Partida Rol por web

Con un movimiento de mano indico que hay que salir del ascensor lo ideal seria atravsar el pasillo corriendo...

Una vez que las puertas están abiertas, me acerco a la puerta directamente. Mis sentidos me han asegurado que no hay nadie.. de momento. Pero eso es algo que rápidamente cambiará.

No tenemos que preocuparnos por cámaras que nos delaten. Quizás el ruido del ascensor al pararse, o el de las puertas al abrirse, hayan sido los causantes de que el enemigo no tarde en aparecer, pero de momento, no hay nadie.. o por lo menos eso aseguraría.

A una orden mental el Sandevistan entra en funcionamiento, y me preparo para atravesar corriendo el hall hasta un punto en el que esté a cubierto, y gane la visibilidad del acceso a las puertas de las escaleras.

Echo un vistazo a Melkor, que no muestra signos aparentes de fatiga tras el esfuerzo. - ¿Adelante? es el mensaje que mis ojos, tras mis gafas negras, le dicen

THUMMMPPPPPP!!

Samuel dispara el LG desde dentro del ascensor, sencillamente el estruendo dentro de la cabina es terrible. El proyectil ovalado de 40 milímetros rueda descontrolado por el pavimento mientras vomita un denso humo negro.

El arreglador deja caer el lanzagranadas en el suelo del ascensor y saca una de las berettas.

Venga coño, ¿a que estamos esperando?

Bruce en vista de que la sutiliza ya no es posible...sale corriendo de la cabina en direccion al mostrador de recepcion donde estaban los de seguridad y desde donde se puede parapetar con su fusil para contener a los que vengan

Samuel no se anda con delicadezas y dispara una bomba de humo al hall. Ésta impacta contra una de las paredes laterales y comienza a escupir un denso humo negro que dificultará la visión y la respiración en unos segundos.

Bruce es el primero en salir del ascensor, atravesando temerariamente el hall en busca de cobertura. Su instinto le guía de momento por el buen camino.

El resto de momento decide la dirección a tomar. Algo les dice que el enemigo está al caer... El ruido de pisadas subiendo por las escaleras es claro y diáfano.

Hay que hacer frente al fuego enemigo inminente.

Samuel y Bruce están ya camino del pasillo de cristal. Los quejidos de las escaleras dejan claro que queda poco tiempo antes de que tengamos compañía, compañía no pedida, por cierto. Gente non grata, como se solía decir antaño.

Mientras empiezo a moverme le hago un gesto inequívoco a mi amigo sobre la puerta por la que vendrán los enemigos. Él sabe a qué me refiero. Seguro que él está pensando lo mismo. Lo que no quiero es que pierda tiempo. Hay que salir por pies lo antes posible.

- Noonan, ¿qué visión tienes desde tu posición? susurro al comunicador esperando poder tener los refuerzos ansiados.

Samuel sale corriendo detrás de Bruce, cojeando a trompicones entre los primeros zarcillos de humo. Pese al editor de dolor, siente en la pierna un pinchazo a cada paso.

Vaya día de perros...espero que tengamos vacaciones pagadas en la puñetera agencia.

Como única respuesta a la pregunta de Kevin asiento con la cabeza, las palabras sobran. Avanzo junto a los demás, tras Bruce mientras hecho mano a la mochila que llevo al hombro.
C-4, el Lx... tal vez el PEM haya fundido los detonadores, hace falta algo más rudimentario...
Uno de los explosivos que he tenido preparados para usar durante todo el asalto aparece en mi mano. Una anticuada, pesada y fea pero efectiva al fin y al cabo mina anti-persona. Unos de los inventos más sucios de la guerra. Pero por eso lo llaman guerra.

Avanzo a toda prisa atento a la información que pueda dar Noonan y preparado para deslizar la mina hacia la entrada por donde llegará la despedida.

De reojo veo aparecer en la mano de Melkor la silueta de esa "amiga traicionera" de la que tantas veces le he oído hablar. - Espero que se comporte como toca pienso mientras concentro todas mis fuerzas en las piernas, luchando por mantener la suficiente serenidad en mi huida como para que no se me caiga el subfusil de mis manos.

Nuestro objetivo será llegar al puesto de vigilancia donde el primer obstáculo de nuestra incursión surgió.

- Espero que el humo y la mina haga que el enemigo pierda el tiempo suficiente como para que podamos huir sin problemas digo para mí intentando concienciarme de que todo irá bien...

Joder, qué coño ha pasado!!! Ya os daba por muertos!!! Se oían disparos desde dentro y el edificio seguía "conectado". Pensé que estábammos jodidos. Me alegra escucharos. Aquí fuera todo está en orden. Nadie ha entrado ni salido por la puerta principal, lo único es que...

BOOOOOOOOOM!

La comunicación con el jefe de operaciones cesa, no por problemas técnicos sino por el ruido ensordecedor de una bomba, una granada o un misil, a saber qué coño, lanzado desde el interior contra la puerta de la escalera, que salta en pedazos de sus goznes permitiendo el acceso al hall. La puerta metálica es lanzada hacia donde estais, emitiendo un chirrido y un golpe metálico cuando cae al suelo. Del dintel de la misma sale un humo blanco que ayuda a que, en combinación con la bomba de humo lanzada por Sammy, la isibilidad en la zona se dificulte.

Fallar un tiro puede implicar darle a un compañero.

Intento, pese a seguir muy atento a lo que sucede a mis espaldas y seguir corriendo como alma que lleva el diablo, escuchar lo que dice Noonan.

me parapeto tras el mostrador y me preparo a recibir a nuestros "amiguitos" con dosis de plomo...

La acción ha llegado y agudizo el oido, reteniendo en mi memoria la posición de mis compañeros e imaginandome el escenario que se ha convertido en campo de batalla.
Esforzándome por mantenerme cerca de Kevin, empuño el fusil de asalto.