Partida Rol por web

Con el arma en alto registro toda la habitacion, con precaucion, los espacios en sombra, veo si hay puertas, y tras comprobar que es seguro miro a este estraño, que parece haber pasado por un exprimidor, y sin perder tiempo corto sus ataduras y le digo:

Somos un comando especial enviado aqui para sacarlos de este lio, venimos a ayudar, ¿Puede caminar? ¿Sostener un arma? ¿Donde estan sus compañeros?. Tenemos que sacaros de aqui lo antes posible y retirarnos.

Me alegra haber encontrado por fin al oficial británico, pero aún nos faltaba encontrar al resto de sus compañeros y las cosas no tenían pinta de mejorar:

Larkin, tenemos que trazar algún plan para poder salir de aquí una vez hayamos rescatado al resto del grupo. Está claro que al teniente le debe haber dado una embolia después del tiroteo, así que lo mejor es que hagamos las cosas a nuestra manera. Tengo explosivos en mi poder. Tal vez lo mejor sea crear una buena explosión que atraiga a buena parte de los soldados del pueblo para facilitaros las cosas.

Con esa idea se me ilumina el rostro:

Cojonudo, yo siempre he adorado la pirotecnia. Es una idea excelente, lo suyo seria acercarse al otro extremo del pueblo y hacer que alli algo salte por los aires, que seguro que hay cosas que se inflaman por ese lado, ¿No?. Todos miran para la izquierda, y nosotros se la jugamos por la derecha. ¿Te encargas de preparar algo alli?. Nosotros a ver si conseguimos que el tio este nos diga donde esta el resto,  que supongo que lo sabra..

Carrick aparece en la habitación algo sobresaltado. Al ver al oficial no puede evitar sonreir. Estaban un paso más cerca de volver a casa.

- Muchachos, no quiero ser el agorero del grupo, pero mucho me temo que si no nos damos prisa descubrirán nuestra vía de escape, y tal como están las cosas es la única que tenemos ... - por el momento.

Otra solución sería liarse a tiros desde la ventana, pero delatar su posición sería una idiotez, estando encerrados en aquella casa.

- Me ha parecido ver movimiento en el sector cercano al embarcadero. Necesitamos saber donde están el resto de los hombres, una vez que los tengamos fuera, vosotros los llevaréis hasta el bote mientras yo os sigo a una distancia prudencial dando fuego de cobertura en vuestra retaguardia. La idea de Larkin es cojonuda, cuanto más los alejemos del sector este mejor.

Carrick se queda dubitativo unos segundos, echa en falta algo cuando habla de cubrirles.

- ¿Sabéis dónde coño está Angus?

¡Joder! ¡Qué presión! Estaba tan tenso que podrían rayarle con un cristal y ni siquiera se enteraría.

Un escalofrio me recorre la espina, ¿Y este? ¿Donde se habra metido? Dios...

Joderrrrr, pues nose, dormido no creo que se haya podido quedar con el jaleo que por aqui se ha montado... asi que no se, pero bueno, ahora tiempo para buscarlo no tenemos, por lo que ajustemonos a este nuevo plan, con la idea de Caparso de distraccion y la de Carrick de evacuacion, sera lo mejor.

Ayudando a ponerse en pie al soldado que estaba retenido le comento para que se haga una idea de la situacion:

Disculpe, la sitacion es bastante chunga, si quiere vivir, mas vale que nos ayude a sacarlos a todos de aquí, porque a casa solo se va en una direccion, y es la que todos tenemos que seguir, asi que... ¿Sabe donde estan el resto de los suyos? ¿Puede decirnos algo de ello?

El oficial, que había asistido en silencio a vuestra conversación, responde finalmente:

-Sí, el resto de mis hombres se encuentra en una de las casas del pueblo. Frente al puesto de carretera nazi. Eso está al oeste, en la otra salida. Pero he oído algo. Creo que hay una división entera acuartelada tras las montañas y si se enteran de que aquí ha pasado algo podrían venir a investigar.

