Partida Rol por web

Maldita sea, no oigo lo que están diciendo, tendré que acercarme más. Si son los que le deben la pasta igual puedo matarlos aquí y ahora sin joder la nave...seguro que a Johan le encantaría poder quedarse con la nave y su contenido...

Sigo avanzando hacia la nave, aunque me acerco disimuladamente hacia los tres hombres para ver si puedo averiguar si son los que le deben el dinero a Johan o si sólo son guardias de seguridad o curritosf.

Artellus se acerca hasta la plataforma evitando ser detectado, y se esconde tras uno de los montones de cajas. Parece que desde su nueva posición puede escuchar casi todo lo que dicen los trabajadores.

-... no tenían derecho a hacernos trabajar hoy. ¡Era nuestro día libre! ¡Y encima de noche! -A

-¡Cállate! Con lo que nos van pagar puedes tomarte una semana libre entera si quieres. -B

-¿Queréis callaros y seguir trabajando? Cuanto antes terminemos, antes nos pagarán. -C

-De todas formas no me siento agusto trabajando para estos tipos. Parece que lo que transportan no es legal... -A

-¡Te he dicho que te calles! Si sigues así te oirán. Recuerda que están en la nave, preparados para despegar. -B

-¿Y qué más me da dónde estén? Si los guardias no han aparecido en toda la noche... Para mí que los han sobornado... -A

-¡Dejárlo ya! Sabéis de sobra que los guardias solo aparecen cuando quieren sacar tajada de un envío. Eso, o cuando algún noble piensa secuestrar la nave. Si aparece uno, yo me largo. No me pagan suficiente... -C

Me acerco hacia ellos muy tranquilamente como si estuviera haciendo la ronda pero alerta a cualquier movimiento sospechoso(con el arma cargada por supuesto). Les hago un gesto de saludo con la cabeza:

-Buenas noches.

A ver si se acojonan y se largan de aquí...si no, igual tengo algún problemilla.

Los tres trabajadores ven a Artellus y acaban la conversación al instante. Se quedan paralizados, mirándole. Al final, uno de ellos se atreve a hablar:

-Bu.. Buenas noches. ¿Sucede algo? Si no es así, puedes marcharte por donde has venido. Esta plataforma es privada. -B

-Buenas noches. No, de momento no pasa nada, pero tengo órdenes de comprobar que todo está tranquilo y que no hay ningún altercado, los dueños de la nave no quieren que haya contratiempos. ¿Los han visto por aquí? Tengo que hablar con ellos sobre par de cosas.

Por el Emperador que todo vaya bien, no me apetece gastar balas en semejante bazofia...

El trabajador B se lleva la mano a la pistola:

-Tú no eres un guardia... Los guardias no piden las cosas, y no entran sin una orden en una plataforma privada. ¡Lárgate antes de que llame a los auténticos!

-No debiste decir eso...

Mientras me escondo en la cobertura que tengo a mi izquierda disparo con la escopeta al más cercano de los tres.

Maldita sea, tenía que complicarse todo...

Con el mismo movimiento que saca la escopeta de su espalda, Artelus dispara a bocajarro contra el estúpido trabajador -B-.

Suena un ruido sordo del disparo antes de que una nube roja cubra media plataforma, a la vez que la pierna derecha de -B- desaparece, arrancada de cuajo. Antes de que nadie pueda reaccionar, el asesino se ha ocultado tras unas cajas.

Al ver la suerte que ha corrido su compañero, -C- intenta huir por la pasarela mientras -A- desenfunda su pistola y se pone a cubierto.

-¡¡NO DIRÉ NADA!! ¡¡DÉJAME VIVIR, POR FAVOR!! -C

-Tío... Tranquilicémonos, ¿vale?... Seguro que hay otra forma de solucionar esto... No me pagan lo suficiente para morir así, ¿sabes? -A

-Muy bien-Vamos a sacar tajada de esto-Dime el nombre de los que os han contratado y cuando llegarán y, podréis iros.

Me mantengo alerta por si acaso intentan algo mientras hablamos.

El hombre restante baja el arma, pero no sale de su escondite. Prefiere mantenerse parcialmente cubierto para evitar perder una pierna como le ha pasado a su compañero.

-¿Nombres? Te equivocas, a nosotros nos contrataron mediante una agencia. ¡No sabemos para quién trabajamos! Pero supongo que serán los hombres de la nave, o ellos los conocerán...

-Muy bien, largaos de aquí y,..., no habléis de esto con nadie, u os buscaré y, os mataré. ¡Largo de aquí!

Puede que hasta no tenga que matarlos a todos...

-Muy bien, largaos de aquí y,..., no habléis de esto con nadie, u os buscaré y, os mataré. ¡Largo de aquí!

Puede que hasta no tenga que matarlos a todos...

-Tranquilo. ¡No se lo diré a nadie! Yo ya me voy...

Y con esta despedida el hombre salió corriendo tras su compañero.

Perfecto, ahora a lo mío...

En cuanto los pierdo de vista recargo la escopeta y me dirijo a la nave. Cuando llegue cojo una granada fotónica y entro en la nave. Antes de avanzar me quedo escuchando para saber si hay alguien y donde está en caso de oir algo.

Artellus cree escuchar unos apsos y voces en el interior de la nave, como el ajetreo anterior a un combate. Si hay alguien dentro, está claro que con el ruido que ha hecho ya saben que está aquí.

Maldita sea...pués a la mierda...

Me cuelgo la escopeta y cojo otra granada fotónica. Lanzo las dos dentro de la nave y en cuanto oiga la explosión entro con la escopeta lista para disparar a lo primero que vea.