Partida Rol por web

Y a nosotros, Capitán Morgan, y a nosotros... ¿Un trago? Hoy es uno de esos días en los que por más que bebes, tu garganta sigue seca. ¡Camarero, otro RON! -Diciendo esto, escruto al Capitán y a sus hombres, por si conociese a alguno de sus acompañantes- Y, dígame, ¿para qué busca al escocés?

-Bueno, supongo que tarde o temprano lo encontraremos- dice de forma casual mientras bebe de una jarra que le ofrecen. Uno de los lugartenientes dice de repente en alto "seguro que ya lo saben..." pero de inmediato es enmudecido cuando Morgan hace un gesto alzando la mano.

-Sin embargo espero que todavia tengan el cofre que les entrege anoche...- comenta esperando una respuesta. En vuestra mente está el cofre, o más bien las piezas del cofre, que están guardadas en una bolsa que lleva José colgada, junto con la estatuilla.

Daniel parece nervioso, pero intenta disimularlo permaneciendo callado y pasando a un segundo plano.

Rojo pone gesto serio y mira a Morgan, cerrando con fuerza los puños al escuchar lo que se le escapa al lugarteniente

- No sabemos donde está el Escocés, como tampoco sabíamos que iba a sacar el arma la otra noche. Ese tipo está loco. Tiene cojones y sabe combatir, pero está loco. Estoy seguro que has conocido a algun pirata como él. No sabemos qué ha podido hacer, y lo que quiera que haya sido, lo ha hecho sin nuestro permiso. Decidme, capitán, ¿en qué maldito follón se ha metido esta vez? En cuanto al cofre... no solemos tirar nuestros regalos, y menos si proceden de personas principales, aunque aun no hemos logrado venderlo por 100 pesos de oro

- Sabía que tenía que haberlo matado, maldito Escocés - no puede evitar pensar

Morgan escucha tus palabras con atención pero sin mostrar ninguna reacción, cuando terminas se reclina sobre su silla y parece relajarse, pero sus palabras siguen con el mismo tono serio.

-Vuestro "loco" amigo sabe bien lo que hace, encontró algo dentro del cofre que me interesa- se calla durante unos instantes y concluye con una pequeña mueca que se asemeja a una sonrisa. -Es una lastima que no esteis al corriente del asunto, podriamos llegar a un acuerdo...-

Y no podría usted ponernos, como dice, "al corriente del asunto", creo que a todos nos gustaría que hablara con claridad si, como parece, se trata de algo relativo al cofre que usted mismo nos entregó. - Digo eligiendo cuidadosamentte las palabras para no desvelar nada que él ya no sepa y evitar enfadarlo.

Ante la contestación de Mike responde molesto -Creo que saben más de lo que me cuentan...- luego, algo más tranquilo -pero no olvido que peleaste junto a nosotros contra esos malditos franceses-

-Está bien. Os puedo poner al corriente, pero solo si aceptais ser mis "socios", iremos a medias en las ganancias. Si nadie se pasa de listo todos conseguiremos lo que queremos- cada vez más ansioso Morgan se echa hacia adelante y comienza a hablar en voz baja tras mirar a su alrededor- se trata de un tesoro, muchas joyas posiblemente y ...- de repente para y vuelve a serenarse - ¿Tenemos un trato, o no?- inquiere.

No seré yo quien me niegue -digo mientras bebo de mi jarra- eso si, si vamos a medias, creo que debemos ir a medias en todo. Necesitamos información sobre el Escocés si quieres que lo encontremos.

-¿Habla en nombre de todos? Decidirlo ahora, si alguien me la juega pagareis todos las consecuencias- dice con una mezcla de impaciencia y tono amenazante.

Daniel se mantiene callado esperando a vuestra respuesta, pero de momento no se marcha.

- De todos menos del Escocés. A ese hay que preguntarle aparte, las cosas como son. Pero creo que entrará en vereda. Siempre que quede claro lo que cada uno aporta a la expedición, por supuesto - respondo sin inmutarme mientras la idea de un tesoro lleno de oro ilumina mi mente por completo

Eso es Me uno con seguridad a lo dicho por el Rojo,deseando conseguir cuanto antes algo de acción y sobre todo de oro.

Daniel emocionado es incapaz de contenerse más y suelta - Yo estoy con ellos, encontraremos ese tesoro-.

De todas formas no estaba conforme con este trato. Y sin más empecé a hablar con un tono un tanto fuerte.

-Igual señor Morgan. No sólo compartiremos a medias las ganancias. Sino también los riesgos. Casi se muere una compañera nuestra por la falta de coraje de algunos de sus hombres. Es seguro que nos dieron el cofre porque no sabían cómo abrirlo. Buscaron un idiota que lo hiciera y luego sencillamente volverían a encontrarlo. Una tarea fácil, libre de bajas y con completa seguridad...- Me detengo por unos instantes para intentar calmarme un poco, pero no logro hacerlo y prosigo. -Además creo que usted también sabe más de lo que nos cuenta... No sólo eso, sino tambien, ¿qué garantías tenemos de que cumpla con su parte del trato en el caso de encontrar este supuesto tesoro?

Morgan escucha al español sin inmutarse, cuando termina responde con calma.

-Deberia saber que para un inglés un trato es sagrado y la palabra de uno su honor. No perderé mi tiempo en explicarselo, tal vez sus compañeros puedan hacerle entrar en razón, si no deberiamos seguir hablando sin su presencia. Por supuesto que conozco más detalles y se los diré si aceptan el trato.- termina mirando al resto mientras sus hombres no quitan ojo a José.

Vistas las opciones, yo acepto. Me fío de su palabra, señor Morgan. Pero, espero que llegado el momento cumpla su parte del trato. Y también espero que cuando el trabajo esté hecho, lo celebremos con mucho RON. -Diciendo esto, pido mi jarra número... Bueno, ya van demasiadas para contarlas, aunque sigo teniendo la misma sed.

Casi al borde el enfurecimiento, golpeo la mesa con mi puño. Me paro y digo:

-Yo no voy a ser el que diga que sí. Además muchachos, esto hay que hablarlo con el resto de los nuestros. No creo que les guste si aceptamos el trato sin consultarlo con ellos.

Me quedo parado apoyando ambas manos sobre la mesa. Mirando furioso a Morgan. No creo que pueda conterme mucho más. Luego mirando a los piratas de Morgan termino diciendo:

-¿Y ustedes qué carajo miran? No voy a lastimar a nadie.

¿Contar con ellos Depiadado? ¿Acaso ellos cuentan con nostros? ¿acaso alguien ha dicho que ellos estén dentro de este trato?

-Eso es, ahora mismo la nota la tiene ese escocés, cómo la consigais... para mi es igual. Si quereis contar con vuestros compañeros podeis hacerlo, pero el trato es solo con vosotros cinco, si luego teneis que repartir vuestra parte del botín tocareis a menos- aclara Morgan ignorando las palabras de José.

Sus hombres sin embargo están mucho más tensos y se están impacientando.

Entendido. Coincido con Bocaseca y con Morgan. Los otros no están así que debemos dejarles aparte, al menos por el momento.