Partida Rol por web

Náhoda či Dopuštění

Chemnitz

Cargando editor
13/08/2008, 17:00
Kanda Takeshi

-Oh, yo estoy bien, gracias, hemos tomado algo de comer en el vuelo. Pero si vamos a tener menos jaleo en la cafetería creo que será lo mejor, por ahora -contesto, sin despejar la afable sonrisa. Al ver cómo busca, sin éxito, un encendedor, extraigo el mío de la gabardina y me acerco a ella para encender su cigarrillo, cortés. No es que yo fume (no lo hago) pero nunca se sabe cuándo puedes necesitar un poco de fuego cerca. Seguidamente me giro hacia Soranno, respondiendo con una divertida sonrisa-. Vamos rápido, entonces, o mi compañera se congelará aquí fuera -río levemente. La verdad es que sí hace frío... No esperaba que tanto.

Así pues, nos dirigimos a la cafetería. Espero a que la teniente escoja una mesa, tras lo que tomo asiento, siempre el último, después de que las dos señoritas lo hayan hecho antes, y pido un té verde al camarero. Antes de comenzar a hablar, me aseguro de que nadie está fisgoneando con un certero barrido visual. Una vez nos han servido todo, centro mi atención nuevamente en la teniente, rezando porque Soranno no tire lo que se ha pedido...
-Bien, teniente. Precisamente quería hablar con usted y con el oficial encargado del anterior interrogatorio por esto mismo. No es muy habitual que se lleven a cabo dos interrogatorios a menos que se trate de departamentos diferentes. Pongamos, por ejemplo, la policía local y la Inteligencia alemana.

Me inclino hacia adelante, colocando ambas manos, cruzadas, sobre la mesa. Más serio ahora, pero no por ello menos educado.
-No creo que ese sea el caso, por lo tanto es una irregularidad que me gustaría, simplemente, despejar cuanto antes, para que no entorpezca la investigación. Asimismo me disponía a entrevistarme con el testigo hoy mismo yo también, pero cualquier tipo de ayuda por su parte será más que bienvenida. De igual modo, comprendo que le ha sido asignado este caso y, lejos de desear acapararlo por completo, si desea usted que cooperemos para resolverlo yo mismo no pondré el menor inconveniente. Por el momento tengo ya algunas cosas muy claras y algunos patrones de actuación por nuestra parte, pero es cierto que cuantas más cabezas pensantes se reúnan en torno a un asunto, menor será el índice de error. Siempre y cuándo hablemos de grupos reducidos -sonrío nuevamente, dando un sorbo al té y dando pie a la mujer a contestar.

Cargando editor
13/08/2008, 19:28
Madeleine Strindberg

Su mano se extendió caballerosa y gentil a encenderme el cigarrillo, una sonrisa ingenua y sorprendida brotó de mis labios por un detalle tan sencillo que no me esperaba. ¡Hacía cuánto no me encendían un cigarrillo! Tan patética es mi vida.

-Gracias...

Nos encaminamos con prisa hacia la cafetería, la chica parecía estarse congelando, no debía hacer mucho frío de donde sea que vinieran, así que lo mejor era sacarla de aquello; el ambiente en la cafetería era el de todas las tardes a esa hora. Uno de los meseros me saludó al entrar, le respondí y enseguida elegí una mesa del rincón con vista a la calle, me senté en un lado, la joven en el otro y el japonés frente a mí. Lo observé durante largos segundos, sus maneras eran tan educadas y en comparación con lo que había sufrido todo el día, aquello era casi un sueño.

Sonreí ante lo absurdo de las cosas que estaba pensando, mientras ordenaba un café con mucha leche. Luego lo escuché atentamente, ciertamente él tenía un punto en el que yo no había reparado o no había querido, un punto que se me hacía bastante estúpido que tanto Schwarz como yo, hubiesemos pasado por alto pero el error por así decirlo, ya se había cometido y sólo teníamos una opción: seguir adelante. Cuando habló de cooperación, no supe muy bien qué contestar enseguida pero al fin, era un hombre de la Interpol, podía ser muy educado y todo lo que yo quisiera pero si no me asociaba con él, lo más probable era que terminaran echándome del caso y eso sí que no.

