Partida Rol por web

Aquelarre- Danza Macabra - Capítulo I: El lobo y la oveja

Escena II - San Juan de la Peña y monasterio de Leyre

Cargando editor
26/04/2016, 21:56
Director

Refectorio

Matamoros pareció ofenderse con la actitud de Bastian. - Si no quieres venir¿para qué te has acercado a nuestra mesa? Es que ¿no somos lo bastante estirado para tí?

Su acompañante, la voz cantante del grupo de 6 peregrinos, contuvo la creciente agresividad de Matamoros- Tengamos la fiesta en paz y dejemos que descansen estos buenos peregrinos. Si no quieren nuestra compaña, ellos se lo pierden.


Puerta del monasterio

Se recuperó el buen ambiente y fueron hasta la puerta del monasterio con Evaristo a seguir comiendo e bebiendo. Allí les encuentró Jacob a la vuelta del bosque.

-Este chiquillo va con vosotros ¿verdad?.  Toma un poco de vino, que ayuda a crecer  a los omnes. Bebe algo, niño, que se nota que tu señor no te alimenta como es debido y te estás quedando en la nada.

Jacob, huidizo por naturaleza, musitó una disculpa y se adentró en el monasterio a reunirse con el grupo.

La plática discurrió entre risas et asaz parescían disfrutar de las historias picantonas de Evaristo, aunque a él, perro viejo en estas lides, no se le escapó que intentaban  embeudarlo... ellos lo intentaban y Evaristo se dejaba hacer.

Cuando Evaristo les comentó que se dirigían al valle de Ibarela, ellos replicaron que venían de allí y le aconsejaron evitar el valle. Al parecer, la zona estaba siendo muy castigada por los bandidos ultimamente, y las gentes del valle no sentían demasiado amor hacia los viajeros desconocidos, máxime si iban armados.

También explicaron entre risotadas que el Abad era una buena pieza y que el día que reventase bajaría tan rápido al infierno que es posible que no hubiese tiempo ni para enterrarlo. El Abad se preocupaba más de llenar su barriga y de exprimir a los siervos que se encontraban a su servicio que de intentar redimir sus almas. Si no había disturbios entre los campesinos era porque, misteriosamente, aquel que osaba quejarse en voz demasiado alta recibía una paliza por parte de unos desconocidos, o veía como parte de su hacienda era incendiada.


Camino a la sala común

Cuando vio que se acababa el vino, assora a Evaristo le entraron los remordimientos y se despidió de los peregrinos.  Beudo cuemo era, non trovó la sala común et en su deambular por los oscuros pasillos de fría piedra se topó con un monje ciego  al que preguntó. El monje le tocó la cara y respiró su aliento a vino. Le puso una palma en el pecho e le dijo:

-Esta es la casa de Dios y el diablo no puede entrar si no se le abre la puerta. ¿Por qué dejas entrar el mal?

Cargando editor
26/04/2016, 22:01
Director

Notas de juego

Las historias de los personajes confluyen de nuevo en la sala común a la que al rato llegan también los otros peregrinos.

Ahora ya podéis leer lo que sucedió a vuestros compañeros, echad un ojo desde que os separasteis en el refectorio y verificad que leéis todo.

Jacob y Ataulfo manifestaron su intención de hacer guardia. Así que salvo que queráis hacer otra cosa, así se hará.

Os dejo la oportunidad de que os manifestéis por si queréis hacer algo diferente durante la noche y, en cualquier caso, mañana continúo con la historia.

