Galería Umbriana

Subida por MrSeeK

Imagen: El nefasto artilugio es castigado según la costumbre popular, tratando de corregir su aberrante conducta. 

La pena y el dolor me impidieron dormir con facilidad. El calor abrasador había dejado un potente cambio metereológico, esperándose sus secuelas en los posteriores días, según los vaticinios más fiables. 

Traté de escabullirmeientras el resto dormía, el valeroso Faifolk había caído, ahora se encontraba en un lugar mejor, mas, lejos de dormirse en los laureles, yo confiaba que se encontraba en los Salones de Mandos, esperando pacientemente, y velando desde allí por el bienestar de todos y de la mision en concreto. 

Mientras buscaba mi bono de sigilo para sumarlo a los intentos de no despertar al resto de la posada, la joven montaraz salió a mi encuentro. No dejaría que abandonara la villa en soledad, ahora que mi compañero no estaba. Al no aceptar un no por respuesta, partimos en mitad de la noche (ojo 3:00 am) en pos de acercar el Cachirulo a su inevitable final. 

Logramos abandonar las minas sin contartiempos, atravesamos ruinas numenoreanas, la aldea genérica numero 42 e incluso alguna montaña tan empinada como innecesaria. Al alba nos adentramos en una nueva provincia, por su nombre claramente relacionada con los palantir. Lo cual me hizo recordar que algunos de los que moran esta página poseen habilidades y objetos de poder que podrían ayudar a derrotar a la maldición chafa KDD's. Envié algunos cuervos aquel día. 

Al finalizar la jornada, llegamos a un pueblo con muy buen rollo y, tras explicar a los amables aldeanos la situación, decidieron actuar como dicta costumbre, practicando el medievo con el trapo. 

Y allí quedó el Cachirulo, pagando por sus malvados actos en busca de la redención de la ¿carne? ¿tela? En fin, que nos la iba a pagar. Mientras tanto fuimos a descansar, había sido agotador viajar bajo el manto de la noche.