Respiré profundo.

-No estoy sola en esto, aunque se lo parezca, señor Kanda-dije mirándolo con cierto fastidio en los ojos, aunque no para con él.-Mi compañero... Bueno, no importa. Como sea, quiero que sepa que no estoy sola pero que lo que usted me dice, me parece sumamente certero-me sentía rídicula hablándole de usted cuando debía ser menor que yo,-yo también tengo algunas cosas claras y otras no tanto. Si quiere, si lo desea, puedo hablarle del asunto del interrogatorio con Heller pero creo que lo más conveniente, sería que lo escuchase sin que sepa nada aún... Sin que sepan nada-dije mirando a su compañera.-Para no predisponerlos... En cuanto a la información que yo o mi compañero manejamos, que es la misma, bueno, la puede obtener perfectamente en la oficina y puede contar sin duda con mi ayuda.

Di un sorbo largo al café que hervía pero acostumbraba a tomar las cosas así.

-Sólo debo decirle que mi compañero es un tanto...-yo podía ser fría, parecer demasiado alejada de la gente pero lo de Schwarz era caso serio.-Ya lo entenderá cuando lo vea. ¿Debo llamarlo teniente, capitán? ¿Por qué la Interpol está interesada en esto?

Di vueltas a una cosa en mi cabeza, qué distinto sería de tener como compañero a uno de esos dos. Sin duda mi cabeza no dolería tanto y no llevaría cuatro cafés en unas horas.

Cargando editor
13/08/2008, 22:08
Lausanne Soranno

La chica se sienta, pide una coca cola y se mantiene muy quietecita, ha soltado la mochila a sus pies y se limita a juguetear con una servilleta, aunque va mirando a uno y a otro hasta que finalmente, con la teniente Strindberg pregunta, interviene con una sonrisa, Inspector Kanda es el término correcto dice mientras espera la confirmación de Takeshi.

El tiempo es importante, así que deberíamos poner claro lo que sabe del caso, y cuales son sus conjeturas, así como cualquier pista sobre el posible paradero del asesino, la mujer que la acompañaba y su posible objetivo, la señorita Van Troy se ha puesto seria, incorporando su espalda sobre el respaldo, despacio, hablando con voz clara y firme.

No debemos dar muchos rodeos, todos queremos lo mismo, resolver el caso, y como dice el inspector, mientras más colaboremos, antes terminaremos con este escabroso asunto luego, tras beber un sorbo directamente de la lata que le han traído, clava sus ojos en la mujer que tiene a su izquierda, ¿Qué problema hay con su compañero? pregunta con un deje de inocencia.

Cargando editor
14/08/2008, 20:24
Kanda Takeshi

Asiento a la explicación de Soranno. Efectivamente soy un simple inspector, así que cualquier otro título o término para referírseme sería incorrecto... Aparte de mi propio nombre, claro está. Vuelvo a centrarme en la teniente.
-Bueno, no se preocupe por su compañero, teniente. Lo que me interesa es el caso. Calculo que no le despierta mucha simpatía por el repentino, pero casi imperceptible, cambio en el tono de voz que ha tenido al referirse a él. Si desea prescindir de su compañía durante el caso, sólo dígamelo. Un equipo funciona bien siempre y cuándo cada uno de sus miembros conozca su lugar en la maquinaria y respete al resto de las piezas. Cualquier elemento que pueda desequilibrar a otro, supondrá un desequilibrio en toda la estructura. Y, francamente, no me gustaría que ocurriera tal cosa -admito, aunque sin ningún tipo de enfado, reproche o amenaza velada. Más bien se trata de un sencillo ofrecimiento, una mano que tiendo a la teniente para que se sienta más cómoda.