Cargando editor
26/04/2016, 22:28
Jacob ben Eleazar

Ben alborotado por cuanto ocurre entrégole las ramas al Maestro Nicomédes para que en faiga con ellas lo que mellor le parezca. Aprofitando la mínima confianza que me dedicó "El Viejo" al prestarse a compartir guardia conmigo, me acerco a aqueste muy nervioso e con la respiración alborozada:

Ay Ataúlfo que me temo lo peor et que gran calamidad se trama! - Le susurro casi sin atreverme a verbalizar mis sospechas -. Que cuando en salí por las ramas del Nicomédes cruzóme con tres marchantes con una buena reata de mulas que pararon allá, a la vera del río - hago un ademán con el brazo, señalando en la dirección de donde vengo -. Et que en cuando ya volvía cruzóme esta vez con aquellos bandidos - muestro el lugar donde paraban los misteriosos "peregrinos" -. E yo non entiendo miaja de aquestas cosas mas mucho me temo que los bandidos darán cuenta de los marchantes y quizás les pasen a cuchillo y sabe Dios cuantas más cosas... dígame que estoy equivocado Ataúlfo, dígamelo por favor! - imploro.

Cargando editor
27/04/2016, 10:23
Ataulfo, el viejo

-Tranquilo muchacho, que estando aqui dentro del monasterio dudo mucho que ningun rufian se atreva a dañarnos en modo alguno. Comentare con los otros tus sospechas y con el propio señor Don Carlos para que él, si lo ve menester, nos diga de mediar si algun conflcto apareciese. Nuestra mision es proteger al señor en su peregrinaje y no podemos ir desfaciendo entuertos a nuestro antojo pues si no mal servicio estariamos dando a nuestro señor-

Y en acabando de comentar esto con el bueno de Jacob, comento con el resto del grupo los temores del joven y les digo
-Voy a explicarle la situacion a Don Carlos y despues creo que deberiamos mantener los ojos abiertos sobre estos rufianes para que no nos hagan un desaguisado a ninguno de nosotros en la sala comun ni a nuestro señor en la suya alcoba-

 

Cargando editor
27/04/2016, 10:48
Carlos de Mayoral

Carlos estaba velando el sueño de Consuelo, a la que parecía haber tomado cariño. Y escuchó absorto a las explicaciones de Ataulfo sin separarse de la niña.

-Es extraño eso que comentáis. Aunque tampoco hay delito alguno en abrevar las mulas en la noche ni tampoco en ser un peregrino malhablado e aficionado al vino. Obrad conforme os dicte vuestro criterio, pues sois un hombre experimentado y confío en vos.

Dicho esto, volvió a centrarse en la pequeña.

Cargando editor
27/04/2016, 12:02
Evaristo,el cojo

Después de despedirme de los peregrinos y un poco achispado y sin vino que beber me fuí a dormir. De poco me sirvieron las advertencias de Ataulfo, pues yo pensaba en dormir la mona y poco más.

Cargando editor
27/04/2016, 22:42
Director

Jacob se resistió al sueño y se mantuvo despierto fingiendo que dormía hasta Laúdes pero no notó movimiento en grupo de peregrinos con el que compartían la sala común. Sí notó que había bastante movimiento en algún lugar del convento que no pudo precisar, pues los ronquidos de los durmientes le impidieron enterarse de más.  A la hora de Laúdes, despertó a Ataulfo como habían acordado y se echó a dormir mientras el experimentado soldado permanecía despierto. No habían transcurrido ni dos horas cuando los supuestos peregrinos se pusieron en movimiento, tan sigilosos que por poco le sorprenden.

Se levantaron todos a la vez y se aproximaron a vosotros con pasos quedos e las manos en las empuñaduras de sus cuchillos. Alzose presto Ataulfo asiendo la funda de su bracamante con la zurda y la empuñadura con la diestra e habló con voz sonora que resonó amplificada en las paredes, despertándoos al resto. Tan sólo permaneció dormido Evaristo, en el pesado sueño del vino.

-Buscáis algo. La salida es por el otro lado.

 

Quedaron los presuntos peregrinos pasmados e indecisos, hasta que habló su líder -   Mil perdones caballeros, con la oscuridad hemos errado el camino a la salida. Os deseamos buen viaje.

Cambiaron de dirección y se marcharon del monasterio dejándoos solos en la sala común.

