Partida Rol por web

Al parecer la mujer del árbol requería la atención especial del esqueleto, el cual en un alarde de grandiosa generosidad él habló, continuando con su historia, para ver si así, poco a poco las sospechas que recaían sobre el se desvanecían.

-Hablaré, pero cuanto más hable, quizás más daño haga a los leales... pero si insistes...

Yo tengo el poder de saber que hace cada artefacto y quien tiene artefactos.

Kerasi tiene el poder de hacer 2 noches o 2 días seguidos.

Malderín, tiene un poder, desconocido aún y confeso por él mismo.

Lothlorl, tiene un poder, el cual lo mantiene oculto.

Asgalot, tiene un poder, el cual lo mantiene oculto.

Bloop, tiene un poder, el cual lo mantiene oculto.

Shantee, tienes un poder, el cual lo mantienes oculto.

-¿Que espero con esto? Que TÚ, Bloop, Asgalot,Lothlorl y Malderín, si es que no sois traidores seais eliminados por La NADA. ¿Que es algo feo y que eso no se debería hacer si somos todos aliados?. Cierto, pero no me importáis en lo más mínimo, así como individuos que sois, si alguien quiere hacer una tortilla hay que romper un par de huevos.

-Pero aún con todo, no es que trabaje para los traidores, es que les doy la vía libre para que sacien sus paladares. Mientras que los leales que quedan y aquellos que han ido de frente y han mostrado y hablado de sus artefactos ,y que sean parcialmente inocuos, como el caso de Kerasi. Sobrevivan a las noches y en los días luchen por descubrir a los traidores.

-A fin de cuentas, sin vosotros 4 aún quedarán más leales que traidores en pie y con un número más reducido los poderes inocuos podrán pillar a los traidores antes de que sea demasiado tarde. Un sacrificio necesario. Si queréis votarme porque os he condenado, hacedlo por el odio que os he creado en vuestros corazones, pero no porque sea un traidor. 

-Ah, y hay más gente con artefactos que no he nombrado. Pero eso lo diré una vez que termine esta votación. Así que, si queréis -refiriendose a los traidores- mas información podéis intentar no votarme y llevar la culpa sobre la cabeza de uno de vosotros o sobre otro inocente, atacar a la Nayade o a Duwin es una idea interesante.

-Mientras que los otros -refiriendose a los leales que el señaló- podéis traerme de vuelta para que diga más nombres y así reducir las posibilidades de ser atacados. De momento tenéis 20% de posibilidades en ser elegidos por la noche, si la Nayade hace 2 veces noche... bueno, mucha suerte.

-Y para el último grupo -leales con poderes que no han nombrado-, vosotros no me traigais de vuelta que quizás se me escape algún nombre más y sea el vuestro. O traedme y os cuente un secreto de los traidores.

–¿Ya has dicho todo lo que querías? O aún te quedan más cálculos, números y sandeces? – replicó la mota de tinta, tan irritada como el elemental de fuego– Eres como un niño que quiere romper el huevo para ver si tiene un pollo, sin importarle si le mata o no. Es más. Disfrutando de su muerte.

Bloop estaba tan furiosa que su piel líquida comenzó a burbujear, pero trató de calmarse y se alejó dando saltitos mientras murmuraba. "Todo va bien, todo va bien". Sus huellas en cambio eran de otra opinión.

"De eso nada."

Las ramas de la ent se agitaron furiosas, más no se movió del sitio.

-Valiente ssacrificio el de quien sse esscuda en mentirass y chantajess para ssalvar ssu exisstencia mientrass condena a otross, y luego cuenta cuatro en vez de ssiete porque le conviene a ssuss númeross. Yo no he pedido essa información, ssi no la que te guardass de loss traidoress y no quieress decir. ¿Por qué? Todo mediass verdadess, nada bueno.

Malderín, ante tanta pelea, se asustó y salió corriendo a una esquina, dónde se quedó hecho un ovillo. Intentaba escuchar y entender todo lo que se había dicho. Pero se había dicho demasiado.

