Partida Rol por web

Pensaba que me iba a perder la carrera, por un isntante me hiciste dudar. Dijo el pequeñajo desde lo alto de la caja ¿Lo has traído?

Vestía un traje bastante mas elegante de como lo habías visto en el campamento, cosas por otro lado normal.

Sonreí ante su comentario y le conteste mientras me quitaba la mochila -Aquí está.-

Después miré la caja y le pregunté -¿es ella?-

Morimasa salto de la caja con un brinco a pies juntos

Puede, déjame ver cogió la pieza y sonrío como si se le iluminara la cara. Bien, así que querías correr con mi moto¿ Verdad? Este es el trato, tu corres y te llevas la cuarta parte de lo que saquemos en apuestas

La cuarta parte... no me parecía un mal trato.

-Trato hecho.- le dije con una sonrisa. Tenia ganas de correr en esa moto. Esto iba a ser divertido.

La moto que había en la caja era una buena moto, una shiba kawasaki de 3º generacion, de 750cc, pero no era la que esperabas, esta moto esta bien pero la otra sería bastante mejor.

Además ésta estaba en perfectas condiciones, y funcionando reluciente.

El oriental frunció el ceño mientras observabas la moto.

¿Que ocurre? preguntó de improviso Pareces decepcionado.

El tono que usaba estaba a medio camino entre la sorpresa y la indignación, l amoto estaba muy bien y tu reacción parecía molestarlo, como si la hicieras de menos.

¡Lastima!

-No... em... pensaba que seria una moto en la que encajara esta pieza- dije señalando la pieza, -pero bueno, hay que darles alguna oportunidad al resto, aunque tampoco muchas ya que esta es una gran moto. Así ganaremos más con las apuestas , jeje.- dije con una sonrisa. Una carrera es una carrera y este tipo parece que es un filón. Toca ganar e impresionarle, igual, algún día, me deja la otra moto...

La moto en que encajara la pieza... El oriental casi rompe a reir Si la tuviera no la arriesgaría en una carrera así, la verdad, la vendería  y saldría de las calles.

Durante los siguientes minutos pasaste hablando con los mecánicos acerca de la moto que ibas a conducir, memorizando el trayecto, recibiendo consejos sobre donde podías recortar tiempo y sobre como reaccionaría la moto, no conocías el vehiculo lo cual era una desventaja.

Todo el lapso de tiempo hasta que llamaron a los participantes a la linea de salida fue frenético, mucho trabajo en poco tiempo, y ahi estabas, ante las miradas de todos en la linea de salida, habría 30 competidores y un par de centenares de personas allí, ibais a atravesar la ciudad y desafuar a la policia en una carrera sin reglas donde se jugaba mucho dinero todo el mundo, la ruta estaba mas o menos indicada pero había hueco para que quien quisiera cogiera tal o cual calle. Sólo habían indicado los puntos de control.

Los nervios, el sonido de motores, el olor a aceite y gasóleo era la anticipación a la adrenalina y la velocidad, conforme todos os poníais sobre las motos y arrancabais motores.

¡Buenos días competidores! dijo una mujer con pinta de pandillera a los que estabais sobre las motos a grito pelado desde un atril Vengo para asegurarme que entendéis las normas... bien, ya he acabado de recordarosla¿ Alguna pregunta?

Las palabras de la mujer arrancaron unas risas un tanto macabras de algunas gargantas, bajo los cascos de motorista no conseguiste ver sus rostros, pero por su voluminosidad una de ellas parece una mujer.

Quiero una carrera divertida y que de que hablar durante el próximo mes, a mi disparo empieza la carrera, si alguno sale antes de la salida daré la salida disparándole a él. Bien señores, buena suerte.

Dicho lo cual saca un fusil de una caja con una sonrisa que os desafía a hacerlo

La carrera estaba a punto de empezar. Este momento siempre me encantaba. Había estudiado el recorrido y me gustaba la idea de los puntos de control.

Tenía que comprarme esos cachivaches para enchufarme a los vehículos, nunca había sido muy partidario, pero eran una ventaja obvia.

Miré al resto de los competidores y me preparé para salir.

La mujer que habló se dirige a una tarima imporvisada con cajas de madera de algún almacén y desde allí hace gestos a la gente que vitorea y grita para que se calle, durante unos segundos consigue su objetivo y todos parecen hipnotizados por el rugido de los motores, que comenzáis a revolucionar en punto muerto para salir como tiros en cuanto metáis la marcha.

Los tubos de escape comienzan  a expeler humo y el aroma a combustible se hace mas fuerte a vuestro alrededor, desde dentro del casco todo parece amortiguado, tanto sonidos como los olores, hace calor y notas el pelo apelmazarse contra tu cabeza. 

Entonces suena el disparo de salida, todos metéis las marchas y la goma resbala en el asfalto previo de salir precipitados hacia adelante como balas dejando la turba de gente de la salida atrás que se revoluciona nuevamente al animar a sus corredores en un coro de voces frenético.

