Partida Rol por web

Harold acompañó al mediano para entregar su propio desafío.

Yo también quiero desafiar a alguien. dijo con voz queda. Es la primera vez que lo hago, de modo que no deseo más que un combate para comprobar el alcance de mis aptitudes.

Deseo un combate de exhibición contra el joven Lavativa. Quizá así podamos terminar lo que quedó a medias al caer yo inconsciente en la arena. explicó mientras entregaba su misiva de reto.

- "Vamos a ver, anotando: Champiñón contra Tambaleo a exhibición, y Muñón contra Lavativa a exhibición." -

Los entrenamientos eran duros y después aún mas duros, parecía todo un infierno, aunque en la mente de Legionario no podía imaginar como sería en realidad, Lagartija se había tomado muy en serio la ejecución  de cada entrenamiento y aunque era muy duro para el humano ese echo hacía que respetase mas al reptil, lo estaba ayudando y debía agradecerselo, aunque quizá nunca lo haría abiertamente, y aunqu estaba empezando a odiar a ese ser por el echo del costoso entrenaminto intetaba controlar su carácter pues era otro concepto que sabía debía moldear...

Cuando le hacía beber toda esa antidad de zumo de limón creía que lo vomitaría todo, la acidez de tal proporción era tan brutal, que le hacía retorcerse todo el cuerpo, después llegaba la hora de las tinas de agua, una helada y otra hirviendo, era todo una locura, Legionario por su orgullo y carácter intentaba aguantar al máximo de sus resistencias sin tener que gritar, pero aquello era mas fuerte que todo eso y los gritos se sucedían cada instante, casi era insoportable, pero el lo haría sin rechistar, había sido uno de los grandes  de la Legión, así que no se amandraría por eso....

En un respiro que le dio el reptil se diocuenta que la hora de los desafíos estaba apunto de acabarse, y el no sabía que hacer, por un lado quería, pero por otro no sabía si estaría preparado o si recibiría alguno por el echo de la venganza o demás...

Después de unos instantes decidió que almenos también le serviría para ver la mejora y de entrenamiento...

Con paso mediocre por los dolores pues además del cambio de temperatura que era bastante duro, se había llevado varios varazos por intentar alir antes de tiempo sin que LAgartija le avisara, y la severidad del reptil se podía ver en los moratones y heridas del cuerpo cada vez mas musculoso del humano, se acercó al ayudante Mecadio...

 - Oyemé, quisiera hacer una exhibición a ese tal Bolsillo, dime si podría ser posible...

En la mente de Legionario tenía la oferta que le habían echo, pero eso significaba combatir a muerte, y aunque era una propuesta muy buena, Legionario pensaba que ir a matar a alaguien por el simple echo de que otros se divirtieran era repugnante, solo mataría si no le quedaba mas remedio y si algún otro insensato lo retaba a él a muerte....

- "Otro grandullón que le quiere zurrar a un mediano... Bien, veremos en qué acaba esto. Anotado quedas. Ahora id a comer, que se enfría la comida." -

- Hagamos caso de lo dicho y vayamos a comer. Te mereces un descanso... regado de zumo de limón. Sí, lo sé, no es necesario que me mires así. Resulta asqueroso - señalo con una risa ligera -, pero es lo que necesitas como complemento de tu entrenamiento. Además, o acabarás odiándolo o le pillarás el gusto. A día de hoy, acostumbro a tomarlo a diario, y eso se lo debo al descastado de Limonero.

Miro de refilón al humano. Se está comportando bastante bien. Acepta el entrenamiento y el sufrimiento que implica. Pero lo hará más fuerte, más resistente. Pero lo peor para su orgullo está por venir. El resto del camino hasta el comedor, es en silencio.

- Tras la comida, no habrá baños. Tan solo una carrera. Larga. Pero necesito la ayuda de algunos más. Mediano, ¿el entrenamiento del enano puede tener una interrupción? Necesito varios brazos que empuñen varas y los vuestros me vendrían bien, así como los de algunos sirvientes - le pido cuando estamos sentados a la mesa -. Mi alumno necesita intensificar su entrenamiento y toca la carrera de varas. Para que estés preparado, alumno mío, te diré en qué consiste la prueba. Deberás correr desnudo por la pista. Se trata de una persecución y si ahora odias el limón, te aseguro que aún odiarás más la madera. Será duro. Y doloroso. Cuando hayamos finalizado, nueva sesión de tinas y después, nos enfrentaremos ambos armados con varas. partirás de una posición de desventaja. Estarás cansado, magullado y dolorido, pero lo que no te mata te hace más fuerte. Después, habrá tiempo al descanso. Te enseñaré algunas técnicas demeditación. Te servirán para sobrellevar el dolor y apagar el fuego de tu sangre cuando veas que pierdes los estribos. Y antes de dormir, untaré tu cuerpo de ungüento y te daré un masaje. No soy Grumcha, pero servirá para aliviarte y curar tus heridas. Como ves, será un día muy completo. Lo único que lamento es que tu entrenamiento no estará finalizado para tu próximo combate. Pero cuando lo esté, tal vez hasta me arrepienta de haberte instruído - señalo con una amplia y orgullosa sonrisa -. Tranquilo, tal cosa no ocurrirá. Solo espero que tus victorias se multipliquen y llenes de satisfacción a tu escamoso maestro Herensuge.

