Partida Rol por web

A Sangre y Fuego (Rotgard)

Prólogo de Vret Copper

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07/08/2013, 20:16
Director

Siempre has sido evitado por todos dado que tiendes a causar problemas...o eso dicen. Sabes que los demás habitantes de la Elegance te consideran de mala fortuna, como si el Emperador te hubiese dado la espalda. A ti nunca te ha importado demasiado, siempre has sabido apañártelas y entretenerte solo. Además esto tiene su parte buena, eres de los poquísimos que han llegado a hablar directamente, y más de una vez, con el astrópata de a bordo...un hombre curioso, "uraño" lo llaman, pero para ti es un hombre bastante interesante. Siempre se ha preocupado por ti aunque de una manera bastante distante y fría...fría como el vacío en el que vivís por lo que tal cosa no es causa gran tormento.

Estás en tu habitáculo, preparándote para iniciar una jornada de limpieza y mantenimiento de salas y pasillos cuando te da un extraño cosquilleo en la nuca, e instantáneamente te acuerdas del astrópata sin saber bien porqué. "Una persona humilde realmente" piensas, y te pones el uniforme para partir y metes todos los utensilios en un bolsón. Justo cuando estás a punto de salir, ya habiendo abierto la puerta metálica del habitáculo, te topas de frente con él, el astrópata. "¿Cuál era su nombre real?" te preguntas, nunca te lo llegó decir pues se le conoce sencillamente como el astrópata. Es un hombre alto, más que tú, esbelto. Porta una especie de gabardina con capucha de tela oscura con la que se tapa con frecuencia, como si el frío arremetiese contra sus huesos contínuamente. Algunos pelos negros se dejan ver, tapando ligeramente sus grandes ojos negros. -Hoy no irás a trabajar. -dice con su profunda y extraña voz, casi cacofónica, como si procediera de todo tu alrededor a la vez. -Ni volverás a hacerlo en esta nave. Debes acompañarme.

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08/08/2013, 16:15
Vret Copper

Me encontraba tarareando una canción muy popular, o eso me decía pues no podía sacrla de mis labios, cuando "Uraño" el astrópata vino hacia mí. Pensé inmediatamente que necesitaría que despejara su cuíículo o algún servicio similar que precisaba y eso me hacía inmensamente feliz.

Asentí bobamente mientras me hablaba hasta que el ominoso peso de sus palabras recayeron en su justo entendimiento: "No trabajarás nunca más en la nave" Mi ánmo se desplomó y mi rostro se descompuso, lívido y pasmado; con lágrimas pugnando por salir de mis ojos y quejidos amargos naciendo en mi garganta. Finalmente con voz débil y quejumbrosa protesté como un niño pequeño. ¿Porqué?¿qué he hecho de malo?, Yo quiero ser útil, me portaré mejor, ¿Qué va a pasarme si no trabajo?

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08/08/2013, 19:07
Director

Se mantiene impasible ante tu reacción y dice, acompañando sus palabras con algún gesto manual: -Me has malentendido. Te digo que has sido bendecido con un honor tal que solo algunos en toda la galaxia llegan a recibir. Tienes un don Vret, un don único que solo yo en esta nave alcanzo a comprender, por eso te digo que lo he organizado todo para...para que te reúnas en persona con el mismísimo Dios Emperador. Entre tú y yo, sé que por aquí no somos los más fanáticos al menos yo en ese tema pero...poder estar en persona frente al Emperador...es algo increíble. Tu don es un gran peligro para ti, Vret, y siento no haberte dedicado más tiempo. Pero hasta ahora te has mantenido indemne ante el peligro que significa poseer tu don, así que estoy seguro de que el mismísimo Emperador en persona te bendecirá no solo con su presencia, sino con la autorización necesaria para poder adiestrarte en el importantísimo don que posees...y quién sabe, quizá algún día desarrolles mi labor en alguna poderosa nave, o incluso en ésta cuando yo ya no esté, quién sabe. -respira hondo en silencio durante un instante y añade: -Prepárate, te acompañaré a la nave que te llevará ante Él y ante tu destino.

Notas de juego

Disculpa, se me olvidó que no deja editar.

