Todo comenzó con una noche estrellada como cualquier otra, era el año 1573 según los portugueses que inútilmente intentaban predicar la gloria de un dios muerto y crucificado. Las flores de los cerezos estaban en su cenit tal y como el Clan de los Asakura. Y al igual que los pétalos de los Sakura terminan por caer, esa noche el Clan de los Asakura cayó.
Todo lo que se veía a los alrededores de la Hon maru1 era caos y muerte. Las llamas lamían la madera que no había sido convenientemente tratada para resistir aquel inesperado ataque, mientras que volutas de humo negro y denso ascendían ocultando el rostro del amante de la diosa, Tsukiyomi2.
Numerosos combatientes, ashigarus armados con yaris en su inmensa mayoría, pugnaban por hacerse con el control del Ichijodani-jo, castillo del Clan Asakura. Eran del clan Oda, tal y como delataban los colores y el mon3 de los cinco pétalos que se dibujaba en los sashimono4 que aquellos malditos desgraciados portaban a sus espaldas. Apenas un puñado de valientes defendía el mon de las tres flores de cuatro pétalos que representaba a los Asakura. Resistían por honor y por lealtad al caído Asakura Yoshikage.
Sin embargo eso último no lo sabían todavía... Únicamente se sabía que había sido herido en el hombro por un perdigonazo disparado por algún tanegashima oculto en la oscuridad. Su armadura fue insuficiente para la velocidad de aquel arma importada y que no respetaba las tradiciones ni la historia del sol naciente. Fue retirado del campo de batalla por su hijo Asakura Hideyoshi a quién le escoltaron un heterogéneo y extraño grupo formado por Mitsuke, el monje personal de la familia; Yoshimitshu Asahuru, un extraño samurái con capacidad de permanecer calmado en la peor de las situaciones; y un par de soldados fieles conocidos como Takeshi y Yoshimi. Los que allí luchaban, debían dar tiempo a su señor para abandonar aquel mundo del que formaba parte, con honor.
Sólo entonces habría gloria en su muerte.
Los que allí se encontraban pugnando por la gloria, se encontraban ajenos a los pasos de un puñado de hombres que decidieron escurrirse de todo aquello. Salieron por la parte posterior de la Hon maru y avanzaron sigilosamente al amparo de la oscuridad y de la cacofonía que producía el enfrentamiento entre las dos facciones. Un golpe seco y desaparecieron tras un acceso secreto a un corredor que se proyectó en el momento de la construcción de aquella fortificación, una galería que conduciría directamente al exterior...
1 Área central del castillo donde suele vivir el Daimyo
2 La Luna, ese nombre es el dios de la Luna mientras que Amaterasu es el nombre que daban a la diosa del Sol.
3 Símbolo del clan
4 Bandera que llevaban los combatientes del Japón feudal para identificar el bando al que pertenecían.
Avanzaban a tientas en la oscuridad pues las paredes estaba húmedas al igual que el suelo. El hijo portaba en sus manos la cabeza del difunto para enterrarla en algún sitio a fin de evitar que la mancillasen convirtiéndola en un trofeo.
De vez en cuando se escuchaba como alguien mascullaba una maldición, otro rezongaba palabras incomprensibles aunque de cuando en cuando la palabra traición se manifestaba en las cabezas de los que allí estaban. Era algo inevitable, la ausencia de luz unida a la excitación que llevaban encima impedía centrarse en otra cosa que no fuesen los recientes acontecimientos que aún estaban frescos en su memoria buscando algo que explicase lo ocurrido. Algo que les diese una pista de cómo podían haber servido mejor a Asakura-dono.
Sin embargo no lo encontraron.
De hecho sus recuerdos comienzan con el sonido de la alarma. Para cuando se dieron cuenta de lo que sucedía, los Oda habían atravesado la San no maru y estaban en la Ni no maru. A la mayoría de los combatientes les pilló a medio pertrechar. Algo inexplicable aquel rápido avance a no ser que como ya hubiese pasado antes... Alguien rindiese el castillo a aquel tirano que quemó el monte Hiei.
Lucharon, resistieron, sin embargo no bastó y tuvieron que escoltar a Asakura-dono al interior de la torre.
