Partida Rol por web

Náhoda či Dopuštění

Viena, el principio

Cargando editor
20/03/2008, 17:20
Thomas Krankl

Disfruto del camino de vuelta, me encanta el no tener que hablar para hacerlo, eso sólo pasa con muy pocas personas en una vida, compartir palabras es bonito, pero compartir el silencio tiene un significado especial.

Al llegar a la puerta del jardín me detengo, el final de la noche, ¿el principio de algo?, la miro mientras sonrío, Bueno, espero que lo hayas pasado bien, no sé si el sitio te ha gustado, es un tanto peculiar una mano en el bolsillo de mi abrigo, mis ojos no pierden detalle de los suyos.

Cargando editor
20/03/2008, 17:54
Karin Salzgeber

… que preciosa noche…es como si la música sonase de una forma especial, muy muy especial… Llegamos al final de la canción…. mi casa… menos mal que las luces están apagadas, no tendré que responder preguntas al entrar….

…bonita sonrisa, como todas las de hoy…de verdad que me ha gustado mucho, había pasado por fuera varias veces pero nunca lo había visto por dentro y ha sido estupendo. –me estoy poniendo nerviosa, … está mirando de una forma…que me gusta…- Y sí, me alegro de haber quedado, me lo he pasado realmente bien… el frío de la noche ayuda a calmar mis nervios, y además me encuentro a gusto, hace rato que decidí que todo ha sido perfecto, no espero nada… aunque no se si quiero algo más…
Te miro fijamente, con esa mirada que es una mezcla entre calma y expectación, esbozo una sonrisa, porque quiero transmitirte lo bien que me lo he pasado gracias a ti… no se que decir, no se que hacer, pero sí sé que no voy a bajar la mirada…

Cargando editor
21/03/2008, 00:52
Thomas Krankl

Yo también lo pasado muy bien, hacía demasiado tiempo que no me divertía tanto los nervios y las dudas me asaltan, un sueño que puede continuar, despertar a la realidad y comprobar que algunas veces estos se cumplen, que la suerte no siempre es esquiva, que la vida a veces te permite vivir, que se deja beber, y deseo mirarla, y lo hago, perderme en ella, su precioso rostro.

El color de sus ojos se me antoja diferente, cómo si millones de pequeñas partículas azules bailaran al ritmo de sus pestañeos, ¿cómo dejar de mirarla?, ¿por qué dejar de hacerlo?, mi mano derecha busca su brazo, posándose sobre él, el tacto de su abrigo, siento más allá, el calor que desprende, casi imperceptible, ¿por qué dejar de hacer aquello que deseo?

Prefiero no pensar, sólo dejarme llevar, su mirada en la mía, mi cuerpo se acerca al suyo, despacio pero decidido, agacho ligeramente la cabeza, la mano aumenta la intensidad del contacto, aquellos labios, ansiados, soñados, quiero besarlos, notarlos, los busco con los míos, con suavidad, sucumbiendo al momento, su cálido aliento…su sabor…mi beso firme, tímido y apasionado, sincero…sin abandonar el azul que me invade hasta sentirme una remota isla secretamente bañada por el mar…

Cargando editor
21/03/2008, 12:45
Karin Salzgeber

….yo… yo… ya sé lo que va a pasar… quiero que pase, quiero sentirme un poco más unida a él, su anhelo es mi anhelo… ahora me doy cuenta de que toda la noche he sabido que iba a pasar, y que lo he deseado… certidumbres tardías. La canción no se acaba todavía….no debe acabar, no puede…
Su mano me abrasa dulcemente... es una promesa…. me da permiso para mirar sus labios y ver como se acercan, sufrir en ese último instante de lejanía y relajarte cuando acaba, cuando acaba tan bien…. su beso me domina, su cuerpo me envuelve…. mi pelo acaricia su cara…. por fin… mi mano se apoya en su cintura, quiero dejarla ahí para siempre, que le abrase, que le demuestre lo mucho que me gusta su beso…. nuestro primer beso… mi primer beso en mucho tiempo…. casi había olvidado esta calidez, esta conexión…. tan diferentes… Thomas.....

