Partida Rol por web

O sea... que no hay cinturón de seguridad... - pienso cuando el ¿ viejo? me responde- Te lo juro... esto es una megatrampa supermortal por sí sola, sin necesidad de un Escuadrón Alfa disparándonos.

Menos mal que empiezo a acostumbrarme a los vaivenes de la nave. Ya consigo mantener el equilibrio sin caerme del asiento. Me pongo a mirar por la ventanilla... ¡Eh! ¡ Yupi! ¡Tengo una ventanilla! Entonces me doy cuenta de que hay un arma preparada para disparar por ella.

Por un lado, no quiero hacer pupa a nadie del Escuadrón Alfa... soy médico y mi trabajo es curar a la gente, o sea... pero por otro... ¡Jopetas! ¡ es que ellos quieren superliquidarnos! 

Saco desinfectante en spray y rocío el arma antes de tocarla. Alineo la mirilla con la nave grandota

- ¿ Cómo funciona est...? 

No me da tiempo a terminar de preguntar cuando aprieto algo sin querer, o sea...

- ¡He disparado, he disparado!- digo dando saltitos- ¿ Le he dado? o sea...

Hummmm.... malditos sean... - Ehhhh, ¡Mita! ¡Ten cuidado!  Me has desequilibrado, no ha sido una carrera justa ,no, a ver, juez, que no ha sido justa, ¡Que yo merezco más que la mia es menos manejable! Hummmm... -Me enfurruño, mientras hago un mohín de "no pienso seguir jugando a esto a menos que me den mi victoria"... pero bueno, entonces aquellos estúpidos siguen disparando, oh si. 

-¡Ehh! No dispare... - Espera, eso eran los fragmentos de Mita disparando... brrrrr... novatos, novatos everywhere... - ¡Cuidado cuando ataques a su nave, eh! Jumfffff, ¡agarráos! No pienso dejar de hacer lo que toca... hummmm... a ver, Knox, a ver... ¡¿Esto funcionará?! - Dije, mirando al activador de la desguazadora. Estábamos taaaaaaan cerca de la nave contraria que sería una pena no probarlo... - A ver, esto... subo aquí, activo allí... ¿o era allí? - dos o tres golpes al salpicadero acompañaron a estas palabras... - Bueno, ¿Así, no? - Dije, pulsando tres botones y una palanca a la vez, intentando poner en marcha aquel engendro que Knox había montado en la nave aquella

-Venga ya, acepta tu derrota compañera- respondo a las quejas de Rezongos.

Desde la Nekosonte vuelven a disparar la nave enemiga y salen despedidos varios trozos, trato de esquivarlos haciendo piruetas con mi nave. 

Por la radio escucho a la piloto protestar y no tengo muy claro qué pretende hacer - Rezongos, ¿qué vas a hacer ahora? deberíamos ponernos de acuerdo. Termino de esquivar los trozos y vuelvo a disparar, quítate de en medio- alerto 

La doctora se apunta a la fiesta, disparando una arma quizá por primera vez en su vida. ¡Y no se le da del todo mal! Alcanza al torbellino de la nave enemiga, pero sin hacerle ningún daño. ¡Mecachis! ¿Este arma dispara algo serio o sólo arcoiris? Puede que el golpe que la Nekosonte acaba de recibir por un trozo perdido tenga algo que ver... o quizá es que la joven Rezongos esté trasteando con la flamante radial, acercándose a la nave de los Alfa que no para de girar sobre sí misma. Tampoco consigue mucho con ello, más bien todo lo contrario...

Mita intenta esquivar la chatarra que también sale despedida hacia ella. Pero no lo logra y pierde un poco de... ejem... inservible blindaje.

La lata del Escuadrón Alfa se detiene, apuntando a vuestra nave Clase III con todas sus armas (no son muchas, pero imponen). Estáis trabados, cuerpo a cuerpo... digo, pegados, tocándoos. Esos hijos de mala laramyter tienen buena puntería, y buena munición también, pues destrozan un poco la estructura, arrebatándoos unos refuerzos de acero y un poquito de inocencia... ¡Os acaban de hacer madurar un poquito chicos! Necesitamos algo más de caña, ¡dadles con todo!