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10/08/2013, 01:16
Vret Copper

¡Eh! Bien, gracias... Dije intentando sacudir la confusión y aclarar mis pensamientos y sentimientos. ¿era un ascenso?, eso parecía. ¿el mismísimo Dios Emperador en persona?. Es tan inesperado, tanto para mí. No sabá expresar mi agradecimiento o al menos sabía que debía hacerlo aunque me frustraba no saber el nombre de mi interlocutor. me quedé en silencio y casi inmóvl y tan sólo reacciones cuando me conminó a acompañarlo; lo cual hice como un autómata. A los escasos metros logré articular. ¡y cómo debo comportarme? ¿Me podrías aconsejar?

Las implicaciones de todo cuanto me había dicho ya aparecerían cuando pudiera organizar mis pensamientos.

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11/08/2013, 12:23
Director

-Bien amm...mandaré a alguien para que recoja tus cosas. -dice empezando a andar en la dirección adecuada, o eso supones al menos. -No quiero desvelarte nada, aunque tampoco podría porque es algo inexplicable...es algo que hay que vivir. Solo te puedo recomendar una cosa: sé fuerte, demuéstrale que eres digno del honor que puede ofrecerte. Tal cosa te será de vital importancia. -su frialdad te pone algo nervioso, pero...¿cómo no estarlo? Tu vida va a cambiar radicalmente. -Vamos al hangar, tu familia te espera allí para despedirse.

Notas de juego

Cometí un error en el anterior post y no me di cuenta: el Astrópata debe estar autorizado así que él estuvo frente al Emperador en el pasado, y posteé como si no hubiera sido así. Lo edito.

Otra cosa: en tu historia no hablas de la familia, supongo que tiene familiares en la nave. En caso de que no, me dices.

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11/08/2013, 12:42
Vret Copper

No pude dejar de sentir un escalofrío, pese al fervor del astrópata y mi ansiedad. Había algo que me resultaba tremendamente inquietante en toda la propuesta: sería la falta de respuestas sustituida por  la consabida "tienes que verlo por tí mismo", o tal vez fuera realmente el miedo a abandonar todo lo conocido. ¿Y si en el vasto imperio había algo peor que la soledad, el vacío y el aire pesado de la nave?

No proteesté más, ni siquiera sabía que decir, sólo le acompañé y pensaba en cuanto era mi vida hasta ese momento. ¿Eran otros mas felices que yo? Podía ser, pero no era realmente infeli, fuera eso lo que fuera. Carecía de graves dolencias y podía moverme casi a mi antojo sin que se me molestara..siempr que no molestara a nadie. Intuía que pronto dejaría de tener esos privilegios de aislarme cuando lo quisiera y sin  embargo..."tu familia". Que poco pensaba en ellos habitualmente, acostumbrados a verlos, a incomodarles pese al amor de mis padres, las peleas en las que Guy, dos años mayor, se había involucrado para defender a su hermano cuando era más peueño y enclenque e igual de extraño. O la risa característica de Violetta con sus diente frontales separados cuando correteábamos por ahí...Una punzada de dolor inundó mi pecho, pese al distanciamiento no había apreciado que era tenerlo pues siempre habían estado ahí. Pero pronto me vería esforzado a recordarles con mi memoria, y a no sentir ninguna mano tierna en momentos duros. Simplemente n o habí sabido apreciarlo.

Notas de juego

Puede que se me pasara decir que tenía familia, pero algo normalito. Debe tener como es normal otros familaires como primos tío y esas cosas. Algún hermano fallecido en temprana edad, lo usual.

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11/08/2013, 17:55
Director

Al llegar a uno de los hangares de la nave te encuentras con tus familiares, de los cuales te despides con gran congoja.* Y una pequeña nave de transporte negra te espera en el centro de la sala. El astrópata te indica la compuerta trasera en forma de rampa del transporte para que subas. -Te deseo buena suerte, y que el Emperador bendiga tus pasos desde hoy hasta el fin de tu camino. -la frialdad con la que habla no hace justicia a sus palabras. Y finalmente embarcas, guardas tus pertenencias en un compartimiento dedicado a ello y te sientas, te pones los cinturones y te preparas para partir y dejar para siempre atrás a tu pasado.

Notas de juego

*Roléalo como quieras en tu próximo post, yo ahí ni pincho ni corto xD

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12/08/2013, 14:48
Vret Copper

Finalmente llegué justo al momento de mi partida, amparado y custodiado por mi familia me despegaba del cordón umbilical de mi segundo nacimiento, me separaba de mi mundo natal. ¡que pequeña y cuán grande al mismo tiempo puede resultar una simple nave flotando en el vacío! Pese a todo en las cercanías habían alguno más de la nave, pese a que su intención fuera cercinarse que realmente me marchaba no me enfurecía.