No sé porque el señor esqueleto quiere que yo muera, si dice que es bueno. Yo no quisiera matar a nadie, ni a los malos tractores. Pero claro, hay que salvar a Fantasía. 

La verdad, yo dije que la emperatriz me había dado un regalo y pensé que habría tenido para todos, pues ella es justa y nos quiere. Y no creo que el regalo sea prueba, si ella no sabe quién es el traductor! Yo no pido que nadie lo explique si no quiere, pero me lo podéis decir si queréis.

Bloop, ¿que has dicho de saber quién mató a Ella? Lo sabes seguro o son suposiciones? 

- Acabas de poner una diana en la cabeza de las personas que tienen herramientas que ayudarían a nuestra causa ¿y pretendes que se te agradezca? ¿después de haber mentido además en lo que a ti se refiere? ¿cómo podernos fiarnos ahora de tu palabra? valiente desgraciado...  es posible que acabes de condenarnos a todos...  pues como dijo Kerasi, lo que debe hacerse con los objetos es utilizarlos, no perderlos inútilmente junto con la vida de sus portadores...

- Empiezo a pensar que sólo es afán de protagonismo...  o que tú mismo, eres un traidor...  nadie sino haría lo que tú estás haciendo...

El duende de los bosques mira a todos los presentes, prestando especial atención al esqueleto, a la mujer árbol y al fauno a los que dedica una mirada pensativa.

Se dirige hacia el rincón del fauno.

- Malderín es tu nombre, ¿cierto?. Eres criatura del bosque y por tanto de fiar.- Se pone a su lado y le frota la espalda dándole ánimos. -No te dejes intimidar, el esqueleto quiere dividir a los presentes, pero Fenrir y el resto son fuertes de voluntad.- Da un abrazo al fauno y aprovecha para meter una bolita de tela por uno de los agujeros de la flauta sin que se den cuenta el fauno y el resto.

Después va hacia el árbol y se sube a su hombro mientras dice - Eres criatura de bosque y por tanto de fiar, ¿puede Fenrir subir, Shantee?-

Desde el hombro de la mujer planta observa a los presentes.

-Fenrir no entiende al esqeleto. ¿Quiere el esqueleto ser desterrado ya? Si es traidor es tonto, pues los leales no le quitarán el castigo aunque puedan y los traidores tampoco para no desvelarse. Y si es bueno es tonto también, porque los leales pierden un aliado y les confunde y los traidores se libran de una molestia que puede averiguar sus poderes.

- Aunque el esqueleto haya mentido y lance acusaciones a diestro y siniestro, no puede dividir a los presentes. Debemos mantenernos unidos, pues solo los traidores quieren dividirnos. Fenrir cree que aquellos que aboguen por la división de los presentes son los traidores.

Tras un momento de reflexión mira directamente al esqueleto.

- Aún está a tiempo de rectificar, señor Bones

Ignorando al Fauno, terminó con la Ent.

-Si dijera lo que queríais escuchar ahora, ¿Por que me habríais de rescatar después de que me hayais condenado injustamente?. De todas formas, una temporada en el Valle de los Emperadores no tiene mala pinta, nunca he ido de viaje, prometo traer postales para todos cuando vuelva de allá. Mucho mejor que el destino de ser devorado por La Nada que tú tendrás... al igual que la Hada aquella... Mis conocimientos serán los que me salven, y también salven al Mundo de Fantasía y a la Emperatriz. ¿Por que desvelarlos ahora y dejar que me condeneis para una eternidad atrapado?.

Viendo hacia aquel ser, pequeñito y harapiento, le respondió.

-¿Eres "El Caminante" se nota que solo sabes caminar, porque de pensar poco y de actuar aún menos. Una vez en una de mis aventuras me enfrenté contra un fuego aterrador que estaba devorando el bosque sagrado de una pequeña villa. ¿Que fue lo que hice? Mandé cortar los árboles del bosque. El fuego se detuvo una vez que no tenía como saciarse, y ahí en su momento de debilidad pudimos apagarlo. El fuego no llegó a la villa y salvamos a todos los niños y ancianos que ahí se encontraban. Y pasó lo mismo que está pasando aquí, en vez de agradecer mi colaboración y la de mis compañeros, nos odiaron por cortar sus "valiosos arboles", pese a que esos arbustos serían su perdición.

