Partida Rol por web

- Se han cachondeado de mi... - suspira negando con la cabeza - Pero les he provocado para que me siguiesen, - explica con un gesto de cabeza hacia la puerta - esperemos un poco, aunque me dá que se han acojonado por mi reacción. - termina ocultandose a un lado de la puerta preparado para coger al primero y lanzarlo contra el suelo.

Apenas Roger termina de decir eso, la puerta se vuelve a abrir bruscamente, y por ella salen dos tipos bastante corpulentos. Roger ya los conoce, mientras que Barry y Ted se pueden hacer una idea de quienes son. No parecen tipejos cualquieras, si no que parecen ser de ese tipo de sujetos que se gana la vida golpeando a otros, como mínimo. El tatuaje que asoma por el cuello de Zed delata a ambos, incluso con esa ropa a la moda y costosa, muy alejada del atuendo clásico del barrio... posiblemente para pasar de inadvertido, y haciendo gala de un buen sueldo. El otro, un negro calvo y bastante grande, sin duda parece ser Jerome.

Zed parece bastante cabreado, mientras Jermome sale detrás de él.

- ¿¡Donde esta ese cabrón!? - exclama mientras mira a Barry y Ted, sin notar la presencia de Roger, quien permanece oculto a un lado de la puerta - ¡Voy a romperle la cara! - exclama. No parece sospechar que Ted y Barry están relacionados con Roger.

Ápenas Zed termina de hablar, recibe el primer impacto, un golpe seco y firme en la nuca con el codo.

Después de sorprender a ambos matones con su ataque, se distrae observando las reacciones de sus hermanos y de los asesinos de su hermano mayor; pese a ello, suelta un derechazo contra la mandibula de Zed, desde abajo; algo conocido por los boxeadores como uppercut.

Roger, sin dar vueltas, y para sorpresa de todos, especialmente de Zed y Jerome, sale de su escondite, tomando a Zed por la espalda y sin darle tiempo a reaccionar, encenstandole un golpe de codo en la nuca...

Eso hace que Zed pierda un poco el equilibrio y se incline hacia delante, mientras Jerome le suelta del brazo y da un paso atrás, mirando a Roger.

El golpe que recibe Zed es fuerte, pero es un tipo grande y no es suficiente como para dejarlo fuera de juego.

Tu a por el blanquito y yo por el negro.

Sale disparado después de susurrarle eso a su hermano pequeño. Solo espera que le haga caso y que no se meta en medio y pase cualquier desgracia.

Da dos simples zancadas, con las cuales se pone a la altura de los matones. Con un fiero rugido sus ojos encolerizados buscan la mirada de Jerome, será su victima, y piensa y desea con fuerza y partirle cada hueso de su cuerpo.

Deja caer la pata de cabra desde el fondo de su chaquetón, que se desliza hacia su mano. Gira el cuerpo sacando la misma y elevándola rápidamente por encima de su cabeza, para sin pensárselo ni una fracción de segundo dejarla caer con toda su fuerza e inercia sobre la cara de su enemigo, del asesino de su hermano.

Esos dos segundos para Barry son casi eternos, vividos a cámara lenta, pero en cuanto el brazo se descarga sobro el otro hombre la adrenalina y la furia toman posesión de su cuerpo y pierde el contacto con la realidad.

Aquella pelea comienza bruscamente, primero con el golpe de Roger, quien toma de sorpresa a Zed, advirtiendo al resto y haciendo que comiencen a moverse.

Barry es el segundo en moverse, de un gran paso se abalanza hacia el grupo, como si de un gigante se tratase, y levanta la mano en alto mientras en ella aparece a la vista de todos una barra de metal, la misma que llevaba Ted en el coche y había recogido de casa. Barry no se hace espera, mira a Jerome, quien lo observa acercarse para luego levantar los ojos hacia la barra de metal y ver como esta desciende rápidamente hacia su rostro.

Todos ahí, y pese a lo que se desata en aquel callejón, pueden oír el crujir de los huesos de la cara de Jerome. Barry puede sentir como la nariz del negro se rompe con el impacto, mientras un poco de sangre salta y unas gotas salpican su rostro.

Jerome cae inmediatamente fulminado, duro como una tabla, mientras la sangre emana a chorros de su nariz y su boca. Cae completamente duro, sin poder emitir siquiera un sonido de dolor por el impacto...

Pero la cosa no se detiene ahí. Al mismo tiempo Ted intenta golpear a Zed mientras este se gira hacia Roger. Pero entonces Ted recuerda por que sus hermanos siempre le protegían en esos casos: Ted siente como golpea una de las costillas de Zed, aunque el único que siente el golpe es el mismo Ted, quien siente un dolor fuerte en sus dedos en el mismo momento en el que los nudillos golpean, como si le hubiera dado con todas sus fuerzas a una pared de concreto.

