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Degenesis I: En el Polvo.

Valle del Polvo: Norte.

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24/03/2018, 11:15
En el Polvo.

VALLE DEL POLVO, NORTE:

Notas de juego

- Escena Narrativa.

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30/03/2018, 02:43
A NADIE LE IMPORTA LA HORA.

VALLE DEL POLVO.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

PARTE NORTE DEL VALLE DEL POLVO.

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30/03/2018, 02:46
En el Polvo.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

El carromato os dejó muy cerca del punto de encuentro. El Famulante Cyrek hizo apretar el paso, y pronto los tres Spitalianos llegaban al lugar, perfectamente puntuales.

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30/03/2018, 02:48
Apocalípticos: Hugg el Quiebros.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Hugg el Quiebros llevó en su moto a Radek Skrabanec al punto de encuentro en el norte del Valle del Polvo donde debía encontrarse con los tres Spitalianos a quienes debía servir de guía hasta Espinazo, tan y como había ordenado la Grajo Raisha, su jefa y la de Hugg.

La moto se alejó rauda tan pronto Radek hubo tomado tierra. El Quiebros se fue sin siquiera despedirse. Hacía un día soledado, aunque un tanto frío. Radek esperaba no tener que esperar mucho.

Y entonces llegaron, justo a la hora acordada y en el punto de encuentro exacto. ¡Estos Spitalianos, siempre tan predecibles!

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30/03/2018, 02:52
Jueces: Juez de Ciudad Munch.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Tu superior inmediato en la jerarquía de los Jueces te había encomendado una misión: servir de escolta y protección a un equipo de intervención sanitaria del Spital. Al parecer había algo en el desolado Valle del Polvo que interesaba a los médicos. Suponías que tu presencia como Juez, aunque fuese del más ínfimo rango, le daba un carácter oficial a su misión en el Valle, fuera la que fuera.

Un día antes, una caravana de paso te había acercado al lugar. Estabas en la zona de encuentro con, ¿cómo se llamaban? La unidad de intervención sanitaria Epsilon-Omicron.

Hacía frío, pese al agradable sol de invierno. El lugar era árido y seco, como no se podía esperar otra cosa de un lugar llamado Valle del Polvo. No era de extrañar que la expansión del Protectorado hacia ese lugar no fuese en esos momentos una gran prioridad para los Jueces.

Había algo al norte, a escasos minutos andando. Tal vez un grupo de personas. ¿Serían ellos?

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30/03/2018, 11:11
Urraca Vargas.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

El viaje había sido absolutamente insípido, marcado por el silencio y una aparente desconfianza mutua. El famulante Cyrek no había creído quizá necesario estimular al grupo para un estrechamiento de las relaciones, quizá no sabía cómo hacerlo o quizá, simple y llanamente, le daba igual a sabiendas de que aquella misión bien podía suponer la muerte de todos y cada uno de ellos. 

Cuando los tres famulantes dejaron atrás el carromato y llegaron al punto de encuentro, Urraca miró en derredor. El sol estaba en lo alto, señalando el mediodía. Al margen de ello, todo parecía marcado por la normalidad y el silencio, si tal cosa era posible en su mundo. De forma mecánica, Urraca verificó el estado de su máscara y la perfecta estanqueidad de su traje, al tiempo que sus ojos oscilaban de un lado a otro, abarcando el máximo de espectro posiblemente su horizonte. Casi de espaldas a sus compañeros, los tres formaban una especie de triángulo destinado a no dejarse sorprender. 

-Famulante Gerik. ¿Qué pasó en el Espinazo? ¿Realmente crees que los devoradores han regresado y que no fueron eliminados tal y como afirman los Jueces?

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31/03/2018, 10:29
Famulante Gerik.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Gerik caminaba en cabeza, observando el entorno que ya le era familiar. Había viajado en diversas ocasiones por el Valle del Polvo y lo más adecuado era que él abriera la marcha.

El viaje había sido tranquilo. Sus compañeros de viaje, poco comunicativos. Gerik, lacónico por naturaleza, tal vez lo prefería así. Eran abundantes las misiones en las que la soledad había sido su principal compañera. Debido a su naturaleza Polen, al haber pertenecido a una tribu bárbara y al retener algunos de los conocimientos de su tribu, útiles en cierta medida para el rastreo o la patrulla, muchas viajes los tenía que hacer en solitario habiéndose acostumbrado a ello. Y tener ahora con él a varias personas que no interactuaban... pues era algo parecido. Hasta que la mujer se adelantó y rompió con esa dinámica, haciéndole algunas preguntas.

