-Bueno, ¿qué? -Konta parecía tan animado como todos los días- ¿Os pasó algo anoche?
Colocó la silla del comedor al revés y se sentó apollando la barbilla en el respaldo.
Nanako se encontraba en el comedor. La noche anterior la había pasado en vela, pero no ocurrió nada. En ese momento se dormía si no se concentraba en realizar alguna tarea.
Shinichi la hizo volver de su ausencia con una pregunta. Parecía que él se había rajado, pues preguntaba que tal le fue sin decir primero su experiencia.
- Pues la verdad no muy bien - Dijo la joven con una sonrisa - No ocurrió nada de nada, y eso que después de leer el comic estuve ojeando otros más...
Nanako había llegado pronto al comedor y se había sentado sola, ahora Rokutanda estaba a su lado, pero aún no habían llegado los demás...
Saago aparece con su comida de todos los días, y se dirige a través del comedor, como era de costumbre, para almorzar con sus auriculares puestos. Se sienta en el mismo lugar que el día anterior y comienza a comer.
De pronto esboza una sonrisa divertida al fijar con la vista la mesa en la que se encuentran los mismo jóvenes del día anterior.
Menudos críos...Me la pasé leyendo por horas anoche el libro Eclipse hasta que lo acabé, y quedé dormido con el en sobre mi cara...
-Mm... ¿Qué traes hoy aquí? -se acerca sigilosamente a la comida de Saago- Huele bien...
Después, callando un segundo mientras veía la silla vacía de su amigo...
-Mm... Kon-kun no ha venido... ¿Creéis que...?
-¿Porqué? -la joven decidida se sentó en otra silla del comedor- ¿Que hay de raro en que Konta falte a clase? Es un macarra. No se puede esperar que asista día sí y día también. ¿Y tu, Uemura?
-N... no... nada... No me pasó nada anoche.
De pronto se impresiona al notar a aquel joven hablándole.
Se quita los auriculares, lanzando una muy pequeña carcajada , observándolo.
Perdona...No te he oído , que has dicho?
Entona en tono amigable sonriendo mientras logra oír como los demás comentan sobre la experiencia de anoche con los libros.
- Quizá - Dijo Nanako con cara divertida - Los libros se han llevado a Konta...
Después de una pausa silenciosa en la que examina a sus compañeros echa a reir.
- ¡Seguro que está haciendo novillos!
-¡No puede ser! ¿El... el libro?
Azumi está visiblemente preocupada.
-Solo estaba admirando tu comida, Saago-kun.
Después, viendo la preocupación de Azumi, la consuela.
-¡Que va! ¡Cómo va a desaparecer en un libro! Además, Kon-kun no leía libros ni en broma. Como mucho, algún comic de Yakuzas como... -el joven impetuoso se incorporó en su asiento mientras miraba al fondo de la habitación, sorprendido- Como el que está leyendo Hamada.
-¡Pero que dices! ¿Hamada con un comic? Estás hablando del número uno de... -la muchacha entrecerró los ojos para ver mejor la portada del libro que sostenía frente a sí Hamada en el fondo de la habitación- Es increible.
Sasuke seguía leyendo el comic, muy concentrado, aparentemente sin darse cuenta de vuestras miradas.
Nanako se levantó de un golpe habiendo encontrado a alguien más a quien le gustaban los cómics y se acercó al chico.
- ¿Eh, que lees? - Curiosona, intentó mirar por encima del hombro del chaval - Vaya, como mola... Ah, me llamo Nanako y soy nueva en la escuela.
Hizo una reverencia informal ante el muchacho.
Menudos niños...
Saago simplemente se colocó otra vez los auriculares y continuó almorzando perdiéndose de aquel intento de conversación.
El muchacho, frío como el hielo, pasó directamente del intento de conversación de Nanako.
Sin embargo... al mirar el comic por encima del hombro pudo ver que uno de los personajes se parecía mucho... casi demasiado... ¡a Konta!
-¿Que te pasa, chica? Parece que hayas visto un fantasma.
La voz socarrona de Tomoe se dirigía a Nanako.
Nanako le quitó el comic al chico maleducado y lo llevó a la mesa de sus amigos.
- Dejamelo un segundo, enseguida te lo devuelvo - Dijo mientras aprovechaba el pensamiento de invulnerabilidad del chaval para levantar el comic.
Cuando llegó a la mesa contigua lo enseñó sin dejar que ellos lo tocaran.
- ¡Chicos! - Dijo apresurada con los ojos desorbitados- ¿Decidme que no se parece a Konta?
Mientras almorzaba, pudo notar que algo conmocionaba a los jóvenes, por lo que se quito los auriculares y prosiguió comiendo mientras intentaba escuchar algo.
Ahora que lo noto...En su grupo falta la chica de ayer...
-¿Que? No, que va. No se parece en nada.
El muchacho parecía convencido de lo que decía, mirando el comic con cara de escéptico.