El ambiente en el interior de aquel lugar contrastaba con los lujos que cubrían las paredes y los suelos, era de hecho opresivo y fúnebre como si la mano de un oni se enroscara en torno al cuello de los que se encontraban allí presentes. El suelo de ruiseñor protestaba cada vez que alguien cambiaba el peso entre sus pies. Sin embargo en aquel momento no había intrusos, sólo familia... Y vasallos.
-Hideyoshi... Has sido un buen hijo y por ello os pido disculpas por no ser buen padre- dijo Yoshikage-dono-. No cometas Seppuku y huye, que te acompañen los que están aquí. Debes luchar por la supervivencia de nuestro apellido, un apellido de Shoguns y Mikados... No dejes que muera con nosotros y recuerda a nuestros vasallos y aliados a quién deben lealtad. Cumple la orden del Shogun y derrota a Oda Nobunaga.
Entonces alguien del servicio trajo una copa de Sake sobre la cual se encontraba un papel de arroz y un tanto1.
-Ayúdame- Le pidió el padre aún con su armadura a su hijo. La herida que el señor del castillo tenía en el hombro manaba copiosamente y le dificultaba la tarea de abrirse el vientre.
Al otro lado, en la sala contigua, descansaban los cadáveres de las mujeres que se dieron muerte como verdaderas esposas de samuráis.
Un movimiento brusco de Asakura-dono congeló la faz del moribundo en una sonrisa celebrando poder morir bajo su propia mano antes que por la de un vulgar campesino que probablemente ni sabría a quién había herido. El hijo ayudó entonces al padre a desplazar el tanto que él portaba envuelto en papel de arroz abriendo una larga incisión por la que asomaron algunas de sus tripas.
Entonces el hijo se incorporó, no había mayor honor que ser en ese momento el kaishakunin2 de su padre. Practicó una reverencia sumamente respetuosa, desenvainó su katana, primero separándola la distancia de un pulgar para a continuación dejar que la tenue luz del lugar se reflejase en la vaina de su arma. La alzó y tras practicar una breve inspiración, el arma descendió como una centella.
1 Daga
2 El segundo que asiste al que comete harakiri / seppuku
La claridad provocada por la luz de la luna se distinguía en la lejanía. Estaban llegando al final de su huida y tal vez por el ansia o tal vez por distinguir mejor el lugar en el que se encontraban, apretaron el paso en los últimos palmos.
Se encontraban varios metros por debajo del castillo y alejados del fragor de la batalla. Sin embargo, no estaban solos. En el exterior se encontraban cuatro desgraciados que tal vez buscaban escabullirse del fragor de la batalla. O tal vez distinguirse buscando cabezas de desertores...
-¡Eh! -dijo uno de ellos al advertir movimiento en la oscuridad-. ¿Quién va?
Se había acabado el sigilo.
Motivo: INI joven samurái
Tirada: 1d20
Resultado: 2
Motivo: INI ashigaru 1
Tirada: 1d20
Resultado: 9
Motivo: INI ashigaru 2
Tirada: 1d20
Resultado: 1
Motivo: INI ashigaru 3
Tirada: 1d20
Resultado: 10
¡Ya está, esto empieza y con combate, no podría haber mejor comienzo!
Sería interesante utilizar el primer post (además de para responder) como forma de presentar a vuestro PJ y si hay algún tipo de relación entre los presentes. No hay problemas por ser todos desconocidos. Y con esto estaría todo el trasfondo hecho ;-)
Por cierto, intentad narrar en tercera persona, y sin usar negritas.
Ashigaru 1 y 3 armados con Yari
Ashigaru 2 con Arco
Joven samurái atacará con Katana
Si Yoshimitshu estaba enojado por lo sucedido no podía saberse. Era un samurai leal a su señor. Tan leal como el que más, por ello acataba todas las ordenes que recibía. Incluída aquella que había dado con su última voluntad a su hijo.
No cometas Seppuku y huye, que te acompañen los que están aquí. Debes luchar por la supervivencia de nuestro apellido, un apellido de Shoguns y Mikados... No dejes que muera con nosotros y recuerda a nuestros vasallos y aliados a quién deben lealtad. Cumple la orden del Shogun y derrota a Oda Nobunaga.