Las malas noticias del oficial no parecen ser tan malas:

Ahora mismo tienen cortadas las comunicaciones, yo mismo me encargué de ellas, así que la única forma que tienen de hacer llegar un mensaje es enviar a alguien hacia ese acuartelamiento. Esto les llevará tiempo, dependiendo de la distancia, así que ese es el tiempo exacto que tenemos para salir de este agujero. Creo que yo me encargaré de dinamitar algo por la zona sur, así consigueremos que ese puesto de carretera al oeste queda algo más desprotegido, y a la vez evitaremos que nuestra huída en bote no se ve en peligro por la afluencia de tropas en esa zona. Señores, suerte. La necesitaremos.

Intentaré salir de la casa con el cuchillo en la mano, buscando las sombras del pueblo para conseguir llegar a la zona sur en busca de un buen objetivo que volar en pedazos.

Con semblante serio comento a los compañeros:

Hum, esta informacion no parece ser muy buena... ¿A cuanto pueden estar esos refueros en coche? ¿Minutos? ¿Horas? La topografia de la zona es muy incierta, no conocemos las carreteras, las vias... Si provocamos una explosion demasiado pronto se podria liar mucho, es mas, ya podrian estar viniendo refuerzos al no tener contacto de ningun tipo, ni telefonico ni de radio... Dios...

Tomando 1 minuto para pensar, y reflexionando sobre lo que se podria hacer, indico:

Caparso, ¿Podrias montar un dispositivo trampa? Me refiero algo asi como poner un Kubelwagen cruzado en la entrada del pueblo, con un dispositivo para que salte por los aires si se mueve, y cargas a unos cuantos metros detras, para que salten en pedazos los vehiculos que estacionen antes de apartar el vehiculo. ¿Sabes a que me refiero?, Alguien te podria ayudar en la tarea, podria ser costosa, Haz magia de esa que sabes, jeje.

Dirigiendome al oficial le indico:

Usted nos da ahora todos los datos que conozca sobre donde estan sus hombres, cuantos son, en que estado, cuantos hombres los custodian y demas informacion, a toda ostia, pero sin olvidar detalle, osea, al estilo follame despacio que tengo prisa. ¿Va?. Despues se dirige a este punto, donde tenemos un compañero emboscado y espera alli junto a el, que no es plan de que pierda el pellejo ahora, justo recien liverado. ¿Ok?

Mirando al resto del grupo señalo:

Podriamos coordinar una accion conjunta, vamos a sacarlos de alli lo antes posible, establecemos una hora de replegada, para que el equipo de demoliciones tenga una hora referente tras la que abrirse, cumplimos y volvemos a casa. ¿Alguna sugerencia? ¿Que les parce? ¿Como lo ven?

Una división ¿Eh? manda huevos... Piensa Márquez al oir la información del oficial inglés.

La idea de Larkin le parecía buena, explosivos-trampa como por ejemplo un kubelwagen estaría bien para cuando llegasen los nazis. Y Márquez rezaba para que no tuvieran blindados.

La buena noticia era que controlaban la radio, podrían llamar a los aliados para que los sacaran de allí si la cosa se torcía. Pero antes tocaba liberar a los demás británicos.

- Bien, deberíamos de ir hacia la casa en cuestión. Allí veremos como liberar a sus hombres, oficial.- Comenta con el ceño fruncido, el español no tragaba a los británicos desde que ellos y las demás potencias democráticas dejaran tirada a la II República durante la Guerra Civil.

Carrick asiente. Las palabras del oficial no parecen ser muy alentadoras, pero nadie dijo que fuera a ser fácil. De pronto cayó en la cuenta.

- Si tienen las comunicaciones cortadas, es probable que ya hayan mandado a alguien para asegurar. Hay que ser rápidos chicos, vamos.

Coge el rifle y el resto de aperos, por si acaso coge de los dos centinelas que custodiaban al oficial sus armas reglamentarias, quien sabe que munición les hará falta ahí fuera.

