Partida Rol por web

Cita:

No, yo diría que es sobrino político (no confundir con sobrino y político) en contraposición a sobrino carnal (Evelyn es sobrina carnal).

Cita:

Una vez casado con Evelyn seré su sobrino. No hay duda en eso, por lo tanto no aplicaría lo de putativo.

Cita:

En absoluto, querida Evelyn. Yo por su amor me cambiaría el look, me haría vegetariano o incluso, horror, católico. Lo que nunca podré dejar de ser, y en eso estará de acuerdo conmigo, es británico.

Rule Britannia!

Sí, Gerry estoy de acuerdo... eso nunca!

Tenemos que decidir de que es la empresa y como se llama... El DJ ha propuesto una empresa de transporte marítimo... ¿qué te parece?

Lo siento, pero depende de ti el que quieras que conozca tu historia o partes de ella los demás miembros de la partida. Lo que si te aconsejo es que comentes las cosas que has vivido con los que las has vivido, porque lo mismo, ellos no están de acuerdo con lo que has puesto, porque sus personajes no son así. Asi que nada, esta escena es para lo que es, y es para que hablais entre vosotros y hagais la historia entre todos.

Ala, a cascar con los demás. ^^

Teneis que poneros de acuerdo en vuestro apellido, para que sea el mismo.

Evelyn ha sido siempre una niña muy dulce y soñadora, tiene caracter y es testaruda, pero no es algo que suela sacar, de hecho nadie recuerda nunca ningún enfado de la pequeña, excepto una anécdota con Gerald y otro con Kadesh, ambos hace tiempo y anteriores a la muerte de su madre, tras eso, Eve se volvió mucho más sumisa.

Es muy comprensiva y suele ser tan amable que parece que todo el mundo la lleva hacia un lado u otro. Es muy sensible y frágil o al menos es lo que todos piensan, no tanto por su físico envidiable pues adora hacer deporte al aire libre, sino por sentir tanto amor por la vida y por los seres vivos... Odia cualquier tipo de matanza, cacería etc... podría decirse que es tan natural y fresca como una flor.

Es hermosa por dentro y por fuera, y aunque no es de vestir de forma despampanante, usa modelos de un gusto exquisito. Es muy elegante, tanto como una gacela en el claro del bosque.

Su corazón sueña con las historias que lee, desde que era niña devora libros, ya terminó hace mucho los de las bibliotecas de la familia, y ahora visita asiduamente a la familia St. John en busca de los libros que tienen... pues adora leer... es el aire que la mantiene viva.

Realizó la carrera de maestra de literatura, y aunque no ejerce porque no necesita el dinero, adora tener niños cerca a los que leer cuentos o contar historias. Uno de aquellos niños tras un cuento dijo que parecía Blancanieves... tan dulce, tan hermosa, tan frágil...

y ella espera sin duda a su príncipe azul... y mucho más desde la muerte de su madre... la que le inculcó que el Amor era la mayor fuerza del mundo, que la Amistad era una forma de Amor y que podía mover montañas.

Es educada y amable con todo el mundo y trata con mucho cariño a sus conocidos, aunque evita a Kadesh, no termina de gustarle, o quizás hay algo en él que pone nerviosa. A pesar de que se conocen desde niños. Nunca tutea a nadie, excepto a Gerald cuando están a solas...

Adora a Gerald, su Gerry, son amigos desde que eran dos pequeñajos que jugaban al pilla pilla en el jardín. La madre de Evelyn adoraba al pequeño y lo cuidaba con mucho amor. Se creó un vínculo muy fuerte entre ellos al fallecer aquella mujer tan inspiradora y valiente. Entonces pararon los viajes, las aventuras, Eve se escondió en sus libros y nunca más volvió a salir de Londres. Iba al norte en verano, eso sí, a la casa de los St. John y pq insistían en que pasara el verano al aire libre y no en la sombría y húmeda ciudad, pero despues... volvía a su Londres adorado. Esa era toda su vida. Nada más. Simplemente esperaba paciente.

Todos la veían crecer... hacerse más y más hermosa, parecerse más y más a su madre, pero... Eve no salía de su mundo de princesas, castillos y piratas...
No era como su madre... valiente, extrovertida, divertida, vivaracha y sobretodo aventurera... adoraba viajar, conocer gente nueva, sitios nuevos, culturas exóticas... el mundo era pequeño para Meredith Doughton.

