Partida Rol por web

-No sé si me gustan vuestros días malos, la verdad- sonreí.

-Bueno, puedo tenerlos peores, de peor humor esa cosa habría sufrido mucho más.

Mejor no comento mis días malos-Digo tranquilamente-Thane, no te culpes, no era tu intención y no sirve de nada que lo hagas, ya te pegué un puñetazo que era más de lo que merecías.

Y menos de lo que recibirás tú por ello.

-Sí, sí, sí. Muy interesante esto- dije, bostezando-. Pero, yo me voy a dormir. Que me caigo de sueño.

Me levanté y me dirigí hacia mi cuarto.

-Cuidadme al hurón, por favor- dije, cogiéndolo y dándoselo a Nathan-. Anda- sonreí-, le caes bien.

Me estiré y bostecé.

-Luego nos vemos- me despedí.

Cojo a Ireth de la muñeca y digo -En la ducha en cinco minutos-Le guiño un ojo y la dejo marchar

Sí, yo me voy a lavar toda esta sangre, nos vemos luego-Digo mientras me alejo hacia donde estaba el baño que Jordan me había indicado

Cuando llegué al baño, Bellis ya estaba allí. Busqué desesperadamente sus labios para besarlos y dejar huella de mí.

-Te juro que no sabría lo que hubiera hecho si te llego a perder- susurré, abrazándolo e hincando mis uñas en su espalda, para darme fe de que, efectivamente, él estaba ahí.

Tranquila cariño-Digo abrazándola y besándola, enroscando mi lengua con la suya, yo ya no llevaba ropa, así que empecé a desnudar a Ireth mientras besaba cada milímetro de su escultural cuerpo-No me vas a perder tan fácilmente, por cierto ¿Como nos bañamos?-Pregunto al ver la extraña ducha.

La besé de nuevo y bajé mis manos a sus nalgas tocándolas, sobándolas y masajeándolas mientras pensaba en lo afortunado que era.

-Y yo qué sé- contesté entre jadeos, besando el cuello de Bellis.

Llevé mi mano al pasador que me regaló Nathan y me solté el pelo. Lo dejé con cuidado encima de la ropa y llevé con suavidad a Bellis hacia la pared. 

Pasé mi lengua por su cuello y llevé su mano a uno de mis pechos. Le agarré por el cuello y lo besé con aún más fuerza y pasión.

-Bellis...- dije, entrecortadamente- necesito saber que estás vivo. ¿Lo estás, eh?- pregunté, picara, mientras besaba el lóbulo de su oreja.

Claro que lo estoy, si no eso no estaría así-Digo refiriéndome a mi miembro, besé sus pechos y me los comía, metiendo cuanto me cabía en la boca.

Después de aquello fuí besándola hasta llegar al cuello y después a su boca, para besarla como seguro, nadie la había besado, llevé mi mano a su entrepierna y empecé a masajeársela en círculos durante un buén rato, para después introducir primero un dedo y después dos y comenzar a masurbarla poco a poco, mientras no cesaba en mis besos.

-¡Dio...Dioses!- mascullé, en un hilo de voz, cuando Bellis aventuró sus de dedos en mi interior.

Mis jadeos se fueron acompasando según los movimientos de Bellis, mientras besaba su cuello y le tiraba del cabello.

Le dejé marca en el cuello, allí en el mismo sitio que la otra vez, como si fuera una marca personal. Busqué su boca con desesperación e introduje mi lengua jugando con la suya.

Exploté de placer, cuando llegué al orgasmo, gritando. 

Pasé mi lengua por su cuello, hombro y torso, hasta arrodillarme y tomar su miembro con ambas manos para introducirlo en mi boca, mientras que con las manos agarraba sus nalgas con fuerza clavando, de nuevo, las uñas.