 

A la mañana siguiente Consuelo estaba completamente recuperada. Con la vitalidad e las ganas de jugar propias de los niños. Partisteis del monasterio de Leire en dirección al valle de Ibarrela... continuará.

- Tiradas (4)

Notas de juego

A Hugo no le dejaron entrar en el monasterio y durmió fuera, amarado.

Guardia en la que se levantan los presuntos peregrinos 1-Jacob, 2-Ataulfo

 

Cargando editor
28/04/2016, 23:05
Director

Al salir del monasterio, Jacob se fija que próximas a la entrada al monasterio hay marcas recientes del ir y venir de un buen número de mulas.

Evaristo, que se había mostrado locuaz en los días anteriores, no cruza una palabra con nadie debido a la resaca que sufre.

Reemprendéis vuestro camino cruzando el río Salazar para entrar en el valle de Ibarrela. El río ha crecido mucho con las últimas lluvias, y el único paso seguro para cruzarlo es un vado poco profundo en una zona donde el caudal se estrecha.

 

Según os cuenta Carlos, el valle de Ibarrela es un pequeño feudo, perteneciente a la familia de los Agreda. Viven en él unas 200 personas, agrupadas en ocho caseríos disperos por el valle, más doce fuegos concentrados en la pequeña aldea, la cual se llama asimismo Ibarrela. La aldea está al pie de una colina, donde se alza el pequeño castillo de los Agreda, poca cosa más que una mansión amurallada y fortificada.

Ya en el valle, encontráis algunos campos quemados, un caserío con el techo de paja renegrido por un incendio reciente, restos de ganado muerto.

A vuestro paso, las gentes muestran hostilidad y miedo. Los hombres dejan en el acto su trabajo para empuñar los aperos de labranza como si fueran armas, no quitándoos ojo de encima, muchachas y ancianos se apartan a vuestro paso, prácticamente huyendo... e incluso un grupo de niños os lanza una pedrada que no os acierta por poco.

Si bien Consuelo inició el camino risueña, al aproximaros a la aldea de Ibarrela, echa a llorar ante la tangible hostilidad. -¿Por qué nos tiran piedras?

Al llegar a la aldea de Ibarrela, las mujeres y los niños se encierran en sus casas, mientras que los hombres y jóvenes os miran silenciosamente, con una desconfianza y la hostilidad bien palpables.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Ataulfo, Bastian haced una tirada de descubrir.

Las capacidades de Evaristo demasiado mermadas para tener opción de tirar.

 

No encuentro en google maps el valle de Ibarrela. Así que esta vez no pongo la ruta. No obstante, os dejo una imágen del río Salazar en la Foz de Arbayún

 

 

 

Cargando editor
29/04/2016, 09:34
Bastián el bruto

 Ante la cargada atmósfera de hostilidad bastián agarra con fuerza el mango de su cotell pero sin desenvainar. Abre bien los ojos e intenta estar lo más alerta posible ante un ataque inesperado.

- Tiradas (1)
Cargando editor
29/04/2016, 09:44
Ataulfo, el viejo

Maldita sea, que demonios les pasa a estas gentes? Acaso creen que venimos a hacer el mal?. Don Carlos, bien haríamos en salir cuanto antes de aquestas tierras que sin duda no encontraremos aquí más que problemas

- Tiradas (1)

Notas de juego

Descubro!!

Cargando editor
29/04/2016, 10:22
Director

En el post anterior escribí:

Ya en el valle, encontráis algunos campos quemados, un caserío con el techo de paja renegrido por un incendio reciente, restos de ganado muerto.

Bastián y Ataulfo, hacen gala de su experiencia militar y explican al resto que la destrucción que veis no es en absoluto arbitraria. Quien lo haya hecho no pretendía destruir la riqueza del valle sino más bien amenazar, dar un aviso.