Sentía pena y a la vez maravilla. El desconocido futuro me aterraba y me atraía cual insecto. Y mi familia expresando su dolor y sus consejos, ya fueran verdaderos o falso cumplieron con lo que se esperaba. Me deseaban bien y me confortaban uno por uno. Apenas puedo recordar que se dijo exactamente sólo a mi padre ofreciendo su sabiduría vital hacia mí: "Hagas lo que hagas, por una vez en tu vida, Obedece."

Y con esas palabras resonando en mi cabeza y el sabor salado de las lágrimas en los labios me interné en la puerta de la nave...

Notas de juego

Tengo el cerebro frito de calor y sueño.

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12/08/2013, 19:34
Director

No tarda la nave en cerrar su compuerta de embarque, echando el último vistazo a lo que ahora es tu pasado...te llevará tiempo acostumbrarte. A bordo hay unas pocas filas de asientos con cinturones en lo que es una sala rectangular metálica, de tamaño pequeño. Aunque hay asientos vacíos no eres el único a bordo, otros de distinta apariencia bien variada están sentados. Notas en la sala mucha seguridad, casi tanta como la que hay en tu nave...en tu pasada nave, y eso te extraña bastante. Te fijas en que aquellos que están como patrullando frente a vosotros, dando vueltas a vuestro alrededor, llevan insignias imperiales que no puedes distinguir claramente...aunque sospechas que son los míticos arbitradores. Llevan también escopetas de combate, claro.

El recorrido en la pequeña nave de transporte es breve, pronto se abre la compuerta de nuevo, cogéis vuestras pertenencias y los miembros de seguridad que os custodian os escoltan dentro de lo que sospechas es una gran nave...pues bajáis en un hangar similar al de tu nave, aunque mucho más cuidado y algo más grande incluso. Al llegar hay algunas mujeres muy bien armadas con el símbolo de la Inquisición en sus pesadas armaduras. Entre unos y otras os escoltan, os dividís en unos cuatro grupos, cada grupo toma un elevador. Hay solo tres elevadores en el hangar por lo que un grupo espera. Tú subes con un par de tipos raros más, una de esas mujeres armadas hasta los dientes y un arbitrador. El elevador cierra sus puertas y las abre tras un momento, habéis ascendido algunos pisos. Ante vosotros hay un pasillo que va hacia el frente y otro que va a la izquierda y a la derecha. El arbitrador sigue hacia la izquierda con uno de los tipos raros y tú, el otro tipo raro y la mujer vais hacia el frente hostigados por ella. Tanto los pasillos como las puertas son metálicas y hay gran cantidad de símbolos sagrados por todas partes, por las paredes y las puertas, las cuales tienen número.

-Tú, aquí. -dice la mujer repentinamente con rudeza y os detenéis en seco. Abre una puerta que tiene al lado e indica a tu compañero que entre. -Por el comunicador recibirás instrucciones, y que te quede claro que no estás autorizado para moverte libremente por la nave. -dice cerrando la puerta con un gran pestillo por fuera. Te hace avanzar y un par de habitaciones más adelante para y dice con la misma frialdad casi mecánica: -Y tú aquí, y lo mismo va para ti. Buenas noches. -dice cerrando la puerta estrepitosamente y sin darte opción a interrumpirla. Ves una habitación bastante espartana, de gris metálico, con poco más que un camastro y un armario. Sobre la mesa de noche hay una especie de comunicador encendido que por ahora no da señal. Estás cansado del estrés, no tienes sueño pero algo es algo. Te planteas organizar tus pertenencias en la estancia antes de tumbarte.

Notas de juego

Esta partida es de ritmo medio-alto, no alto, por lo que dentro de ese margen puedes buscar un momento más adecuado para postear en el que no tengas el cerebro frito xD De todos modos se agradece el interés en la presteza.

Por cierto perdona que no repare mucho en descripciones detalladas, hay mucho que hacer en tu prólogo y no tanto tiempo.

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13/08/2013, 15:36
Vret Copper

La situación me hacía empalidecer, desconocidos, armas, cracteres feroces. No podía dejar de mirar de un lado a otro con nerviosismo y asombro intentando no enfurecer a nadie sosteniendole la mirada, sobre todo a los ¿arbitradores?, la enorme seguridad y hosquedad me repelía y no paraba de preguntarme que razón había para ello.

unas mujeres que no sabía distinguir a que estamento pertenecían, nos separaron por grupos para enseñarnos nuestros cubículos. Se comportaban como enfermeras gruñonas y presentía que serían capaces de dar azotes bien terribles. No entendía nada, pero la fuerte autoridad me hizo obedecer sin rechistar. "Si señora, Si señora era cuanto salía de mis labios intentando mantener el rostros sereno pese a que tenía ganas de hacer pucheros.