Zed siquiera se inmuta y se gira hacia Roger, mientras estira el brazo y le lanza un golpea de revés, el cual da de lleno en la mejilla de Roger, haciéndole dar un paso atrás, pero sin que lo sienta demasiado. Golpes mas fuertes le han dado a lo largo de su vida como para que eso le haga caer al suelo, así que no pierde tiempo y lanza un rápido derechazo a la mandíbula de Zed, pero este es mas rapido y se inclina hacia atrás, esquivando el golpe de Roger, el cual pasa cerca de su mentón pero sigue de largo...

Barry sabia que había golpeado con demasiada dureza a aquel hombre. Caía al suelo mientras la sangre salpicaba sus manos y su rostro.

Estaba a punto de frenar su ira. Pero el grito de dolor de Ted a su espalda le hizo volver al desenfreno que estaba viviendo. Se giro tan grande como era, para ver la situación. El otro hombre, el tal Zed estaba peleando contra Roger, y Ted se estaba doliendo de una mano.

No sabía que había pasado, pero no consentiría que nadie hiciera daño a ninguno de sus hermanos. Soltó la barra mientras se movía rápido hacia la espalda del asesino de su hermano.

No iba a golpearlo, tenían que sacar información, a la antigua usanza. A golpe limpio.

Abrió los brazos, largos como eran. Eran como unas barras de acero, y con fuerza y rapidez se cercaron alrededor del blanquito. Roger acabaría con el, y mientras, el le haría una presa con todas sus fuerzas.

El sonido que produce la barra de metal resuena en todo el callejón con un tono metálico cuando Barry la suelta y la deja caer al suelo, a un lado de un inconsciente Jerome, de cuya boca no para de brotar sangre.

Sin dar mas vueltas, y si perder tiempo, Barry se lanza tras Zed, tratando de apresarlo entre sus brazos fuertes. Sin embargo Zed también es un tipo grande y duro, por lo que aquello se le complica a Barry. Logra tomarlo con firmeza, pero aun así Zed puede moverse y mantenerse de pie, con cierta dificultad, pero puede hacerlo. Barry no lo inmoviliza del todo, pero si logra obstaculizar cualquier movimiento de su contrincante.

El tipo esquiva bastante bien, pero seguramente no pueda soportar una semicarga; y es esto lo que hace. Con un brusco impulso de su pierna izquierda intenta chocar con su medio cuerpo derecho contra el matón, para tirar a este contra la pared.

Después del golpe a Zed, el puño le duele como si lo hubiera estampado directamente contra un muro, en lugar de contra el torso del tipo. Por la mueca que había formado en su cara tras el impacto, cualquiera diría que era a él a quien habían golpeado en las costillas, y no al contrario. Mueve los dedos de nuevo, ajustándose el puño americano.

Tenía que continuar con la pelea de todas formas. Él no quería sentirse un inútil pero, aún encorvado tras los resultados de su propio puñetazo, no consigue hacer más que quedarse congelado en el sitio tragando saliva, mientras sus hermanos intentan sujetar al del tatuaje y embestirle. Estaba siendo más un espectador incompetente que otra cosa, y era eso justamente lo que había detestado siempre... pero era lo que estaba ocurriendo de nuevo...

Ted aun siente algo de dolor en su mano mientras observa como sus dos hermanos todavía siguen tratando de reducir a Zed, aunque este parece ser duro, al menos mucho mas que su compañero, el cual continua tendido en el suelo y sin moverse. Pese a que Barry y Roger tratan de reducir a aquel tipo de una buena vez, este aun se resiste a caer.

Zed intenta soltase de los brazos de Barry, pero no puede hacerlo, y si bien no esta completamente inmovilizado, Barry aun lo sostiene con la fuerza suficiente como para que no pueda atacar a Roger, quien sin dar mas vueltas se lanza contra Zed, tratando de hacerle caer sobre una de las paredes. Sin embargo Zed logra soltarse a tiempo y esquivar a Roger, dejando a Barry en su camino, quien también logra hacerse a un lado justo a tiempo para evitar la embestida de Roger, quien pasa de largo, sin darle a anda, como un toro enfurecido...

Si no pueden hacerlo de pie, lo mejor seria hacerlo en el suelo. Esta es la fugaz idea que cruza como un relámpago la cabeza de Barry. El tipo esta claro que ha estado más de un par de veces en peleas de aquellas características, y ya habían perdido el factor sorpresa.

Roger acaba de pasar como una apisonadora justo por su lado. No se lo había llevado por delante por pura suerte. Tenían que coordinarse. Pero no estaba precisamente de humor para estar dando instrucciones, y mucho menos en una pelea callejera. Así que hizo lo siguiente que se ocurrió. Un mal plan, si se paraba a pensarlo, pero no iba a pensar nada, así que se quedaría como un plan.

Volvió a realizar una presa, esta vez en un salto, hacia delante y hacia abajo. Su objetivo no era inmovilizar como antes a Zed. Al menos no de forma que no pudiera devolver los golpes. Esta vez iba a por sus piernas.

