Partida Rol por web

Bueno, tampoco podemos hacer mucho en estos momentos- dice Edward. Se había encontrado durante buena parte de la conversación ensimismado, observando todo a su alrededor. Desde luego, la cosa no era como la pintaban allí por EEUU, aunque de eso ya tendría que haberlo sabido. La guerra es la guerra- volverá cuando tenga que volver. 

El sargento Stone, aparecio con su rostro imperterrito mirando a cada uno de vosotros aun con su cara manchada de barro.

Soldado Bentley y soldado Thomson, id a comandancia os acaba de tocar la loteria...- Sonrio de medio lado- El resto conmigo que os voy a enseñar vuestro nuevo hogar...

No os dio mucho tiempo a la despedida pues rapidamente os hizo marchar con todo el equipo que llevabais encima. Pero no os acompaño del todo, solo .

En la tercer barracon esta el Cabo Rockwell, decidle que os enseñe vuestro nuevo hogar y como funciona esto...si me necesitais estare en la cantina o en el barracon central.

A pesar de que siempre suelo tomarme las cosas bien, no pude evitar soltar un bufido cuando el sargento Stone nos vuelve a dejar solos en medio de la base para que busquemos a otro tipo.

-Me siento como una maldita pelota, llevandonos todo el día de un lado para otro.- Mientras hababa caminabamos rapidamente, pues ya teniamos ganas de al menos saber donde ibamos  a dormir- ¿Que creeís que ha pasado con Bentley y Thomson?

Cuando el sargento llega y nos suelta que Bentley y Thomson los licencian, a la par que nos ordena que busquemos al cabo Rockwell en uno de los barracones. Agarro todos el petate y ponemos en marcha hacia el barracón.

Pues no lo sé, supongo que algo muy grave habrá pasado con sus familias, no suelen licenciarte así como así-siguiendo la conversación de Ryan, con ganas de encontrar ya nuestro sitio -Vamos a ver como se las gasta el cabo

Eso, o que se habrán asustado y quieren volver de nuevo a casa- dice Edward- ahora vamos a hablar con el Cabo. Si hay suerte podremos instalarnos de una puñetera vez en este sitio. Que estoy harto de dar tantas vueltas.

Me pongo a la latura de ellos, y les digo en voz baja:

-Hay un método para que te licencien antes de tiempo, y es hacerse una herida, me parece que eso han hecho, te clavas el machete en la pierna, y ya te puedes ir, o eso he escuchado. También puede ser que tengan alguna enfermedad.

Continuo avanzando, y les comento:

-Otra vez voy a tener que gritar para encontrar a ese tio. El sargento "malaspulgas" nos ha dejado aquí tirados, y mi juguete, pesa demasiado -digo mirando mi arma- en cuanto encuentre una litera, la okupo.

Bueno, espero que no sea grave lo que les haya pasado -digo sinceramente. Por cierto, hablando de gente que tiene la suerte de no estar aqui ¿Creeis que encarcelaran a Cassius Clay?

Seguimos en dirección al barracón para buscar al cabo Rockwell, la humedad y el calor hace que parezca que está a kilómetros. Mientras seguimos nuestra con nuestra conversación asiento al comentario sobre las razones de las licencias, para después seguir la charla.

No creo que vaya a la cárcel, aun después de convertirse al islam sigue siendo un ídolo para muchos, y eso pesa más que otra cosas .

No puedo reprimierme de hacer una contestación sobre el tema que han sacado.

-Ese negraco, la única suerte que ha tenido en la vida, es que no se ha topado conmigo, si no, otro gallo cantaría.

Mientras caminabais por los barracones la gente os miraba sin miraros, quiza era porque no os querian coger cariño. Ya que aun no habiais salido de combate y era sabido que los novatos eran los primeros en caer.

Llegasteis a un barracon y alli un tipo negro sin camiseta estaba sentado, mas bien esparramado en el "porche". Se habian improvisado un toldo con las sabanas verdes y unos sacos de tierra hacian su trono.

Fumaba tabaco liado y en su otra mano tenia una Budweiser. Cuando os parasteis enfrente de este, os dibujo una sonrisa blanca llena de dientes.

No hace falta que pregunteis...¡Es aqui!- Alzo las manos como si aquello fuera un palacio.- Soltad todo eso, coged una cerveza y poneos comodos chicos....

Menos las cuatro ultimas camas el resto podeis cogerlas a vuestro antojo...nadie las reclamara.- Esa ultima risa fue triste.

Veo al negraco, y me pongo delante de el mirándole fijamente, mientras huelo el pitillo que fuma, hasta que le digo:

-Que pasa hermano, veo que fumas tabaco jamaicano, unas caladitas no me vendrían mal, y si me cuentas como va esto, mejor que mejor.

Hecho una ojeada dentro de nuestro nuevo recinto, y busco algo de movimiento dentro por si hay ratas.

-Supongo que hay todos los chinches y pulgas que se puedan desear aquí dentro. -a los de mi grupo- Mi cama que sea la mas cercana a la entrada, que si he de ir al cagadero, pueda hacerlo rápido, no quiero tropezarme con nadie.

Al fin econtramos el barracón, donde encontramos al cabo Rockwell y por su actitud poco tiene que con la de un mando convencional. Nos dice que casi todas las camas estan disponibles menos unas cuantas, a la par que nos 'ordena' que cojamos una cerveza.

-Gracias- le digo mientras voy hasta una de las camas para dejar a ALICE que ya se estaba poniendo un poco pesada. Cuando dejo los trastos, me siento un momento en la dura cama para comprobar lo que ya se intuia acerca del colchón, mientras digo resignado.- Hogar , dulce hogar .

