A regañadientes, Mila acepta, a condición siempre de que le ayude a prepararla.
Y así pasan la tarde, ensayando la canción de Mila, ultimando detalles por móvil con la banda y maquillándose para salir.
Ya en el 107, Mila le presenta al encargado y éste le pide a Rachel el nombre del grupo para presentarlos en su actuación, para la que quedan unos 30 minutos.
- Eigthies Power, responde con ímpetu intentando darle vigor y fuerza al nombre, no se preocupe van a flipar esta noche.
El tipo toma nota y vuelve a la sala. El grupo prepara todo con un poco de prisas. Al teclista no le hace gracia no haber tenido tiempo de probar la acústica, pero arrima el hombro como cualquier otro.
Llega el momento de salir. Rachel siente las mismas mariposas en el estómago que siempre que sale a actuar. Es cierto lo que dicen, el día que dejas de sentirlas en el escenario es el día de bajarse del mismo.
La primera canción, un clásico de Queen, cosecha aplausos del público. La segunda, un exitazo de las Vixens con los coros de Mila, logra que coreen los estribillos. Rachel se encuentra en el punto álgido de la tercera cuando algo raro pasa. De repente, todo el público parece brillar. Como si fueran cada uno una pequeña lamparita independiente, todos tienen un halo de luz de un color entre bermellón y violeta que, al estar tan juntos, parece unirse en un único todo de luz que resuena en armonía con la voz de Rachel. Es como si fueran uno con ella.
Lo primero que le viene a la cabeza es girarse para ver si los demás ven lo mismo pero su carácter sale a relucir y piensa que debe seguir de cualquier manera...será efecto de los focos...nadie va a joderle su noche.
Intento seguir cantando, aunque sea cerrando los ojos en plan emotivo
Extrañas emociones, ajenas, se abren paso en la mente de Rachel. La excitación, la alegría de otros tomándola al asalto. De algún modo, la cantante se da cuenta de que esas emociones son las de su público. ¿Serían esas luces que resuenan con su voz responsables de que ahora ella sienta las emociones de esa gente? Se siente como si estuviera unida de un modo inexplicable a ellos. Como si fueran parte de un todo.
...necesito un descanso..debo acabar la canción y que Mila cante la suya...¿cómo puedo saber lo que siente la gente?....Su cabeza comienza a ir por un camino diferente de la canción pero ella pone todo el esfuerzo que puede en terminar.
Si quieres gasto FdV
Con gran esfuerzo por su parte, logra concentrarse en la canción intentando ignorar el éxtasis que la invade. Las sensaciones van in crescendo, pero ella logra terminar su actuación. Tienen un descanso de 15 minutos hasta la siguiente canción.
Rachel sale del escenario medio mareada debido a la confusión. Se apoya en la pared y se restriega los ojos, como intentando centrar la vistas y dejar de ver esas luces. Al llegar Mila a su lado le pregunta: ¿Has visto eso? Había...como...como luces en la gente...y luego esa oleada de sentimientos ¿lo has sentido también?
Mila también está rodeada de una pulsante luz que parece emitir ella misma. Su color, sin embargo, pasa del dorado-violeta al naranja con motas oscuras. Rachel siente una nueva oleada de preocupación y confusión, pero el éxtasis sigue ahí, recorriendo todo su ser, dándole un subidón como el de ninguna droga que haya conocido.
- Rachel ¿De qué hablas?¿Estás bien? - pregunta mirándola a los ojos. Su luz se torna rojo brillante por un momento mientras pregunta - Dime que no te has metido nada raro - su enfado palpitando entre el caos emocional que experimenta Rachel
- Sabes que no tomo nada si tengo que actuar, responde algo ofendida pero el hecho de ver luces en su propia amiga le hace ser cauta. Olvídalo, solo he dormido tres horas y es la segunda actuación en menos de veinticuatro horas...estaré incubando algo.
La luz alrededor de Mila se torna un lento torbellino de rosa y naranja - ¿Quieres que cancelemos? Si no te sientes bien no hace falta sobreesforzarte, ya hablo yo con el tipo este - El miedo y la confusión se entrelazan con el éxtasis que siente Rachel.
- Nah, tranqui...voy a ver si tomo un poco el aire fuera y se me pasa, dice intentado calmar a su amiga. Creo que es un buen momento para que cantes tú y así me dejas descansar ¿vale?
Mila asiente con gesto preocupado, incapaz de negarle el descanso que tanto parece necesitar. Pasa por un pasillo hecho de gente - el local está abarrotado -, todos emitiendo luces mas o menos mortecinas, el bermellón y el violeta predominando los apagados colores; medioignorando las alabanzas que le dedican, hasta que logra salir a la calle.
Allí fuera sus emociones se calman, el éxtasis dominando. Una sensación de paz, una calma indescriptible y para Rachel desconocida, empieza a abrirse paso hacia ella.
Respira, tranquila, llevas unos días que no paras y estás exhausta..esta noche nada juerga a casa a descansar...pero antes hay que terminar la actuación...y tras unos minutos vuelve tras bambalinas.
- ¿Todo bien? - pregunta una voz masculina a su espalda antes de volver a entrar.
Rachel se gira un poco sobresaltada más que por la pregunta por la presencia de alguien: Si, claro ¿Usted es?
Supongo que no le reconozco cuando me doy la vuelta
- Yo soy un viejo amigo, Rachel - dice la misma voz, de nuevo a su espalda.
Da una vuelta sobre sí misma buscando a quien está jugando con ella: Esto no tiene gracia, sal que te vea
- Siempre estoy ahí, Rachel. Dentro de ti y a tu alrededor. Corta un trozo de madera y ahí estaré. Levanta una piedra y me encontrarás - dice la esquiva voz
- No tengo tiempo para tonterías, debo terminar la actuación - dice comenzando a encaminarse al escenario.