Recordaba esas palabras claramente, las recordaría mientras viviera. Y mientras lo hiciera el hijo de su señor se mantendría con vida. Lo juró por su honor. Igual que juró que Asakura Hideyoshi cumpliría la última voluntad de su padre.
Una vez más repasó cómo había podido pasar todo aquello. Acababa de llegar de una misión como mensajero del clan a la capital, no había tenido tiempo ni de quitarse la armadura ni asearse un poco. Y lamentaría por el resto de su vida no haber sido más perspicaz para ver las señales. Aunque, ¿quién podría haberlas visto siendo todo causado por un traidor? Más no estaba en la naturaleza de los Samurais buscar excusas ante lo sucedido. Había fallado, tendría que vivir para rectificar su error.
Al menos pudo pelear junto a él una última vez. Nunca olvidaría todo lo que le enseñó.
Y ahora escoltaba al hijo de su señor, su nuevo señor mejor dicho, ayudandolo a huir del castillo del clan Asakura. ¿Volverían alguna vez?
Sí. Se dijo. Lo harían.
Por pasillos secretos llegaron hasta una salida oculta, más no despejada. Había cuatro soldados vigilando por azar aquel lugar. Seguramente cuatro cobardes que no querían pelear por miedo a morir.
Daba igual. Cuatro o cuatrocientos. No iban a detener a Yoshimitsu ni a su espada.
Salió raudo como una flecha en dirección al arquero. Más la oscuridad le jugó una mala pasada al samurai, pues no pudo apuntar bien a la cabeza del ashigaru y la armadura de este detuvo su hoja.
Motivo: Ini
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+2)=17
Motivo: Ataque a arquero
Tirada: 1d20
Resultado: 3(+4)=7
Bueno. Pues aquí empezamos. :)
Como he sacado más que ellos he preferido actuar ya para ir adelantando.
Todo cambia, nada perdura... eso dicen
Esa noche funesta a Takeshi le tocó servir de guardia en una de las puertas traseras, por lo que cuando todo sucedió, estaba despierto y equipado, no como la mayoría de sus compañeros. Desde su posición, oía el fragor de la batalla, apretando con fuerza el Tanegashima que le había sido confiado, hasta que uno de los samurais del Clan le reclamó, ya que la fortaleza estaba siendo invadida hasta su corazón, y carecía de sentido guarnecer algo que ya carecía de sentido.
Apenas había tomado parte en la lucha, cuando se vio apartado de ella, y tuvo el extraordinario honor de estar cerca de uno de los más importantes acontecimientos que podría imaginar... el seppuku de su propio Señor, procurando que nada turbase la ceremonia que se estaba llevando a cabo.
Con lágrimas en los ojos, formó parte de la comitiva que buscaba salir del que fuese el castillo del Clan bajo cuya protección había prosperado la provincia durante generaciones. ¿Qué futuro deparará a estas tierras, ahora que nuestro Señor no está, que el castillo ha caído, y que el joven Hideyoshi-sama parte en busca de aliados para evitar este funesto destino? ... tales son las trbulaciones del fiel servidor, cuando, apenas dada la primera bocanada de aire en el exterior, se encuentran de bruces con una celada, o con una patrulla que el azar ha puesto justo en su camino.
Sin tiempo para nada más, Takeshi se prepara para la lucha; es consciente de que no debe usar el arma de fuego, porque atraería más tropas de los Oda, por lo que se lanza hacia adelante, dejando el Tanegashima en el suelo, y echando mano del Kama.
Motivo: Ini Takeshi
Tirada: 1d20
Resultado: 18
Motivo: Ataque Takeshi
Tirada: 1d20
Resultado: 10
Igual que Yoshimitshu san, tiro ini, supero la de los Oda, y anticipo el ataque [a ashigaru 3 , que no lo dije, que es el de más Ini]
Venganza!!
Mitsuke estaba cansado. ¿Cuanto hacía del principio del ataque? ¿Horas? ¿O solo unos minutos? Daba igual estaba cansado, tenía un golpe en la cabeza que no recordaba haberse dado y una extraña sensación de frío. Nada que su entranda voluntad no pudiera ignorar fácilmente.