Ni siquiera le gustaba la Sociedad Londinense, prefería ir al albergue a ayudar a los pobres en Navidad, que ir a las lujosas fiestas de los St. John. Y aunque al final acudía a alguna de ellas, solo hacía acto de presencia y terminaba escondida en la biblioteca de la mansión... Sentada sobre su hermoso vestido, en un rincón oscuro, en el suelo, sosteniendo una lámpara con una mano y el libro con la otra. Sin zapatos y con el pelo suelto y libre, como tanto le gusta. Como tanto le gustaba a su madre....

Cita:

En absoluto, Richard. Por una parte, una de las ilusiones de Evelyn es ver mundo, y por la otra jamás se me pasaría por la imaginación dejar a mi esposa aquí estando en Ultramar.

Es más, y aunque a veces se me ha acusado de tener un pensamiento excesivamente liberal en ese sentido, creo que la fuerza del Imperio no sólo está en el fuerte brazo de nuestros soldados, sino también en la solidez de nuestra institución familiar donde, si el marido es destinado a la India, allá se traslada la familia entera, dipuesta a mostrar a aquellos salvajes las excelencias de nuestra forma de vida, como un ejemplo a seguir.

Cita:

Gerald St. John, BCom (Hons)

Los St. John pertenecen a lo que suele llamar en el Reino Unido landed gentry [nobleza menor con tierras; tiene el título honorífico de "esquire", que le sitúa por encima de un simple "gentleman"], y se espera de ellos que sean la espina dorsal del Imperio, proporcionando oficiales al Ejército o la Armada, administradores coloniales en tierras lejanas como la India o África del Sur, o diplomáticos de carrera allá donde Su Graciosa Majestad se digne enviarles.

Con una bella mansión en el Mall de Londres, y una espléndida hacienda rural en Lancashire, los St. John son el vivo retrato del caballero británico. Gerald es hijo único, y su madre murió muy joven, por lo que su infancia fue una sucesión de ayas, mayordomos e institutrices, en la que el único rayo de sol eran las visitas de Evelyn Doughton.

Evelyn.

En sus juegos infantiles, ella era siempre la princesa en peligro y él, el brillante paladín que la rescataba de peligros inimaginables. Cuando el peso del apellido se le hacía insoportable, una sonrisa o el mero roce de su mano, aliviaban la carga de Gerald. Siempre albergó en su mente la idea de pedirla en matrimonio porque en el mundo no había ninguna otra que se le pudiera comparar. Mientras estudiaba en Oxford pensaba en cómo declararle su amor, y en trazar un futuro para los dos, juntos por fin.

Tras graduarse en Comercio y Administración con honores, se encuentra en la actualidad preparando su "aterrizaje" en el Foreign Office, con las miras puestas en un cargo de administrador en Egipto (en la esfera de influencia británica desde 1882).

sip, y no.

Mi madre es la que viajaba y conocía mundo, yo me sumerjo en los libros pq aunque me gustaría hacerlo nunca me he atrevido a ello desde su muerte. antes viajaba con ella.

Cita:

Entonces no hay equívoco, mi querida Evelyn.

Le propongo surcar los mares en busca de nuevas sensaciones, otros países, otras costumbres, a mi lado, como marido y mujer. Conoceremos los mares del Sur, las ciudades de la ruta de la Seda y de las especias, las maravillosas pirámides de Gizeh, o las cataratas Victoria que descubriera Livingstone hace apenas 50 años.

Sólo hacen falta dos palabras: sí, quiero.

Gerry no digas bobadas... No voy a ser tu esposa y mucho menos salir de Londres, aquí está mi hogar, mi lugar... mi refugio... mi vida.

Deja de insistir en eso querido amigo. Tú busca la forma de que mi padre vuelva de Egipto, que es lo único que ahora mismo anhela mi corazón. Prometiste ayudarme

Neo, a ver si nos fijamos que Sean ya está cogido para hacer de William...

Sino vais a tener el problema de que los prometidos son hermanos o algo así.

Cita:

Y lo mantendré.

Por lo demás, que nunca serás mi esposa son duras palabras, my dear. No obstante, sabes que mi devoción por tí se extiende más allá de todo lo razonable, y si tengo que arrancar a tu padre de las mismísimas garras de Satanás, lo haré... por tí, y sin pedirte nada a cambio.

Eve le mira triste... Gerry... lo siento... yo... no he dicho nunca... pero yo... Trae a mi padre por favor... digo posando mi mano sobre la suya mientras le miro a los ojos.

Hola hijo ... me parece bien el apellido que nos has puesto ...

Y tienes razón ... tenemos que solucionar nuestra deuda ... aunque ya estoy en ello ... ¿quieres saber las posibles soluciones o prefieres que lo haga a escondidas tuya?

:P