-Con esto quiero decir, no me gusta el fuego, no me gustan los arboles. Y si hay que hacer sacrificios para que otros -y creo que ellos bien saben quienes son- puedan pasar las noches a salvo y usar esos poderes contra los traidores. Pues es un sacrificio que hago en nombre de los que aún no he nombrado.

-Por cierto, si fuera un traidor; este poder que estoy usando me daría una ventaja enorme, de hecho, en vez de decir quienes poseen objetos, directamente se lo contaría a mis compañeros, y solo a ellos, en horario nocturno, y terminaríamos uno a uno, contra todos aquellos con artefactos. O iría yo en persona. Y por cierto, si soy yo un traidor, ¿Por que no hay nadie defendiendome?. En teoría alguien tendría que decir "Es demasiado tonto para ser un traidor, dejemosle de lado en sus tonterías" algún argumento de ese estilo para dejarme por loco, y así no disminuir nuestro numero y cumplir la misión que La Nada nos habría encomendado.

Y viendo al nuevo, se atrevió a comentar y corregir su lógica.

-Entonces dices que porque vienen del bosque no pueden ser traidores, ¿Entonces podemos acusar a los seres de fuego por ser destructivos por naturaleza? Menuda lógica más vaga...

-Respecto a si soy o no un traidor. No lo soy. Pero mi actitud es la propicia para una situación como esta. Ya que el objetivo que debemos de tener es dividirnos. Directamente entre los leales y los traidores, porque como sigamos de la mano todos juntos mientras caminamos... nos dirigiremos hacia donde los traidores quieren que nos dirijamos. Por eso yo me niego a daros la mano a ninguno de ustedes, ahora todos son mi enemigo. Así que ahora solo he de ver con quien disculparme por mis actos cuando todo esto acabe.

 “En cuento a mí, Bones, creo que Kerasi y Kshpir ya lo han dicho todo. Y lo último que dices, que incluso es cosa buena si caen algunos de los leales a la Emperatriz porque de todas formas no hacen nada, es hasta grotesco. Tú crees que hacen nada, pero la verdad es que simplemente se enfocan, no se pierden en palabrería vaga y calculan sus próximos pasos contra los traidores.”

No articuló lo que estaba pensado: que Bones quizá era uno de ellos. Daba a pensar que el poder de que se jactaba era justamente uno que reclamaba tenían todos los traidores...

Hyrr participó poco en esa conversación, pero había quedado con el sinsabor de la arrogancia de Bones presente. Ella no salía mucho, pero su viaje le había enseñado un poco sobre los habitantes de Fantasía y sabía que no todos eran así, para ello solo restaba mirar a los presentes.

Su sentir fue compartido por muchos otros que, en mayor medida, expresaron su inconformidad con las palabras de Bones. A pesar de eso, no estuvo a tiempo para responderle y decidió esperar hasta el otro día para intervenir. Sus acciones eran completamente incautas y eso se vería reflejado en otros habitantes.

Atreyu la fue a buscar esa mañana y Hyrr se sentía renovada, con la luz del sol acariciando su cuerpo y llenándolo de vitalidad una vez más, cosa que no sucedía durante las noches porque no era tan fuerte su luz y sus energías podían verse menguadas, aunque ella ardería mientras ardiera la llama eterna.

Cuando escuchó la noticia de la Hada, Hyrr se puso algo triste, ya que así la conociera o no, era un habitante de Fantasía como ella, aunque el hecho de que llegara un invitado de última hora la emocionó.

Sin embargo, Bones estaba incluso más molesto que el día anterior y Hyrr no guardó más silencio. Se acercó a Kshpir y lo miró con una sonrisa tranquilizadora. Era bastante irritante, pero estaba dándole lo que quería.