-Como ha dicho mi compañera, la agente Soranno, no nos sobra tiempo, así que cuanto antes podamos ponernos con el trabajo de campo, mejor. Lo primero que deberíamos hacer sería cotejar apuntes sobre el interrogatorio del señor Heller para sacar algo en claro (si es que no lo hay todavía). Y, para continuar, pedir una orden de registro para entrar en el piso de la señorita Van Troy. Tenemos entendido que ha dejado Chemnitz. Nos lleva varios pasos de ventaja, igual que el asesino (quien, probablemente, haya tenido la misma idea que nosotros... No me extrañaría que nos encontráramos un piso ayanado). Por eso cuanto menos tiempo perdamos, mejor. Es fun-da-men-tal encontrar a la señorita Van Troy, porque a través de ella, muy probablemente, encontremos al asesino. No sólo impediremos su muerte, sino también la de muchas otras personas, asumo.

La explicación es fría, profesional, igual que el tono de voz. Pero en ningún momento se pierden las maneras y las formas. Se nota que la buena educación y los modales son una parte muy importante de mi personalidad. Extraigo de la gabardina una libreta con tapas forradas en cuero, muy cuidada, con una estilográfica. La abro y me dispongo a tomar notas.
-Háblenos, pues, sobre el interrogatorio. Creo que su consejo es muy bien hallado, así que atenderé a sus impresiones antes de consultar nada. Nunca se puede menospreciar la intuición femenina; siempre la he considerado un arma más poderosa y afilada que una espada -afirmo, con sinceridad y una renovada sonrisa.

Cargando editor
14/08/2008, 20:43
Madeleine Strindberg

Ok. Es inspector, no debo olvidarlo. Debí leerlo en su placa pero estaba aún descolocada por el asunto del salón de audiovisuales, sin embargo, sigue habiendo algo que me está molestando y no sé exactamente lo que es. Respiro profundo, se trata de responder, lo que esta gente quiere de mí, son claramente respuestas.

-No hay problema con mi compañero, suele ser un tanto necio y duro, parece demasiado grosero y despota pero es un buen policía de eso no hay duda y quizás hasta les serviría más que yo misma, mi ética no me permite intentar siquiera deshacerme de él pero muchas gracias por el ofrecimiento-respondo reacomodándome en la silla.-Sé que el tiempo apremia, esa no es una novedad para nosotros tampoco. Si quieren que les dé mi opinión sobre Heller y lo que recuerdo que hemos hablado, se las daré pero los datos detallados los tiene mi compañero porque debemos entregar un informe al jefe hoy mismo.

Pido otro café, mientras continúo hablándoles.

-No me estoy yendo por las ramas, señorita Soranno-mi tono es amable.-Lo que sucede es que lo complicado del caso, lo difícil que ha sido incluso para nosotros conseguir pruebas, lo hace todo más lento. Sé bien que lo ideal es encontrar a Van Troy pero empezaré por decirles lo que sé de Heller. Dice ser un admirador de la modelo, dice haber intentado salvar a la mujer; él fue herido y ella no pero si le dio tiempo a darle las llaves de su auto para que escapara junto con sus hijos y yo aún me pregunto en qué momento pudo haber sido eso...-veo a Kanda a los ojos.-Dice que el asesino fue con una mujer, lo cual cual tampoco parece muy factible, quizás ella ya estaba allí, aunque en realidad poco se ve en los videos por no decir nada. Steffan y yo no logramos sacar nada en concreto de allí. Ahora saben lo mismo que yo sé y no sé si tengan alguna duda... Lo cierto es que la huída de Van Troy, a mí me parece un tanto increíble.

Bebo un sorbo del café que me han traído, pensando de nuevo en esa vuelta de vida que puso a Heller bajo la espada del asesino o que él dice que lo puso. Me fijo en la pareja mientras espero sus reacciones, parece mentira que alguien tenga un compañero tan educado y coherente y otras tengamos tanta mala suerte, asumo la suerte que me tocó vivir y espero que Steffan lo pague bien caro.