Cargando editor
21/03/2008, 16:32
Thomas Krankl

El roce de su mano sobre mi, todo el hielo del que tantas veces parece que esta hecha, derretido en agua, la dulce humedad de sus labios, el leve cosquilleo de sus cabellos al acariciar mi rostro, me siento transportado, un mundo sólo de dos, nada ni nadie, pero todo tiene que terminar, el instante termina, poco a poco el contacto va finalizando…

No quiero que eso suceda, todavía no, demasiado hermoso, mis manos buscan su espalda por encima del abrigo, rodeándola, abrazándola, y mi boca nuevamente busca la suya, con más ansia mientras la acerco para sentir el contacto de su cuerpo, para asegurarme de que es real, no voy a olvidar su sabor, imposible de hacerlo…

Finalmente nuestros labios se separan, pero quedo cerca de ella, de su mirada, con la sonrisa inevitablemente dibujada, Eres…increíble no sé si es lo mejor para decir, pero es lo único que sale de mi garganta mientras continuo cercándola con mi presencia.

Cargando editor
21/03/2008, 17:56
Karin Salzgeber

.....es mágico.... precioso...... irrepetible.... la conexión es cada vez mas fuerte, más intensa, más íntima, no puedo estar mejor, no se puede estar mejor...... su mano llega a mi espalda en el momento adecuado, cuando más necesito sentirla, una sincronización silenciosa, no pactada.... perfecta.
Mi mano aprieta un poco más su cintura, para que sienta que necesito más tiempo en su abrazo, para resistirnos un poco más al encuentro de nuestros ojos. Todavía no.... sólo un poco más..... por favor...... necesito una nueva oleada, me conformaré sí es la última.... Thomas....
Ya estoy preparada, ya me siento plena para nuestro reencuentro, ya noto nuestra dulce despedida....abro los ojos y estás aquí, donde sé que estarías... donde tienes que estar.... cerca, muy cerca.... mi sonrisa acompaña a la tuya, ¿cómo podría no hacerlo?.... -yo... Thomas... - no puedo decir nada más, recuesto mi cara en su cuello, en su abrigo... no puedo decir nada.... déjame aquí un momento, que recupere mi entereza....

Cargando editor
22/03/2008, 00:33
Thomas Krankl

Sólo rodearla, mi brazo sube hasta la parte trasera de su cabeza, acariciando su cabello, despacio, sintiendo el calor de su rostro, esperanzado en tenerla así para siempre, mis dedos atraviesan su pelo para juguetear en su cuello, recorriéndolo mientras escucho su respiración en el silencio de la noche.

Unos segundos, unos minutos, una eternidad…no importa, giro mi cabeza, un beso en su frente, fugaz, robado…suave…al final no puedo resistir buscar de nuevo esos ojos que tanto me gustan, que tanto me turban, no quiero marcharme, separarme de su lado es la peor idea que he tenido nunca, pero aún así ese momento tiene que llegar, por desgracia, le sonrío, el brillo de sus mejillas en el frío de la noche, agarro su mano, estrechándola entre la mía, con ternura, encontrando su mirada.

Palabras que no quiero decir, mis sentidos me detestan al pronunciarlas, Debo marcharme, es tarde, debes estar cansada y yo debo estar soñando…

Cargando editor
22/03/2008, 00:59
Karin Salzgeber

Su arrullo me relaja, me despierta, me reconstruye, la vuelta a la realidad ha sido muy dulce, muy sentida. Ahora sí que está acabando la canción, sus últimas notas…
- Sí que es tarde…. ¿podré despedirme? ¿podré apartarme?.... lo miro a los ojos, a la boca, a los ojos de nuevo… ya no tiene que darme vergüenza, ya he cruzado esa línea… poco a poco me separo, casi me duele…. mi mano apretada quiere quedarse, se despide con una caricia, sonriendo…. Buenas noches Thomas, que descanses. Me inclino hacia su cara y le doy un suave beso en la mejilla…. Me quedan cosas que decirte…. te las diré….
Me acerco a la verja para abrirla, sabiendo que todavía está, que quizás me este mirando…. Mis manos van más lentas que de costumbre, preferirían estar haciendo otra cosa…. Adiós….

Cargando editor
22/03/2008, 09:56
Director

El momento finalmente termina, pero la noche sigue siendo igual de hermosa mientras atraviesas la verja de entrada y el pequeño jardín, al llegar a la puerta de la casa una última mirada y un último adiós con la mano, con los ojos, desapareciendo en el interior de tu hogar.

El silencio reina al entrar, pero mucho menos agradable que antes, ahora es un silencio de soledad, pero al ser tan familiar no te es extraño, no te inquieta, subes las escaleras y tu madre sale a la puerta de su habitación, un breve intercambio asegurándose de que todo va bien y regresa a su dormitorio.

El tuyo te recibe tal y como lo dejaste.

