Partida Rol por web

Que la espada que se le había deslizado de la mano le diera al blaster de su objetivo sin duda fue un golpe de suerte , oportunidad que no dejó escapar y se abalanzó sin dudarlo y usó la misma estratagema que había usado anteriormente con su espada pero con los puños , por suerte tenía puestos y preparado los guantes de combate para darle una buena tunda al guardia ..... y de esta manera quedaría alguno vivo pues dudaba mucho que el wooki se controlara tal y como estaba inmerso en una furia salvaje . 

El bláster y la espada eran una clara mala señal. ¿Quizás Trix había mordido más de lo que podía tragar? zendra continuó moviéndose en silencio por la oscuridad hasta ver claramente lo que pasaba.

Avanzas por el pasillo unos metros hasta poder ver la situación con claridad. El wookie acaba de incrustar su espada en el hombro de un guardia, dos guaridas mas están en el suelo con cortes recientes de espada y Trix pelea a puñetazos con otro de los guardias. Al parecer la pistola era del guardia y la espada de Trix.

El disparo de la Umbariana produce un agujero negro en las tripas de la capitana y esta deja caer su cabeza pesadamente. Mientras el miembro de la tripulación que estaba en el puesto de artillero aparece por el pasillo con el bláster en la mano. Al ver tu sable de luz, a la capitana y su compañero en el suelo se queda confundido.-¿Qué...qué ha pasado?.-

Zendra avanzó confiada entre el humo de la estancia, dispuesta a sorprender al guardia que peleaba con Trix pero a medio camino tropezó con el arma de uno de los guardias tumbados en el suelo.

Viendo que la habían descubierto, Zendra mandó el sigilo a la mierda y disparó sobre el guardia que luchaba con Trix.

Después del puñetazo en la cara que hizo tambalerse hacia atrás al guardia de la Ultaaro IV, Trix estaba dispuesta a acometer con una patada cuando un disparo de blaster pasó muy cerca de ella. El rayo escarlata impactó contra el guardia y lo derribó con un agujero en el pecho.
Al volver la cabeza ves a Zendra con el arma humeante en la mano. El Wookie todavía se debatía con el otro guardia que quedaba, aunque parecía como si estuviera jugando con él. Su Ryyk estaba clavado en el hombro del humano.

La Capitana ha caído, pero ahora es otro de los piratas el que se aparece para detener nuestro plan que, al parecer, no va tan viento en popa como debería. Zendra, la Umbariana que me acompaña, después de acabar con la Kel Dor, va a averiguar que es lo que está sucediendo con la otra nave.

Sin perder un momento, cargo contra el pirata que nos ha descubierto. Me acerco rápidamente a él, blandiendo mi sable de luz para acabar con la amenaza que provoca.

Roorh estaba sediento de venganza y el pobre soldado iba a ser  un fantástico  objeto para aliviar dicha  sed. Con una de sus manos  agarró con fuerza la cabeza del soldado mientras con la otra,con su espada Ryyk , seccionó el brazo del muchacho entre gritos y gruñidos del wookie. Mientras la sangre se derramaba a espuertas de aquella herida, Roorh comenzó a apretar con fuerza el cráneo de  su enemigo. Los enmudecidos gritos de dolor del humano  solo conseguían que Roorh aullase  de satisfacción hasta un  crujido desagradable puso punto final  ala agonia del soldado.

Cubierto de con su sangre y la de sus enemigos, Roorh se giró hacia sus compañeras rugió como si quisiera liberar el resto de su  ira . Respiro profundamente y enfundo su enorme espada  en la vaina que portaba a su espalda. Miró para Zendra y le espeto,aun de mal humor:

 - Garuuu rooro  raaw rooor gruuorr?.-

El zumbido del sable de luz penetra en tus oídos, en tu cerebro, en la fuerza. Notas cada movimiento del arma mientras la esgrimes.

-Gracias Zendra, pero ya lo tenía dominado. Le desarmé con mi espada para deleitarme un poco con la pelea.-La Zeltron se vuelve hacia el Wookie y le guiña un ojo.

-Oh, no.-Una voz magnética suena delante de vosotros, donde termina el pasillo para girar a la izquierda. Veis una sombra que se escabulle en esa dirección.

-Seguidlo vosotros! Yo voy a comprobar que Kazer no necesita ayuda y volveremos a por vosotros! - dijo Zendra antes de volver a desaparecer tras las sombras de una consola informática.

Al escuchar la orden de la mujer umbariana, Roorh cogió aire y salió como alma que lleva el diablo tras la enigmática sombra que había huido por la izquierda. Un rugido de satisfacción fue la única respuesta  por parte del wookie  mientras se alejaba.

Giró a la izquierda tan rápido como sus pies le permitían y , sin dejar de correr, husmeó la zona y lanzó miradas inquisitivas en busca de su objetivo.

Recogiendo sus armas tan rápido como pudo, Trix siguió al wookie en su frenética carrera.

Al doblar la esquina veis justo una puerta que se cierra a la izquierda. La nariz del wookie no deja de olfatear mientras un olor a metal y aceite se mete en sus fosas nasales.

El enemigo recibe mi golpe y aun se mantiene en pie, por lo que sin dudar un momento, vuelvo a blandir mi arma. La hoja de luz se deforma por la velocidad del movimiento, dejando una estela de luz de color celeste por la trayectoria del golpe que lanzo hacia el pirata.

Algo puede haber salido mal y al parecer alguien nos ha engañado, pero el punto es que tengo aquí enemigos con los que debo acabar antes de continuar con la misión. Mi ataque es feroz y espero a que el enemigo caiga para avanzar hacia la cabina donde debería estar el cuarto pirata.

La puerta de la cabina se abre a tu paso y entras. El piloto se gira para ver quién a entrado. Baja la guardia al ver que eres tu y te pregunta por el asalto. 
Tu instinto te dice que es el momento de actuar y el zumbido del sable de luz acompaña el resplandor azulado que inunda la cabina.

Llego rápidamente a la cabina y veo al piloto. No me gusta mucho lo que voy a hacer pero él es un tipo que hace daño a gente inocente con sus actos de delincuencia. Debe ser derrotado para poder seguir con el plan y acabar así con el Mynock y su oleada de asesinatos.

Me acerco con mi sable de luz encendido, del que no parece haberse percatado en un comienzo. No me extraña pues son armas raras y escasas en la galaxia. Uno no espera toparse con una y mucho menos en nuestra situación actual y siendo empuñada por un "pirata".

Cargo contra él sin pensar en nada, solo decidido a hacer mi labor para luego ir por mis amigos, a quienes no dejaré solos en este lío.