En todo este tiempo al servicio del clan Asakura había sido tratado bien, y aunque no pudiera evitar pensar en su templo de vez en cuando Mitsuke consideraba ya la causa del clan como la suya.
Asakura-dono había sido un buen señor y Hideyoshi-sama había cumplido con honor una difícil tarea que podía hacer el bien Mitsuke si no dar cuanto tuviera, sus piernas, sus brazos su vida por ayudarles.
¿Qué había causado tanto dolor sangre y muerte?
Cuando aparecieron los atacantes, no pudo evitar sentir que la adrenalina generaba una pequeña fisura en su siempre templado espíritu. Alguien iba a pagar por ello.
Yoshimitshu-san paso rápido a su lado y Mitsuke se lanzó al ataque solo una fracción de segundo después.
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 6
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 20
Disculpad pero he marcado mal las tiradas como solo para el director
6/20 de iniciativa
20/20 ataque. +1 por la Habilidad de entrenado en Boken.
Atacó al joven Samurái
Máster: Corregido
Apenas podía pensar con claridad. Su mente era un mar de preguntas que hacían que su percepción se tornara borrosa. Aquel enemigo les había superado, había penetrado en su castillo y había humillado a su familia, a su clan. Los Asakura, uno de los principales opositores a los Oda, no eran sino polvo. Una gloria pasada. Otra victoria de Nobunaga. En su mente apenas había espacio para el cuerpo de su padre, que siempre intentó en vida conseguir que los Asakura fueran honorables, un verdadero ejemplo en todo Tenga. Lo intentó en vida, y lo intentó en el filo de la muerte.
Mientras caminaba para abandonar aquella matanza, a sus hombres, y a su hogas, observaba a quienes le acompañaban. Vio a Mitsuki, y sintió alivio. El que siempre fue uno de los hombres de confianza de su padre, sin lugar a dudas sería una buena guía en estos momentos. Kaishimi y Takeshi, dos de los ashigaru más leales que conocía, unos ejemplos para el resto de campesinos; serían recompensados, sin duda. Y el enigmático Yoshimitshu, uno de los bushi más calmados que había visto jamás. Apenas habían compartido momentos juntos, pero su padre y su propio sensei decían que su habilidad y mente no tenían parangón. No era un ejército, pero era todo lo que el clan Asakura iba a necesitar, estaba seguro.
Ya estaban a punto de abandonar aquellas tierras cuando fueron sorprendidos por cuatro hombres... Oda. La mirada de Hideyoshi se abrió y sus dientes se apretaron en una máscara brutal de resentimiento y odio.
-¡Asakura! -gritó al tiempo que desenvainaba su katana en dirección a aquel samurai. Sólo un cobarde estaría a las órdenes de Oda, y su destino era la muerte.
Motivo: INI
Tirada: 1d20
Resultado: 11(+2)=13
Motivo: Ataque al samurai
Tirada: 1d20
Resultado: 10
Ay, pobre Hideyoshi, está nervioso xD
Durante generaciones su familia había servido al Clan siendo siempre fiales a la disciplina marcada, mientras reflexionaba sobre ello, junto con Takeshi de guardia en una de las puertas traseras, y al igual que él, equipado y listo para la batalla. Por desgracia su señor había sido herido, y con el fragor de la lucha, había terminado en la misma sala donde se había realizado la ceremonia del harakiri. Cuando la misma había apenas terminado de forma realmente emotiva, un grupo de desgraciados apareció para tratar de quebrantar el honor del patriarca ya muerto, y eso era algo que no se podía permitir.
Armado con su Yari y sin apenas pensar en ello se lanzó a la batalla para derrotar al carroñero enemigo, fijando su vista en el arquero.
Motivo: iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 12
Motivo: ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 14
Motivo: daño?
Tirada: 1d6
Resultado: 1
No hubo tiempo más que para algunas maldiciones antes de que el acero hablase por los contendientes:
Takeshi dejó caer su mosquete y empuñando su kama que normalmente usaba para segar la cosecha corrió raudo a encararse con el enemigo que se encontraba más adelantado, un ashigaru armado con un yari que logró impedir que aquel ataque fuese a más.
