Partida Rol por web

Despues de un tiempo Dwayne fue calmandóse poco a poco, habia visto mucho en su vida, pero ésto lo desbordaba.

Junto a él en el coche estaba la pequeña Brenda, una chica de color que acababa de perder a sus padres, sin saber muy bien por qué, le recordaba a la pequeña Tania, la hija de su amiga y sólo pensar que estaba a pocos metros de Shane le revolvía el estomago,junto a ella se hallaba un perro y un tipo con sombrero, que se comporta como si fuera su padre, un hombre protector, le caía bien a Dwayne.

Junto a él y conduciendo se hallaba su angel de la guardia, sin ella no hubiera sobrevivido-No me he presanto formalmente me llamo Dwayne y gracias por haber parado y rescatarme-Dice Dwayne mirandóse por si le habian atacado esos seres y no por culpa de la adrenalina no lo habia notado.

Llegaron a la gasolinera los otros ya habian llegado, los dos sheriff bajaron del coche, uno fue a llenar el deposito, el otro entró en la tienda, una tercera persona bajo del otro coche tenia una escopeta-MIERDA!!!!- Pensó mientras recordaba que la suya quedó en la jodida moto que no quiso arrancar.

Se acercó hacia el establecimiento junto a la pelirroja, y alli vió al dueño del negocio apuntando al sherrif, ademas llevaba un brazo vendado con sangre, ésto no pintaba bien...............

La gente tán sólo le preguntaba por el brazo y éste salió a la defensiva, malo, muy malo, su experiencia como antiguo policia, le decía que ésto iba a acabar muy mal para alguien, no conocía a ésta gente, pero ahora mismo era la única que conocía, y no pensaba que hicieran daño a nadie y menos a la pequeña Brenda.

Dwayne sacó su pistola y apuntó al dueño del Local-Sólo te estan preguntando sobre el brazo, somos 6 tios armados, y tan sólo estas tú, contesta a la pregunta y nos marcharemos por donde hemos venido, ellos son sheriff... yo no, y ésta noche he visto cosas jodidamentes raras para que vengas a tocarnos los putos y jodidos huevos, tu decides-Dice Dwayne con una frialdad que a él mismo le sorprende, pero está nervioso, en lugar que no conoce, y con gente extraña, y otra gente que le dá por atacar y mutilar 

Jennifer acababa de comprar sus cosas cuándo la situación se descontroló totalmente, mientras Brenda se escondía detrás de Harrper.

Los nervios sin duda estaban a flor de piel. Y más cuando de repente y de la nada un tipo apunta con su arma al dependiente del local.

Arden, que hasta entonces se había mantenido tranquilo, empieza a hacer fuerza con su mandíbula para intentar contener su estrés. Sus músculos faciales se tensan y dejan ver una muy bien marcada cara.

Apunta hacia Dwaine, que parecía bastante nervioso.  Bobby, dile a tu colega que baje el arma, o la tenemos. Habéis entrado en mi local, y puedo usar defensa propia en un jurado, además de los testigos aquí presentes y las cámaras de seguridad.

Arden, parece bastante tranquilo a pesar de la situación. Echa una mirada fugaz hacia Parker.

¿En serio? ¿Un blanquito llamando hermano, a un hermano? Joder Bobby, no sé en qué andas metido, pero seguro que podías haber encontrado a gente un poco menos estúpida. Si se le ocurre decir eso en algún barrio más chungo seguro que le violan el culo o algo peor.

Arden se cruje el cuello, y un sonoro crack, como el de un hueso rompiendose resuena en el local.

No sé qué cojones os pasa a todos con mi herida, pero si sirve para calmaros, me he cortado con una lata ¿vale? No es bueno almacenar cosas afiladas y abiertas en zonas con poca luz, que luego te cortas y la lías. Joder, sangra bastante, pero es solo un puto corte, y ahora, o bajas tu puta pistola, o te meto un puto tiro en la cabeza, ¿me has entendido gilipollas?

¡!!Joder con los putos blanquitos y su prepotencia!!!

