Partida Rol por web

Hug se puso al lado de Damarah como este le había indicado y sin más aviso procedió a golpear al primer orco que tenía a su lado, con toda su fuerza dejó caer su hacha sobre el berseker esperando que cayese y no se levantase más, para así quedar uno menos

Mientras el paladin y el barbaro  golpeaban con sus armas a un lado y al otro Pike tomo carrerilla y aprobechando el impulso golpeo al orco, este no vio ni venir el ataque, esaba demasiado ocupado en mirar mas alto, Pike noto con satisfacción como el arma atravesaba facilmente la armadura y acto seguido la piel pero algo iba mal, la espada parecía haberse atorado.

Damarah blande su bastarda contra el primer orco que se encuentra y le asesta un buen golpe que hace brotar una buena cantidad de sangre orca.

Tras el primer envite, Correcta vuelve a surcar el aire de la habitación, salpicando la sangre de su primera victima, pero esta vez no logra atravesar a ningún enemigo, aunque sabe que pronto volverá a derramar sangre impía.

Damarah da un paso al frente para dejar espacio entre los orcos y la puerta.

Mientras el combate tiene lugar el PAladín anima a sus compañeros:

Sin piedad, pues ellos no la tendrán con nosotros. Atacad  a los heridos para que no nos superen en número. Cerrar la puerta, que la contienda no se oiga más allá.!!

Despues de ver como la puerta se abrió, Kaxhastrox sacó la ballesta y mientras la cargaba se acercó hasta el dintel de la misma, procurando de no molestar los movimientos ni visiones de sus compañeros.

Su mirada se dirigió hacia el que indiscutiblemente era el que mandaba y apuntó en su dirección. Maldición, no tengo un tiro limpio. Agudizó sus sentidos y se preparó para disparar a la menor oportunidad.

Damarah se posiciona en posición defensiva, protegiendo a sus compañeros más débiles, junto a Hug' ohl, serían los que llevarían el peso del combate a sus hombros. Iveliös con un rápido movimiento clava su flecha en la clavicula de uno de los orcos que aún se mantenía en pie.
Hug se posó al lado del paladín y Pike hizo lo mismo tratando de posicionarse en un lugar donde tuviera un orco con la guardia baja.
A su vez, que Kaxhastrox sacaba su ballesta y la cargaba para dispararla sobre un enemigo.

 Iveliös se dispone a disparar nuevamente con mis sus dos flechas, concentrándose para acabar con el maldito orco al que ya le había clavado la flecha y esperando malherir al otro que está a su lado.

El Elfo recoge dos flechas de su carcaj y con un ágil movimiento las lanza a su enemigo, solo una de ellas impacta pero es suficiente para clavarse en su garganta y quitarle la vida al instánte.
El Paladín lanza un corte en el pecho a otro orco (Berserker 2), dejándolo malherido, pero aún en pie, el,paladín nota como las venas del orco empiezan a brotarse de la rabia y ve como los músculos empiezan a brotar y aumentar su tamaño desaforadamente, el orco envaina su gran hacha y lanza un cntrataque al paladín que lo deja mal parado.
Otro de los orcos (Berserker 3) se lanza a la refriega para ayudar a su compañero maltrecho y con su hacha de batalla logra incrustarla en la espalda del paladín que ve como la vida se escapa de sus manos!
Otros dos orcos (Berserkers 4 y 5) se lanzan contra el bárbaro, alcanzan a lastimar al hombretón, pero parece no importarle demasiado.

En contrarespuesta, Hug lanzó un tajo que logró penetrar la armadura del orco (Berserker 4) pero que claramente logró lastimarlo, el bárbaro logró ver como los ojos de su enemigo empezaban a brotar de sus cuencas y sus venas empezaban a brotarse, iba a entrar en furia sin duda alguna.
El Mediano logró filtrarse por las piernas de amigos y enemigos y logró una posición ventajosa contra uno de los orcos que atacaba al paladín (Berserker 3), con su diminuta daga, se encaramó a la espalda del orco y se la clavó directo en la nuca, matándolo al instánte.