Kaishimi optó por eliminar la ventaja del arquero logrando pincharle levemente con su yari. Quiso devolver el golpe con una kama, pues a esa distancia las flechas eran un estobo, pero tuvo que detenerse para esquivar el ataque de Yoshimitshu.
Finalmente el monje Mitsuke escoltó a Hideyoshi quién, tal vez por el ardor de la juventud, se había encarado obstinadamente con el joven samurái que parecía ser el líder de aquel grupo. No tuvo suerte en su ataque, pero afortunadamente un buen golpe con el Boken provocó un sonido de huesos rotos e impidió que la cosa fuese a más. Salvar la vida a su señor hizo que bajase la guardia, momento que aprovechó el último ashigaru, en quién nadie parecía haberse percatado, para pinchar al monje. Afortunadamente aquello quedó en un rasguño.
Parecía que el destino de los Asakura estaba por extinguirse como la débil luz que titila antes de consumirse. Sin embargo aún parecían contar con el apoyo de Amaterasu...
Motivo: ATA ashi3
Tirada: 1d20
Resultado: 13
Motivo: ATA ashi1
Tirada: 1d20
Resultado: 17
Motivo: ATA ashi2
Tirada: 1d20
Resultado: 12
Motivo: ATA samu
Tirada: 1d20
Resultado: 2
Motivo: Yari1
Tirada: 1d6
Resultado: 1
Takeshi
Yoshimitsu
Hideyoshi
Kaishimi
Mitsuke / Ashigaru con Yari 3
Ashigaru con Yari 1
Ashigaru con arco 2
Joven samurái
Quedáis encarados así:
Ashigaru 3 - Takeshi
Yoshimitsu - Arquero - Kaishimi
Hideyoshi - Samurai - Mitsuke - Ashigaru 1
Un último comentario, hice a los cortesanos con pocos PV porque normalmente suelen estar en las grandes batallas detrás, dirigiendo y son más de intrigar que de pelear. Lo comento porque lo tenga en cuenta a la hora de pelear porque podría morir de un único golpe...
Si os alejáis del emparejamiento que tenéis el enemigo contará con un dado de ventaja contra vosotros.
El primer ataque de Yoshimitshu había fallado, el por qué no importaba. Sólo importaba recuperarse y eliminar la amenaza. En otro momento tal vez le hubiese molestado la intervención de Kaishimi en pelea. Pero aquella noche y aquel combate no era para pensar en su honor. Tan sólo en salvaguardar la vida de su nuevo señor y la misión que les encomendó su antiguo señor.
Aprovechando el ataque del soldado de la casa Asakura, el estoico samurai no tuvo problemas en terminar de abatir de un golpe en el pecho al arquero enemigo que les impedía la huida.
Una vez acabado con él, y viendo la situación de su señor, Yoshimitshu salvó la distancia que les separaba raudamente y realizó un tajo lateral ante el otro soldado de la casa Oda. El cual, ocupado como estaba con el monje y su joven señor no vio lo que se le venía encima.
Motivo: Ataque a arquero
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+4)=23
Motivo: Daño a arquero
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+3)=9
Motivo: Ataque a ashigaru 1
Tirada: 1d20
Resultado: 17(+4)=21
Motivo: Daño a ashigaru 1
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+3)=9
He supuesto que el arquero caia con 10 puntos de vida. Si no es así dimelo y modifico el post, pues he usado la habilidad de ataques multiples y sólo puedo hacerla si acabo con un enemigo.
El joven Hideyoshi-sama había sido muy imprudente.
Mitsuke había estado convencido de poder retener al Samurái, al menos lo suficiente para recibir ayuda de Yoshimitshu-san o de al menos uno de los Ashigaru. Ahora se vio entre 2 enemigos pero no dudo lo más mínimo el joven Samurái podía hacer daño a su señor y para evitarlo no había ningún precio demasiado alto. Había estado seguro de acabar con aquel tremendo primer golpe, después sintió algo parecido a un picotazo, más no se molestó en volverse si quiera para ver de qué se trataba. Solo tenía un objetivo en la cabeza, desplazo su boken lateralmente pero noto que a su movimiento le faltaba certeza y no lograba superar la guarda del samurái enemigo.