Mira tio, como tú me he encontrado a lo largo de mi vida a mucha gente, te sigo diciendo, me puedes apuntar y dispararás y me matarás pero luego hay otras 3 armas minimo que te apuntan que te dejarán como un queso gruller,asique lo mas sencillo es que bajes tu jodida arma, y estemos civilizados,afuera tenemos una niña y está asustada, y no quiero que esté mas, no se si me has entendido, vivir o morir, es tu elección- Dijo Dwayne sin espera a respuesta del sheriff, pues entre otras cosas le estaban apuntando con una escopeta

por si las moscas le apunto varios turnos a la cabeza...........

- "Señor Arden, necesitamos un lugar para pasar la noche. El pueblo entero se ha vuelto loco, se están matando unos a otros en las calles como salvajes caníbales enloquecidos...

Hemos visto como Blutter le arrancaba el cuello a mordiscos al Sheriff Coltran. Luego "El Tipo" se encargó de él con un machete... Entonces han atacado el Bowling, hemos visto cómo despedazaban a Josh... Y al final nos han perseguido docenas de locos dementes, tal vez cientos... Hemos tenido que huir como hemos podido, dejando a mucha gente atrás." -

Una pequeña gota se desliza del emplaste de arden y cae sobre la barra. - ¡¡¡Aggghhh!!! ¡¡¡¡Agghhh!!! - grita la pequeña descontrolada con un timbre de voz tan potente que podría dejar sordo a cualquiera. - Nos van a matar nos van a matar, vamos a morir todos- comienza a correr hacia la salida tropezándose con un montón de latas que había apiladas a un par de metros de la entrada con un sonoro ruido. La pequeña dá un traspiés y sigue corriendo hacia afuera corriendo fuera de la gasolinera hasta el coche... que ahora no se abre, mientras no para de gritar como un loca. 

A los pocos segundos se empieza a oir un lloro de impotencia. 

En medio de la noche, por encima del generador de la gasolinera solo se escucha a la pequeña niña. 

Tras terminar de hacer mi compra la tensión volvió a la tienda, con demasiadas armas y machos alpha preparados para demostrar quien disparaba antes. Dwayne había provocado esa situación con sus modales groseros pero sus últimas palabras fueron acertadas aunque tardías. La pequeña Brenda, asustada tras todo lo ocurrido, corrió afuera y se quedó llorando junto al coche.

Robert ¿puedes ir a calmarla? Y llévate esto para ir cargándolo en el maletero -le pedí al comerciante mientras abría el coche desde lejos. A continuación me giré hacia el resto -Esto no es una película de zombis, aunque se le parezca. Si a este hombre lo han mordido, cosa que no sabemos, no tenemos la certeza de que vaya a morir. Recordad que es un virus y cada persona responde de forma distinta ante estos. Además, es su gasolinera y su tienda, el manda sobre todo lo que está aquí y nadie tiene derecho a usurpar sus bienes y patrimonio, pese a la catástrofe. Señor Arden, voy a llenar estos bidones de gasolina y, tal vez, mande a alguien a comprar un par de cosas más pues nosotros nos vamos de aquí. Cuantas más horas perdamos más descontrolado se volverá todo y más difícil nos será salir de la ciudad.

Ya se había aclarado todo -al menos Bobby Joe no tenía razones para desconfiar- así que se interpuso entre ambos hombres para calmar los ánimos.

- Vale... vale señores... - dijo, alzando las manos hacia ambos*, para poner paz - Haya paz, por favor. Arden, como ha dicho mi compañero, necesitamos pasar la noche aquí, habrás visto lo que ha pasado en la televisión, y hay mucha gente afectada por esa... enfermedad. Atacan a la gente que ven, y no podemos viajar de noche.

Luego se giró a Dwayne, no las tenía todas consigo con ese tipo tras el incidente con Shane, pero ahora no podía permitir enfrentamientos internos.

- Por favor, ¿puedes bajar el arma?