Cargando editor
18/08/2008, 09:54
Lausanne Soranno

Soranno permanece callada, sonriendo algo tímidamente cuando la teniente parece disgustarse con ella, pero ella no ha lo ha insinuado con mala intención, realmente el tiempo es importante, se frota el ojo sano, como si tuviera sueño, y abre la mochila, sacando de ella una carpetita marrón, que te tiende.

Así, por encima, ves a un tipo grande, vestido de una forma un tanto peculiar, empuñando una espada y un arma, luego el mismo tipo atacando con la espada a otro hombre, y en la tercera una cosa un tanto extraña, una especie de piedra, de la cual parece emanar una luz, colocada en la mano de ese hombre, junto a él, una mujer a la que no se le ve el rostro, empuña el arma, pero al verla más de cerca, te resulta extraña, no logras identificar el modelo de la misma.

Bien, eso es lo que nosotros vamos a aportar al caso, por el momento no podemos dar mucho más, unas cuantas fotos echas por un fotógrafo indiscreto ríe, lamento no poder dar más datos del mismo, parte del trato por las fotos fue mantener su identidad en secreto, pero dice que el tipo apareció de la nada, y desapareció de la misma manera habla para ambos, dando un nuevo sorbo a su bebida.

Cargando editor
19/08/2008, 20:05
Kanda Takeshi

Escucho a ambas señoritas, observando nuevamente las fotos que Soranno muestra a la teniente, aunque las he visto ya repetidas veces e incluso tengo copias. De cualquier forma, nunca está de más revisar las únicas pruebas que hay, ya que la información de la señorita Strindberg no es demasiado halagüeña. Suspiro, algo frustrado, pasando la mano por el mentón, en gesto pensativo, tras lo que doy un leve sorbo al té.
Ciertamente la huida de la señorita Van Troy es de lo más extraña... Máxime si tenemos en cuenta que nuestro asesino es un hombre metódico, meticuloso, que no parece dejar nada al azar, por lo que he adivinado de él hasta el momento. Tal vez... Si Heller está vivo es porque el asesino así lo quiere... Igual que quería que la señorita Van Troy haya huido. ¿Podría querer o necesitar algo de ella? Podría ser, no podemos descartar dicha posibilidad. Apunto nuevamente algunas notas en el cuaderno antes de volver a hablar.

-Tenemos razones para pensar que la mujer que acompaña al asesino podría tratarse de una mujer implicada en otro caso, en Nueva York, concretamente. Los métodos del sospechoso de dicho caso coinciden con el modus operandi de nuestro asesino -repiqueteo con los dedos sobre la mesa-. No estamos seguros, pero podría tratarse de ella. Tampoco sabemos si le está acompañando voluntariamente o por la fuerza. De hecho es otra de las incógnitas más grandes de este caso, ya de por sí extraño. Me gustaría saber si tiene en su poder el informe de balística, ya que imagino que habrán conseguido hacerse con la munición empleada por el asesino. Asimismo me gustaría echar un vistazo al informe forense, aunque no creo que encontremos nada concluyente en ellos... Sobre todo quiero saber dónde recibió el señor Heller el disparo (si es que lo fue, y no se trata de un corte de arma blanca) -todo esto va dirigido a Strindberg, que es quien puede haber tenido ya acceso a todo esto.

