Partida Rol por web

Palmeando su hacha incapaz de controlar su júbilo el bárbaro demostró su alegría de una manera casi infantil.
Entre incontroladas risas el enano se dirigió valoz hacia el cetro solar de Sargón y lo recogió.

-¡Venga chico! Las mujeres tendrán que aguantar nuestro relato esta noche delante una hoguera...

Al terminar de arrancar la cabeza de la araña, la levanto en alto y grito a los ruidos que resuenan en aquella caverna:

 - "¿Alguien más quiere morir? Tengo cosas que hacer, asi que dejaré que crezcan y se reproduzcan antes de volver a matarlas. ¡Bichos de mierda, no están a la altura de Sargón, El Grande!"

Luego de eso escupó en el suelo, asiento a las palabras de mi compañero y comienzo a seguir a las damas, con la cabeza en mi mano izquierda y mi atarraga en la derecha, apoyada en mi hombro.

 Viendo que las arañas permanecían quietas, guardando su posición, trato de calmarlas para que nos dejen pasar. Al fin y al cabo son animales

Me acerco lentamente al grupo que nos cerraba le paso para huir, con los brazos extendidos y las manos abiertas, evitando cualquier signo de violencia. Calmaos pequeñas, calmaos.

Las arañas sisean con mas virulencia cuando haces el gesto y pronto te queda claro que están mas allá de tu influencia.

Shelkis lo intenta otra vez por Shana, viendo que quizás sea la única forma de poder seguir y la más segura.

La maga intenta recordar alguna situación parecida a esa en alguna de sus vidas pasadas e intenta con voz calmada y dulce disuadir del mismo modo a las bestias.

-Está bien… Calma pequeñas… Nadie os hará daño.

Shelki consigue hacer que las arañes se calmen un poco y no se muestren tan agresivas, aún así no conoce lo suficiente sobre esos bichos para hacer que os dejen pasar.

Perdéis un tiempo crucial en el que Sargón se dedica a conseguir su trofeo y a gritar en la cueva, luego con menos prisas que Ûrahit, camináis hacia donde vuestras compañeras han desaparecido.

No tardáis en daros cuenta de una especie de túnel que hay en una de las paredes donde una gruesa capa de telaraña recubre cada centímetro de la pared. Alrededor del túnel principal hay un sinfin de pequeñas entradas por las que se podría entrar gateando.

No obstante, antes que llegéis a la entrada varias arañas llegan desde las paredes para bloquear el paso y emboscaros. Quizá si os hubierais dado mas prisa, estaríais en la entrada del túnel con mejor ventaja.

Os rodean unas 8 arañas como las de antes, con afiladas patas y mandíbulas abiertas.

Parece que has conseguido calmarlas, Shelkis, pero nos siguen cortando el paso... ¿tienes alguna idea? - le pregunto a la maga. La situación era complicada. Estabamos las dos solas, junto a Ethys, y rodeadas por varias de estas bestias. La forma que yo conozco para apartar a los animales de mi camino sin tener que luchar no ha funcionado con ellas así que... parece que tendremos que abrirnos paso por medio de la fuerza.

-Lo único que se me ocurre es empujarlas con mi hechizo de onda e ir ganando terreno según las haga retroceder… Hace falta alguien delante que resista mientras tanto para poder avanzar y otro detrás para que no nos entorpezcas las que nos impiden la retirada.

 Delante puede ir mi oso Ethys, él aguantará los golpes mejor que yo. Detrás me quedaré yo.

-¡Maldición! ¡Una emboscada! -escupió la obviedad- Parece que te han entendido, amigo. ¡Tendremos que pelear espalda con espalda!

El bárbaro buscó un error en la táctica de los monstruos: Una brecha en la pared... un flanco demasiado generoso... una elevación desfavorable...

Al ver que las arañas nos han rodeado, suelto mi trofeo automaticamente para tomar mi atarraga de la forma que necesito para luchar. Luego de eso digo:

 - "¿Donde mierda están las mujeres cuando se las necesitan? No importa. Hermano, creo que es el momento de demostrar si somos dignos enanos. Ya matamos a la jefa del cubil y ahora nos acosan sus sirvientes. Venceremos y viviremos con la gloria de haber limpiado este lugar o moriremos con el honor de jamas habernos rendido. ¡POR EL HONOR!"

Espero que llegue el momento de comenzar esta lucha y definir quienes se impondrán sobre los perdedores.

La primera de las arañas se abalanza sobre Sargón esgrimiendo sus patas como afilados mandobles que causan una fea herida en el brazo del enano, las demás sisean excitadas con la visión de la sangre fresca.

La primera araña habia comenzado con su arremetida y su enorme y filosa pata me habia arañado el brazo en un profundo corte. Sin perder tiempo alguno respiro hondo para evadir el dolor de mi brazo y me muevo cuidadosamente al lado de la araña que me golpeo.

Rapidamente levanto mi atarraga y lanzo dos golpes contra ella, mientras le hablo a mi compañero:

 - "Ataquemos a la misma araña siempre. Como mi papá decia, mientras menos quedan, menos pegan. Debemos ir abriendonos paso hacia el tunel. Recuerda que estas desgraciadas atacan de más lejos de lo que nuestras armas llegan. Ten cuidado y quedate a mi lado para que nos cubramos."

Sigo mi ataque y espero que pronto mi compañero llegue a mi lado para poder cuidarlo y que él me cuide a mi.

La maga hace un rápido movimiento de brazos, echando hacia atrás las mangas de su vestido y preparándose para el lanzamiento de su conjuro.

La onda atronadora de Shelkis aplasta las arañas que tenia enfrente despejando el camino ... por desgracia tiene un efecto no deseado.

A lo largo de las hendiduras y túneles estrechos que han en las paredes, se puede escuchar el grito de muchas mas arañas que han sido alertadas por el atronador sonido del hechizo.

Parece que habéis despertado el nido.