Si la cosa estaba ya mal con el "sheriff en funciones" y el dependiente de la tienda encañonándose uno al otro la entrada de Dwayne hizo que nos acercáramos a un momento realmente dantesco. No era de extrañar la reacción de Brenda y que saliera corriendo del establecimiento, adultos con armas comportándose como críos. Estoy vigilando a esta panda de pistoleros cuando Jennifer me tiende los bártulos que ha ido recogiendo.

- Al coche me voy....no valla a ser que os lo toméis a mal y me disparéis. Retrocedo lentamente sin dejar de vigilar a esta gente tan ansiosa por disparar y salgo de la tienda hasta el vehículo.

Me acerco hasta Brenda con las bolsas entre los brazos, las dejo sobre el coche y me agacho hasta quedar a la altura de la cabeza de la niña. - Tranquila Brenda, no pasa nada. Todo va a salir bien.... espero, nos iremos pronto de aquí. Entra en el coche Jennifer ya nos lo ha abierto, estarás mas  cómoda en el interior. La aparto suavemente de la puerta y se la abro para que pase. - Dejo esto en el maletero y me siento ahora contigo.     

Arden sigue apuntando a Parker. Bobby, me fio de ti, pero hasta que ese cretino no baje su arma, no voy a dejar defender mi establecimiento, sino cualquier bobo armado podría venir a robarme, y no pienso permitir eso.

Chaval estás muy seguro de que los demás van a responder por ti si nos disparamos, creo que deberías empezar a pensar que lo mismo no sois tan buenos amigos.

Mira Bobby, parece de los pocos sensatos de vuestro grupo intentado evitar confrontaciones. Si lo que dices del Sheriff es cierto, y a muerto, lo más probable es que te quedes su cargo, muchacho.

La pelirroja tampoco parece mala gente. Arden da un buen repaso al cuerpo de Jennifer, y no está nada mal, podrías aprender un poco de ella.

El otro que dices que puede dispararme me está pidiendo permiso para quedaros aquí a dormir, tienes una cría acojonada de unos 8 años, y un tipo llevándose cosas a su coche. Creo que tendrías que hacer mejor tus cuentas, chaval.

Una cosa te digo, asegúrate, de que cuando me dispares, me mates o me dejes bien jodido, porque yo no fallaré. Una cosa es tu prepotencia y todas tus gilipolleces, y otra es mi puntería.

Tu veras chaval.

Bobby, no sé qué coño pasa o han dicho en la tele, pero yo no uso de eso, solo tengo radio y no han dicho…

Justo en ese momento un boletín informativo parecido al que habéis oído anteriormente revela la aterradora situación de Kansas.

Muy bien, el mundo se va al garete ¿no? Aun así no es motivo para intentar asaltar mi tienda.

Justo en ese momento un camión de transportes llega a uno de los surtidores con dos hombres. Uno blanco, con perilla y mal afeitado al volante, y uno afroamericano en el asiento del copiloto.

Forcejeo con la puerta del coche, pero mis paupérrimos bracitos no pueden hacer nada contra el coche de la chica del pelo de fuego. Le doy dos patadas con tal mala suerte de que me doy en la espinilla, pero no me importa. - Abrete tonto, abrete- mi respiración empieza a tornarse agitada. Algo va mal. 

De repente noto un brazo en mi hombro - ¡¡¡AAAAGGGHHHHHHH!!!- Grito mientras me tiro al suelo y ruedo precariamente, cuando abro los ojos solo es Robert, el único que hasta ahora ha parecido preocuparse por mí. - Ah... eres tú... perdón...- dije agitada como el demonio, mi pequeño pecho subía y bajaba como si hubiera estado corriendo una maratón. 

En cuanto me dice que el coche está abierto lo abro y me subo corriendo, allí está Darwin que lo había dejado dentro, lo abrazo con todas mis fuerzas, hasta casi estrangularlo. El perro tranquilamente me da un lametón, no sabe que está pasando. 

Cuando Harper entra en el coche conmigo no puedo evitar echarme a llorar - ¡Me he echo pupa en el pie!- dije entre sollozos mientras recordaba el dolor al haber pateado el coche. 

En cuanto el camión se detiene, Bubba se apea del vehículo y avanza cauteloso.