Carrick baja las escaleras y se dispone a asegurar una salida libre, ya sea por la puerta principal o alguna de las ventanas.

-El plan de Larkin es bueno. Caparso bloqueará la entrada oeste del pueblo mientras nosotros liberamos a los prisioneros. Carrick, creo que le dije que se mantuviera en el exterior para que nos diera cobertura de francotirador pero veo que no me ha hecho caso. Ha dejado a Angus solo ahí fuera. Espero que la próxima vez cumpla las órdenes que le doy.

El comando abandonó el edificio del cuartel y salió a la calle en compañía del oficial británico. La noche estaba tranquila y a Angus no se le veía por ninguna parte. Tal y como Carrick había dicho, en las calles oscuras que llevaban al embarcadero habían movimiento. Un soldado alemán subía por la calle semiagachado y camuflándose entre los portales.

Siguiendo las órdenes del teniente, me separo de mis compañeros en busca de un vehículo cerca de la entrada oeste del pueblo, con el fin de preparar una buena trampa explosiva que evite la entrada de refuerzos al pueblo, o al menos que consigue retardar dicha ayuda. Intentaré mantenerme siempre oculto hasta llegar a la zona en cuestión, con mi cuchillo preparado para usarlo en caso de emergencia. La falta de luz y el corte de las comunicaciones nos habían preparado una situación propicia para la maniobra, pero la cagada en la operación al delatar nuestra presencia en el pueblo me hacía pensar que las cosas aún no se habían puestos duras del todo: lo peor estaba por llegar.

Carrick se arrodilla y empuña el rifle. Coloca su ojo frente a la mira de precisión y busca la sombra del alemán moviéndose entre los portales. Luego susurra.

- Oficial, usted dirá si quiere ir limpiando el camino.

Coloca el dedo sobre el gatillo y espera la orden, siguiendo a la figura entre las sombras de la calle. Itentaba adivinar su uniforma, su casco, cualquier detalle que pudiera identificarle como un soldado enemigo. No quería que por un despiste, tuvieran que llevar una bandera doblada al día siguiente a la familia de Angus.

Mantiene la respiración. Hombre y rifle son uno ahora.

Mientras Caparso se encarga de la sorpresita, y Carric del aleman que anda a saltos por el pueblo, el resto del equipo vamos a liberar a los hombres que quedan, ahora que sabemos donde estan. Mirando a los hombres del comando les digo:

Seria conveniente echar un ojo por las ventanas y asi, para ver si hay alemanes en el interior.

-Quítele de enmedio, Carrick -ordena fríamente el oficial.

Carrick espera tan solo un par de segundos en lo que adivina la figura del soldado entre las sombras. Mantiene la respiración de nuevo. Su cuerpo es inmóvil, inerte, con nervios de acero. Su percepción de profundida es tan precisa como letal. Apunta directo a la garganta para que el cerdo no tenga tiempo ni de ahogar un grito antes de caer a la nieve.

Su dedo se desliza suavemente por el gatillo, se aferra a él. El ruido del disparo puede delatar su posición, pero no eliminar a ese soldado puede ser mucho peor.

un segundo más y... blam!

Carrick dispara y el aleman es alcanzado en el abdomen. El soldado cae al suelo desplomado pero cuando el francotirador se está felicitando a si mismo ve como el cuerpo empieza a moverse de nuevo, arrastrándose en busca de refugio.

-Larkin, adelántese con Pepe y el oficial y busque a esos rehenes. Caparso ya se está ocupando de la sorpresa para nuestros invitados. Carrick, ¿le ha matado? -el oficial cargó su subfusil y se dispuso a seguir a los hombres- ¡Que alguien encuentre a ese idiota de Angus!

- Venga, cumplamos con las ordenes.- dice Márquez a sus compañeros. El español se pone en camino, pistola en mano y sentidos alerta.

Hay que tener mucho ojo, puede que haya más alemanes por aquí. Toda la movida que hemos montado ha debido de oírse bastante lejos.