Hyrr rió y miró a Bones con una sonrisa en la cara, mas su cabello trepidante mostraba su verdadero estado de ánimo – Eres tan ególatra que no te das cuenta que solo te estás beneficiando a ti mismo y estás condenando a muchos más. Tanto así que estás acaparando los juicios que todos podríamos invertir en encontrar a los verdaderos traidores. Los traidores deben estar supremamente felices de que les regales información y de que quites todas las miradas de ellos al llevártelas todas. Es que ni siquiera yo he querido tanta atención, y eso que yo vivo sola en el santuario sin nunca salir – dio un paso en el aire y luego otro, asemejando a una escalera de fuego que le llevó hasta Kshpir, cayendo dentro de él para nadar entre las llamas y volver a salir. El elemental no se había quejado y Hyrr extrañaba el calor de su santuario.

Salió de allí y se dirigió hacia Kerasi, a la cual tocó con cuidado, mas su tacto era suave y fresco, ya que los guardianes podían controlar el calor de sus cuerpos, pero sus cabellos eran llamas ardientes, así que procuró no estar mucho tiempo cerca, no quería dañarla.

- Ya que Bones ha hecho el favor de revelar tantos datos de los inocentes a los traidores, creo yo que sería una buena alternativa prolongar el día. De esta manera, si Bones se marcha, podremos buscar a los verdaderos culpables sin intromisiones. Claro está, es tu decisión – le guiñó un ojo y volvió con Kshpir.

Con respecto a la historia del bosque y el fuego de Bones, anotó – Verás, el fuego puede ser destructivo, pero también puede ser vida. El sol, los volcanes, la luz, todo viene de la misma fuente que yo protejo. Tal vez tú hiciste lo correcto, pero por las razones equivocadas. Si ves maldad en todos, no puedes ver la bondad y eso solo te llevará a juicios inexactos y apresurados. Si tomáramos más tiempo en analizar y menos en escucharte, podríamos haber llegado a algo. A veces el silencio habla más que los discursos – era entusiasta, pero no había vivido tantos millones de años por nada.

El espectro soltó una carcajada hueca ante las múltiples peroratas de Bones.

-No sé si eres traidor o leal, lo único que me queda claro es que eres idiota. Aunque ahora ya entiendo mejor toda esa perorata sin sentido alguno sobre probabilidades entre eventos totalmente inconexos.

-Vuelvas o no e independientemente de tu lealtad, tu actuación sólo ha favorecido a los traidores. No sé si hay artefactos capaces de traerte de vuelta, si es que te vas a la Ciudad de los Antiguos Emperadores, lo que tengo claro es que los poseedores de artefactos caerán uno por uno los primeros y que eso dejará a los traidores muy cómodamente instalados en sus posiciones. Espero que tu sacrificio tenga sentido para ti, Bones, porque no lo tendrá para nadie más. Algunos moriremos inocentes, otros culpables, pero tú tendrás la sangre de todos sobre tu frente, incluso si fueses leal, cosa que dudo mucho.

Respondiendo a la división de opiniones que se cernían sobre el esqueleto este tan solo les contestó con un ademán de manos y con unas parcas palabras, que a fin de cuentas, no era más que un mero resumen de lo ya dicho con anterioridad.

-Ahora mismo hay 3 opciones que tenéis entre manos.

Primera opción; creeis que soy un traidor y por tanto debo ser expulsado de esta sociedad, VOTAD POR MI.

Segunda opción, no creeis que soy un traidor pero aún así preferís condenarme a mi antes que buscar a un traidor, VOTAD POR MI.

Tercera opción, no creeis que soy un traidor y preferís hacer algo útil con vuestro voto en el día de hoy, entonces, VOTAD POR HYRR.

Me parece raro que ella quiera que 2 inocentes desaparezcan a manos de sus compañeros. De hecho, es mejor que los traidores se deshagan de 2 leales, a que 2 leales desaparezcan a causa de una votación doble y no haya esa posibilidad cuando el número de traidores y el de leales se vayan equiparando para así poder votar con cabeza y tener mayor probabilidad de acertar a dar a un traidor.