Motivo: Ataque a Samurai
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+1)=7
Duda del primer ataque.
No tiré daño por haber sacado critico y pensaba que acababa con él; 6+1 por el critico +1 la habilidad de Entrenado en el boken. 8 son sus PV
Disculpad las molestias de estos dias y si no lo especifique como le dije a DJ he estado unos días sin PC tirando del movil.
Gracias a todos.
Poco tiempo tengo para pensar, sólo para sentir y dejar que mi cuerpo actúe por instinto.
Afortunadamente, el que tengo delante, es un soldado de los Oda, no un samurai; de ser de este otro modo, estaría en graves apuros, pero ahora, con mi kama, tengo que hacer frente a un peligroso yari; arma de hoja corta contra lanza; si, esto ya lo he vivido otras veces, y sigo entre los mortales, así que se lo que tengo que hacer.., cerrar distancias y negarle la ventaja del alcance, para segarle la vida.
No debería fijarme en lo que tengo alrededor, en el resto de combates; la situación es confusa, pero aún así echo un vistazo rápido hacia donde está mi Señor, Hideyoshi-sama, aquel cuya vida hemos de preservar aun a costa de la nuestra; veo también los movimientos fluidos del monje; nunca,cuando le ví en el castillo, pensé que pudiese ser un guerrero; de hecho, en las cocinas, gran sumidero de los rumores de cuanto acontece en la fortaleza, no se hablaba nada en especial de él. Esto me hace pensar fugazmente en los problemas que está teniendo el señor Nobunaga con los monjes guerreros de ciertos monasterios, que están en guerra abierta con él y lo que representa; tal vez sea un monje del monte Hiei...
.. vuelvo a centrar toda mi atención en el Ashigaru que tengo delante, pero parece que me va a costar liquidarlo por la vía rápida
Motivo: Ataque a Ashigaru 3
Tirada: 1d20
Resultado: 11
Motivo: Posible daño de kama
Tirada: 1d4
Resultado: 1(+1)=2
Sensei: Creo que la tirada es correcta:
1d20 -> 11 -> éxito por los pelos
Tiro daño por si procede: 1d4+1 del kama , y no tengo bono de FUE que añadir, por lo que es un 2 pelaete, el mínimo que puedo causar
Respondo para aclarar las cuestiones surgidas hasta el momento:
@Deathstalker/Yoshimitsu. ¿Por qué sumas +3 a las tiradas de daño?, aclarado. Por cierto, dos ashigarus muertos en un turno.
@Xinexa/Mitsuke. Hiciste crítico en la tirada del dado por ello supuse que aplicabas máximo de daño +1. En tu caso el máximo de daño es 4 + 1 (por entrenado en boken) + 1 por el crítico. Sigue vivo pero le dejas tiritando. Me doy cuenta que no quedó claro en la narración. De hecho en la primera versión hablé de romper huesos, pero al redactarlo de nuevo para narrar los sucesos por emparejamientos para que se entendiese mejor me doy cuenta que ese detalle lo omití. Lo corrijo.
Se considera que un ataque es un crítico si el resultado del dado es de 20. En ese caso el atacante aplicará el daño máximo de su arma +1. No obstante el jugador podría elegir una consecuencia especial derivada de su ataque. El DJ tendrá la protestad de aceptar o no dicha propuesta (dañar la armadura o el arma, que el próximo ataque se haga con ventaja, derribar al oponente, etc).
@Pijusmáximus/Takeshi. La tirada que haces es contra la defensa del adversario. Si fuera una tirada normal contra una dificultad, 11 sería éxito en la mayoría de los casos. Sin embargo en este caso vuestros adversarios cuentan con una defensa de 13. 10+ 3. Armadura ligera en el caso de los ashigarus.
Agggg, No se porque habia pensado que el Boken era de 6 y no de 4.
Totalmente aclarado ahora gracias.
¡¡Vamos chicos que nos ganan!! :)
Máster: Así es, si quieres te cambiamos el arma tras el combate y te dejo excepcionalmente cambiar tu especialidad (un único favor de Amaterasu puedes considerarlo) por si se te pasó en la creación de pj, porque 1d4 es un dado muy bajo... Tendrás yaris, katanas y arco para elegir.