Lo agarro con fuerza por las rodillas. Sus brazos, largos y fuertes como eran, se enrollaron alrededor de su enemigo como una cadena. Dejando al descubierto su cabeza y su espalda. Agachado delante de aquel asesino. Era sin duda una jugada arriesgada. No se había planteado si quiera si el tipo iría armado. Y solo podían rezar para que así fuera.

Desde el suelo, con las rodillas flexionadas, empezó a moverse. Zed se resistía, como era de esperar. Pero si despegaba los pies de la nieve y el hielo que se había formado en aquel callejón, Barry tendría otro punto de apoyo para cumplir su misión. Ahora que lo tenia agarrado por las piernas, y que era un blanco fácil. Lo que pretendía era tirarlo al suelo tan largo como era, para poder darle una pateada entre los tres hermanos.

Solo necesitaba unos segundos mas, y que alguien lo distrajera, y su plan daría resultado.

Parado donde estaba, de su nariz podía verse salir continuamente vaho, blanquecino a causa del frío. Su respiración era más deprisa de lo normal debido a la adrenalina que corría por su sangre. Después de ver cómo se zafaba de sus dos hermanos, Ted se anima al fin a lanzarse otra vez al ataque contra el tipo. Era correoso, pero si le daba un buen golpe se le iban a quitar las ganas de moverse tanto, o por lo menos en eso confiaba al decidirse a arremeter. Se dirige en la acometida con el puño americano en alto, bramando para darse valor a sí mismo, aunque su voz más bien aguda no es que ayudara precisamente a intimidar a nadie.

Luego de esquivar a Roger, y mientras Zed aun se esta acomodando después de esquivar aquella embestida, Barry se lanza en un tacle a los pies de Zed, tomándolo con fuerza, pese a que este se resiste, y sin dejarle moverse. Tan solo un leve empujón hace falta para hacerlo caer, pues Barry no logra hacerlo con su propio impulso.

Es entonces cuando Ted lanza un fuerte puñetazo que da en la cara de Zed. Ted puede sentir el golpe en su mano, aunque esta vez no se lastima, y ve como Zed suelta algo de saliva al recibir aquel golpe por sorpresa, justo en la mejilla izquierda, a la vez que suelta un leve quejido tras el golpe.

El puñetazo que le da Ted no parece ser lo suficientemente fuerte como para noquearlo, pero si como para hacerle perder el equilibrio y, junto con la ayuda de Barry, hacer que caiga al suelo, aunque continúe consciente.

Roger se detiene al apoyarse contra una de las paredes de aquel callejón, impulsado por su propia embestida, la cual no tuvo éxito. Al girarse ve como Zed se encuentra en el suelo, con Barry y Zed a sus lados. Si bien aquel matón no parece estar reducido todavía, y aun se lo ve dispuesto a dar pelea, esta en una posición bastante incomoda, la cual les da la oportunidad perfecta para “terminar” con aquel tipo de una buena vez.

Roger se incorpora y se limpia la chaqueta, un poco sucia por apoyarse en aquella pared, mientras camina lentamente a donde esta Zed tendido, pensando mil formas en las cuales “divertirse” con aquel sujeto, aunque por el momento tan solo camina y lo observa, como si disfrutara de aquellos segundos antes de hacer algo.

Barry ve como Roger se acerca. Aquel tipo no para de moverse, y no quiere dar tiempo a que el negrata se lavante y se una a trifulca. El tiempo es oro, y para ellos mas. Cuanto mas tiempo pasaran en aquel lugar, mas posivilidades de que alguien asomara el hocico y viera lo que estaba pasando.

Y no tenia ninguna intencion de dar explicaciones. Sin embargo, Roger no hacia nada. Ted, aunque se esforzaba, no era precisamente un tipo pesado, alguien con quien contar para una pelea, y sin embargo ahi estaba, dandolo todo. Y el cabron de Roger se habia parado a mirar.

¡Pateale de una puta vez, a que coño estas esperando!

Mientras, notaba como Zed empezaba a revolvese, y el estaba en una posicion delicada, aunque estuviera en el suelo, estaba colocado en sus piernas, y en cualquier momento podia lanzarle una patada y dejarlo sonado. Asi que no queria jugarsela.

Empezo el forcejeo, y Barry vio su ocasion. Tan grande como era, se levanto un poco, su presa se estaba ya preparando para lanzar una coz feroz, pero el sabia lo que hacia, se dejo caer tan grande era, con el codo derecho por delante, apuntando claramente a su entrepierna. Si no le daba con el codo, el peso de su cuerpo en la zona haria el resto.

Le estaba gustando el momento, estaba desahogando toda la rabia que había ido acumulando ese día, y sabía que los tipos se merecían toda la paliza, y mucho más. Derramar su sangre ahí mismo es en lo que pensaba, mientras las imágenes del video de la muerte de su hermano pasaban por su cabeza.

Confiado por el puñetazo que acababa de propinar en el mentón de Zed, y viendo al matón tendido en el suelo y forcejeando en el suelo con su hermano, se anima a atacar de nuevo lanzándole una patada en la cabeza.