Mi mirada se vuelve entonces hacia el enano.

- Mi invitación para aprender técnicas de meditación se extiende también a ti. Y a ti, desde luego, mediano, aunque dudo que algo tan aburrido te atraiga - comento risueño -. Enano, sin embargo, no olvido tu petición hecha en Detritus. Cuando hayas acabado tu entrenamiento, buscaremos el Gremio de Cazarecompensas de Malatea y veremos qué podemos hacer entonces.

Kilómetros. Eso parecía medir la sonrisa de Harold cuando Heresunge les pidió colaboración con la carrera de varas.

Bueno, si es por ayudar a entrenar a un compañero, no podemos negarnos, ¿verdad? preguntó pícaramente a su maestro el enano

 -Claro Lagartija, te ayudaré, además a Muñón también podrá beneficiarse de la carrera de varas-sonrío, sigo escuchando las siguientes palabras del Dracónido- No, la meditación no me atrae nada.

Legionario asiente sin mediar palabra, quizá estaba bastante dolorido o tal vez pensaba en lo que venía por delante, o incluso si sería capaz de no dejar de correr desnudo para enfrentarse a sus agresores con varas y arrancarles la cabeza al notar los golpes en su cuerpo desnudo, sería una lucha interna muy dura, pero como bien decía ahora su estricto maestro, lograría hacerse mas fuerte...

Sabía que si estuviera en plenas condiciones el echo de correr le daría ventaja sobres los futuros agresores, pero llevaba mucho entrenamiento encima con lo cua al cuerpo le costaría responder, se llevaría unos cuanos golpes, y para finalizar tenía en mente intentar devolver algunos de esos golpes al reptil en el enfrentamiento que llevarían acabo, como mínimo para sentirse satisfecho y desahogado...

La meditación era una cosa que nunca había pensado pero al oírla mencionar a Lagartija Legionario empezó a darle vueltas, de verdad serviría para olvidar el dolor, había oído historias que gracias a la meditación muchos valerosos guerrero habían conseguido olvidar el dolor de las heridas y combatir como si nada y después de la batalla caer insconscientes al acabar la meditación, pues el dolor les venía de golpe después, pero nunca lo había visto con sus ojos así que debería comprobarlo para saber cuanto de cierto había en esas historias...

 - Yo también espero que mis victorias crezcan...

La idea de la libertad se arremolinaba una y otra vez en la cabeza, ahora pensaba que quizá debió  desfaiar a muerte para tener esa oportunidad... Enseguida rechazó esa idea, era equivocada, no debía matar para divertir a los demás, tan solo por supervivencia....

- El resto del día transcurre entre duros entrenamientos.

- El resto del día va transcurriendo tranquilamente.

SEGUNDA SANGRE DE TIAMAT:

POR LA MAÑANA TEMPRANO.

- Tras la Jornada en la Arena de Malatea, los luchadores de Detritus regresan a la Escuela del Halcón Negro.

SEGUNDA SANGRE DE TIAMAT 4480:

TARDE-NOCHE.

Harold regresó satisfecho a la escuela. Un día más, sin ser herido, probaba una capacidad envidiable para la supervivencia. O mucha suerte.

En cualquier caso, el enano se apresuróa anotar en sus registros las peculiares particularidades de la arena de Malatea, pues quizá hubiera tenido algo que ver con la efectividad de sus conjuros en esta ocasión.

Tras ello, se aseó, y acudió al comedor comunal, buscando con la vista a su nuevo entrenador, Champiñón.

Después de la pelea algunos curadores intentaron sanar mis heridas, nada comparado a lo que la enana sanadora hacia. Era extraño, ya había olvidado su nombre, eran tantas cosas las que cambian en una ciudad diferente. 

aun así, tengo abiertas mis heridas, pues aquel mediano era poderoso y sus ataques devastadores. Se me había vuelto a abrir la herida del muslo izquierdo que acarreaba desde la derrota contra legionario. 

Corriendo fui a la cena, pendiente de Muñón, pues más rápido que yo fue él, que no dejó ni tan siquiera atacar a su rival.

Ya en el lecho, dormitaría pensativo e imaginaría en mi mente como serían las calles de Malatea que nunca veré. Pues de otra cosa no pero de soñadores los medianos son un rato.

Entreabro mis ojos. Apenas distingo una bruma sanguinolienta a través de la cual contemplo mi cuerpo vendado. No tengo fuerzas, estoy dolorido y mi espíritu muestra un hondo pesar que la derrota no justifica. Cierro los ojos nuevamente y permito que el sueño me alcance, abandonándome entre sus brazos.

SEGUNDO SOL DE TIAMAT 4480:

MEDIODIA.

- La mañana transcurre plácidamente. La mayoría descansan o incluso duermen mientras unos pocos entrenan al aire libre.

- En un momento dado se forma una conmoción en las puertas, al parecer han llegado mensajeros con noticias impactantes.

Muñón y yo entrenábamos livianamente, ninguno se esforzaba en demasía para dañar al otro con la vara de entrenamiento.  De repente, se percibe un griterío y mucha gente situada en la puerta.

-Muñón, voy a ver lo que pasa.

Dije, sin pensármelo dos veces, dejando el entrenamiento a la mitad