Hago una nueva pausa, volviendo a poner en orden mis ideas con el gesto más serio que antes, ceñudo incluso.
-Este hombre... Parece ser capaz de viajar sin ser visto, entrar y salir de los lugares como por arte de magia sin dejar ningún tipo de prueba, cerraduras forzadas, restos de fibras. Nada. Parece como si se evaporase en el aire... Me viene a la cabeza un antiguo cuento de la diosa Tsukiyomi en uno de sus eternos conflictos con su hermano Sosano-Wo... Claro que ellos son dioses y nosotros nos estamos encargando de un hombre... -sonrío levemente, intentando quitar hierro al asunto-. Lausanne, ¿serías tan amable de conseguir una orden de registro para el piso de la señorita Van Troy, por favor? Me gustaría que fuésemos ahí lo antes posible. Por otra parte, el señor Heller se ha declarado como un entusiasta admirador de nuestra modelo. Tal vez él pueda saber sobre su actual paradero, no estaría de más preguntarle al respecto. ¿Lo hizo usted, teniente Strindberg? -pregunto, mirándola nuevamente a los ojos después de haberlos centrado en Soranno, a quien sin darme cuenta, nuevamente, la he llamado por su nombre de pila... Mis modales están empezando a flaquear, cosa que no me acaba de gustar.

Cargando editor
19/08/2008, 20:25
Kanda Takeshi
Sólo para el director

Notas de juego

Me gustaría hacer una tiradita de criminología para ver si se me ocurre alguna cosilla. ¿Cómo iban las tiradas en Cyberpunk? No lo recuerdo y ahora mismo no tengo el manual n_nU.

Cargando editor
19/08/2008, 20:34
Director

Notas de juego

atributo + habilidad

Cargando editor
19/08/2008, 21:00
Madeleine Strindberg

Luego de escuchar el discurso de Kanda con atención y de ver el sombrero horroroso que porta nuestro asesino, me doy cuenta que no hay razón para callar más los detalles, además, el japonés me inspira confianza y la chica también aunque quizás mi frialdad y eso, no permitan que se note. Encuentro entre mis cosas mi encendedor, jugueteo con él sobre la mesa y al final enciendo un cigarrillo.

-Les diré todo lo que sé, aunque esa historia de aparecer y desaparecer por arte de magia, me parece una ridiculez, sin ánimo de ofenderlo-miro a Kanda directamente a los ojos.-Los informes de balistica nos dicen que el arma era una 9 mm pero no tienen ninguna marca distintiva. Además, no recuperamos el arma... Lo que vi en el video es tal lo que he visto en estas fotos. No estaba en la sala, de pronto sí y de pronto de nuevo no. Ni siquiera se ve el momento en el que entra al estudio. Tenemos las cintas en la comisaría por si quieren echarles una mirada.

Vuelvo un poco los pensamientos a atrás, precisamente a la sala de audiovisuales y luego al inspector, las cosas serían muy distintas sí trabajara con él y no con Steffan pero bueno, hay gente con suerte en la vida y gente que no. ¿En qué andará el teniente? Carraspeo y prosigo.

-Heller dijo no saber nada al respecto del paradero de Van Troy y francamente a mí me parece que miente, descarada y absurdamente pero igual tendrán que verlo con sus propios ojos. Su auto no tenía modo de rastrearlo y no es capaz de decir de qué manera escapó ella o en qué momento él le entregó las llaves. No fue herido de bala como todos los otros, quizás por eso está vivo; fue herido con una espada...-doy una calada profunda al cigarrillo, me acomodo el cabello que me estorba en la cara y miro a ambos personajes quedándome luego sólo en los ojos rasgados del inspector, apago el cigarrillo sin mirar a otro lado.-Si les soy sincera, no sé cómo lo hicieron pero salieron del estudio sin que nadie los viera, sin que las camaras pudieran captarlos.

Estiro las piernas bajo la mesa sólo un poco, ha sido un día realmente largo y pinta para ponerse peor. Pensé en esa leyenda de la que había hablado, mientras la imaginaba, le miraba y me preguntaba que pasaba por su cabeza, luego recordé algo y bajé la cabeza lentamente obligándome a despegar mis ojos de los suyos, ruborizándome levemente.

Cargando editor
19/08/2008, 22:15
Kanda Takeshi
Sólo para el director

Notas de juego

Vale, ¿eran dados de 10, no? ¿Es decir, tiro 1D10 con dificultad...? Explícame brevemente el sistema de nuevo, anda, xDDDDDDD.

