Partida Rol por web

Gore hace su advertencia a Chad y pasa una rama por debajo de la abertura del garaje con la intención de comprobar si hay alguien allí. Ni bien hace ésto, una mano verde, llena de gusanos, coge la vara y se la intenta quitar mientras hace un sonido quejumbroso. La fuerza del zombie es tan poca que el hombre puede retirar la mano sin ninguna dificultad.

Se sienten entonces el arrastrar de pasos varios y ahora de lo que era un quejido, se han convertido en unos más. Sean cuantos sean, es seguro que son más de dos muertos los que están dentro de allí...

- Yo soy Marta, encantada. ¿Eras medico Nick? ¿Puedo tutearte verdad? A mi me parece bien el perímetro de seguridad, si les parece bien, entremos, yo estoy lista

Ante la iniciativa de Gore, Chad asiente con la cabeza. Ha estado muy listo, y gracias a eso se han salvado de un ataque directo de esos bichos. Pero ahora, saben que al menos el garage esta infectado. Primero tendran que deshacerse de ellos. Seria sencillo atacar desde abajo, pero lastimarles las piernas no servira de nada. Tienen que darles en la cabeza.

La ventana...

Chad mete su mano en su morral y se encamina hacia la ventana abierta, manteniendo unos dos metros de distancia.

El hombre estrecha la mano de los recién llegados con un entusiasmo evidente. Tiene unas manos grandes y fuertes, acorde con su metro ochenta de altura, y con el atisbo de barriga que aún asoma bajo la camisa. Seguramente las semanas de privación de cerveza y comida han ido mermando considerablemente su volumen.

Mira a Marta, con una sonrisa pícara y sus ojos azules brillando divertidos. -Claro, tutéame, no soy un doctor ni nada de eso. Antes de que todo se fuera a la mierda me dedicaba a vender y comprar cosas. Se guarda el revólver en el cinturón, con una gran hebilla en forma de cabeza de lobo, y coge la maleta con la mano izquierda. -Por si te interesa, sé poner alguna venda y, lo que es más importante, podría hacerte unos platos de pasta exquisitos.

-Bueno, formemos el perímetro ese. ¿Qué hay que hacer?

Mientras Nick se presenta hecho una buena ojeada a la fachada del hospital y asiento pensativo a la propuesta de Daniel

-bien, entremos y aseguremonos de que no quedan podridos dentro, el primer piso es una buena idea-

Tras cargar de nuevo un virote voy a la entrada y les indico que me sigan

-con cuidado, deberían haber salido con los disparos, pero no nos confiemos-

Entran los cuatro en este orden: Denzel junto a Nick primero, atrás sigue Marta con Daniels. La sala de espera del hospital está totalmente vacía. No se ven signos de podridos a la vista, ni tampoco de gente. De allí un portón lleva a un pasillo amplio. Las camillas están obstaculizando un poco el paso, la sangre se halla por todas partes, incluso en las paredes. Hay varias puertas a la derecha e izquierda. Ningún muerto sale de ellas.

Al fondo hay una puerta enorme que da a la morgue, según se lee en una placa y que está cerrada con candado. Junto a esa puerta otro pasillo termina en el elevador. También hay escaleras. Además hay varios pasillos más, es un hospital grande. Por todo este lapso de tiempo, el único sonido que se oye es el de los pasos cautelosos del grupo.

Excepto el signo de total desastre, parece que no hay muertos aquí. O que están condenadamente tranquilos.

Chad mete la cabeza, más bien se acerca, a la ventana más cercana. Desde allí no se puede ver el garage sino una sala de estar. Hay dos sillones, una televisión y una mesita de café.

También hay un hombre que tiene una escopeta en la mano, que evidentemente se ha volado los sesos y ha escrito en la pared "Dios nos perdone"

Además hay una puerta, quizás desde allí se pueda pasar al garage. A simple vista está cerrada pero eso no quiere decir con llave...

Esto es un desastre, me parece evidente que no somos los primeros que intentan refugiarse en el hospital. Eso o esto estaba lleno de infectados en las primeras fases, hago una mueca de disgusto pensando en como debió ser esto cuando esos desgraciados se levantaron de sus camas y empezaron a devorar a los médicos que les atendían

-luego deberiamos bloquear todos los pasillos y puertas excepto el camino directo del exterior a las escaleras. Pero de momento veamos como esta ese segundo piso-

Hablo en susurros, nunca se sabe cuando pueden haber podridos cerca

Avanzo cautelosamente empuñando mi revolver apollado en la muñeca del brazo izquierdo con el que sujeto una linterna. El primer piso parece tranquilo, el plan de Denzel es el adecuado así que asiento para no tener que hablar y señalo hacia las escaleras.

De vez en cuando giro sobre mi mismo caminando marcha atrás para cubrirnos las espaldas. Solo el sonido de nuestros pasos me está sacando de quicio, el inquietante eco de los lugares muertos.

-Qué acogedor. Nick avanza detrás de los otros con el revólver en la mano derecha y el omnipresente maletín negro en la izquierda. Camina haciendo el menor ruido posible, con los ojos puestos sobre el suelo, para no pisar cristales rotos o Dios sabe qué cosas que habrá por ahí. A pesar de estar en uno de los sitios más siniestros que recuerda, a esas alturas en lugar de sangre corre horchata por sus venas. Ha visto tanta mierda y tanto horror que ya no le mira a los ojos y lo ignora tanto como puede.