- Buenas noches - dice fingiendo no enterarse de nada.

Estaba acostumbrado a evitar problemas y en cuanto tengan el combustible podían ir cagando leches fuera de ese lugar y que se maten a tiros.

- Queremos combustible y seguimos con nuestro viaje.

Bubba manifestaba la más absoluta indiferencia ante las extrañas circunstancia. La cosa pintaba mal, el informe de la radio no era nada alentadora y si el mundo se iba a la mierda poco importaba que estaba sucediendo aquí.

Samuel miró hacia el recién llegado.

Pues probablemente tu tengas mas suerte que nosotros- y girándose hacia Arden - al parecer el dueño tiene problemas con los "blanquitos".

La verdad es que estaba empezando a hartarse de la actitud de Arden así que decidió meterse en la conversación para desviar un poco la atención de Hicks.

Primero. El que hallamos entrado con armas no supone que venimos a atracarte. El mundo se va al garete y es probable que dentro de nada ni el dinero ni todo lo que hemos valorado hasta ahora sirvan una mierda y lo único que realmente sea importante será la capacidad de ayudarnos unos a otros.

Y segundo, a modo de información. En el barrio que creció este "blanquito" un "negrata" como tu de clase media hubiese durado menos que una chocolatina a la puerta de un colegio. Yo era el único blanco en mi cuadrilla y es un defecto de juventud usar el "hermano".

Así que si ya has acabado con esa actitud de "negro resentido contra la sociedad blanca que le menosprecia" empieza a actuar como dueño de la tienda y vete a la caja que tengo una VISA oro y 100 dolares para gastar.

Tras parar el camión ruidosamente, Hugh ve la escena que ante él se dispone y como Bubba baja rápidamente del camión para intervenir.

El cementerio esta lleno de héroes ....

Piensa para sus adentros mientras se mantiene desde la cabina observando lo que allí parece ocurrir, ya que las armas y el nerviosismo no son buenos compañeros, y el mismo podría dar un seminario sobre eso.

Señores tranquilidad, nosotros sólo queremos gasolina para continuar como dice mi compañero. Y no se preocupe, podemos pagar por ella sin problemas. No pensamos asaltar ninguna tienda.

Dice Hugh esperando que se tranquilicen un poco las cosas.

Dwayne seguía apuntando a al dueño del local, cuando la cosa parecía desmadrarse.

Veía como la pelirroja mandaba a la pequeñaja y al del sombrero salir de la tienda e ir hacia el coche-Bien-Dice mirando al dueño del local-Hoy ha sido tu puto y jodido dia de la suerte ahora te dejaré vivir, pero no creo que veas otro amanecer-Le dice mientras camina hacia atras lentamente hacia la puerta de salida-Nosotros nos vamos, ahí te quedas, pero si fueras inteligente y tienes un vehiculo, yo que tú, me largaría de aquí-Dicho ésto sale de la tienda cuando vé otros dos nuevos individuos-No sé quienes sois pero será mejor que os largueis de aqui cuanto antes-Comenta a los recien llegados, sin parar y apuntar hacia dentro de la gasolinera, se encamina hacia el vehiculo al cual habia llegado-Lo siento todo lo ocurrido, no soy una persona violenta, simplemente esto me pilla de sorpresa y en las unicas personas que confio, son las que hemos salido del paradise-Dice nada mas llegar al coche

Miro a Bobby en silencio, creo que ambos sabemos reconocer a un delincuente violento cuando lo vemos. En las presentes circunstancias, tal vez sea mejor que el tal Hicks se marche con viento fresco. Aunque lo siento por quienes vayan con él...

Con cierta perplejidad asentí ante las "buenas palabras" que Arden dirigió hacia mi persona. Antes de responder llegó un camión, del que salió otro hombre de piel oscura. Por suerte su actitud parecía buena, algo que seguramente cambiaría en las visitas de nuevos supervivientes, cuando la situación fuera aún más caótica.

Algunos siguieron lanzando pullas al tendero pero, por suerte, Dwayne dio un claro ejemplo diplomático y se retiró.