- Jajajajaja - ríe alguien desde dentro de la lata por un altavoz. - ¡Ya os tenemos, pringados!

- ¡¡¡Uyuyuyuyuyuyyyy!!! ¡Se están calentando bien! ¡Y eso que afuera no hace precisamente frío! Los favoritos de Lalande les tienen acorralados. La nave insignia de los patatas, la Nekosonte, se hace pedazos bajo el fuego del Escuadrón Alfa. ¡Espero que hayan apostado a los relucientes! Porque estos novatos que acaban de llegar a Duslak no van a durar ni una hora de show!

Algo chocó contra mi nave, me habían dado y eso me hacía enfadar bastante, estaba claro que el enemigo no sabía contra quién estaba jugándosela.

Y ya cuando escuché cómo se reían de nosotros, la adrenalina se apoderó de mis sentidos - ¿A quién llamas pringados?- se iban a arrepentir de aquello. 

Me posicioné a su lado y desde ahí lancé una bomba.

—¡PRINGAO TU P*T* PADRE!

Desde luego, nos estaban dando una buena tunda de repente... Pero no debíamos dejar que se nos notara...

—¡Claro que funciona, viejo! —le contesté luego a Hub—. ¡Pulsa ahí! Ese botón rojo con el dibujito de una calavera... ¡Sí! ¡Sí!, el que pone: Danger, do not touch this shit. Aprieta a ver qué pasa... y luego mueve la palanca y ¡destrózales el careto a esos cretinos!

Es que tenía que explicárselo todo... No daba para más el pobrecito...

—¡Pijita, sigue apretando el gatillo y grita como una loca! ¡Ya verás que los acojonas! ¡Y Envoltura Testicular, tú igual! ¡Acribilladlos a balazos! —animé a mis amigos, mientras yo me levantaba de mi asiento y cogía un soldador de oxiacetileno que vi por ahí dando tumbos—. ¡Ni se os ocurra dejar que esos cabrones se salgan con la suya! Y por los golpes no os preocupés: ¡Yo me encargo de que este trasto no nos deje tirados!

Sonreí tratando de infundir seguridad en el equipo y alcé el pulgar.

Y es que... ¡y una mierda me iban a destrozar la Nekosonte! Tenía que repararla mientras el resto repartían... ¡Era mi labor! Así que me fui a la parte en la que nos habían hecho un boquetarro y me puse a soldar como una loca... sin guantes, ni gafas de protección, ni hostias... ¡Cómo en los viejos tiempos con la Kamal!

—¡Niños! No hagáis esto en casa —exclamé, en cuanto vi acercarse el dron-cámara del show.

- Me estás cabreando, hummffff, pringado... ¡CLARO!, si si, pringue es lo que habrá dentro de esa lata de sardinas gencosianas cuando termine con vosotros, sardinas en lata de pringue... - Y entonces vi como no había hecho nada con aquel cacharro que había instalado Knox... - Bah, eso no sirve para nada, no no, mocosa, si es que, meh, que manía de tocar las cosas que funcionan... de verdad... buffff. - Mientras me deshacía una coleta, giraba el volante y aceleraba hacia los bichos en lata aquellos... 

Había visto por dónde circulaban, y cómo giraba su cacharro... - Que sí, que brillaís, puajjj, pero mejor, así os veo menos con mis viejos ojos... bueno, no, no son viejos, pero que lo sepas... -Entonces, pulsé la palanca adecuada, para dar el último acelerón, y... - ¡Joder! Maldita enana, de verdad, me voy a cortar estas coletas... hummsssss ¿Cómo porras se hacen las coletas? Ahhgghhhshshs, ¡Me molesta el pelo para ver lo que pasa delante! -Desesperado, con una mano en la palanca y la otra apartando con gesto nada femenino el flequillo

—Pues las coletas se hacen... ¡Espera! ¡¿QUÉ...?!

Me giré al instante, con el soldador aún en marcha... y por poco lo asesino con la mirada. Eso sí, con una mano me agarré bien fuerte de algún lado... qué por el cristal delantero me veía venir la nave brillante de los pardillos aquellos a toda velocidad... El viejo pensaba embestir de nuevo, eso era apreciable a simple vista, pero no era lo especialmente relevante... ¡sino lo que había dicho de cortar MIS coletas! ¡Por supuesto! 