Cargando editor
19/08/2008, 22:17
Director

Notas de juego

ains, tiras 1d10 + Atributo + Habilidad, la dificultad no la necesitas saber, en este caso es variable.

Cargando editor
20/08/2008, 10:35
Lausanne Soranno

Soranno asiente en silencio a la petición de una orden de registro por parte de Takeshi, parece ahora distraída, como si la cosa no fuera con ella, alternando la mirada entre el líquido negro de su vaso y el de repente interesante techo de la cafetería, que dicho sea de paso, no tiene nada de especial.

Se remueve en la silla, colocando una pierna doblada y sentándose sobre ella, fija su atención en la agente de la policía alemana, hace un par de veces el amago de hablar, pero no parece decidirse, se aparta el pelo de la cara, palpando su herida, Takeshi… empieza a decir, justo cuando el móvil de la teniente empieza a sonar, interrumpiendo las palabras de la joven, que calla esperando que conteste.

Cargando editor
20/08/2008, 10:36
Móvil

Un número desconocido aparece en pantalla, de un teléfono móvil, al descolgar, la grave voz de Steffan al otro lado, Strindberg, te necesito en el 53 de Bonn Street, no avises a nadie de la comisaría, sólo me fío de ti, así que no me decepciones, ¡ahora! dice con aprensión, te parece oír el sonido de un disparo justo antes de que la llamada se corte.

El lugar no quedaba lejos, tal vez a unos diez minutos o así en coche, era un barrio de mala muerte, seguramente Steffan tenían algún informador allí, o cualquiera sabe tratándose de Schwarz, pero el lugar era peligroso, de eso no te cabía duda, y apenas habías estado allí un par de veces.

Cargando editor
20/08/2008, 19:00
Kanda Takeshi
Sólo para el director
- Tiradas (2)

Notas de juego

Un 1... Eso es malo, ¿no? xDDD

NOTA DEL MASTER: Pues si, muy bueno no es, pero tira de nuevo 1d10, de 1 a 5, pifias, de 6 a 10, no pasa nada. Si pifias, la cagas con alguna aprecicación bastante evidente, no quedando Takeshi en buen lugar.

Ufff... No pifio, menos mal, xDDD.

Cargando editor
21/08/2008, 19:39
Kanda Takeshi

-Oh, no me ofendo, no se preocupe, por favor -respondo con una sincera sonrisa a su alusión.

Comienzo a hacer nuevas anotaciones cuando la llamada de Soranno me hace volver la vista hacia ella para, nuevamente, volverla hacia la teniente, cuyo teléfono suena. Igual que Soranno, espero respetuosamente a que lo coja, extendiendo la mano hacia adelante con una nueva sonrisa dando a entender con cortesía que no hay ningún problema porque atienda a la llamada. Seguidamente, llevo la mano al mentón observando con el ceño fruncido las notas del cuaderno. Este caso es cada vez más complejo...

Notas de juego

Jodo, la foto es inmensamente grande... xDDDDDDDD. Lo siento, no parecía tanto en el photobucket, xDDDDDD.

Cargando editor
21/08/2008, 20:24
Madeleine Strindberg

Me levanté de un salto de la silla, mirando en todas direcciones. Cogí mi abrigo y el bolso, aquello no estaba nada bien, las cosas se complicaban y complicaban bastante mi existencia; pensé en correr a decirle al jefe pero algo me impidió hacerlo, sería quizás aquello que escuché al cortarse la llamada.

-Señores, ha sido todo un placer conocerlos y les ayudaré en lo que sea-solté un billete para pagar los cafés de los tres.-Llamen en cuanto tengan la orden para revisar el departamento de Van Troy y si necesitan algo más, lo llamaré en cuanto vuelva de esta...