Cargando editor
29/04/2016, 10:30
Ataulfo, el viejo

Estas gentes han sido duramente castigadas. Sus campos arrasados, su ganado muerto. De seguro les han condenado a varios años de hambre y pobreza. Empiezo a entender que miren con recelo a cualquiera que se acerque a sus moradas, mas si van armados, como vamos nosotros

Cargando editor
29/04/2016, 12:00
Carlos de Mayoral

Carlos se muestra algo preocupado por la salud de Evaristo.

-Deberías controlar tu afición por el vino, amigo. Algún día te vas a meter en un problema del que no quizá no puedas salir.

Sin embargo, no oculta su gratitud por la información conseguida.

Cargando editor
29/04/2016, 12:43
Jacob ben Eleazar

Et que andaba cabizbajo e barruntando las cosas que íbanos sucediendo desde nuesa partida que bien parescía que a cada paso que dábamos más nos adentrábamos en la boca del lobo y eso en demasía me tenía preocupado:

Si bien empezamos felices y contentos en San Juan de la Peña, desde que salimos de aquel lugar parescíamos malditos o víctimas de un mal agüero o quien sabe si es que los tempos que corrían eran tal que así. Al apestado pueblo de Arrés siguióle la estancia en Leyre donde habíamos tenido que extremar las precauciones para que los bandidos no nos causaran mal alguno et que ellos contaban que era el propio abad quien tenía sometida a la población que si alguno en decía una palabra más alta que otra era rápidamente reprendido.

Et que no podía más que suponer que acaso fueran aquellos mismos bandidos que nos querían mal los que facieran de guardia del monasterio et qué terrible fora esto que los propios siervos de Dios echaran mano a delincuentes e criminales para subyugar a las buenas gentes de la zona.

Y que non podía dejar de rumiar el motivo porque los tres de la reata de mulas habían decidido dormir al raso, despreciando la hospitalidad de los monjes et qué extraño me parescía eso!

Y ahora, como los bandidos habían anticipado, llegábamos a Ibarrela et que non somos precisamente ben recibidos e nos acogen a pedradas e gran hostilidad et que, parecido a lo que pasara en los terrenos de Leyre, parescía que alguien tuviera bien amedrentada y asustada a la población mediante salvajes actos que más semejaban obra de unos bárbaros que las propias de un Señor que cuida sus tierras.

Notas de juego

Dedico unos instantes a revisar la zona donde hay tantas pisadas de mulas. Puedo tirar algo para tratar de encontrar algo???

Cargando editor
30/04/2016, 07:53
Evaristo,el cojo

Tenía una resaca de tres pares de narices, eso era que había tomado mal vino. Y bueno, que yo ya no soy el que era y en la medida de lo posible me contengo con el vino, pero esta era una ocasión especial y había que celebrar que se acabaron los días de vacas flacas.-¡Ay señor! non se que me pasó, me dejé llevar por la ocasión, pero nunca más¿eh? Decía arrepentido por los excesos del día anterior a Don Carlos.

 Por el camino iba callado, cuando ví a las gentes que empuñaba los útiles de labranza como armas me temí lo peor, pero éramos bastantes y estábamos armados, no teníamos nada que temer. Cuando ví a un grupo no demaasiado hóstil me dirigí a ellos bajando del caballo, con las manos abiertas y dejando mi palo en el suelo-Buenas gentes, non queremos causar ningún mal, somos peregrinos camino de Santiago. Digannos que ha acaecido aquí, et tal vez podamos ser de alguna ayuda-digo con sinceridad intentando obtener alguna respuesta. Y quizás no ser linchados.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Al límite la paso ;)

Cargando editor
30/04/2016, 11:11
Nicomedes Ha-Levi

Lo de ser recibido a pedradas no era desconocido para Nicomedes. Hacía tiempo que no iba por los caminos con la kippa puesta por ese mismo motivo. Esta vez tenía una reconfortante compañía armada a su vera, así que no le asustaba. Así que volviéndose a Consuelo, con una sonrisa furtiva,  le contó que a el se las tiraban a menudo, y la niña no entendió tampoco la razón.