Damarah dirige su golpe hacia el orco que acaba de herir Ivëlios. A su vez dice aceleradamente: Kax cierra la puerta, Pike las llaves !!

Correcta surca el aire y se dirige hacia su objetivo impactando parcialmente sobre el orco, que logra esquivar la mayor parte del golpe.

Viendo que no tenía ángulo de visión contra el jefe, Kaxhastrox se fijó como objetivo uno de los orcos que estaban amenazando al bárbaro, "Sira por detrás" le comunicó a su fiel compañera.

Maldición, murmuró cuando su saeta se fué alta.

El hechicero descargó su ballesta imprecisamente, la saeta se estrelló lejos en la pared del fondo, Mientras Sira intentaba imitar -torpemente- los movimientos del mediano, logró escabullirse y se posó justo a la espalda de uno de los orcos que combatía con el bárbaro (Berserker 4), dándole ventaja a Hug cuando atacase.

El Sargento lanzó una sonrisa tosca y gruesa de burla, sabía que sus peones necesitaban algo de práctica, y esta carne fresca era algo para agradecerle a su Dios oscuro, luego podrian beber su sangre. desenvainó su Alfajón y apuntó cn su punta al gran bárbaro -Tu ser mi perra! -Y volvió a reir; claramente sería su próximo objetivo y víctima.

El paladín parecía abatido, cerca de reunirse con su dios. Una nube negra empezó a formarse en sus ojos y por una fracción de segundo pensó en rendirse ante la vida, pero sintió una extraña sensación nque invadió su cuerpo y le dió fortaleza para lanzar un último ataque de manera heróica (Como Boromir en ESdlA antes de morir) que acabó con la vida de su rival (Berserker 2). luego respiró profundamente y se bebió la poción que Melania les había entregado a cada uno previamente. Sintió como empezaba a recobrar las fuerzas.

 Iveliös ve que el bárbaro es el próximo objetivo de los orcos y decide ayudarle nuevamente lanzando otras dos flechas.

 - A ver si esta vez no fallo....

Hug'Ohl le clava el hacha al orco que tenía los ojos inyectados en sangre. Una sonrisa le asoma en la cara. Ante él estaban otro orco más y el sargento que le pedía guerra.
¿PerrA? Le había llamado perra. Su ira salía desmesurada de su cuerpo. Sólo había que ver como había dejado el cuerpo del horco. Su ira iba en aumento.
PERRA! 

La primera flecha salió disparada del arco de Iveliös a gran velocidad, hacia uno de los orcos, pero esta rozó el yelmo y se desvió para estrellarse contra la pared.
La segunda flecha sin embargo, dio justo en el blanco, penetró el pecho del orco que iba a entrar en furia y la punta alcanzó a salir por su espalda. Su cuerpo inerte cayó pesadamente al suelo.

Mientras el bárbaro Hug' ohl se desconcentró para dirigirse al líder de los orcos, el último esbirro aprovechó y clavó su hacha en el costado del bárbaro, afortunadamente su armadura logró amortiguar el golpe, que de otro modo hubiera sido mortal.

Pero ese golpe le había salido caro al orco, los ojos de Hug se inyectaron en sangre y con su enorme hacha cercenó limpiamente la cabeza de su rival.

Ya solo quedaba un orco en pie, el líder y no parecía dispuesto a rendirse, al contrario, parecía más determinado a combatir y a -seguramente- morir, pero su intención sería llevarse a alguien con él.

Pike avanzo hacia el jefe que insultaba a Hug la rabia que llevaba conteniendo desde que vio los cadaveresal entrar a la fortaleza salio toda junta en ese intante, el sargento con los ojos fijos en Hug  no se dio cuenta de lo que pasaba hasta que la espada de pike se hundio profundamente en su muslo provocando un reguero de sagre a su paso.

Estaba harto de aquellos monstruos, mataban por puro placer y personas inocentes sufrían las consecuencias vas a ser la perra del diablo monstruo dijo mientras se ponía a un lado con la espada preparada para acabar con su enemigo.

Todos los orcos habían caído, sólo quedaba el líder que se dirigía hacia el sangrante bárbaro para acabar con él y llevarse al menos a alguien al otro lado. Hoy no será cuando te vayas Hug, tienes una misión que hacer antes de reunirte con la Dama Severa, "Sira ataca", pienso antes de vaciar la mente y concentrarme.

