Partida Rol por web

si pasa algo así, como último recurso. hacer un pega y corta en el doc word, de vuestro post (para no repetir toda la faena d enuevo)

y mirar si se puede borrar todo el post, hacer uno nuevo tomandolo  de copiado del  del Word.

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Claro que si de bajo de la imagen del  post  no esta la papelerita que te permita borrarlo, Pues no hay nada que hacer.

:(

yo tras vuestro aviso lo corregiría, pero no sería tan inmediato.

:)

21

No encuentras a la persona, buscas por  los sitios más obvios, nada. Al salir afuera, ves en la zona de ocio una pista de tenís, una piscina  al lado de esta hay un kiosco y un joven preparando cóctels , más al fondo un parking, ves a Tryss y Amara  cerca del kiosco. Hablando muy placidamente y terminando de conocerse.

Eso es lo que has visto.

Detrás aparece Harlan, esta intranquilo, desde que esta en este hotel la inquietud le persigue, (gente nueva, la presión de la selección, etc), Harlan  te llama te pregunta, te vio bajar la escalera con premura y le extraño. 

Estáis en el exterior en la zona vallada y de recreo del Hotel, se ve salir a Leni y tras ella a Harland

Los cuatro teneis ahora mismo entre vosotros contacto visual.

Harlan corrió detrás de ella. Le extrañó, pues se aseguró expresamente de estar fuera de su rango de visión antes de iniciar la carrera detrás de la figura. Debió de cometer algún error para que Harlan se diera cuenta. Quizá escuchó sus pasos... o quizá la vigiló preocupado, viendo que había tomado el mismo rumbo que su "amiga" y que iba a descubrir su indignidad. En cualquier caso, eso le acabó de confirmar que ambos habían estado juntos.

- ¿Quieres saber qué sucede, Harlan? - preguntó con enojo. - ¿Por qué no me lo explicas tú? Me decepcionas. A pesar de tu timidez, te tenía por alguien íntegro. No me imaginaba que fueras el tipo de persona que consume prostitución.

Helene, como feminista convencida, no aprobaba en absoluto el negocio de la trata de blancas; ni respetaba a los clientes que la fomentaban. La primera persona que conocía de su equipo pronto reveló una cara poco amable. Esperaba que el resto de sus compañeros fueran personas más afines a ella.

Amara interrumpe la conversación al ver a los dos otros candidatos bajar a la zona de recreo. 

-Tryss, aquellos son el doctor y la novelista, ¿no?

Si le hubiesen pinchado con una aguja en brazo, muy probablemente Harlan no habría derramado ni una sola gota de sangre. Lo que había sucedido con aquella mujer había sido malinterpretado por Leni. Pero, ¿era una malinterpretación real o sólo quería sacarle información de algún tipo por desconfianza? No lo sabía, pero no podía arriesgarse a perder la colaboración de una compañera tan brillante que, además, era psicóloga.

—¿Consumidor de prostitución? ¿Yo? —su voz sonaba tan indignada que había subido una octava como poco—. ¿Estás de broma? Jamás pagaría dinero por tener relaciones sexuales. ¡Las personas no se alquilan ni se compran, Leni! ¡Y si hay alguien que detesta un comportamiento de ese estilo, soy yo! Esa mujer ha estado en mi habitación por asuntos relacionados con la misión —eso era totalmente cierto y, ya más calmado, su voz sonaba con más aplomo—. No sé en qué te basas para decir eso, pero no habrías podido ofenderme más de ninguna manera.

Cuando se giró para irse de allí dejando a la psicóloga con la palabra en la boca, puso ver que el resto de los compañeros que había visto realizando pruebas y con los que se había cruzado en las salas comunes y por los pasillos, estaban allí, cerca. ¿Habrían escuchado las palabras de Helena acusándole de machista y putero? Pero lo peor era que esas acusaciones procedían de la única persona en la que Harlan se había fijado en todo el periodo de entrenamiento. Parecía su destino ser rechazado con razón o sin ella.

Parecía  visto  desde vuestro Angulo (Tryss y Amara), una escena típica de una pareja enfadada  y enojada la una de la otra. En el que la chica le reprocha alguna cosa y el chico da explicaciones  con un tono algo elevado y termina de darse la vuelta para irse.

¿pero estos que habrán  estado haciendo esta noche o estas últimas horas?...

Ahora mismo en la escena  sois tres chicas, un chico y en el kiosco el joven coctelero que va a la suya. 

A Kowalky le preocupaba que si no accedía sabotearan su entrada en la misión para meter a alguien más colaborador, además el seguro de vida si había problemas al regresar a la atmósfera y la promesa de un buen pago le tentaban, por no decir que, si seguía jugando bien sus cartas, podía sacarle a la rubia algo más que una gratificación por adelantado. Después, no se complicaría la vida, si podía conseguir la información bien, si no, seguramente no le pagarían, pero habría vuelto a casa y se acabó.

La decisión estaba tomada. A última hora de la tarde llamó al teléfono que le había dado la rubia, —en mi habitación, pasada la medianoche, está vez me encargaré yo de las copas, tú y yo tenemos un… trato que cerrar.