El hombretón la miró unos instantes antes de contestar. No es que le importara mantener conversaciones, lo que sucedía es que dada su naturaleza poco habladora era exigente en las mismas: a no ser que no tengas nada inteligente o interesante que decir, mejor no abras la boca. Ese era uno de sus lemas. Tras analizar unos instantes las preguntas de la famulante Urraca, el hombre asintió, como dando por conforme que lo que inquiría su compañera merecía respuesta.

- Sobre el Espinazo no hay mucho que decir. Es una aldea que visito eventualmente en mi ruta. Allí la autoridad ronda entre lo endeble a inexistente y la figura de un spitaliano, si se ve reconocida su labor, puede generar algo parecido al respeto. Por ello un campesino me informó del suceso. Lo conozco y creo que fue totalmente sincero y su descripción muy clarificadora - explicó el polen -. Pensé que una imitación de los devoradores no tendría ningún sentido. Pensé en que, tal vez, podría ser algún superviviente nómada del exterminio de su clan. Sin embargo su avistamiento ha sido muy cercano al camino principal y el atacar a un bandido demuestran una excesiva seguridad. A mi ver solo posible si ese individuo sentía la confianza que solo aporta la seguridad. La seguridad de sentirse apoyado, probablemente por otros, a mi ver - expuso su razonamiento a la mujer -. Por tanto, famulante Vargas, si me preguntas si creo que era un devorador mi respuesta es sí, lo creo. Y si me preguntas si puede haber más mi respuesta sigue siendo afirmativa. Y si finalmente me hablas sobre la labor de los jueces... bueno, tal vez no fueron tan diligentes como ellos afirman - terminó encogiéndose de hombros.

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31/03/2018, 18:17
Alejandro de Burgos.
Sólo para el director

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.


Cuando uno se acerca a varios, vigilar es obligado. No ofende quien es capaz de actuar presto para defender su vida, o la de otros inocentes. No tenga sin embargo el cuidado el exceso de atacar a quien no ha atacado, o quien no porta visiblemente las marcas de una vida de infamia o corrupta.

Con esa máxima de los jueces en la cabeza, Alejandro se tomó su tiempo, aprovechando que el grupo aún estaba lejos. Con deliberada lentitud ajustó su capa de piel, por si llegado el peor de los casos, la misma podía evitarla alguna herida. Luego comprobó que la pistola de chispa estaba preparada, ya que él era uno solo, y el grupo era de varios, y desenvainó su hachuela, pero manteniéndola por ahora abajo, y sin apuntar con ella al grupo que, al norte, se acercaba hacia él. Hecho esto empezó a caminar hacia ellos, lentamente, sin apresurarse, atento a saber cuantos eran.

Y más importante aún, quienes eran.

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31/03/2018, 21:08
Famulante Cyrek.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

El silencio solamente fue interrumpido por el sonido constante de la carreta al moverse. Nuestro grupo no es lo más comunicativo, en parte porque todos parecemos ser muy distintos, en parte porque a nadie parece importarle realmente. Me habría gustado hablar un poco, me habría gustado que nos conociésemos más considerando que compartiremos una importante misión, pero no supe realmente como hacerlo. El don de lenguas nunca ha sido lo mío y prefería perder la oportunidad que aprovecharla.

Me concentré repasando mis notas médicas y el manual para así ignorar la incomodidad de viajar juntos pero no hablarnos. Espero que eso cambie pronto, aunque no tengo ni idea de como conseguirlo. El Famulante Gerik parece ser poco más que un rudo bárbaro con el que no creo tener muchos temas en común. La Famulante Urraca parece una mujer muy segura de sí misma, es intimidante. Pero planeo hacer, en algún momento.

Nos bajamos de la carreta y seguimos nuestro camino a pie tan en silencio como lo veníamos haciendo. Entonces la Famulante Urraca hace una serie de preguntas a las que el Famulante Gerik contesta de forma detallada. Respondo lo que pienso acerca de la situación:

 - "Sin considerar lo difícil que es purgar completamente un tribu, cuando cualquier número de sus miembros pueden haberse ocultado fuera del alcance de los ejecutores, siempre he considerado que los Jueces se especializan en mantener el orden en las ciudades, pero las purgas en campo abierto no parece ser la labor que mejor manejan. Lo averiguaremos a su debido tiempo."

