Partida Rol por web

-¡Mierda, se jodió! grita Carlos y habilmente coge una papelera cercana a la puerta y se la lanza al vigilante para desorientarle y que a Yola le de tiempo a cruzar los pocos pasos que le separan de este.

Sin embargo, pisa un charco inoportuno de una sustancia altamente resbaladiza y se resbala, cayendo de culo y deslizandose por el suelo hasta empotrarse contra la mesa de los monitores. La papelera vuela esparciendo su contenido por los aires y ensuciandolo todo.

- Somos... los de la basura!

Grita sin saber muy bien lo que dice, inspirada por toda la mierda que su primo esparce por la habitación en cuestión de segundos. Se abalanza contra el segurata intentando evitar que desenfunde el arma. De momento no quiere disparar con la suya, consciente de que el ruido podría ser escuchado a distancia.

-¿Ein? ¿Pero no veniais a reponer?

La poca iniciativa del vigilante le hace dudar en unas fracciones de segundo que hacen que su mano se detenga en el arma sin desenfundarla mientras procesa lo que acaba de oir.

Ahí la tienes... al menos en esto parece que no he fallado...

Roberto da gracias mentalmente por quer al final la cosa haya salido bien y la misión no haya acabado antes de empezar

Yola reacciona rapidamente y detiene la mano del vigilante cuando este está sacando el arma, ambos se quedan a la par mirándose a los ojos sin reaccionar, pero el vigilante forcejea. Ya se ha dado cuenta de que algo no va bien.

Carlos, se pone de pie. Apoyándose en la mesa donde están situados los monitores de vigilancia sacude la cabeza intentando orientarse y en ese momento ve el forcejeo que matienen Yola y el vigilante.

Roberto, alertado por el estruendo creado por la aparatosa caida de Carlos, asoma su cabecita para ver lo que ocurre y respira ligeramente aliviado al ver que sus dos compañeros empiezan a tomar el control de la situación.

-Pero ¿Que os pensáis que estáis haciendo?

Dinio intenta darle un empujón a Yola para quitársela de encima y que esta le suelte la mano para así poder sacar la pistola, pero Yola le tiene fuertemente apresado, si bien intentar cualquier otra acción podría hacer que el vigilante consiga sacar su arma.

- Ahora vas a ver lo que estamos haciendo...

Haciendo acopio de fuerzas, lanza su rodilla contra los huevos del segurata. No hay nada más efectivo que eso para hacer que un hombre se ponga a tus pies.

Carlos recuperado de la caida y al ver la pelea que está teniendo su prima con el vigilante, acude raudo a ayudar a Yola lanzándose de cabeza a la pelea.

Aún estamos a tiempo de inmovilizarle y que nadie se entere de nada.

La rodilla de Yola apunta demasiado arriba e impacta en el estómago, haciendo que el vigilante resople soltando aire, pero sus duros abdominales le protegen de un daño mayor.

Intenta devolverle el golpe dándole una patada en la espinilla y Yola siente el agudo dolor de su pie golpeandole en la pierna.

Carlos se tira de cabeza contra el vigilante y por una vez su jugada sale bien. Sorprende a Yola y a Dinio en medio de la pelea y ambos se separan por culpa del empujón. El arma vuela por los aires y Carlos cae rodando al suelo hecho un ovillo con Dinio. Ambos se enzarzan en mordiscos, puñetazos y arañazos mientras ruedan por el suelo.

Roberto miraba la escena estupefacto Los hombres del emperador estan resistiendo, vamos a tener que usar a fuerza para contener el mal Pero cuando dio un paso para ir en ayuda de sus compañeros le entro el pánico
No puedes queedarte parado, será mejor que caminespero su cuerpo no podía avanzar

Distracción fatal, alguien se ha tirado un pedo y Yola se ha girado para ver quien ha sido, en el mismo momento en el que su primo tumbaba a Carlos con la embestida. Motivo por el que suelta el brazo de Dinio, pero gracias al empujón de Carlos, el arma sale volando y Dinio deja de estar armado.

- Coño, pero quién ha sido el cerdo? a quién se le ocurre...

Frunce el ceño desentendiéndose momentáneamente del combate, mosqueada por el ruido que sin duda ha escuchado. Echa un vistazo hacia atrás y fija su vista en Roberto. Probablemente ha debido ser él.

Carlos y Dinio siguen enzarzados en la pelea, hechos un ovillo en el suelo, mordiendose, pellizcandose, dándose patadas y puñetazos, etc. Cualquiera diria que disfrutan de la pelea.

-Maldito cabrón! Te voy a sacar las tripas a base de mordiscos!

Grita histericamente Carlos, pero al intentar morder al vigilante recibe un puñetazo en los morros que le hace decir algo así como:

-Ifjo ze futa!

Al mismo tiempo que escupe sangre en el suelo.