Partida Rol por web

Mike miró con algo de desdén a T.J. en cuanto se unió a Benjamin y a él. Sus formas cada vez le desagradaban más, y habría jurado que había estado a punto de levantar la mano a Katerzyna, lo que no estaba dispuesto a consentir; pero tampoco era su intención caldear más las cosas, por lo que prefirió guardar silencio-como casi siempre- y limitarse a andar más atento con el comportamiento del americano con respecto al resto de personas.

En cuanto reparó en los cadáveres, levantó la ceja izquierda.

-Cadaveres de ¿militares...?...-Adoptó una mueca de indignación. En otra situación habría reaccionado de forma complétamente diferente, pero desde que había despertado en ese bosque, su sentido de lo "normal" se había deformado bastane.

-Bueno, cadaveres de militares con ropa adecuada-se dijo para si mismo.

En cuanto hubieron dejado el ciervo en un sitio adecuado, se afanó por hacerse con una de aquellas ropas térmicas, plegando el chaquetón y dejándolo junto con el resto de la ropa apilada.

Apartándose a una esquina de la cocina, se puso aquella ropa térmica.

Contemplo cómo Erik y T.J. terminan por separarse, tras la arriesgada y quizás torpe intervención de Kat, quien muestra más voluntad que otra cosa. Me pongo muy tenso cuando T.J. la sujeta por los brazos de esa manera, planteándome seriamente el intervenir, pero finalmente la suelta en seguida tras una seria amenaza.

Parece fuera de sí. ¿Será normal en él, o...?

También dedica unas palabras a Erik, que no logro oír, aunque por sus gestos se puede intuir el mensaje. Aquí ha pasado algo muy gordo, o algo muy tonto que se ha vuelto gordo por alguna razón que desconozco. Sólo espero que no sea una bola de nieve que termine por crecer y volverse un problema para todos.

Gracias, Mike, coge de la parte de atrás del madero. -Le agradezco cuando se ofrece a ayudar con el ciervo, levantando el palo de mi hombro con gran alivio y cogiéndolo de la parte delantera- Claro, T.J., ¿puedes sujetarle la cabeza? Llevo todo el pasillo arrastrándola...

Entre los tres, llevamos el ciervo hasta la cámara frigorífica, donde lo dejamos en un estante del que T.J. retira unas latas de conserva. Es entonces cuando me fijo en los cuerpos sin vida, y la ropa de estos.

Mike, ¿alguna de esas chaquetas será de tu talla? A Victoria tampoco le vendría mal algo de abrigo... -Digo con aire casual, como sin darle importancia, porque realmente me preocupa mas T.J. y su actitud- T.J., ¿todo bien? -Le digo con cara de preocupación, sin reproche ni molestia, cuando Mike se aparta a coger la ropa- ¿Ese rollo es algo que deba preocuparnos?

Oigo las voces de T.J. y me giro con los ojos muy abiertos al ver cómo sujeta a Katarzyna. Apoyo la palma de la mano sobre la mesa para levantarme rápido si hace algún gesto de más, pero parece que todo queda en una bravuconería. Al fin la suelta y entonces me giro de nuevo, lanzando un suspiro y negando con la cabeza.

- Los ánimos están caldeados por aquí... Incluso Benjamin está aún más tenso de lo normal. Creo que de alguna manera el Dragón está haciendo mella en él, aunque según Rina - aprovecho para acariciar su mano, des de que entramos en el castillo estaba más fría que en las últimas horas  - es solo una cuestión de que trata de lograr algún tipo de liderazgo a cualquier costa. No sé... - niego de nuevo, esta vez para quitarle importancia al asunto.

- ¿Qué hay de Chris y las hermanas? Supongo... ¿están bien verdad? - desvío la mirada hacia la ventana antes de continuar - Debo contaros algo. Creo que es importante, así que prefiero decírtelo ahora ya que vosotros cuatro sois los únicos con los que aún no he podido hablar. 

Le conté a Giulia mi encuentro real con la chica del sueño, cómo me interné en el bosque y la vi arrastrando la misma canoa. Le expliqué que incluso salí de las sombras a bastante distancia para que ella no se asustara, pues quería llamar su atención y traerla con nosotros, pero que cuando traté de llamarla ella reaccionó muy asustada, con muchísimo miedo. Tanto que de alguna forma logró infundirme sus propios sentimientos en aquél momento. Le conté que era tan poderosa que arrancó varios árboles a la redonda, haciendo que me golpeara la cabeza y que a causa de eso la perdiera y no pudiera seguirla. Callé un rato, pensativo, recordando.

- Ella estaba huyendo sabes. De algo o de alguien - miré a Himiko de reojo, de nuevo - No sé ¿Por qué tendrá cerrada la biblioteca?

