Por mi parte continua, no pienso dar evidencias de que no se lo que deberia hacer en este caso y cagarla delante de un contacto del inquisidor.
Julia observa divertida como os quedáis parados ante la figura que resulta ser un cuerpo momificado muy bien conservado. La muchacha echa su capa en uno de los brazos.
- Es el gran tío Thalus, líder de la casa Strophes en épocas oscuras, explica con una sonrisa. Nosotros los nobles de Sibellus apreciamos nuestra historia antigua tanto que mantenemos a nuestros muertos honrados para recordarnos las glorias pasadas. Tiene sus usos, supongo.
Luego intenta poner un gesto más serio y dice: Empecemos de nuevo ¿de acuerdo? Soy Julia Strophes, bienvenidos a la Colmena Sibellus, y con una nueva sonrisa termina diciendo primos
Observo la momia dubitativo...
Mmmm, que costumbres mas raras que tienen.
Entonces me giro un cuarto de vuelta y le doy un abrazo casi que de oso levantando a Julia del suelo y dándole media vuelta conmigo. luego dos besos como marcan los cánones:
-Primita, cada vez que te veo estás mas guapa. Yo soy Arcturus por si no te acuerdas de mi y los otros son los primos Dhamon el mas refinado, Tarkov cascarrabias, Octus el serio y Zacha el raro.
Dhamon saluda con una reverencia a la mujer.
- Un placer volver a encontrarnos, Julia. - Comenta el noble. - Cada año estas mas preciosa. - Termina por decir. Le extrañaba la actitud de la propia dama, como su temieran estar siendo espiados o algo similar. - ¿Cuando podremos ver al Tío? - Tenia ganas de encontrarse en un lugar adecuado para lo que les había llevado allí, y esa perdida de tiempo no relajaba los nervios del psíquico.
- Ya he dado instrucciones para que le avisen de vuestra presencia, responde educadamente a Dhamon. Luego mira al resto esperando unas palabras por su parte
Gracias- Añade Octus de forma solemne. El arbites deja a un lado las bromas para ponerse serio, parece que en breve van a entrar en materia.
Es una magnífica escultura, honra a la familia y a sus antepasados.
Dice en relación a la escultura realista con los brazos abiertos. Luego deja caer pesadamente su petate a un lado, aunque no se descubre la capucha por miedo a no poder hablar aun con claridad ni mostrarse despreocupadamente.
Le comenté a Octus por lo bajini:
-Me parece que no es una estatua pero bueno. Por cierto, ¿viste que atenta es Julia? jamás nos han tratado así...
Zachariah hace un saludo con la cabeza.
El siervo de la máquina os saluda, noble Julia.
Enseguida el tecnosacerdote se calla para no meter la pata...
Todo aquel asunto se estaba alargando mucho, pero bueno, era cuestión necesaria al tratar con la nobleza. El protocolo y demás parafernalia. Tenía ganas de entrar de lleno en el asunto. Cuanto antes comencemos antes acabaremos, y si hay suerte con el pellejo sobre la piel. Si el Trono media. Aquello era mucho decir desde luego, la vida media de un acólito no solía superar las 5 misiones, y si así lo hacía iba para largo, si tenía unas cuantas luces y lograba aprender algo de todo aquello. Sinceramente esperaba que yo lograra sacar algo. Por mi propio bien. Suspiré y me subí un poco el pañuelo del cuello para protegerme del frió.
Sonriendo a cada uno con su presentación, Julia parece un rayo de luz en esta complicada misión: Poneros cómodos, tenéis refrigerios en ese aparador, dice señalando uno de los muebles. Voy a buscar a mi padre y haremos las presentaciones formales.
Quedáis solos ¿hacéis algo o avanzo?
Me siento en el sofá y estiro las piernas hasta que me crujen las rodillas. Miró el ceñidor y a punto estoy de aflojarlo cuando me digo a mi mismo:
Como un señor, no como un barriobajero.
Entonces lo dejo. Observé a los demás como se acomodaban.
Por mi podemos seguir o nunca saldremos de ahí.
¿Hay algún tipo de tecnología en la estancia? Si la respuesta es que no hay nada, yo me espero a que venga sin tomar nada.
Editado director: Nada de nivel (hay lamparas y cosas así)
Octus miró alrededor con el petate a sus pies.
Así que así es como viven los ricos...
Dijo para sí mismo mientras observaba la opulencia de los aristócratas. Dudó si encenderse un cigarro o en meterle mano a los refrigerios que había comentado la dama. Finalmente, optó por no hacer nada y dedicarse a lo que más le gustaba, desconfiar.
Su ojo protésico comezó a zumbar al ajustarse para enfocar. El arbites buscaba equipos de vigilancia ocultos que puediera estar observándoles ahora mismo para ver qué hacían.
Tirada oculta
Motivo: Perspicacia, Buscar
Tirada: 1d100
Dificultad: 30-
Resultado: 83 (Fracaso)
Dhamon se mantuvo en su lugar mientras veía salir a Julia y esperaba el regreso de esta junto con su padre.
Por fin obtendrían información y podrían ponerse manos a la obra. Allí parecía que la situación era clamada, pero nunca estaba mas de mas prevenir que lamentar. Sus pasos le llevaron hasta una posición que le permitiera vigilar toda la sala mientras tenia su espalda apoyada contra la pared.
Por mi parte avanza sin problemas.
Paciencia, no quedaba otra. Bien sabía que las cosas solían ir lentas y cargadas de protocolos cuando se trataba de la clase alta, así que la paciencia sería nuestra mejor aliada. También era sabido que disponían de tecnología cara que solo ellos podían pagar, escuchas, cámaras y demás artilugios, así que me apoyé en una pared y me crucé de brazos. No diría nada ni comentaría ninguna cosa que pudieran recoger si se nos estaba vigilando. Solo cabía esperar al regreso de la dama.
Avanzamos pues.
Laurent Strophes entra tranquilamente en la habitación mientras Julia cierra las puertas detrás de él.
Uno a uno os da la mano y luego pregunta: ¿Qué tal está el viejo sabueso guerrero, eh?
Me quedé callado un momento pensando en una respuesta decuada:
-Mmmm, si se refiere a vaarak goza de salud física artificial, pero con la mente lúcida como siempre. -miré a los demás con la típica mueca de no saber si la había liado-