Partida bélica ambientada en Reinos Olvidados donde los personajes deberán defender un fuerte de las fuerzas oscuras de Szass Tam.
La luz parpadeante de los viejos fluorescentes es lo primero que veis esa noche, cuando os quitan las capuchas. Si bien, no lo primero que sentís pues antes de dejaros ver, extraen las estacas de vuestros corazones. Una sensación casi tan desagradable como el ponerlas allí.
El lugar es arcaico, un cruce entre túneles, amplio, con cajas y materiales de construcción apiladas y olvidadas. Ante vosotros está nada menos que Kevin Jackson, el príncipe de Chicago. Sin duda no es el único vástago presente, pero nadie más se deja ver.
-Lamento que nos reunamos así.- sin duda dice la verdad... probablemente no por el hecho de que os hayan llevado estacados sino porque el polvo del lugar estropeará su caro traje. -Pero así son las cosas. Como ya sabéis quien soy y que tengo enemigos, pero esta noche no soy el príncipe, sino Kevin Jackson. He sido víctima de un robo. Pero me temo que no sé cuando sucedió, ni como, ni por parte de quien. Os he... hecho venir... de esta peculiar manera porque así podréis decir sin mentir que no os llamó el principe. Hoy no habláis con él sino conmigo y no os ordeno nada sino que os propongo un... encargo. Espero que haya sido lo bastante claro para todo el mundo.
En definitiva, se os ha encargado recuperar "algo" y se ha puesto esfuerzo en señalar que no es un encargo del príncipe, aunque lo sea y sin intermediarios. Sin duda es algo gordo. Algo peligroso.
Algo de lo que no os vais a poder escaquear, ni huir. Sabe vuestros secretos, como deja caer en ciertos comentarios dedicados a cada uno. Sabe lo que teméis. Sabe lo que no podéis perder.
-Sereis generosamente recompensados. Os recomiendo colaborar entre vosotros, claro, pero...¿Quién soy yo para imponeros nada? Ni que fuese el príncipe.
Han pasado quince años desde que la Casa Targaryen fuera destronada durante la Rebelión de Robert. Han sido años de paz y tranquilidad en los Siete Reinos, gobernados por el rey Robert Baratheon y su Mano, Jon Arryn.
En medio de este contexto, una casa del Norte y una casa de las Tierras de Occidente, amigas desde antes de la Rebelión, se disponen a estrechar sus lazos mediante un matrimonio entre sus hijos para estrechar lazos. Pero, ¿podrán ambas familias mantenerse unidas ante el cercano estallido de un nuevo conflicto o terminará demostrándose que los cimientos de su amistad no son tan sólidos?