Cargando editor
22/03/2008, 11:42
Karin Salzgeber

Me acuesto contenta, ilusionada, cansada…. ya tapada, un último momento pensando en lo que ha pasado hace apenas unos instantes y por fin me duermo.

Durante la noche algún despertar, simplemente por la postura, rápido, pero lo suficientemente largo para tomar conciencia de lo que paso hace cada vez más tiempo… en todos los despertares me vuelvo a dormir con una sonrisa en la cara, pensando en cómo estará durmiendo o si estará despierto pensando en mí…

Me despierto por la mañana y de repente me viene la intensidad de lo que pasó ayer. Sé que no voy a poder volver a dormirme, ahora me están viniendo todos los nervios, todas las consecuencias de la noche y de nuevo su intensidad. ¡Thomas! ¡Te has besado con Thomas! Es cierto. Lo llamaste, quedaste con él, lo provocaste y te dio un beso…. Ahora no parece tan sencillo como lo fue anoche. ¿Cómo pudiste? ¿Qué estará pensando de ti? ¿Se lo contará a alguien de la Orquesta? Oh, me empiezo a poner violenta…. estos nervios no me gustan… Seguramente, cuando lo cuente acabará riéndose… riéndose de ti, de tu descaro, de tu ligereza… ¿Cómo has podido Karin? ¡Se va a enterar todo el mundo! ¡otra vez has sucumbido!, otra vez te has dejado engañar… como con Josef… ese dolor… pero el de ayer no fue Josef, Karin, fue Thomas, él, que siempre te cuida, tu incondicional, él nunca te haría daño, siempre lo has sabido, que os hayáis besado no cambia eso… me vuelve la calma, la tranquilidad, lo bonito de la noche, con la misma intensidad que antes la violencia… me acuerdo de su dulce beso, su entrega… no importa lo que pase, todo está bien, es Thomas…él te respetará, no te tortures más porque lo sabes, estás segura…. Me entran ganas de saltar, que emocionante, ¡Thomas! ¿se habrá despertado? ¿se acordará de mi? seguro, sonrío para mi… se acordara de cuando entramos en el bar… de cuando me presento al señor Hasner… de nuestras bromas….ay, de cuando me puso la mano en el hombro y todo cambio… su beso… me pongo colorada, sonrío mucho más… que beso más bonito, a la vez que intenso… debería haberme quedado un poco más…. más colores en mi cara y más sonrisas… mi mano en su cintura… que vergüenza….sus palabras… ¡ME DIJO QUÉ SOY INCREIBLE!…. tengo que hacer algo, me estoy poniendo nerviosa….

Miro el reloj, he dormido unas 6 horas y media, sonrío más, me da igual, con estos dulces nervios aguantaría todo el día aunque hubiese dormido tres. Me pongo ropa cómoda de estar por casa y bajo a desayunar, saltando por las escaleras, en busca de ruido, barullo y de participar en él, ¡tengo que quemar estos nervios!¡Esta alegría!

Cargando editor
22/03/2008, 19:58
Director

Que diferente despertar con tan solo un día de diferencia, apenas ha amanecido, a través de la ventana la luz del sol anuncia un radiante tiempo, muy acorde con tu carácter.

En la cocina de tu casa el mayordomo se afana en preparar el desayuno, lo saludas y te devuelve el saludo, te sonríe al verte tan alegre, pero enseguida la voz de tu padre te reclama desde el salón, al oírla abres la puerta que estaba cerrada y allí lo tienes, los ojos alzados al verte llegar.

Cargando editor
22/03/2008, 19:59
Peter Salzbeger

Leyendo el periódico sentado en la mesa con una taza de café que aún desprende su aroma, perfectamente arreglado como siempre, desde primera hora, casi no recuerdas haberlo visto nunca sin estar impecable, aunque ahora usa gafas de vista para leer.

¿Qué tal has dormido?, pregunta más como una obligación, sin esperar respuesta sigue hablando, como anoche no te vi te lo dijo ahora, nos han invitado esta noche a una fiesta en casa de los Herzog, es una cita importante y quiero que estés preparada, además, creo que tu conoces a su hijo, Josef, ¿no era amigo yo?, pues si, parece que no se acuerda de que estuviste saliendo con él, o no quiero recordártelo.