De todas formas, yo sé que volveré, porque sé que aquella persona a la que no nombré y estoy protegiendo dando otros apetecibles objetivos va a traerme de vuelta a este Mundo... Y sí, una vez por ciclo puedo saber qué tipo de artefacto tiene uno de ustedes, aún sin mirarlo. Así que, nos vemos a la vuelta...

Kshpir se quedó de una pieza cuando Hyrr, una elemental de fuego mucho más importante que él, se metió en su interior para caldearse. De haber podido, se hubiera ruborizado.

—Cuarta opción —gruñó el elemental, mirando una vez más al esqueleto—, no sabemos si eres o no un traidor, pero todo lo que has hecho ha perjudicado a los leales. Creo que no es tan descabellado votar por ti...

Y por lo que comentaba el resto, parecía haber bastante consenso en la sala.

La última carta bajo la manga del esqueleto la ha levantado en el momento en que aquel ser de fuego le ha vuelto a amenazar, pese a todo, esta carta no le provoca mayores beneficios que el de hacer que alguien reconsidere su voto o su postura. De todas formas, la sentencia ya está firme y ocurrirá sí o sí lo que tenga que ocurrir, o al menos eso ha pensado el esqueleto.

-Si hay consenso en la sala, indica que los traidores están a favor de condenarme. Así pues, ¿Soy un traidor?.

-Por cierto, hay un poder capaz de vincular dos almas, si una va a otro plano existencial la otra también. No importa si son dos traidores, dos leales o ambos. Aunque creo que su lazo se romperá si una es traída de vuelta de dicho lugar. ¿Sabías que yo he sido marcado por ese poder? ¿Quieres saber a quien estoy vinculado yo? Seguro que la respuesta te va a interesar... 

Dicho lo cual, comenzó a reirse de los presentes, aunque en particular del rostro fogoso de uno de los que lo han tomado como un enemigo y no como lo que era, un aliado un tanto macabro. ¿Será un farol del esqueleto y dicha habilidad no existe? ¿Será verdad que su poder le va diciendo cosas de interés sobre los artefactos de otros? Lo único que tiene por seguro aquel esqueleto es que si él cae, no irá solo.

-Aunque parezca extraño, esta visión la acabo de tener en estos instantes, tras acumular el poder que se me ha otorgado y dirigirlo hacia uno de los presentes en particular, que ese sea una habilidad da miedo, el hecho de vincular a dos seres... pero que justamente sea yo... no me lo esperaba... y apuesto a que alguien de los presentes se lo esperará menos... bueno, tendremos tiempo para hablar en el Destierro.

-De todas formas, ya sabéis, si votáis por mi, otro de los aquí presentes caerá.

–Nadie ha hablado de consenso– interrumpió Bloop– pero quien es un traidor traicionaría hasta a su propio grupo con tal de continuar su terrible labor. ¿No pretenden al fin y al cabo destruir Fantasia? ¡Qué mas les da un destierro! Podrían elegir a quien quisieran, incluso a uno de ellos para despistar. Pero ilústranos. ¿A quién has vinculado? No me hará cambiar mi decisión, te lo advierto... porque ese poder beneficia especialmente a los traidores, que saben quien es de los suyos y quien no, y pueden usarlo para acabar con más inocentes.

- Enhorabuena Bones, has conseguido que todos creamos que eres un traidor...  si eso era lo que deseabas lo has logrado.  Por otra parte, si tanto sabes ¿no sería más lógico revelarlo ahora y no obligar a otro a malgastar su regalo en una perreta infantil tuya? habla ahora y déjate de enigmas y lógica de mercadillo, pues si tanto sabes, deberías saber el número de regalos que nos ha otorgado la Hija de la Luna, y ni eso nos has dicho.

Primero no tenías dones y ¿ahora tienes dos? ¿Cómo crees que podemos ya fiarnos de ti? Mentiras, mentiras y más mentiras...  palabras, acusaciones, y la irresponsabilidad de llenar nuestras cabezas de dianas.

Te miro y sólo siento vergüenza si es que eres un aliado, cosa que como el resto, dudo...