Señor Arden, necesitaría también mantas o, en su defecto, toallas, además de algunos productos básicos de medicina y, ¡que narices! voy a coger algo más de comida y gasolina -dije sonriendo amablemente al dueño mientras sacaba otro fajo de billetes. A continuación miré al recién llegado -nosotros también seguimos nuestro viaje en breve. Tal vez podamos salir juntos de aquí para separarnos poco después, con la idea de protegernos entre nosotros mientras nos alejamos de la ciudad. Por cierto, soy Jennifer. ¡Dwayne, ayúdame a llenar estos bidones! -concluí, dejando los bidones en la puerta para que mi compañero los llenase de gasolina mientras yo cogía un par de cosas más y esperaba la respuesta del nuevo.

Mientras Dwayne retrocedía hacia el coche la chica pelirroja empezó hablar con en el encargado, de manera tranquila y afable, mientras mira de reojo a los dos Sheriif, sobretodo uno que no dejaba de mirarle con desconfianza, cuando iba a decirle algo, la chica pelirroja dijo su nombre, mas bien le gritó,durante un instante dudó, pues hacía mucho tiempo que sobretodo una mujer no le mandaba, le decía que recogiera unos bidones, guardó su pistola, no antes de mirar al dueño del establecimiento, cogió los bidones y se dispuso a rellenarlo-Ese sheriff de pueblo, que se habrá pensado, si supiera toda la verdad se la metería por el gaznate-Pensó Dwayne mientras cargaba la gasolina en los bidones.

Una vez finalizado, silbó a la pelirroja haciendola una señal que se dirgía al coche, alli se encontraban la pequeñaja y el hombre de sombrero, le gustaba la manera de tratar a esa pequeña de ese tipo...........

Afortunadamente, la tensa situación entre Dwayne y Arden terminó, pero la cosa no pintaba bien. Tanto Jennifer, como muchos de los ocupantes del Bowling Paradise habían decidido salir a toda prisa, y eso no le gustaba. Le hubiera gustado que todos permanecieran juntos, que sobrevivieran a la noche, y descubrir con alegría que por la mañana venía el Ejército con una lista de soluciones.

Pero no, probablemente no pasaría eso.

- Jenn... - alcanzó a decir en una de las idas y venidas de la chica. Él no iba a ir a ninguna parte, se iba a atrincherar en la gasolinera e iba a aguantar lo que viniera.

O eso quería.

La situación se estaba calmando. En un alarde de inteligencia y responsabilidad, o quizás simple y llano aprecio hacia su entidad física, los hombres armados dejaron de apuntar a Arden, que respondió de la misma forma. Bajó lentamente su arma. Arden hizo caso omiso del comentario del hombre que hasta hace unos instantes le apuntaba.

¿Supongo que a éstas alturas no querrán hacerse la tarjeta de descuento para ganar puntos por compras grandes verdad?, insinuó mirando a Jennifer.

Dos nuevos invitados llegaban en un camión.

Hola, disculpen las molestias y la escena aquí montada, parece que ya se han acabado las tonterías, dijo Arden con un intento fallido de sonrisa hacia sus nuevos clientes.

Al oír a Jennifer declarar sus compras, Arden se alegró algo más. Parece que hoy voy a hacer buena caja, eso siempre está bien.

Pelirroja, tienes toallas al fondo, en la estantería de la izquierda. Si lo que quieres es agua en cantidades puedes coger las garrafas de 5 litros que hay apiladas al lado de la puerta metálica. No están frías, pero seguro que harás buen uso de ellas. Tengo más comida en el almacén, así que no te cortes y coge lo que quieras.

Ustedes también, dijo refiriéndose a los recién llegados. Cuando terminen de echar la gasolina que quieran pasen por aquí, y les atenderé encantado.

Respecto a lo de pasar aquí la noche, no es que me oponga, pero apenas tengo sitio, aunque si se conforman con dormir en el suelo… Eso sí, quizás venga por aquí algún cliente y se extrañe, pero bueno, ya se me ocurrirá algo, que no se diga de la hospitalidad de Kansas.