Cargando editor
22/03/2008, 20:30
Karin Salzgeber

-Buenos dí… qué?- me ha caído un jarro de agua fría…- yo, verás papa, tengo que practicar mucho por ir un poco retrasada, -… ¡NO POR FAVOR!....- excusadme con que me encuentro un poco indispuesta, es que de verdad que tengo que trabajar, ya sabes, Tengo que preparar bien un conierto y necesito estar muchas horas practicando... La sonrisa se ha apagado, mi cara expectante no refleja ningún entusiasmo a la invitación de mi padre….

Cargando editor
22/03/2008, 20:49
Peter Salzbeger

Parece que tu negativa ha conseguido captar la atención, pues se quita las gafas y las suelta junto al periódico, clavando su aún atractivo rostro en ti, su semblante es serio.

Lo siento Karin, anoche no tenías tanto que estudiar, tienes que entender que esto es importante para nosotros, tienes todo el días para estudiar, la fiesta no empezará hasta las ocho, así que aún tienes tiempo de sobra su mirada es la de alguien que no quiere discutir más.

Cargando editor
22/03/2008, 21:00
Karin Salzgeber

Mi cabeza pesa en la balanza las dos opciones que tiene, seguir intentándolo o no. En otra ocasión, para otra fiesta u otra casa a lo mejor no me importaría, pero la certeza de toda la noche en casa de Josef….

Papá, si hubiese sabido lo de la fiesta, no habría salido anoche y habría practicado para poder ir hoy. Es un contratiempo, lo sé, pero no será tan necesario que yo vaya, ¿no? seguro que no se notará. Es muy importante que me prepare bien el concierto. Tono pausado, tranquilizador, para no enfadarlo, como si se tratase de una simple conversación... no quiero ir, hoy no, por favor….-

Cargando editor
22/03/2008, 21:51
Peter Salzbeger

Tu padre suspira, baja la cabeza un momento, con gesto cansado, cerrando el periódico, y poniéndose aún más serio, aunque su tono de voz sigue sin variar.

Karin, te estoy pidiendo una noche a la semana, tienes que entender lo que esa fiesta significa para nosotros, puede que para ti no tenga ninguna importancia, pero haz el favor de pensar en alguien aparte de ti

Cargando editor
22/03/2008, 22:05
Karin Salzgeber

-Entiendo que es importante para vosotros, mi pregunta es la siguiente: ¿es imprescindible que yo vaya? ¿de verdad cambia tanto el éxito de la fiesta? Si es así, pues iré y mostraré la mejor de las sonrisas, como siempre.- Me siento un poco mal, porque si fuese a otra casa ya habría aceptado, pero también él podría saber lo que significa para mi ir allí, creo que esto es lo que me enfada de verdad, que haga falta que se lo explique, cosa que me niego a hacer….
Sigo manteniendo el tono de una conversación normal y distendida, no quiero enfadarlo tan temprano. He gastado mi último argumento

Cargando editor
22/03/2008, 22:15
Peter Salzbeger

La expresión de tu padre se suaviza, Me alegro de que seas razonable, tu madre no querría que faltaras, está muy ilusionada con la idea, así que no se hable más, a las ocho tienes que estar preparada

Sin decir nada más vuelve a colocarse las gafas y abrir el periódico y continuar su lectura como si la conversación no hubiera existido.

Cargando editor
22/03/2008, 22:29
Karin Salzgeber

Mi cara se pone roja, por la humillación, la desconsideración y el autolitarismo. ¿Cómo es posible que no entienda nada, que no sepa nada? ¡Oh!- PPues, pues muy bien. Me giro bruscamente, enfadada, ¿cómo puede ser así? Ya no tengo ganas de desayunar, de tocar el oboe, de pensar en Thomas… nada. Esta noche, ¡Esta noche va a ser un infierno! Me encierro en mi cuarto, a tocar el oboe, a desconectar, a intentar relajarme….

Cargando editor
22/03/2008, 23:29
Elisabeth Salzgeber

El portazo, el enfado y la sensación de impotencia, la puerta cerrada y la música que suena, señal para no ser molestada, al principio te cuesta concentrarte, pero finalmente, como siempre, logras abstraerte de todo, sumergirte entre las dulces notas del oboe, unas horas de calma…

Rotas por el suave toque de unos nudillos en la puerta, tu madre pide tu permiso para entrar, con una sonrisa, quizás conciliadora, quizás sincera, pero te decantarías por lo segundo, Gracias cariño, gracias por venir esta noche, sé lo difícil que resulta para ti se acerca un poco hasta tu posición Está un rato, lo que dure la cena, y luego enseguida te vienes para casa, ¿de acuerdo?