La casa incendiada ya era otra historia. No había adulto en Aragón que no hubiera visto guerra alguna vez, pero en esta ocasión, el hogar chamuscado les parecía a Ataulfo y Bastián  que no era consecuencia de guerra sino debido a ausencia de ley. 

Nicomedes se encontraba en otro reino y si ya en aragón hablaba con acento, aquí se delataría como extranjero en cuando abriera la boca, así que la mantuvo cerrada. Cuando vio que Evaristo descabalgaba le dijo en bajo -Mira que si podríe auxiliar algúno, gustoso lo faríe y no le cobraríe, ca creo que devemos congraciarnos con los paisanos de aderredor. - Y no se le ocurrió nada más que pudiera hacer por el momento. 

Cargando editor
30/04/2016, 11:48
Director
Sólo para el director

Evaristo, descabalgó y camino con su leve cojera, abrió las manos y manifestó de forma elocuente que vuestro grupo no era el enemigo.

Eso creó un silencio prolongado y tenso de aquellos a los que el continuo maltrato ha demostrado que, aunque tal vez crean las palabras de Evaristo, en realidad no tienen nada que ganar fiándose de los desconocidos.

Cuando vio que Evaristo descabalgaba le dijo en bajo -Mira que si podríe auxiliar algúno, gustoso lo faríe y no le cobraríe, ca creo que devemos congraciarnos con los paisanos de aderredor.

Evaristo volvió a hablar- Aquí mi docto amigo, que estudió medicina en la madraza de Toledo, prestará sus servicios a todo el que lo requiera como gesto de buena voluntad.

Durante unos minutos la respuesta fue el mismo silencio y la tensión creciente que sólo puede acabar con un brote de violencia porque nadie está dispuesto a tender la mano ni confiar otra vez... nadie salvo quizás una madre, que salió de su casa con un bebé en brazos, y atravesó a empellones el círculo de varones de gesto adusto que se había cerrado en torno vuestro.

-Vuelve a la casa. -Se escuchó a algún hombre

-Es una treta, no se contentan con quemarnos las casas e matar ganado, nos quieren envenenar los niños-Dijo otro al tiempo al tiempo que intentó retener a la mujer.

-Dejadme pasar. No me toques, quita, aparta.- Ignoró la mujer, que dando codazos llegó hasta vosotros.

Se acercó y tendió el bebé hacia Nicómedes. -Arde de fiebre desde hace tres días. Por el amor de Dios, arrebátaselo a la muerte.

 

Cargando editor
30/04/2016, 12:24
Director
Sólo para el director

Dedico unos instantes a revisar la zona donde hay tantas pisadas de mulas. Puedo tirar algo para tratar de encontrar algo???

Tira descubrir. Puesto que te acercas y revisas la zona, tienes un bono del 20%

Notas de juego

Mensaje para Jacob

Cargando editor
01/05/2016, 12:39
Director
Sólo para el director

Evaristo tiene la vergüenza de ser feo así que es torvo y fiero. Además huele a vino y tiene el malus de la resaca y es cojo... falla la tirada claramente. Más que nunca, parece un mendigo. Un niño le va a empujar y va a quedar en el suelo... al final tendrá que salvar la situación el colega de Carlos

Notas de juego

Cargando editor
02/05/2016, 11:32
Bastián el bruto

 Acercándome a Don Carlos para ejercer lo mejor posible mi labor como guardaespaldas le susurro:

 -Maese Don Carlos  manténgase vuestra merced cerca de Ataulfo y de mi, pues esta gente está dispuesta a todo. Parece ser que han sido víctima de algún tipo de advertencia. Quizá esta pobre gente no está al día con sus impuestos o donativos para con su señor. No debemos bajar la guardia.

 Me coloco de forma estratégica intentando proteger el flanco izquierdo de Don Carlos y preparado para empuñar mi hacha si hiciera falta. Miro rápidamente de un lado a otro con los ojos bien abiertos por si alguno de aquellos perros apaleados se acercara de forma hostil.