Partida Rol por web

Observo con tristeza la fugaz mirada de humanidad que ha tenido el poli antes de diñarla. ¡Hijo de puta loco! pienso mientras miro por un instante al científico.

El edificio se tambalea pero creo que eso poco les importará a los polis, que tratarán de cumplir sus órdenes hasta el último momento, importándoles bien poco si se derrumban con la casa o no. La única esperanza es acabar con ellos, o distraerlos lo suficiente, y rezar para que nos dé tiempo de llegar al ascensor antes de que la casa se desplome del todo.

Rodeo a los polis de forma que queda libre el paso para Luna y Sophia hacia el ascensor; con un gesto con la cabeza les animo a continuar su camino hacia la salida. Esperemos que el ascensor no se haya dañado con la explosión. Esquivo los dos disparos y arremeto contra uno de los polis, clavándole la navaja en el gaznate.

- ¡Vamos Andrúe, joder, dispara! ¿A qué coño estás esperando?

A la derecha e izquierda del edificio hay otros dos edificios pero les separa un callejón. Al asomarse Luna ve que hay un andamio de esos colgantes a dos plantas mas abajo, una caida aparentemente segura, pero no ocurre lo mismo de este hasta el suelo.

Ante la frase de Dan le respondo con una mirada sin mucho significado. Luego apunto al mismo policia que Dan y le pego un tiro que ,aunque le roza, no le causa daño alguno.

-Tenemos que salir de aquí ahora.

-Con esta cosa podemos ir bajando rápido, si esto se cae por el camino al menos el golpe será mucho mas leve, y si llegamos hasta abajo estaremos apenas a metros del suelo. ¡Vengan! -bajó ahora algo la voz para hablar a Sophia, por su rostro parecía que hasta gritar le suponía un esfuerzo doloroso- ve...subiendo y busca la palanca de esa plataforma. Yo lo haré también en lo que...llegan Dan y Andrue.

Cada vez le estaba costandomas hablar, sentía que se le escapaba el aire de los pulmones.

Desclavo la navaja del cuerpo del poli y le arreo otro navajazo, antes de que reaccione. Acto seguido salgo corriendo hacia el borde de la azotea, por donde han desaparecido las chicas y por donde está desapareciendo Andrúe ahora mismo. Con las prisas provocadas por el cada vez más pronunciado bamboleo del edificio y por las palabras de Andrúe, me he dejado olvidada la navaja en el cuerpo del esbirro.

Mientras corro, sufro la angustia de pensar que en cualquier momento sonará un disparo que me alcanzará por la espalda y acabará con mis sueños de fuga. Espoleado por el miedo, salto al vacío, confiando que algo debe haber ahí abajo, donde estarán mis compañeros.

Asiento como respuesta a la petición de Luna y sin pensarlo, comienzo a correr en busca de aquellas palabras. No había tiempo que perder si queríamos sobrevivir. Pero, ¿Donde está la maldita palanca? miro hacia los lados en su busqueda, el corazón latía con fuerza y las esperanzas eran cada vez más pocas.

Corro hacia el borde tras Dan y salto repitiendo sus movimientos. Antes de saltar miro hacia atras para asegurarme de que ningun balazo me alcanzaba.

Dan y Andrue caen en el elevador estando los cuatro dentro. Detras este hay una ventana que da al interior del edificio. Mientras Sophia busca la palanca el helicoptero se encara hacia vosotros.

-Se acabó el juego. -se escucha desde el interior del helicoptero-

El helicoptero empieza a disparar hacia vosotros. Pasando por encima de vuestras cabezas agujereando la pared, rompiendo la ventana y, con mala suerte, partiendo una de las cuerdas de metal que sostenían al elevador. El elevador se queda cojo, quedando colgado hacia un lado haciendo que os tengais que agarrar a algo para no caer.

Mientras tanto el edificio sigue tambaleandose cada vez con mas sensación de ir a derrumbarse.

En su estado, no pudo hacer demasiado por aferrarse a algún sitio. El solo hecho de respirar le era dificil y doloroso, y hacer un esfuerzo así seguramente terminaría de matarla. Claro que, no pensó en nada de esto cuando el elevador se ladeó. Solo perdió el equilibrio, intentó agarrarse pero apenas empezó a forzar sus músculos una oleada de dolor le golpeó, obligandole a soltarse. Se dió un golpe contra los fierros de la "pared" de la plataforma que ahora estaba mirando hacia el suelo y finalmente, se precipitó al vacio. O mejor dicho, al toldo que había antes de una muerte segura.

El elevador se decanta violentamente hacia un lado e instintivamente trato de sujetarme a cualquier cosa que evite que me precipite al vacío.

No lo consigo y en unos instantes me veo volando, en caída libre, directo a estamparme contra el suelo. Maldita sea mi suerte.

Luna cae sobre el toldo que primeramente amortigua la caida pero luego se raja, haciendo que caiga al suelo sufriendo algo de daño.