Continúo caminando mientras vigilo los alrededores. Tengo la impresión de que el juez debería estar por acá, de que deberíamos encontrarlo en cualquier momento. El Valle del Polvo es un lugar en el que hay tener mucho, mucho cuidado, por lo que mantengo los ojos bien abiertos hasta que encontremos lo que buscamos y que ninguna otra cosa nos encuentre a nosotros.

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31/03/2018, 23:37
Radek Skrabanec.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Radek permaneció en un lugar a la sombra... y en un lugar discreto, todo en uno. Todo en uno era su palabra, si podía: permanecer fuera del viento helado y del demasiado sol también, perder poca humedad, estar fuera de la vista de los extraños. Se fijó en qué tipo de gente parecía. Tenía a mano su ballesta.

Al Quiebros le había dado lo que merecía: nada. Hacía lo que le habían mandado, como a él. Permaneció sensible al estado de ánimo del motorista, pero se quedó ahí. Una vez se había perdido subido en su moto, le alejó de sus pensamientos.

Se preguntaba por dónde cruzarían hasta el Espinazo. ¿Irían al oeste o al este del pantano? El lago le atraía a veces pero... ¿Cómo sería esta gente?

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04/04/2018, 00:43
Urraca Vargas.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Urraca escuchó cuanto Gerik tenía que decir. Un sutil y fugaz enarcamiento de su depilada ceja derecha parecía que iba a ser cuanto tenía que dar como respuesta a las palabras de este. Las castañas pupilas de sus enormes ojos sombreados por el kohl se detuvieron en los ojos de este y tras un instante de silencio, terminó por hablar.

-O la desesperación. No tengo demasiada fe en el instinto -declaró- y sí en la lógica y racionalidad de los hechos. Cuanto acabas de relatar tanto vale para lo que afirmas como para quien quisiera decir que era un simple superviviente de ese clan que en la desesperación por sobrevivir hubiera forzado sus límites y atacado in extremis con un resultado favorable para él. No obstante, no me corresponde a mí juzgar -su mirada se desvió hacia el horizonte-. Ni decidir. Y no hay mejor forma de erradicar una epidemia que prevenirla ante los primeros síntomas de enfermedad.

Repentinamente, todo su cuerpo pareció tensarse. Alzó una mano para señalar algo.

-¿Lo veis? ¿En la sombra, un hombre armado con una ballesta lanza arpones? -una ráfaga de viento atrajo momentáneamente su atención. Algo parecía moverse más allá, pero no terminaba de apreciarlo. Se alzó las lentes, en un intento de percibir lo que se le había antojado una silueta. Craso error, pues la tierra en suspensión la cegó haciéndola llorar.

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04/04/2018, 21:40
Famulante Gerik.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Ante la afirmación de la mujer el polen se encogió de hombros.

Academicista, pensó sonriendo bajo la máscara, encasillándola. La mayoría de spitalianos lo eran y por ello Gerik resultaba un bicho raro. A él le gustaba pensar que era capaz de integrar lo mejor de ambos aspectos en su haber: la intuición bárbara y el conocimiento spitaliano.

Divisó una figura detrás de la densa nube de polvo, a la par que Urraca lo señalaba y confirmaba que no se lo había figurado. Después escuchó una maldición por parte de la mujer y cómo esta se encogía y se rascaba los ojos.

Por el Spital ¿A quien se le ocurre quitarse las lentes en este momento?, se preguntó incrédulo. Negó con la cabeza y se acercó con prudencia hacia la silueta, agarrando con fuerza su Desplegador. A pocos metros pudo ver claramente su ballesta lanzarpones y su sobreveste de explorador. Lo examinó de arriba a abajo, pero no dijo palabra pues no le correspondía hacerlo. Para presentaciones e intercambio de información había dos personas por encima de él y esperaba que así siguiese, de lo contrario significarían muchas bajas.

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04/04/2018, 23:40
En el Polvo.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Te vas acercando y ves que son dos hombres y una mujer. Los tres con Trajes Espitalianos y Máscara de Gas, aunque la mujer ha levantado sus lentes, mala idea con todo este polvo y tierra. Los tres parecen llevar Desplegadores con Molusco en las manos y Rifles Fungicidas a la espalda.

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05/04/2018, 00:38
Famulante Cyrek.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: ¿A QUIÉN LE IMPORTA? PARECE MEDIODÍA.

