Partida Rol por web

-Lo ultimo que deseo es una guerra que cause tanto mal al buen pueblo que me acogio entre ellos estoy con tigo Kenvent

Mmmm, cazar nuevos animales, y poder tallarlos luego, inetresante.

-Yo me paunto a la caceria, y ya sanaré al campesino cuando llegue, quiero tener todo mi poder completo para cazar esos bichos.

Les comunico a mis compañeros mientras ya estoy saliendo por la puerta.

Cuando salís fuera descubrís que los guerreros se han llevado vuestras armas en la confusión de la marcha. Afortunadamente en la entrada de la cabaña hay un armero con una pequeña variedad de armas que os permite equiparos de nuevo.

Tras cojer un arma parecida a la que suelo llevar me dirijo al grupo 

-Si los buscamos debemos ir a las montañas, por lo que he oido son salvajes que viven con lobos e incluso se dice que muchos de ellos tienen sangre de lobo por salvajes cruces entre razas, probablemente si han cazado ya esten de vuelta en su madriguera disfrutando del banquete sera el mejor momento de atacar

Siento un escalofrío ante las palabras de Erikand... caníbales...

- Creo que ya que vamos a ayudarles, lo mejor es que vayamos por nuestra cuenta. No aceptarán nuestro auxilio, y nuestra única oportunidad de lograr algo importante es conseguirlo por nosotros mismos. Intentaré rastrear algo... aunque me vendría bien ir a los alrededores del ataque ¿podemos preguntarle al campesino?

Agarro lo que parece una lanza corta.

La sopeso, y les digo a mis compañeros.

-Vamos a ver si encontramos alguna pista, me muero por ver un bicho de esos, y ¿que se han cruzado con los lobos?, diossss, un hombre-lobo seria muy interesante. ¿Creeis que si hay un cachorro lo podriamos educar para que fuese mi montura?, soy pequeñito y no peso mucho.

-No tientes a la suerte, Kilder. Tal vez mueras por ver un bicho de esos- hago una mueca parecida a una sonrisa, me hace muy poca gracia saber a que nos vamos a enfrentar. Prefiero hablar y con canibales no creo que se pueda hablar mucho- Me da igual ir por nuestra cuenta que acompañar a los Valle Sombrio. A partir de ahora me preocupare de que nadie se me coma- me dirijo a la entrada de la cabaña y cojo las armas mas parecidas a las que tenia.

Jajaja rié Crixus al escuchar lo que dice Kilder sobre el cachorro -Pues Kilder, de verdad que si eres pequeño jaja , Si encontramos un cachorro, te ayudare a atarlo para que lo montes, pero en mis tierras los Cachorros asustan a los niños y no al revez jaja rie nuevamente. -Perdonen, tenia que decir eso...Sigamos,por el camino que deseen,aunque sin mi espada no llegaré muy lejos. dice mientras busca un arma parecida a su espada.

Kenvent coge la primera espada que encuentra en el armero. Yo prefiero atacarles ahora para impedir que esos salvajes quemen más granjas de los Valle Sombrío. Así, Thormund verá que le estamos ayudando de forma más directa y, además, en su guarida podrán defenderse mejor y será más difícil liquidarlos. Sea como sea, apresurémonos, podemos terminar de decidir el plan por el camino. Y acto seguido, echa a correr en la dirección general en la que han ido los Valle Sombrío.

Creo que puedo seguir las pisadas de los guerreros hasta el asentamiento, y una vez allí... tal vez encuentre el rastro de los telmoris.

- Seguidme, voy a intentarlo -susurro a mis compañeros.

Dejame intentar intentar a mi... dice mientras se agacha y busca huellas, luego se levanta y dice -Ni idea señores.

Voy mirando hacia el suelo, con toda la iludión, buscando huellas de lobo para poder seguirlos, pero no encuentro nada mas que huellas humanas.

-Igual es de un hombre-lobo, pero no creo...

Reniego en voz baja, maldiciendo mi mala suerte.

- Nada de nada. No encuentro nada. Si queremos ayudarles, tendremos que ir a su encuentro.

Me encojo de hombros con cara de malas pulgas. Estoy fino, fino...

Los lobos no han dejado huellas, al menos eso parece. A pesar de que no soy rastreadora observo el suelo por si veo algo. 

-Yo tampoco veo nada, tendremos que guiarnos por el instinto. 

Kenvent tampoco encuentra ningún rastro.

-¡Vamos a luchar al lado de los Valle Sombrío, rápido! -dice moviendo el brazo de la espada en dirección a las columnas de humo negro-. ¡A las granjas!