Mundo Friki: Películas

27 Vestidos

Argumento

27 Vestidos

Jane siempre ha sobresalido en el cuidado de los demás, pero no tanto ocupándose de sí misma. Toda su vida ha girado alrededor de hacer feliz a la gente – y tiene un armario lleno con 27 vestidos de dama de honor para demostrarlo. En una tarde memorable, Jane logra ir y venir de un banquete de bodas celebrado en Manhattan a otro que tiene lugar en Brooklyn, hazaña de la que es testigo Kevin (James Marsden), un reportero de periódico que se da cuenta de que una noticia acerca de esta adicta a la bodas es su billete de salida de la sección nupcial del periódico.

Jane encuentra que el cinismo de Kevin se opone a todo cuanto ella estima – – a saber, las bodas, y los dos tienen un encontronazo. . Para complicar aún más la que fue vida perfectamente ordenada de Jane, se presenta su hermana pequeña, Tess (Malin Akerman) que conquista inmediatamente el corazón del jefe de Jane, George (Edward Burns). Tess recluta a su siempre complaciente hermana para que planee otra boda más – la de Tess y George – pero lo que Jane siente por éste provoca revelaciones espeluznantes… y quizá la conduzca al comienzo de una nueva vida.

Datos técnicos

Productora:
Dirigida por: Anne Fletcher
Protagonizada por: Katherine Heigl (Jane), James Marsden (Kevin), Malin Akerman (Tess), Judy Greer (Casey), Edward Burns (George).

Clasificación

Temática:
Juegos a los que puede adaptarse:

Opinión de Shanon

En mi opinión es una pelicula divertida y con momentos muy románticos, pero también es bastante predecible ya que casi desde el principio de la película sabes que va a ocurrir. Aunque apartando eso, es una pelicula para verla en el cine con unas buenas palomitas y un resfresco y evitar estar bebiendo en las escenas de risa porque sino bañas al de en frente o al de al lado, según dónde estes mirando en ese momento.

11/10/2010, 14:54

Coincido con la apreciación de Shanon.

Una pelicula palomitera, apta para echarte unas risas y pasar un buen rato. Tiene suficientes gracias como para no ser un rollazo sensiblero, a la par que lo suficientemente ligera como para que no te pese olvidarte de los detalles.