ALGÚN LUGAR DEL DEMIURGO A UN DÍA AL SUR DEL LÍMITE DEL PROTECTORADO, BORCA OCCIDENTAL.

Mientras mis compañeros hablan entre ellos (más bien Urraca habla mientras Gerik solo pone caras), veo aquel hombre con una gran ballesta de arpones. Es un arma típica de los Apocalípticos y eso no me gusta mucho. Aparte del hecho de que me molesta un poco el que nuestro superior no se haya tomado la molestia de decirnos que nuestro guía sería uno de ellos, los Apocalípticos de por sí me desagradan y tener que compartir con uno de ellos no es nada agradable.

"Si mi molusco reacciona, lo mataré apenas termine su trabajo."

Gerik se acerca a él y lo sigo. Veo que mi compañero no pronuncia palabra, por lo que probablemente espera que yo tome la palabra. El "guía" nos ha visto claramente, por lo que me adelanto y hablo en nombre de los tres:

 - "Saludos. ¿Estás aquí por nosotros? Si es así, dime tu labor, por favor."

No pronuncio más palabras que esa pues, en caso de que mis suposiciones no sean ciertas, no quiero revelar ninguna información adicional que pueda poner en peligro nuestra misión. Es mi primera vez en una labor como esta y no quiero cagarla desde el inicio.

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05/04/2018, 07:58
Degenesis.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: MEDIODÍA.

​Los Spitalianos ya han determinado que hay cierto nivel de esporas ambiental en el Polvo, aunque es un nivel bajo. Es posible que haya algún pequeño campo de esporas en alguna parte del territorio, y que el aire arrastre junto con el polvo una minúscula cantidad.

Los Moluscos, sin embargo, no reaccionan en presencia del joven Apocalíptico. Está limpio, no es un Quemado.

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05/04/2018, 21:57
Radek Skrabanec.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: MEDIODÍA.

Radek observaba con placidez aparente. Sus pupilas tremularon un poco en un rápido mirar a la tipa y al barbudo. Se habían parado al sol, donde los destellos de cualquier metal que llevaran encima podían revelar su presencia en kilómetros a la redonda, y tenían muchos aparatitos que creaban sutiles dependencias: debilidad, en medio de la fuerza. Esas lentes, esas mascarillas. Radek estaba masticando algo tranquilo. Siempre parecía estar masticando algo.

La ballesta estaba preparada para disparar, frente al hombrecillo. La sostenía con mano lánguida, pero no estaba apuntando a los splilitanos.

La mujer y el barbudo habían mirado en la misma dirección, y sus gestos inconscientes revelaron al pequeño guía dónde estaba el quinto invitado no deseado. No podía ser un animal al acecho... No representaba un peligro inminente, al menos, pues sus gestos no traslucieron excesiva alarma.

Radek no se volvió a mirar, desde luego. Lo que fuera que tenía fuera del campo de visión no sabía que él sabía que estaba ahí. Se limitó a añadir el término a la ecuación que se hacía sobre cómo estaban las cosas.

Saludos. ¿Cuántos sois en tu partida? Esperaba que el espilitano que se había dirigido a él supiera contar. Pensaba que estaba en blanco sobre el quinto no invitado. Debía hacer algo de tiempo, antes de hacer saltar la liebre. Lanzó una miradita a los otros dos, alzando una ceja y señalando luego con el movimiento de los ojos enrojecidos por el polvo hacia el lugar donde debía estar el quinto.

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06/04/2018, 05:17
Famulante Cyrek.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: MEDIODÍA.

El hombre me hace una pregunta sin contestar a la mía. Tuerzo el gesto en signo de molestia cuando habla pero, al escuchar lo que dice y mirar en la dirección que él lo hace, entiendo de inmediato el motivo de que su duda sea más importante que la mía en primera instancia. Un hombre se acerca desde esa dirección, un hombre que a juzgar por su aspecto, es el juez que enviarían a acompañarnos también.

Vuelvo a mirar al apocalíptico y le respondo con voz seca:

 - "Cinco incluyéndote, si es que eres quien esperamos. ¿Cual es tu labor para con nosotros?"

Repito la pregunta al momento de afirmar con fuerza mi desplegador. No tendrá otra oportunidad de confirmar que es quien es. Mi actitud no es totalmente hostil, solo gracias a que el Molusco no ha reaccionado, pero un Spitaliano no necesita demostrarse hostil para cercenar un miembro gangrenoso o para quemar un lugar contaminado por la sepsis así que, con nosotros, nunca se sabe.

