Partida Rol por web

- No soy muy amiga de ellas - responde a la pregunta - pero reconozco que podrían ser útiles ahora...

trataría de ir cuanto antes con el resto, pero si queréis armas, lo que digáis... ahora, hace unas horas había policía, militares, pirados armados, todos en las calles, pegando tiros a esas cosas, y bueno, las armas no les han salvado...

-Las armas no pueden nada contra ellos, pero contra nosotros sí. A si que, decidme, si cada uno llevásemos un arma de fuego ¿Qué ocurriría si de pronto alguien entra por la puerta sin que lo esperemos? Cualquiera podríamos abrir fuego y matar a una persona. En cambio, dudo que abriendo fuego todo lo que queramos contra una de esas... "cosas" consiguiésemos algo. Si un arma no te sirve contra un enemigo pero sí contra tu propio bando, no te sirve como arma.

Respiro un poco.

- Nuestro principal objetivo debería ser llegar a ese punto de reunión, después conseguir abastecernos de comida y suministro energético, y por último tratar de comunicarnos con otras partes del mundo, tenemos que saber si algún país ha conseguido resistir, y si queremos realmente hacer una resistencia, tenemos que comunicarnos.

Amen hermanos -sonrie, luego ante algunas caras largas aclara de forma sería -Estoy completamente de acuerdo

Las palabras de Robert fueron mas que suficientes para convencer a Margaret. Las armas quedaban descartadas, al menos por el momento. Ahora tocaba avanzar, pero la cuestión era hacia donde. La universidad aún se encontraba bastante lejos y lo mas conveniente era tener la ruta bien preparada para ocultarse y/o descansar. Al menos, era lo mejor si querían sobrevivir.

Little Johnny había permanecido en completo silencio, situado al lado de la puerta de la cocina vigilando mientras el resto se repartía por el edificio y buscaba viveres y materiales que pudiesen necesitar.

Cuando Lucius y Margaret volvieron y el grupo comenzó a hablar sobre la conveniencia de no llevar armas casi estuvo a punto de reírse a carcajadas ante la inocencia supina de la que el grupo hacia gala. ¿En serio se creían la sarta de estupideces que estaban diciendo?

Por supuesto un arma de bajo calibre no podría hacer nada con esa especie de maquinas gigantes que recorrían las calles, pero era de simplones pensar que esas eran las únicas fuerzas del enemigo. Estaba claro que los mecanoides eran la cabeza de playa. Los alienigenas, tenían que contar con tropas mas ligeras, soldados que como mínimo pudiesen acceder y peinar los edificios por dentro para poder controlar efectivamente los territorios que fuesen conquistando, y en ese caso las armas supondrían la diferencia entre la vida y una muerte probablemente horrible.

- Como quieran.- Intervino repentinamente apartándose de la puerta y aproximándose al resto.- Pero si esperan que esos cabrones tengan piedad de ustedes por pasearse desarmados en medio de una zona de guerra, les sugiero que comiencen a cavar sus tumbas por que las van a necesitar mas pronto que tarde. Por mi parte...- Levantó la mano donde aferraba su pistola para que quedase bien a la vista.- Si uno de esos cabrones se me cruza por el camino le reventaré la cabeza antes de que intente acabar conmigo.-

Bueno, esas cosas parecen mecánicas, no se exactamente si pueden resistir balas, que calibre o potencia, pero quizás podría preparar algunas trampas eléctricas con baterías de coches. Ahora eso sería más si vamos a pasar noche en algún lugar, llevaría tiempo, pero dormiríamos más seguros. 

Tampoco se si los tumbaríamos con eso, pero al menos el chispazo haría suficiente ruido como para alertarnos.

Quizás no sea tontería pasar noche aquí, e ir avanzando cada día unos pocos kilómetros hacia el punto de encuentro.

Julia tiene en su mente una pregunta que no ha dejado de acariciar desde que alcanzaron una relativa tranquilidad con el asunto de buscar refugio, alimentos y supervivientes. Era extraño, pero...

- ¿No hay nadie que pilote esos artefactos? - pregunta sin estar muy segura - Es decir... ¿son solo máquinas? No he podido verlas con claridad, estaba más preocupada por... escapar.

Sean máquinas o haya pilotos, es mas que evidente que son seres duros- dice Margaret- francamente, mientras mas pongamos distancia sobre ellos, mejor que mejor.

Mira a Lucius- ¿sabes hacer eso que acabas de decir? porque suena complicado. Además, ¿es efectivo?- viendo esas máquinas, lo dudaba. 

Bueno, el principio no es muy complejo, las baterías se pueden colocar de distintos modos, por ejemplo si las colocas en serie, lo que haces es sumar potencias. Luego mientras más coloques más potencia. La batería de un coche da un buen chispazo a una persona, si colocando varias deberíamos freir la electrónica de uno de esos cacaharros y puede que también a su piloto, de tenerlo. Aunque bueno ahí depende del diseño, hay una cosa llamada jaula de faraday... pero vamos que con inutilizarlo nos vale así que daría igual. 

Eso con los cables de los coches y sus baterías se puede montar algo interesante, lego tocaría lo de hacer la trampa, y bueno ya sabéis, si algo cierra el circuito... Zaasss.  También se puede usar superficies que transmitan corriente y cuando pasen por encima, activen la conexión a modo de trampa más trabajada. pero si en principio puedo improvisar algo así en un rato. 

viendo las caras con las que le miraban algunos, -en resumen, si, podría hacerlo.

Lo explicas de tal forma que parece fácil- responde- claro que no se hasta que punto hay interés de hacer esto. ¿Como lo veis?- pregunta al resto del grupo.

Escucho con atención lo que dice todo el mundo.

-Creo que somos cinco, y creo que no van a venir  a buscarnos a un edificio que ya han atacado. ¿Qué probabilidad habría de que hubiese alguien dentro? Y si por algún motivo saben que estamos dentro, no importa el resto.

bueno pues entonces tomemos camino, pongamos en marcha, no se si se puede llegar hasta donde tenemos pensado en un solo día a pie, me refiero tal  como están las cosas, es decir un día normal sería un paseo de muchas horas pero se puede hacer. pero con la hora que es, será mejor que nos pongamos en marcha

- Antes de que caiga la oscuridad... - susurra Julia, pensando en el camino que tenían por delante, y que tendrían suerte si es que lograban sobrevivir de alguna forma a toda la locura que estaba desarrollandose - Cuanto antes mejor, ¿no creen?

Decidís avanzar de nuevo, sabedores de que no había mucha mas opciones que eso. Así que, recogiendo vuestras pertenencias -la comida que habíais encontrado- os poneis de nuevo en rumbo.