Una vez en mi cubículo me dediqué a inspeccionarlo, me preguntaba si el intercomunicador me permitiría comunicame con alguien, pero no me atreví. Lo miré, por tanto, largo rato y comencé a disponer mi equipaje bien ordenado. Me tumbé en mi camastro y cerré los ojos intentando conciliar el sueño. Iba a ser complicado, lo sabía, pero el primer contacto me llamaba a no desear pensar mucho más por el momento.

Notas de juego

Ya se lo del ritmo, pero sabiendo que hay que hacer, por no hacer perder el tiempo a los demás.

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15/08/2013, 22:21
Director

A partir de aquí la cosa es sencilla, aunque no te dan opción a negarte, o esa es la clara impresión que te da. Empiezas descansando "tranquilamente", pero en cierto momento te avisan de que debes prepararte para las lecciones sobre la oración. En resumen: te enseñan cómo debes orar al Dios Emperador a partir de aquí todos los días. Te llevan a zonas controladas donde un clérigo os imparte esas lecciones, siempre escoltados desde que salís de vuestras celdas hasta que volvéis, sin oportunidad a hablar entre vosotros al menos en principio. Pronto queda claro el sistema a seguir: las comidas del día se imparten a la hora adecuada, y la mayor parte del tiempo restante os las pasáis en rituales de oración. Así unos meses, el tiempo se torna insulso, indeterminado para ti. Lo más especial que te sucede en todo este tiempo es que llegas a oír que uno dio problemas y fue "detenido" permanentemente.

Notas de juego

En alguna ocasión intentas algo con el comunicador, pero todas sus posibles funciones han sido anuladas, solo sirve para trasmitirte esos malditos y repetitivos mensajes aparentemente automatizados.

¿Intentas algo especial en este tiempo o obedeces órdenes y esperas la reunión con el mismísimo Emperador, y con él tu futuro destino?

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17/08/2013, 16:22
Vret Copper

Me concetraba en la maravillosa experiencia que me aguardaba ante el Dios Emperador, pero por el momento solo sentía miedo y reiteración. Cada día, cada ciclo lo mismo bajo la disciplinada y severa atención. aún cuando mi ánimo me isntaba a hacer algo cada día que pasaba se me pasaban las ganas de contradecir a nadie. Y si se enfadan , ¿que me harán', ésto es terrible...

Notas de juego

No voy a intentar nada. Que ésta gente da yuyu xD

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18/08/2013, 09:58
Director

Tu vida continúa manteniéndose monótona hasta un día...el día tan esperado. Un día no os llevan a las capillas, después de la primera comida del día os dejan inusualmente en vuestras celdas, y más tarde os van llevando de forma ordenada a una sección de desembarco despejada para tal propósito. Uno a uno os van poniendo unos simples cascos que cubren toda la cabeza, con unas almhoadillas por dentro en las orejas; estáis cegados y prácticamente ensordecidos. Cuando se abre la compuerta os ordenan caminar, y eso haces durante un buen rato. El aire libre no te parece liberador, incluso te sientes en peligro. En tu recorrido asciendes una buena cantidad de escalones, y al principio te percatas de la fuerte brisa pero luego te percatas de que estás entre paredes. Llegado el caso te quitan el casco, y estás en una gran sala con tus compañeros de condición alrededor y más mujeres armadas de las que viste en la nave. El gran salón está decorado con estandartes que cuelgan de las paredes con un símbolo extraño* y delante de vosotros hay un reducido grupo de hombres con túnicas de calidad con esos símbolos dibujados. Os dividen en pequeños grupos y uno de estos hombres se queda con cada grupo, siempre escoltados por esas extrañas mujeres tan bien armadas. El hombre va poniendo sus manos en las sienes de cada uno, y diciendo "apto" o "no apto". Te percatas de que "apto" solo lo ha dicho un par de veces hasta llegar a ti, momento en el que al poner sus manos en tus sienes sientes que te va a estallar la cabeza, y dice "apto".

