Partida Rol por web

Hago una cara de desconcierto.

-En serio?Ya hablaremos luego pues. No sera peligroso?

Vuelvo a donde estaba antes

- Laxus he dicho NADIE. - digo mientras espero los emparejamientos.

Suspiro.

-En fin, que sea lo que Dios quiera.

-Tranquila Samy, si consigo ese pokemon, me asegurare de restregartelo bien por la cara y cuidarlo muuucho, por ti claro jajajajajja.-

- Te aseguro que no saldrías del Pueblo con él. - pienso mientras una perversa sonrisa se forma en mi cara.

Missy miró a Samy, como solo una mujer sabe mirar a su mejor amiga. Telepatía femenina.

APLÁSTALE.

No iba a permitir que ese desgraciado se saliese con la suya, no si eso iba a afectarla a ella, a Chad, o a Samy. Su bienestar estaba por encima de los caprichos de un niño malcriado que no se hacía verdadera idea de cuan dura era la vida real. Problemas de haber vivido siempre entre algodones sin que nadie te plante cara y te enseñe como es el mundo.

Me acerco lentamente a Silver y le digo. -Oye, me haces un favor, ¿podrias sacar a los pokemon que ahi en esas pokeballs para registrarlos en mi pokedex?- Digo mientras registro los pokemon que andaban aun fuera en la pokedex.

- Laxus, ¿acaso el miedo empieza a aflorar en tu interior? - pregunto divertida.

- Silver, si cuando gane puedo volver a escoger mi equipo inicial hago el cambio con Growlithe. Sino lo conseguiré una vez acabado el Torneo.

Laxus rio ante el comentario de Sammy. -¿miedo? ¿yo?, no te confundas, lo que pasa es que no soy tan retrasado como el resto de vosotros, si se donde estan esos pokemon tambien sabre donde se captura, y podre ir a capturarlos yo mismo en vez de hacer amenazas estupias sobre robos.- dijo con una sonrisa.

- ¿Amenaza Estúpida de Robo? - digo. Realmente no me conoces.

Peleas y mas peleas incluso en ese pequeño pueblo y entre conocidos de toda la vida no había mas que peleas lo mismo que asolaba el mundo, ni siquiera los niños tenían una forma diferente de pensar para ellos todo era luchar por ser el mas fuerte, solo algunos de ellos parecían realmente felices con el regalo que habían conseguido, aunque eso si todos demostraban miedo ante la espectativa de perder a su Pokímon tan pronto lo habían conseguido, eso estaba bien asi aprenderían a valorar lo que tenian y a luchar dando lo mejor de ellos.

- Lo siento no se devolverá el equipo, si alguien quiere hacer un cambio aun esta a tiempo, pero despues aun si gana no recuperara su equipo inicial -

Despues de todo esto y ver sus reacciones ya abría tiempo para decirles mucho mas.

Missy miró su Pokeball.

Es mío. O mía. En mi mano se queda.

Apretó los dedos, rodeando con fuerza aquella esfera, oprimiéndola.

- Está bien. - respondo a Silver con una sonrisa. Ya conseguiré a Growlithe con la ayuda de mi Pokemon.

Tienes razon, no te conozco, y sinceramente, no me interesa conocerte.