-Ireth, esto me encanta-Susurré cuando empezó a realizarme la felación, empecé a acariciar su cabello mientras ella se metía mi falo en la boca y lo sacaba, mientras aceleraba el ritmo emitía gemidos cada vez mas fuertes- ¡Mhum! ¡Ah! Ireth, eres la personificación de la diosa del amor-

El placer iba aumenando gradualmente, cada vez me acercaba mas al éxtasis del placer mientras Ireth succionaba mi miembro hasta que al final susurré -Voy a terminar- Aunque Ireth hubiera querido apartarse no hubiera podido y descargué una ingente e increible cantidad de semen en su boca.

Cuando terminé y antes de que pudiera, tragárselo o escupirlo la levanté y la besé compartiendo mis fluidos con ella, dándole un beso que jamás olvidaría, le dí la vuelta y la apollé contra la pared la levanté poniendo sus piernas sobre mis hombros para realizarle un cunilingus, empezándo en círculos después de arriba abajo, saboreando su sexo como si fuera un helado, hasta que al final, metí mi lengua en su cálido agujero.

Permanezco cabiz bajo con las manos en los mandos pensando en mi noble ciudad destruida, espero a que se vallan Bellis e Ireth y en ese momento hablo -Mago, cientifico, no os echeis la culpa de nada, ... yo e tenido la culpa de todo lo que a pasado.- dije algo triste por las vidas que se habian echado a perder.

-Tonterías. Ninguno suponíamos que todo ésto iba a pasar. Podía haber un fallo, que en el peor de los casos estime que nos salpicaría a mi y a Thane, y quizá a un pequeñisimo sector de la ciudad...pero no todo éste caos.

Boqueaba como un pez fuera del agua, emitiendo gemidos acompasados según los movimientos de la lengua de Bellis.

-Bellis, Bellis- gemí.

Me agarré en un toallero y con la otra mano envolvía mis dedos en sus cabellos.

Intenté reprimir los gritos, pero me era imposible. Sabía que se oían en toda la dichosa nave, pero eso me daba igual, tan solo podía sentir la legua de Bellis haciéndome maravillas.

-¡Bellis!- me arqueé y grité cuando llegué al orgasmo-. ¡Dioses! ¡Dioses!

Me bajé de los hombros de Bellis y le besé con desesperación, atrayéndolo hacia mí.

-Que esto no termine nunca, que no termine- mascullé.

Yo sabia que algo por el estilo podria pasar, pero nunca pense que vosotros .... lo intentariais asta tal extremo.

No paraba de besarla y de recorrer con mi lengua todo su cuello, sus orejas -Yo tampoco quiero que termine ¡Jamás!- La puse cara a la pared mientras hacía que se doblara por la cinura mientras apoyaba sus manos en la pared, poniendome detrás de ella comencé la penetración, debido a sus dos orgasmos, no me costó nada penetrarla.

Empecé con un ritmo lento para después acelerarlo y acabar pareciendo un animal salvaje, me agaché para poner mi boca en su oreja y susurrarle enrcortadamente debido a las embestidas y al placer recibido-E-eres u-u-una verdadera d-diosa, n-no quiero terminar con esto n-nunca-Después besé su oreja y seguí embistiéndola

-¿Por qué os empeñáis en culparos a vosotros mismos? ¿Quién lo atravesó por estar seguro de que todo saldría bien? He pasado toda mi vida estudiando los viajes espaciales, y cuando veo la posibilidad de estudiar uno, fracaso.

-La máquina tuvo un fallo, demasiada entropía toda junta, pero a veces al intentar avanzar se fracasa. Y si Jordan, supongo que somos bastante tenaces...pero por eso mismo no me voy a lamentar, sino que voy a hacer lo posible por ayudar a superar ésto...empezando por devolver a nuestros dos huéspedes a su hogar. Cuando estaba sepultado ahí abajo, sosteniendo las rocas con mi magia, de repente oí a Anne, aunque no sabía aún que era ni nada. Pero decidí ayudar, y usé parte de mi magia para dejarla entrar donde yo estaba, y para curarla. Del mismo modo, quizá tenga parte de culpa en lo que ha ocurrido, pero no voy a dejar que éso me impida ayudar a los que lo necesiten, y limpiar todo éste estropicio.