¡NI HABLAR!

—¡Te cortas un solo pelo y te juro que le prendo fuego a tu barba, viejo!

Y para que quedase claro, me llevé el fuego del soplete a escasos centímetros del matojo enmarañado y canoso que tenía el vejestorio por barba. 

Bromas con mis coletas, las justas... ¡Qué aprendiese a conducir con ellas! ¬¬

Mita lanza unas bombas por aquí, otras por allá, y ¡¡KABOOM!! La mayoría explotan en pleno desierto, levantando una enorme nube de polvo. Pero una de ellas impacta en el chasis mismo de la nave, haciéndola crujir. Rezongos se divierte, embistiendo con todas sus ganas a la nave, haciéndole dañito del bueno. Ahora ya brilla menos, puedes estar contenta Rezongos. La has ensartado bien, gajado en dos, desmontado completamente... el polvo la oculta ahora, pero la tienes sujeta como una albóndiga con un tenedor, puedes tratar de lanzarla lejos para destruirla definitivamente, o quizás el viejo Knox quiera desguazarla con ayuda de la radial para obtener algunas piezas valiosas...

Knox repara un poco muchísimo a Nekosonte, soldando aquí y allá, y la deja incluso mejor que estaba antes de empezar este mini combate. Sus chapas han salido reforzadas, podríamos decir que acaba de fabricar todo un chasis con hilo de soldadura, ¡pero qué genialidad! ¡Qué despilfarro! ¡Qué maravilla! ¡La audiencia seguro está loca de contenta ante semejante demostración de mecánica!

Sin embargo la afrenta de Rezongos al amenazar con cortarse las coletas hace que Knox pierda los nervios y esté a punto de saltarle un ojo con el soplete. Su cuerpo no es el joven y terso de antaño, ahora está imbuido en el arrugado y oxidado cuerpo barbudo... los reflejos no son los mismos, ni tampoco la capacidad de reacción...

A eso que estaba yo haciendo la tonta con el soldador que el viejo embistió antes de tiempo con la nave brillantita y se me fue a tomar por saco... directo a... ¿mi ojo? ¿el del viejo? ¡A saber! El caso es que sonó un buen...

¿Ehm? ¿Qué había sido eso? Sonaba terroríficamente mal... y, ¿dónde estaba la soldadora ahora?

—¿E-estáis bien...? —y miré a todos... ¿con un sólo ojo? ¿con los dos? ¿con el soldador enredado en la barba?

- Eh, eh, ¡EEEHHHHH! Aparta eso de mi cara, de la tuya... ¡¡¡de la quien sea!!! Que ya tuve mucho de piratas en aquella nave infernal, no quiero parecerme a ellos, humfff, no... no, ¡APARTA! - Dije dando golpecitos con las manos, intentando a la par alejar la cara, pero tampoco queriendo dar un golpe que quemara mi barba... ¡MI BARBA! No no, por todos los lumins, mi barba no, con la de tiempo que había dedicado a su descuidado... humm.... 

El soldador encendido se le escapa a Knox, entre el jueguecito, el impacto y la falta total de seguridad de la Nekosonte. La catástrofe está servida. La potente llama surca la cara de la joven en diagonal, abrasando uno de los globos oculares de la piloto. Por un segundo nadie esperaba lo que acaba de ocurrir, pero los accidentes son así, vienen cuando quieren, no cuando estás preparado...

¡la pirata galáctica!

Hub suelta los mandos para echarse las manos a la cara. Ni Mita ni Benito se percatan de lo sucedido, pero Tahïr lo ha visto todo en primer plano, y hasta casi termina herida también... ¿podrá hacer algo la médico para salvar el ojo evitar que los daños sean mayores? El corte es feo, muy feo, si al menos hubiese ocurrido sobre la cara del viejo a lo mejor ni se notaría; pero en esta... uff, va a ser complicado.

Tahïr, puedes seguir disparando y pasar de Hub, estás en tu derecho, pero en ese caso sufrirá más de daño, y puede que hasta pierda algo más la pobre... Puedes intentar estabilizarla, en cambio, aunque el ojo ya no lo salva ni akalawakka.