Dicho esto, se encargó de conseguir a través de un camarero un botella de buen Vozka, hielo y unos limones que dejó esperando en la nevera de su habitación, aquella broma del ron ya se había alargado demasiado.

Tryss estaba pensando en el coche gris cuando la escena del doctor y aquella mujer que juraría que había escuchado que era periodista la arrancó de sus pensamientos por el momento.

- Vaya, esos dos se conocen muy bien... - Dijo Tryss a Amara - ¿Te suena ese coche gris?- Dijo apuntando la matricula.

Ok, de acuerdo, Haré una llamada y se puede decir que estas ya dentro d la misión, espero que este negocio nos permita conocernos un mejor mejor ya no solo ahora, también en el futuro. Esta noche estaré allí pasada la media noche. Cuando vayas a tu habitación mira en tu maleta de viaje, veras que es parecida no la misma, tiene un doble fondo en este veras el PEN y el localizador. Esta noche nos vemos, chao. 

Harlan se dio la vuelta y se fue indignado, y Helene no le detuvo. Puede que su acusación no fuera cierta, pero pensó que él se lo había buscado. Lo cierto es que seguía azorada por la persecución a gritos a la que le sometió y tampoco le apetecía alargar más el culebrón ni dar más espectáculo; y después de todo, no tenía por qué pedirle explicaciones ni él por qué darlas.

Decidió ir junto a Tryss y Amara, que estaban charlando en una mesa próxima. Le vendría bien un cóctel y un poco de compañía femenina para relajarse.

Después de librarse de Harlan elevando el tono de la conversación, Helene necesitaba un respiro. Lo cierto es que, si bien no había descartado el asunto de la prostitución, no era esa su sospecha principal. Sabía cuando un hombre ocultaba algo, y Harlan lo hacía. Si era cierto que esa mujer era quien decía, eso no explicaba ese interés tan grande por parte del biólogo en detenerla. Debía haber algo más, y deseó que fuera únicamente un lío de faldas. No confiaría en él hasta averiguar más.

La psicóloga se dirigió al kiosko. - Buenas, un cosmopolitan por favor - pidió levantando una mano al coctelero. - Un día tranquilo, ¿eh? - dijo para darle conversación mientras lo preparaba, viendo que no había mucha gente por la zona.

Tuvieron una breve conversación hasta que le sirvieron el cóctel. A continuación se dirigió con el mismo hacia la mesa de Tryss y Amara, eran dos posibles compañeras de misión y vendría bien hacer migas. Esperaba que la cosa entre mujeres fuera mejor que con Harlan.

- Hola chicas, ¿cómo estáis? ¿Puedo? - dijo señalando una silla vacía.

Ambas estaban hablando de un coche gris próximo. Tryss anotaba su matrícula.

- Espera... ¿es ese el coche que iba pegado a nosotras durante el viaje? - preguntó con sorpresa. - Le pregunté acerca de él al mismo Gumther Fernández. Me dijo que no se correspondía con ningún trabajador de ULISES. También me advirtió de que tenían fundadas sospechas de intentos de espionaje por agentes externos y que mantuviéramos los ojos abiertos ante este tipo de cosas -dijo en confianza, pues vendría bien el trabajo en equipo si quería investigar al respecto.

Leni dio un sorbo a su cosmopolitan. Les contó que la habían seleccionado como psicóloga de a bordo para la misión y les preguntó qué tal les había ido a ellas. Después volvió al tema anterior.

- Lo cierto es que he visto un par de personas sospechosas por el hotel. Si el coche perteneciera a alguna de ellas, empezaría a sospechar más seriamente. ¿Habéis visto vosotras algún movimiento extraño últimamente? - preguntó con la esperanza de unir algún cabo.

- Pues si está en el hotel podemos decir que queremos hablar con el dueño por que lo hemos rayado sin querer...-Dijo Tryss mirando a la mujer. - A ver a quien nos lleva. Pero no podemos estar del todo seguros si es el mismo coche - Añadió apretando los labios.

-Sí. Eso parece, Tryss. Y no, el coche no me suena. Pero no iba atenta, estaba... -Amara deja la frase en suspenso cuando ve aproximarse a Allende, quien se mueve con soltura y seguridad, destilando confianza en sí misma y cierto aura de éxito.

La voz de Amara es fría, otra vez distante, cuando se presentan, mira lentamente a Allende, como valorándola, quizás con un deje de ¿envidia? Entorna los ojos al reparar en el cóctel en su mano.

-Entonces, ¿usted irá en la Cavafis...como psicóloga? Muy pronto lo ha sabido.

La frase es como un cuchillo helado, por un momento se hace un incómodo silencio, pero Leni rápidamente cambia de tema, volviendo a algo que las uniera, las situara ante un problema común: los extraños movimientos que percibían a su alrededor.

-Como ratones en un laberinto -concluye Amara ante la exposición de hechos extraños, la idea de tomar algún curso de acción parece atraer a la mujer y atenuar su sempiterno gesto de extrañamiento.

Asiente al plan de Tryss, le muestra sus llaves, mirando al coche gris.

-Pero hagámoslo bien. Comprobad que no venga nadie.

Y se encamina al coche gris.