A partir de ahí la Scholastia Psykana se hace cargo de ti. Durante unos cuatro o cinco años permaneces en Terra siendo adiestrado por ellos en sus grandes instalaciones, y recibes la autorización necesaria para utilizar tus poderes, lo cual no llega sin los pertinentes rituales solemnes y profundamente dolorosos ideados para poner a prueba la fortaleza de tu alma contra los depredadores psíquicos de la disformidad. Tras este tiempo en el que tu yo ha cambiado profundamente, madurando, aprendiendo y fortaleciéndote física y sobretodo mentalmente, deciden que eres de los poco aptos para servir en la Inquisición, y en una de sus Naves Negras te transportan fuera de las cercacías de Terra y más allá del Segmentum Solar. En el arduo viaje te informan de que has sido destinado al Segmentum Obscurus, concretamente al Sector Calixis, como acólito de un inquisidor llamado Marcus Toth.

La espera tiene su recompensa y llegado el caso accedes a una de las pequeñas naves de transporte que te dejará en la otra Nave Negra en la que está el inquisidor, la cual se dirige a dicho sector. Al abrirse de nuevo la compuerta del transporte te preparas para salir. No eres el único que desembarca aquí, aunque no sois muchos.

Notas de juego

*

Pues ayer noche, leyendo, me enteré de muchas cosas que no son como pensaba. Juraría que alguna vez leí que todos los psíquicos pasan por la Comunión de Almas, pero al parecer solo aquellos destinados a perecer y mantener el Astronomicón pasan por ese proceso.

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18/08/2013, 10:27
Marcus Toth

Estáis en un gran hangar muy similar al de la nave anterior, y a la salida ves un hombre de mediana edad con el pelo a capa color negro mate, amplia gabardina color verde oscuro que al estar abierta deja ver una pistola bolter y una espada de energía colgando de su cinto. Lo único artificial que ves en él es su ojo derecho, injerto disimulado aunque despida una intensa luz roja. Te tiende la mano al bajar por la rampa de desembarco del transporte con una sonrisa en el rostro y dice: -Soy el inquisidor Marcus Toth, es un placer.

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20/08/2013, 16:13
Vret Copper

Al bajar, Saludo con una inclinación de mi cabeza al inquisidor y aunque con lentitud le ofrezco mi mano derecha enguantada para estrecharla, haciendo una mueca de dolor incluso antes que la toque. Es un placer servir bajo su manos inquisidor Roth, soy Vret Copper.

Intento sonar lo menos agresivo posible y lo más humilde y servicial que puedo. Todavía me dan escalofríos algunos mandos y me inhibe el caer bajo sus malos humores. Por lo demás me temo que mis ojos rueden demasiado hacia los lados ,así como mis movimientos no son todo lo contenidos que quisiera. me pondré en marcha en cuanto lo precise o cuando quiera, ya sabe...Deje sin terminar la frase sin saber si debía seguir hablando incoherentemente o simplemente escuchar.

 

Notas de juego

Como yo no se demasiadas cosas, pues no me sorprende. oy aprendiendo día a día xD.

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20/08/2013, 21:15
Marcus Toth

Sonríe afablemente con tus palabras. -Toth, es Toth. Por aquí. -te guía hacia el elevador más cercano. Subís algunos pisos y las puertas se abren, mostrando pasillos blancos con puertas de madera pulida con números y algunas con nombre. Avanzáis por el pasillo frontal y se detiene en una puerta del lado derecho de número 16, la abre moviendo el pomo y te invita a entrar. Tiene una cama que aparenta ser la mar de cómoda, una mesa de noche, un amplio escritorio y un armario.-Ésta será tu habitación. -dice mientras coge la llave de la parte interior de la cerradura (estaba puesta) y te la da. Luego se saca algo de un bolsillo y te lo da, es un comunicador que se pone en la oreja. -Está configurado, no lo modifiques. Con esto podrás entrar en contacto conmigo cuando lo necesites. Acomódate y baja al comedor del piso de abajo. Te esperamos en la mesa de la esquina derecha, no tardes. -acaba diciendo con una amplia sonrisa con algo de picaresca y se va, cerrando la puerta al salir.

Notas de juego

Tienes horribles cicatrices, pero eso no significa que te duela. Te recomiendo que no rolées que te duele, porque eso te daría penalizadores con la diestra que no creo que te interesen xD

PRÓLOGO FINALIZADO Tu prólogo se acaba con esto, si quieres postear y describir las emociones, pensamientos y sensaciones puedes perfectamente, sino no pasa nada.