele estar siempre allí arriba. Cuando le pregunta por qué, el sargento bajito dice que lo cierto es que tienen ordenes de no molestar a Hansen si no es estrictamente necesario y de obedecerle como si fuera el mismísimo jefe de la Guardia, aunque su rango es de soldado raso.
Buho comenta que le gustaría saludarlo, como al resto de los guardias, ya que debe estar muy sólo allá arriba.
Los sargentos se miran entre sí. Bueno. Un saludo. Sólo saludar. Eso no puede hacer daño a nadie ¿verdad? Hola y adios. Y ya está.
Diciéndole a los sargentos que sólo será un momento, Buho sube por las escaleras hasta llegar a una puerta de madera. La abre.

Dentro hay una pequeña estancia, una especie de rellano hacia lo que es la cima de la torre, a la que lleva una puerta de madera negra reforzada con bandas metálicas. El resto de la pequeña sala incluye un jergón, una mesa y una silla, y un guardia que se vuelve hacia ti.
Hansen.

Un hombre joven, de pelo corto negro, rasgos bastos y ojos cansados. El hombre que vio en su sueño. Buho le reconoce... Y él reconoce a Buho.
Eres tú. Le dice mirándole con sus ojos cansados y ojerosos.

Zorro Plateado quiere seguir buscando en la biblioteca lo que no pudo terminar de buscar la noche anterior. Información sobre el sello heraldico del mago, el anillo que se encontró con Lobo Gris y busco información sobre venenos capaces de provocar los sintomas que matarón a Lobo Gris.

Águila Certera contempla maravillado la gran Catedral de Ishir, era asombroso lo que podía hacer el hombre con su mera devoción.

Le resultó confortante que la primera persona encontrada en la catedral fuera la hija del barón. De hecho, no pudo reprimir su sonrisa durante toda la escena con los guardias.

Cuando llegaron a presencia del Hermano Luanus, Águila lo saluda y escucha amablemente su conversación interesándose por las actividades de los hermanos y hermanas. Tras escuchar sus historias acerca de la vida monástica, Águila pregunta:

Ayer en la biblioteca del castillo encontré una referencia interesante hacia un hermano vuestro. El Hermano Challon. No sé si ese erudito sigue con vosotros, ¿es por casualidad miembro de vuestra orden en Ruanon?

Al hacer la pregunta quiero observar sus reacciones.

La Mano / Torre de la Biblioteca
Horario: Mañana

Zorro Plateado es el primer visitante en entrar en la gran biblioteca de Ruanon esa mañana. Tanto el Bibliotecario como sus jovenes ayudantes lo observan atónitos. Las noticias corren rápido por el Palacio y ya todo el mundo sabe que ayer por la noche Zorro sufrió un atentado contra su vida.
Aun así, no hacen ningún comentario y se ponen al servicio del Señor del Kai, que no tarda en pedirles libros y más libros de temas específicos.

Pasan las horas y Zorro hace lo que puede en cuanto a la busqueda de venenos o enfermedades que se correspondan con los síntomas de Lobo Gris, pero como comprobó ayer, la variedad y la cantidad de tratados sobre estos temas es tal que es imposible, a partir de los sintomas que observaron en el cadáver, obtener un veneno o enfermedad. Lo contrario sí que sería posible, es decir, a partir de un veneno obtener los sintomas, pero ¿qué veneno podría ser? Resulta imposible saberlo por ahora.

Buscar información sobre el anillo de plata es también infructuosa. Un simple anillo sin adornos apenas revela nada sobre lo que buscar en la biblioteca. Pero el tiempo de estudio le da una idea a Zorro. Si alguien puede saber algo de esta pieza, serían orfebres y de esos hay, y muy reconocidos, en Ruanon. Sería una buena idea preguntar en el mercado de Ruanon o en algun taller de orfebrería del Barrio de los Artesanos.

Zorro está picando de una bandeja de frutos secos que un criado le ha traido cuando encuentra por fin algo que por un momento le hace atragantarse. El simbolo del ojo cerrado aparece en un tratado de misticismo. No sólo el simbolo, sino un colgante como el que portaba el Maestro Dragair. En el antiguo volumen se habla de este objeto encantado que un mago puede crear y que al parecer protege a su portador de todo tipo de ataques psíquicos y exploración mental...
Es muy curioso, porque el día que llegaron a Ruanon y se encontraron con el mago, no llevaba ese colgante, pero después, durante el banquete sí. Está claro que oculta algo, y ahora, con ese colgante no hay manera de saber qué es, ya que ni vuestro Sexto Sentido sería capaz de detectar nada raro.

Satisfecho con su hallazgo, Zorro se estira en su asiento y echando un vistazo a los ventanales del techo comprueba que ya ha pasado buena parte de la mañana.
Es entonces cuando de pronto descubre que desde la puerta de la Biblioteca alguien le estaba observando. ¿Cuánto tiempo lleva allí? Se trata de Brendan Furia, el Guardia Rojo, que le saluda con una sonrisa mientras parece susurrar algo. Inmediatamente después desaparece de su vista al salir de la Biblioteca.
A pesar de no haber oido lo que ha dicho Furia, Zorro ha leido sus labios y ha entendido lo que susurraba:

La curiosidad mató al gato...