Cuando Bob hace un comentario de porqué escoge su cama, no puedo evitar que se me dibuje una pequeña sonrisa.

Bien, hagamos caso al cabo y cojamos una de esas cervezas mientras podamos.

Tras dejar sus pertenencias en el barracón, Edward se dirige hacia la caja de cervezas, donde coge una. Desde luego, no esperaba tomarse una cerveza a la primera de cambio. Pero suponía que la guerra tenía este tipo de peculiaridades. Tras elegir su cama (una de tantas) mira al cabo:

Y dígame, señor. ¿Cuanto tiempo lleva aqui?

Completamente agotado deje caer a Alice junto a una de las camas y me dejer caer bocabajo unos segundos

-Joder como voy a dormir hoy...

Tras comprobar la comodidad de la cama (que tras tres horas de marchas se me hacía extrañamente confortable a pesar de su evidente mal estado) me levanté a beber una cerveza junto a los demás. Sin decir nada, me puse a escuchar la charla de los demás compañeros.

¿Hermano?- Sonrio con su blanca dentadura- Si claro llamame como quieras "Blanquito"- Te tendio su cigarro con ese seductor olor a campo.- Luego rulaselo a tus compañeros haber si se tranquilizan pues teneis una cara de susto que no podeis con ella y esto os relajara jajajjajaja ya lo creo que lo hara...

Bebio un largo trago de cerveza y arrugo la lata- Pues chico si vas a cogerte una traeme otra para mi...

Espero a que todos os pusierais comodos para hablar- Me quedan 100 dias para irme de esta mierda y no me puedo imaginar cuando me quedaban los 365 dias como os quedan a vosotros. pero supongo que tendria la misma cara que vosotros y ese miedo que se os ve a algunos.

Pues aqui aparte del jodido calor pegajoso hay muchos bichos y son jodidamente enormes. jajajjajaja he visto cucarachas tan grandes como una rata jajjaja

Otra cosa no habra aqui, pero tiempo libre hay mucho hasta que nos toca salir a esa puta selva. Pero bah, no pensemos en eso ahora, contadme quienes sois y porque os habeis metido en esta mierda.

Eso es lo que me pregunto cada mañana. Los cigarritos de la risa que me fumé antes de tomar la decisión no me hicieron ningún bien...Pero bueno, a lo hecho pechos...no, pechos no, pecho. Bien respira...relajate...y sobre todo no te pases con la bebida...Dos cervezas, máximo tres, no dejalo en dos.

Tras unos instantes en silencio, imaginando con desgrado esas cucarachas me dispuse a responder la pregunta del cabo.

No me metí, me metieron

-Bueno. Estoy aquí porque no pude librarme con excusas baratas.Mi salud es buena y no tenía pasta para pagarme estudios superiores -dije tras dar un largo trago de la amarga, calentorra pero deliciosa cerveza- Espero sacar el dinero suficiente para pagarme la carrera ya que mi familia no esta dispuesta a pagar la que quiero estudiar. -añadí señalando el lapicero que aún tenía enganchado en la oreja- Creen que el arte es para vagos y hippies y que mi hermanita se fugase con unos melenudos... bueno-concluí con una sonrisa sarcástica en la cara- no ha mejorado su visión del asunto.

Por cierto, ¿se sale mucho a la selva por aqui?-pregunté con la esperanza de que la respuesta fuese "No". Aquel campamento no sería el paraiso, pero un año así...bueno. Podría soportarlo

Continuo disfrutando de nuestro pitillo comunitario, mientras intento hacer aros con el humo, y se lo paso a Ryan.

-Toma, fuma de esto, que te hará un hombre. No le des muy fuerte que toserás. -le quito la cerveza con la que venía- pues yo he llegado aquí para poder educir un poco un par de cosillas que tengo pendientes con la comunidad. Si os sirve de consuelo, yo no fui.

Le doy un trago al botellín, y me lo acabo.

MIro un poco mis alrededores, y le comento:

-Valiente pocilga a la que nos han traido, tendremos que dormir machete en mano por si tenemos visitas peludas, y si os quitáis las botas, yo de vosotros les daría la vuelta antes de volver a ponéroslas.

Sigo a Bob y a Ryan hasta sentarnos cerca del cabo Rockwell, éste nos pregunta cual han sido los motivos de que estemos aquí después de decirnos que ya 'sólo' le quedan 100 días de estar aquí. Abro una de las cervezas y empiezo a beberla poco a poco, mientras escucho las respuestas de mis compañeros. Al parecer ninguno de los dos han venido aquí por cuenta propia han venido por otros motivos, parece que yo soy un bicho raro -pienso, Bob le arrebata la cerveza a Ryan, así que aprovechando voy a por otra y se la lanzo a Ryan, cuando ya terminan y se hace un pequeño silencio digo.

-Lo mío viene de una larga tradición militar, voluntario. - miro a Bob ante sus palabras de que tiene cuentas pendientes con la justicia, de lo que poco hemos aprendido es que nuestros compañeros son lo más importante aquí - Aquí eso no importa Bob estamos todos del mismo bando.

Al parecer la cosa esta tranquila hasta que toca salir a alguna misión por la selva.

Y algún consejo que puedas darnos cuando nos llegue la hora de salir de 'excursión'

Yo lo hice para luchar por mi país- responde- simplemente esa- tras esto coge una de las cervezas ofrecidas por el cabo y tras abrirla la bebe lentamente- no es que sea la mejor razón del mundo, pero ahí esta.