Xinexa Perfecto, muchas gracias, cuando acabe (si sigo vivo) cambiaré la especialidad por Katana.
Había subestimado a su oponente. Toda su vida dirigiendo a los hombres de su padre en batalla, aprendiendo de ellos, juzgando a los guerreros por sus aptitudes y esta vez el que había cometido el error había sido él. Miró de reojo a los ashigarus y a Yoshimitshu... parecía que no tardarían en llegar. El propio Mitsuke parecía no tener problema con su rival. Tan sólo él... volvió a apretar los dientes mirando a los ojos de su rival, para luego centrarse más en sus movimientos, sus hombros, sus pies... Tenía que ganar unos segundos.
Si, si, entendí lo de los pocos PV, no te preocupes por eso :3
Me pongo en posición defensiva, para un total de DEF 18
@Deathstalker/Yoshimitsu. ¿Por qué sumas +3 a las tiradas de daño?, entiendo que sólo sería +1 por entrenado en X, igual hay algo que se me escapa. No obstante con 8 de daño, también caía el ashigaru.
Porque tengo +2 a fuerza, que se suma al daño cuerpo a cuerpo ¿no? De ahí el +3.
Máster: perdona, tienes razón. Matas a los dos en un turno, pero por nivel no puedes iniciar un 3er ataque
Yoshi:Sep. Ya lo sabía. Pero bueno, para cargarse masillas está bien la habilidad. XD
Máster: Sí, da épica... Cuando la vi en el reglamento original pensé en dejarla recordando el final de la película harakiri.
Viendo que nuestro Samurai era una picadora de matar, Kaishimi decide moverse para ayudar a Takeshi. Por su experiencia sabía que la clave de estas pequeñas escaramuzas era resolverlas en un lapso de tiempo muy breve. Seguramente el enemigo los estaba buscando para acabar con ellos, por lo que los refuerzos no tardarían en venir para poner las cosas imposibles.
Quizás despistado por sus pensamientos y superado por los acontecimientos, cuando trata de golpear con su arma, falla no consiguiendo conectar el enemigo.
-Vamos Takeshi, daremos cuenta de él entre los dos.
Motivo: ataque ashingau 3
Tirada: 1d20
Resultado: 5(+1)=6
Yoshimitsu logró cambiar el curso de la batalla sin dejarse amilanar por el primer ataque fallido, uno y dos cayeron; primero el ashigaru con el que se encontraba encarado para de un salto cruzar la escasa distancia que le separaba del arquero, de otro golpe de muñeca segó su vida.
Takeshi perseveraba en su enfrentamiento con el Ashigaru más ninguno de los dos cedía terreno afortunadamente llegaron refuerzos en forma de Kaishimi quién se había quedado sin rival.
Finalmente el joven samurái se vio rodeado por tres personas, antes de rendirse decidió vender cara su vida atacando sin cuartel al último de los Asakura, sin éxito.
Motivo: ATAashi
Tirada: 1d20
Resultado: 12
Motivo: ATAsamu a Hideyoshi
Tirada: 1d20
Dificultad: 18+
Resultado: 12 (Fracaso)
Takeshi
Yoshimitsu
Hideyoshi
Kaishimi
Mitsuke / Ashigaru con Yari 3
Joven samurái
Takeshi - Ashigaru 3 - Kaishimi
Hideyoshi - Samurai - Mitsuke - Yoshimitsu
Ya sólo quedaban el samurái y uno de los soldados Oda. La pelea estaba sentenciada, más eso no era ningún consuelo para lo que había sucedido aquella noche. Y Yoshimitshu lo sabía.
Aún así al ver como el Oda atacaba a su joven señor comprendió que el samurái enemigo no se iba a rendir, lo cuál era algo honorable y que podía entender. De hecho en otra situación seguramente le habría dado la oportunidad de enfrentarse en duelo singular, más no aquella noche.
La Katana de Yoshimitshu se tiñó con la sangre de su adversario.
Motivo: Ataque samurai
Tirada: 1d20
Resultado: 11(+4)=15
Motivo: Daño samurai?
Tirada: 1d8
Resultado: 7(+3)=10
Si doy a 15 le hago 10 de daño.