Lo que sí es cierto es que ya no le parece tan buena idea usar aquel lugar como refugio, quizás uno con menos sangre y cadáveres estaría mejor. Eso le hace pensar en una de las últimas noches, cuando las cosas eran normales, que pasó en un hotel de Las Vegas bañándose en un "jacuzzi" con dos putas y una botella de champán. Si hubiera sabido lo que iba a ocurrir, habría gastado todo su dinero en hacer un viaje al lugar más remoto en lugar de llevarlo en un maldito maletín.

-Siberia...joder, o las malditas Galápagos. Allí seguro que no hay tantos zombis. Susurra para sí, preso de ensoñaciones que le ayudan a evadirse. -Tiene huevos, ¿las tortugas también estarán podridas?

Guarde la espada que tenía en la mano para coger la pistola, era mejor que si un grupo de podridos se acercaba en grupo, poder aprovechar la distancia y disparar, haciendo desaparecer el mayor numero de podridos posibles, mejor que la espada seria, aunque ésta fuera mas silenciosa.

Mire en el interior de cada habitación, sin adentrarme en ellas, solo un vistazo rápido para ver si había algo que nos pudiera resultar útil, segui al grupo callada, atenta a cada sonido que pudiera alertarnos de que habían más podridos por la zona

Se van acercando hacia las escaleras, para revisar la segunda planta. Marta guarda su sable y saca la pistola y va mirando como puede las habitaciones que quedan hasta allí. La que pasa primero es donde la camilla ha trabado el paso, adentro no se ve más que un desorden total, luego hay pocas, que están más o menos en el mismo estado deplorable. 

Nick, por su parte, piensa en qué desperdicio es tanto dinero encima cuando no puede usarlo, pero no por ello deja la maleta. Sigue caminando y apunta con su arma a los alrededores.

Daniel y Denzel hacen otro tanto. El objeto es asegurar el perímetro, diría el militar, para poder traer a la gente a habitar este sitio; o ver si ello es factible.

Entonces, al acercarse a las escaleras, pasan por la puerta de la morgue. Se escuchan varios arañazos detrás de ella. Una mano pálida asoma, con sus uñas rotas, por entre la abertura que ha dejado la cadena con el candado. No es que se pueda abrir, solamente sale esa mano... y luego otras dos. En ese momento los muertos comienzan a empujar con fuerza las puertas metálicas. Las cadenas impiden que la abran pero el sonido es fuerte y si hay más cerca...

-¡Ayudadme! Hay que trabar bien esta puerta, por si acaso. Se guarda el revólver en el cinturón y deja el maletín junto a la puerta de la morgue. Se acerca a una camilla e intenta moverla para empujar la enorme puerta. Si los tiene, acciona los frenos de las ruedas y busca algo pesado que esté cerca para trabar mejor la puerta.

-Si la cerramos no harán tanto ruido y se tranquilizarán un poco. Además no creo que a nadie le guste pasar por aquí con estas cosas asomándose.

Cuando termina, (si es que termina), se sacude las manos en el pantalón y se queda con los brazos cruzados. -Quizás el colegio sea mejor opción. Al menos en mis tiempos no había morgues junto a las aulas, jeje.

Rapidamente ayudo a Nick a bloquear la puerta

-Marta, esa espada tuya... ¿podrias cortar esas manos?-

No estoy seguro de que la chica sea capaz, claro, supongo que no habrá ido nunca a Angola durante la guerra, cuando cortar manos a la gente era la táctica habitual de la guerrilla, recordando todo aquello se me hace mucho mas sencillo tratar con estos podridos

Recuerdo aquellas escenas preguntándome si en el fondo no nos mereceremos esto

Al constatar que son bastantes me quedo dudando que hacer.

Sí abro puedo poner en peligro a los niños, pero tenemos que eliminarlos…

En ese momento mi acompañante se aleja y voy retrocediendo sin perder de vista la puerta del garaje y a él.

Escucho a Denzel, dudo un momento pero después saco mi espada y corto las manos. ¿Que diferencia podría haber entre cortar unas manos y disparar a la cabeza a los podridos? Ninguna.

Intente que fuera un corte certero, de un solo tajo. Cuando las puertas se hubieron cerrado, ayude a atrancar la puerta.

- Podríamos revisar el colegio, si es grande puede que sea de ayuda

Me sobresalta la mano saliendo por sorpresa de la puerta, pero recupero en seguida la posición apuntando. Al ver que no pueden salir sigo las acciones de mis compañeros. Al menos he encontrado supervivientes competentes...

Si pudieramos encontrar una palanca con la que atrancar la puerta por los pomos, y tableros o vigas para apuntalarla, sería mas o menos seguro. Pero si hay otro edificio que pueda servir, quizás intentar ver si ese está mejor antes de limpiar este...

 En cuanto cerramos las puertas me permito pensar en lo que dicen de la escuela

-¿alguien sabe donde esta la escuela o como es? esta claro que este no es muy buen lugar, pero no tenemos todo el tiempo del mundo para ir dando vueltas por la ciudad, revisar y acondicionar un edificio nos llevará tiempo y hay mucha gente esperando un refugio antes de que pase algo ahi fuera. Yo creo que deberíamos asegurar el hospital y ya veremos mañana con mas calma que hacer-

Al asomarse por la ventana Chad da un paso hacia atras. Lo que ve es algo casi ilogico y terrible, a la vez que triste y desesperante. Casi en un acto reflejo, el hombre se hace la señal de la cruz, como hacia tiempo no lo ensayaba.

-Comprendo su dolor, pero ha sido un tonto...

Acto seguido Chad vuelve a acercarse con Gore. -La casa no es un buen sitio. Adentro hay, al menos un cuerpo sin vida, con las peredes ensangrentadas. Aunque nos deshagamos de los podridos, habria mucha limpieza por realizar. Mejor buscar otro sitio.