Rodasar Baoyar, murmuro al tiempo que mi mano derecha se eleva al cielo, baja hasta mi corazón y se extiende hacia adelante, señalando al sargento con el índice extendido. Del dedo sale una fina descarga de energía, que al impactar en el cuerpo del objetivo, se tranforma en unas llamas que lo envuelven un instante antes de desaparecer, dejando en la estancia un olor a carne quemada.

Mientras tanto Sira se acerca al orco y lanza un ataque a su otra pierna.

La espada del mediano se enterró en el muslo del musculoso orco, pero apenas se dió cuenta, su mirada se fijaba en el bárbaro, pero cuando una estela de fuego lo rodeó, sintió el verdadero dolor de la carne viva quemándolo y haciéndolo gritar de dolor mientras dejaba un olor de carne quemada en loa habitación.

Sira aprovechó para asestarle un golpe en las costillas que avivó el dolor del orco.

Su momento se le acercaba, se le notaba en la mirada, pero siguió combatiendo; su mirada de odio se centró en el hechicero, pero no iba a ser tan estúpido como para pasar por al lado del bárbaro y del paladin, así que siguió con su plan original. Si se iba a ir de este mundo de los mortales, al menos se llevaría a alguno.

Alzó su espada al aire y la blandió cn gran torpeza, el dolor en los brazos no lo había dejado hacer lo suyo.

Damarah, sabedor de que con el orco era imposible negociar, se acercó para asestarle el golpe de gracia y darle el final merecido al sargento. El rival estaba en las últimas. Entre la sangre y el fuego apenas parecía ya un orco. El paladín lanzó un golpe demasiado confiado. El sargento estaba más entero de lo que parecía y pudo esquivar a tiempo la bastarda de Damarah, que ni siquiera le rozó.

MALDICIÓN, Por todos los dioses, acabad con él. Pronunció el paladín, mientras pedía perdón a su Dios por haberse confiado tanto en el  golpe... Nunca hay que subestimar a un enemigo, por derrotado que parezca.

El sargento había llamado perra al gran bárbaro, eso casi hizo entrar en cólera a Hug. Iba dispuesto a dar su mejor golpe que desencajara al que parecía su líder, pero al ver como el orco ardía y que todos sus compañeros le sacaban un trozo de su carne, simplemente sonrió, dejó que su ira fluyese por sus manos y fue hacia él, dispuesto a llevarse la mejor parte. Fácilmente esquivo su ataque, para luego blandir su hacha. Parecía que el tiempo le favorecía, grácilemnte acarició el mango y lo alzó.
Ser la Muerte. LA PERRA MUERTE!!! Se le ocurrió al bárbaro, algo que le pareció una gran ocurrencia, acto seguido soltó el hacha con gran fuerza, clavándose bien fuerte [B]Muerte no sirve a orco![/B] le susurró antes de sacar su hacha con una patada.

El capitan, como muchos me ignoro, Iveliös no perdió el tiempo y clavo sendas flechas en su pecho humeante justo cuando alzaba su espada para atacar a Hug, sus ojos se giraron incredulos conforme la vida se escapaba por sus heridas, por su parte Hug no perdió el tiempo hundiendo el hacha firmemente en su hombro haciendo que el capitan se hincase de rodillas, con una patada desatasco su hacha, el moribundo capitan miro con sus ojos vacios al techo así con fuerza mi espada y la clave en el pecho, justo en el corazón, note con satisfacción como la armadura cedia ante la presión de la punta, la espada se detuvo un instante para acto seguido hundirse profundamente acabando con la vida de otro siervo del mal.

Que los dioses te juzguen digo con rabia cuando saco la espada goteante mientras noto como la rabia que me habia invadido hace poco va remitiendo ante la adrenalina miro a mis compañeros, la sangre que recorre la armadura de Damarah, el recuerdo de los cadaveres en las celdas, la montaña de muertos en las cloacas y por primera vez en mi vida tengo sed de sangre..... y pienso saciarla