-¡¡ O SEAAAA!! ¡¡LÁSER ARCOIRIS!! ¡¡QUÉ SUPERMEGACUQUIIII!! - grito entusiasmada. - ¡¡Osea, tía, Knox, osea, TIATIATIATIA!!¡¡ QUÉ CRACK ERES!! ¡¡ME SUPERMOLAAAAA!!

Me he venido muy arriba.

Entonces me giro para lanzarle un besito cuando de repente, veo un ojo saltando de la cara de Hub y llega rodando hasta mis pies. 

Es sólo una bolita, puedes hacerlo. Venga, tú puedes cogerla... es sólo una bolita, es una bolita, una bolita...

Me agacho para coger el globo ocular. Parece insalvable. Se le ha pegado todo tipo de... cosas inidentificables del suelo. Además de que está churruscadito.

Ay, mamá... el piloto se ha quedado tuerto. 

Al menos voy a intentar que no se ponga superfatal. Cojo el botiquín y me acerco. Cuando veo la sangre correr por su cara tengo que contener una arcada.

- O sea, que la sangre humana... es super roja, o seaaaaaAAGGHHH- digo tapándome la boca para evitar que nada salga por ella.

Me giro y busco en el botiquín unas gasas. Con una mano se las paso a Hub mientras con la otra me tapo los ojos y abro los dedos lo justito para ver algo, pero no demasiado.

- ¿ Te puedes ir presionando la herida con esto,  porfi?

Poco a poco me voy acostumbrando a la visión de la sangre. Sólo ha sido la superimpresión de la primera vez.

- Había visto fotos de sangre humana, o sea... pero nunca la había visto así... como fluyendo y eso, o sea... . Perdón, o sea. - me recompongo- Dime si te hago pupa, ¿ vale?

Me acerco con otra gasa para cambiar la que le he dado. Al final dejo una gasa impregnada en antibiótico dentro de la cuenca ocular y le cierro el párpado con una tirita de purpurina.

Me retuerzo del dolor, aunque al principio no veo de dónde ha venido el golpe, aunque quizás, haya sido la metralla de destrozar esa lata asquerosa, pero del puro dolor, y de pronto el calor que entra por mi cara... pego un par de golpes a todo lo que tengo delante en mi zona de pilotaje... y entonces... calor... 

- ¡Joder! ¡JODER KNOX! - Miro (es un decir, claro está) hacia dónde está la loca de mi compañera- ¿Pero nadie te ha enseñado a ver dónde están los enemigos? Humngffff, ghsssss ¡Ahhhhhh! No, no pienso apretar, pijazul, no no, ya lo decía mi prima, "Cuidado con eso que te vas a sacar un ojo", clarooooooo, ¡Pero lo decía de jugar con pirañas comededos de Alpha Centauri! ¡No de los amigos! ¡O las amigas! ¡ O de mi mismo! - Grito, sin mucho sentido, mientras sigo aporreando lo que pillo con mucha, mucha pupa, pero a la vez, aunque le he dicho que no, me aprieto esa cosa blanca y suave dónde me ha dicho la doctora pitufa... 

-¡¿DE VERDAD NO HAS VISTO SANGRE?! ¿De dónde vienes tu? ajjjjggggggshshdgrnfioefkskoioksjsdhf ... - Digo a la doctora, pensando en que aquello se parecía mucho a... - ¿sabeis que algo así intentó hacerme una... esto... mujer de mala vida en un reservado? Si, si, Knox, mira, esa cicatriz detrás de la oreja... de aquellas giré a tiempo... humhjdhdkkl... y fue con una botella de cava... vale, no, una lata de sucedáneo de cerveza barata... humddddd... ¡QUE ME HACES DAÑO PULPITUFA! - Jumffff

Yo no es por nada, pero esas faltas de respeto lo mismo no tienes por qué aguantarlas, ¿eh, Tahïr? Cuando Hub te llame Azul, o Azulita, o Pijazul o ese tipo de cosas... puedes usar tus "talentos" para hacerle daño, para hacerte respetar un poco, ya sabes...