-Creo recordar que dije que no tenía artefacto alguno, cosa distinta a no tener el poder que uno me ha entregado, es decir, a diferencia de vuestras baratijas, yo soy el catalizador de ese poder. Pero sin artefacto.  Así que tecnicamente no he mentido. Aunque supongo que no sabríais reconocer una mentira aunque vuestra vida dependiera de ello... je... que irónico...

-No diré nada más, a estas alturas buscar a traidores es complicado, así pues la opción más lógica es esperar a que pasen los días y el número de molestos inocentes vaya decayendo, bien por el trabajo de los traidores por la noche o bien por la estupidez de los leales por la mañana.

-Reitero, para los duros de mollera... o carente de esta. Mi único poder se basa en ver quién de los presentes tienen artefactos, tanto como Lothlorl o Bloop. Además de eso, si veo un artefacto de forma directa puedo saber, que no decir, qué es lo que hace dicho artefacto; al menos hasta que su dueño, u otro, confiese su utilidad. Estas son mis habilidades que las tengo siempre activas.

-Y además una vez por día puedo saber qué hace un artefacto sin verlo y si tiene efectos directos, verlos también. Por la noche del día anterior, antes de que el Hada desapareciera, he visto que ALGUIEN tiene el poder de traer de vuelta a seres desterrados. Y hoy por la mañana he visto que ALGUIEN me había vinculado con OTRO de los presentes. Y esto es lo que os he contado. Espero que esta vez lo hayáis entendido. Sería un desperdicio dar tanta información a quien no comprende lo que se les dice...

-De todas formas, cuando vuelva, traeré nuevas noticias... y una postal para vosotros de la Ciudad Antigua de los Emperadores... si es que aún no la habéis visitado para entonces... o si estáis flotando en la inmensidad de La Nada...

Asúmelo, nadie te va a traer de vuelta porque nadie te aguanta aquí. Si al final te mandamos al exilio nadie te querrá de vuelta, con o sin información.

Y con eso se olvida del esqueleto.

Yo no sé a quien votar. Y ahora también tengo dudas sobre si usar mi poder o no. Si no lo uso puede que me quieran matar, pero si lo uso en parte estoy desaprovechando un poder que luego será más útil. Los dos seres de fuego me habéis pedido que lo use. ¿Qué opina el resto?

"¿Postal?" ¿De qué hablaba ahora el saco de huesos? Por si fuera poco, ahora se inventaba palabras raras. A Kshpir empezaba a darle vueltas la cabeza...

—Mmmm, yo no te he pedido que usaras tu poder, Kerasi —dijo, dirigiéndose a la náyade—. Sólo he estado de acuerdo en que hacerlo era lo que más reducía tus posibilidades de morir a manos de los traidores. Puedes reservártelo, pero en ese caso serás más peligrosa para ellos y la diana seguirá sobre tu cabeza. Tú debes decidir...

“Lamento no poder aconsejarte en este asunto”, dijo Kairim a Kerasi. “La Emperatriz te entregó el poder a ti, y sólo a ti, porque sabía que tú eres el personaje designado para hacer mejor uso de ello que nadie. La Emperatriz confiaba en que tú sabrás cuándo servirte de él. Y yo no confío menos en ti que le Emperatriz.”

-Difícil decisión- respondió abatida Bloop- indudablemente tu poder sería de más utilidad sabiendo que hay más de un traidor. Claro que si no lo utilizas ahora los traidores temiendo su fin pueden acabar contigo. Uy uy. Pero hay algo más.
Bloop levantó su negro dedo.
-Un traidor puede decidir no matarte hasta que lo uses, mientras quedemos más leales que traidores, con la esperanza de que decidamos desterrar a alguno de nuestros compañeros, quedando así debilitados. Además, ellos pueden pensar que si no te matan sospecharíamos de ti. Creo que decidas lo que decidas estás a salvo pero también creo que usarlo ahora beneficia a los traidores.
Bloop se acercó a la mujer árbol, esperando sentirse algo protegido bajo su sombra.