Hubiera agregado si es que vuelvo pero no tenía mucho más tiempo, saludé con la mano a la joven y luego al inspector, esperaba que les hubiera quedado claro que estaba con ellos y que haría lo que fuese para cooperar pero en ese momento, por muy malnacido que fuera mi compañero y por muy peligroso que fuera ese barrio, su vida estaba en peligro y yo debía ayudarlo de cualquier manera. Había dicho que confiaba, quizás estaba siendo sarcástico pero no era el momento para averiguarlo. Esperé unos segundos por si tenían algo más que decir pero no muchos más, quizás ni fuera el tiempo suficiente.

-Lo siento...-musité.

Me encaminé con prisa a la salida del café y a media calle intenté detener un taxi, realmente esperaba tener la suerte de llegar a tiempo.

Notas de juego

No continué porque no sé si coger un taxi puedo narrarlo o debo esperar al director.

xDD Si, la foto es enorme, señor Japón :P

Cargando editor
25/08/2008, 10:11
Lausanne Soranno

La joven agente mira con extrañeza a Takeshi debido a la brusca manera en la que la teniente da por finalizada la conversación, luego se vuelve hacia ella, reteniéndola antes de que abandone la mesa, levantándose con sorprendente rapidez, aunque tirando la silla al suelo en el proceso con algo de estrépito.

!Espere teniente!, ¿ha sucedido algo?, recuerde que estamos en el mismo barco le dice con sus ojos azules clavados en los de la policía, esta es mucho más alta, y en apariencia mucho más fuerte, aún así no parecen tan diferentes desde la perspectiva del japonés.

Es una especie de extraño desafío lo Madeleine es capaz de ver en la mirada de aquella jovencita, cuya mano derecha esta sobre el brazo de la teniente, y la mano izquierda se esconde en el bolsillo trasero de su pantalón en un actitud algo desenfadada, contrastando enormemente con su expresión.

Cargando editor
27/08/2008, 17:53
Madeleine Strindberg

Miré a la joven policía y luego al japonés, la verdad era que no podía traicionar a Steffan, por más que no me gustara para nada lo que estaba sucediendo y el barrio donde esto estaba pasando; me quité lentamente la mano de la chica de mi brazo y traté de mantener la calma.

-Señorita Soranno, esto es un asunto de índole personal, no se preocupe. Los tendré al tanto de todo lo que ocurra respecto del caso. Inspector, hágame un favor-le miré a los ojos fijamente poniendo mis manos sobre la mesa que estaba entre nosotros.-Llame a mi móvil en una hora y si no le respondo, vaya con mi jefe y dígale que me busque en el 53 de Bonn Street...

Quizás me estaba arriesgando al darle esa dirección a Kanda pero otra cosa no podía hacer, asentí con la cabeza sin dejar de mirarlo y me eché a correr hacia a la calle en busca de un taxi.

Cargando editor
28/08/2008, 10:34
Kanda Takeshi

-Vaya, pero... -me pongo en pie, preocupado y sorprendido por la reacción de la teniente. Casi no me da tiempo ni a reaccionar, aunque escucho sus palabras con rápido interés y rápidos asentimientos con la cabeza. Pero, aunque fuera a decir algo, Soranno se adelanta rauda y veloz. Pero como lo que ha dicho es, más o menos, lo mismo que iba a decir yo (aunque tal vez mucho más resumido, cosa que ahora no viene mal) no pongo objeción alguna. Cojo la dirección que la teniente me entrega asintiendo con gravedad-. Una hora, muy bien -confirmo-. Tenga cuidado, teniente Strindberg -recomiendo, mucho más serio ahora. Esto parece un asunto grave... Es posible, deduzco, que el compañero de la teniente esté en problemas en esa calle, quizá por un caso que ambos llevan un tiempo siguiendo... Y ahora hay problemas. En condiciones normales correría raudo a ayudar a ambos, pero ahora mismo, por desgracia, tenemos la necesidad de coger a ese individuo lo antes posible.
-Lausanne-san -miro a mi compañera-. Quizá debamos ponernos ya en marcha. Tenemos ya bastante sobre lo que trabajar y unas cintas de vídeo en l comisaría.