-Esto de estarse muriendo...es un coñazo...

Se quedó en el suelo tal cual había caído durante unos minutos, y luego se dió vuelta intentando colocarse de pie. Miró alrededor, ¿estaba en la calle? ¿Alguien estaría llamando a la policía al ver el derrumbe del edificio?

Apretandose la herida de bala, miró hacia arriba para saber de la suerte de los demas y del edificio. No sabía si donde estaba se encontraba a salvo del todo por el derrumbe pero no era eso lo que le preocupaba, sinó quizá encontrar algo para amortiguar la posible caída de los demas.

¿Porque nadie se deja tirado un colchón estos días? Argh...

Apartando el mordaz pensamiento, rezó en silencio para toparse con algún contenedor de basura lo suficientemente lleno y ligero como para que cediera a ser empujado, o algo que se le pareciera.

Al escuchar disparos, me detengo, el corazón me da un vuelco y miro en dirección opuesta, por donde había subido. Mis compañeros estaban muertos sin duda alguna y el edificio colapsaría en el momento menos esperado y mi destino sería el mismo que el de ellos.

Miro hacia arriba y hacia abajo, sin saber que hacer ¿Habrían sobrevivientes? y ¿Qué sentido tenía ahora buscar la palanca? -mierda...- murmuro al tiempo que frotaba mi rostro, frustrada.

Tras unos segundos de lucha interna, decido continuar en la busqueda de la palanca, quizás estaba cerca de ella ¿Pero donde estaba?

Hay una palanca que hace que el elevador ascienda o descienda a la izquierda de este. Por otro lado, en un callejón que separa a ese edificio con otro hay un contenedor de basura con unas cuantas bolsas dentro. Podría ser empujado si se tiene la suficiente fuerza.

Sin ninguna dificultad veo venir la caida y me agarro a lo primero que veo. Me quedo colgando esperando a que Sophia pueda llegar a la palanca para bajar el ascensor.

-Inténtalo tu primero.

Al instante de resbalar del elevador y comenzar mi caída, tropiezo con un bordillo que sobresale de la fachada. Rápidamente me viene a la cabeza la loca idea de que quizás un piso más abajo haya otro igual y me concentro para tratar de agarrarme a él. No lo consigo; el bordillo ha pasado demasido rápido por delante de mis ojos y a pesar de que lo he alcanzado con una mano, no ha sido suficiente. Pero, por lo menos, el intento de agarrón ha frenado un poco la velocidad de caída.

Pensando que quizás sea mi última oportunidad, hago un sobresfuerzo para alcanzar el siguiente bordillo. Al pasar a su altura estiro los brazos cuanto puedo y doblo las manos sujetándome al saliente. La inercia de la caída da un fuerte estirón en mis hombros y siento un gran dolor. Mi cuerpo se balancea y adelanto los pies para no estamparme contra el edificio.

Parece que el plan ha funcionado. Aquí estoy, colgando de un saliente, a dos pisos de altura de un edificio que se derrumba, tratando de imaginar cuál será mi siguiente movimiento.

El helicoptero se encara hacia Dan y le apunta al pecho. Su ametralladora montada empieza a dar vueltas con intención de disparar.

-¡Dan, sal de ahí!

Se dió cuenta de que tampoco él tenía muchas opciones de a donde ir, y tiempo menos. Se encaró a un contenedor de desperdicios que había visto antes y, colocandose a un lado empezó a empujarlo. Se quedó dolorida al forzar la herida, pero no se paró ni un segundo. A ojo y lo mas rápido que pudo, posicionó lo mejor posible el improvisado "colchón"

-¡Sueltate! ¡Tienes donde caer a salvo!

Luego de esto se quedó apoyada en el objeto que acababa de mover. Sentía que estaba perdiendo mas sangre, y realmente empezaba a sentirse mareada. No veía bien.

El acercamiento del helicóptero me deja muy claro cuál será mi próximo movimiento. Aflojo la presión de mis dedos y vuelvo al vacío; repito la operación para agarrarme al último bordillo y lo consigo otra vez. Parece que le voy cogiendo el truquillo.

El helicóptero comienza a maniobrar, sin duda tratando de ganar una posición donde ametrallarme. Entonces oigo a Luna, prometiendome que puedo caer sobre blando. Bueno, sólo es un piso ... pienso.

Así que allá voy; unos cuantos metros de caída hasta notar un fuerte golpe y verme engullido por un montón de bolsas de basura.

Me incorporo como puedo, dentro del contenedor y asomo la cabeza, mirando a Luna. Parece que estoy relativamente sano, pero no se puede decir lo mismo de ella, que está perdiendo mucha sangre y parece que se desvanece.

- ¡Luna, aguanta!- salgo como puedo y me acerco a ella. Necesita un médico, así que miro si hay algún taxi, coche, ambulancia atraída por las explosiones, ... en fin, algún medio para llevarla urgentemente al hospital.

Espero que Andrúe y Sophia salgan también del atolladero.