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06/04/2018, 13:44
Alejandro de Burgos.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: MEDIODÍA.


A pesar que me enorgullecía de mi resistencia, estaba poco acostumbrado, aún, a esta tierra. Por dentro no podía dejar de maldecir mi estupidez: esos puñeteros bichos no sólo sabían a rayos, además le habían causado tal extrema debilidad que había llegado a temer sufrir algún tipo de envenamiento, con lo que había tenido que forzarse el vómito, lo que le había causado una sensación de desagradable ingravidez y malestar.

El maldito polvo le golpeaba los ojos y la boca, y aunque era cierto que era soportable (no necesitaba adminículos ni trajes para soportarlo, aunque debía recordar, para la próxima salida, agenciarse al menos uno de esos pañuelos para la boca y algo que protegiera un poco sus ojos, quizás, un sombrero), no dejaba de ser molesto.

Por tanto sólo era capaz de percibir sombras. Sombras spitalianas, afortunadamente. Probablemente sus compañeros de viaje. Y una quinta persona con la que los dos varones conversaban.

- Saludos. Soy el juez enviado a apoyarlos- dijo con parquedad, deteniéndose junto al grupo tras avanzar lentamente hasta ellos, volviendo a enfundar su hachuela al comprobar que no eran enemigos.

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06/04/2018, 15:48
Radek Skrabanec.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: MEDIODÍA.

Asintió. Soy vuestro guía.

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06/04/2018, 16:51
Urraca Vargas.

VALLE DEL POLVO, PARTE NORTE.

AÑO: 2595.

MES: ENERO.

DÍA: FINALES DE MES.

HORA: MEDIODÍA.

Urraca se secó los ojos, enfadada consigo misma por aquel error de novato y por la irracionalidad de su gesto. ¿Por qué se había quitado las lentes? ¿Qué era lo que su cerebro había interpretado al ver la lejana silueta entre el polvo y el viento? Algo en el fondo de su ser, en aquellas nieblas olvidadas a fuerza de lágrimas y voluntad, martilleaba constante, deseando despertar un recuerdo muerto y cubierto por las cenizas de un páramo arrasado a sal y fuego.

Cerró los ojos, controlando hasta la última célula de su ser para recuperar el control. Cuando los abrió, tanto Gerik como Cyrek ya se habían adelantado, obviando la potencial amenaza del hombrecillo armado, y acercándose a él. Debilidad, murmuró para sí, dejando que el viento arrastrara la palabra. Eran tres. Él uno. Aguardaban todos, pero eran sus dos compañeros los que se habían aproximado reconociendo tácita y calladamente su autoridad.

Permeneció en su sitio, sin moverse un ápice, aunque sus músculos parecieron bailar armónicos bajo su traje a la espera de lo inesperado. Y los oyó hablar. La boca de Urraca se torció bajo la máscara en un gesto de desagrado. Debilidad, volvió a murmurar y nuevamente el viento desvaneció la palabra en medio del polvo. Su líder cedía y transigía pese a la sequedad de su voz.

Y entonces, le vio llegar, la mano cubriendo los ojos para protegerlos inútilmente del polvo. Pero no necesitaba verlos para reconocer los rasgos de aquel rostro de otros tiempos, ni era necesario entender lo que decía para recordar los graves de aquella voz poco amiga de las palabras de más salvo en el lecho, bajo las sábanas. 

Su corazón se detuvo y un escalofrío recorrió su espina dorsal y el pasado, como un corrimiento de tierras, cayó sobre ella hiriéndola una vez más. Parpadeó. Dio un paso. Otro. Otro más. Mecánicamente, como si estuviera intoxicada, hasta situarse frente a él. El tiempo no había pasado inútilmente. Algunas canas apuntaban aquí y allá. Un ceño más pronunciado. Arrugas en las comisuras de los ojos marcadas por la suciedad del viaje. Unos labios más duros. Vio que les miraba pero no les distinguía sino como formas. Urraca tragó saliva para deshacer la congoja que amenazaba con estrangular su garganta.

Extendió la mano libre para limpiar sus legañas, en un gesto aséptico pero cargado de una devastadora intimidad.

-Alejandro -dijo y el viento se negó a llevarse su nombre, envolviéndolos a todos.