La carrera daba comienzo.

Pensé en una ruta alternativa, aunque no me fiaba mucho de conocer la zona, así que procuré no arriesgar mucho. Aceleré y salí de la parrilla de salida.

Que empiece la fiesta

El grupo de cabeza salio disparado dejando detrás de si a los mediocres y a los aficionados, la moto respondió bien, la sentiste vibrar entre tus piernas y rápidamente la salida quedó atrás, de los  5 que erais en el grupo pronto se fue posicionando cada uno en un puesto, pero dada la naturaleza de la carrera delante tuyo se fueron por otro camino dos de los competidores, no te dio tiempo a darte cuenta hasta que ya pasó, tampoco sabías si iban atener ventaja por ese movimiento.

Mientras, por detrás tuyo dos competidores a la misma altura se enzarzaron en una pelea de manotazos y puñetazos hasta que finalmente uno de ellos calló al suelo y salio arrastrándose  él y su moto  a toda velocidad contra un coche aparcado en un lado de la calle.

La carrera empezaba como de costumbre. Mi prioridad era correr. La cosa se iba a poner cada vez más dificil y convenía ganar el mayor terreno posible. Me gustaba esta moto, no era como la mía, pero me gustaba.

Te deslizaste a toda velocidad entre el tráfico y atravesaste el primer punto de control, algunos forofos estaban allí y animaron al pelotón de competidores que ibais en cabeza. Muchas veces había sido tu uno de ellos, era reconfortante haber subido ese peldaño y ser el protagonista.

Desde fuera los peatones y conductores solo veían la estela roja de tus luces de posición, pero de repente algo pasó y te separaste de todos los competidores, cuando quisiste saber que ocurría viste venir tráfico hacia a ti en dirección contraria, te habías equivocado de calle, tomando una desviación antes de la que debías y habías acabado en una calle de  sentido único.

El corazón se te disparó mientras reaccionabas por instinto entre pitidos y gritos de sorpresa y el sonido de neumáticos frenando repentinamente sobre el asfalto.

Me había metido por donde no tocaba y ahora tenia que salir de aquí. El truco era no estrellarse...

Tras esquivar los coches me dirigí al próximo punto. Era indiscutible, tenia que aprenderme las rutas antes de ir a una carrera. Bueno, ahora, lo que tenia que hacer, era acabar esta con vida (y ganarla, ya puestos a pedir...).

Continúe con mi ruta con la esperanza de que algún otro conductor se perdiera por el camino.

Pasaste entre los coches zizagueando de un sentido al contrario sobre la linea que dividía la calle en dos carriles, tu corazón dio un vuelco cuando sin saber muy bien como pasaste entre dos coches sin mayor contratiempo que llevarte por delante un retrovisor y un arañazo en la chapa de tu moto, finalmente te reincorporaste a la carrera con unos 5 segundos de desventaja de desventaja, pero quizá tu equivocación fuera tu buena estrella pues delante tuyo pudiste ver a varios coches patrullas persiguiendo a el resto de los competidores. 

Desde tu posición privilegiada pudiste desviarte y tomar una avenida paralela desde donde conseguiste recobrar la ventaja y cruzaste el checkpoint el 2º, un tercero te seguía de cerca, las sirenas sonaban detrás de vosotros, acallando los vítores de los espectadores e iluminaban la noche como si fuera navidad. También escuchaste como alguien abría fuego sobre el coche patrulla pero estando blindado como estaba lo más que sucedió fue una sucesión de chispazos sobre su carrocería, acompañados de sonido de metal contra metal y el aire cortado al rebotar las balas y siguió en pos vuestro sin inmutarse.

¿Como demonios habían cogido al grupo de cabeza tan rápido? Era obvio que alguien se había ido de la lengua, quizá alguien que pretendiera ganar aprovechándose de los problemas de los demás

¡Polis!

A veces pasa, pero nunca es agradable. Además, han sido muy rápidos. Esta carrera sería peligrosa...

Procuré centrarme en mi y evitar a los coches de la policía. Con un poco de suerte y esta moto los perdería de vista, aunque si han llegado tan pronto puede que sepan la ruta...

Peridste tu venaja zigzagueando en una calle con mucho tráfico, para sacarte a la policía de encima pero otras dos motos se aproximaron recortando distancias en una larga avenida tras de ti, no pudiste distinguir nada mas que su velocidad y que eran motos pues sus luces impedían que vieras mas allá por el retrovisor.

Aceleraste todo lo que pudiste para evitar que te rebasaran y pasasteis muy cerca los unos de los otros el tercer punto de ruta, parecía que el volumen de espectadores se hacía mayor, pudiste escuchar como disparaban nuevamente al coche patrulla pero esta vez con armas de mayor calibre.