Había estado atento a los movimientos de TJ e incluso había apartado una mano y la había enfocado hacia ellos, dispuesta a apartarlos con un soplo de viento, pero todo quedó en nada. Se volvió a centrar en Makoto cuando le habló.

-¿Ya veo... mala noche en la cueva?-comento asintiendo al mal ambiente-Todos bien. Ellas fueron a buscar algo que escondieron antes de dormirnos, y Chris está en el laboratorio. Respecto a Ben...-puso los ojos en blanco por un momento- Coincido con Rina. Pero no me gusta su forma de hacer las cosas, desde hace tiempo-especialmente la noche en que se pusieron a hacer manitas en la cueva con Himiko al lado. Aunque eso parecía más que lejano. 

El cambio en Makoto le llamó la atención y se centró en él. Escuchó atenta al relato con cierta sorpresa. ¿La habían encontrado, sin más?
-Si está sola, es la útima y hay soldados persiguiéndola es normal que esté asustada...-de humedeció los labios, pensativa-Tenemos que encontrarla y traerla a salvo...-suspiró. Ante el comentario de Himiko, miró a la pareja alternamente.

-Himiko comentó que la razón del cierre es alguien. Alguien que apareció poco después de dormirnos y de nuestro tiempo. Está en un bloqueo, y cuando se libere podremos entrar en la biblioteca. Y contactar con la última. No sabemos más, espero que Himiko nos cuente el resto...-aportó la información que tenía.

-Descuida, símplemente me conformo con la ropa térmica, la chaqueta seguro que le irá mejor a alguna de las chicas que no lleven ropa adecuada.

Se acabó de poner aquella ropa elástica que se le pegaba al cuerpo, denotando su figura delgada pero fibrosa.

-Bueno, como un guante.

 Tras la intervención de la rubia, giré el cuello para mirar con el ceño fruncido como T.J. se retiraba con intención de ayudar a Ben y Mike a llevar el ciervo, sin entender el por qué del conflicto, y tensa y molesta por el momento en el que agarró a Kat. ¿Qué coño había pasado?

 -Kat.- Posé mi mano con delicadeza sobre su hombro desde atrás y me moví frente a ella, seria. -¿Cómo se te ocurre meterte así?- Dije más en tono de reproche que de pregunta, agarrando su hombro para que me escuchara bien.- Deberías tener más cuidado con éstas cosas... ¿Estás bien?- Pregunté, ahora sí, preocupada. La chica había demostrado ser impulsiva, además de persistente, y para algunas cosas estaba bien, pero para otras el no contenerse podría acarrear problemas, y no sólo a ella. Yo, sin embargo, no sería la que me preocupara por ahora sobre los dos protagonistas del espectáculo una vez acabado, que ni sabía de qué había ido. Lo que sí sabía es que no quería más problemas ni más gente enfrentada entre sí de la necesaria.

 -Ah..- Resoplé. La solté y bajé la mirada mientras me frotaba la cara, y guardaba la otra mano en mi bolsillo. Volví a mirarla antes de seguir hablando. -Siéntate, anda, te traeré algo de comida.- Sugerí a la chica para que se tranquilizara tras su desagradable encuentro con T.J., y no tuviera otro tenso cruce con él si quisiera coger comida.

 Entré a la cámara frigorífica para buscar latas de conserva para Kat y para mí, pero al instante me di cuenta de que había más personas de las que esperaba encontrarme. En seguida desvié la mirada hacia el suelo ante tal macabro cuadro, bufando aire por la nariz. Tomé aire profundamente antes de volver a abrir los ojos y echar un vistazo a los chicos que yo conocía, quienes llevaban parte de la ropa de los que no. ¿Esa niña había hecho eso? Con un poco de suerte, y viendo como habían llegado, no había sido gratuito y me libraría de un destino similar. Decidí tratar de ignorar aquello todo lo que pude y volver a lo de coger la comida, y algo de ropa ya que estaba, al ver que había alguna por el suelo.

 El chino llevaba casi toda la ropa de uno de ellos, excepto la chaqueta, que estaba en el suelo apilada con más ropa. T.J. llevaba justo lo contrario. Recogí la chaqueta del suelo y quise llamar al asiático, quedándome por un momento en blanco al no recordar su nombre ¿Cómo lo había llamado Ben? Era... - Mike - Llamé al chico. -¿Vas a ponerte esto?- Pregunté levantando la chaqueta para mostrársela antes de ir a por la comida, dando por hecho que era la parte sobrante del uniforme que portaba, que anteriormente llevaría uno de los cadáveres, a los que volví a mirar de reojo. En cualquier otra situación no habría preguntado, pero tras la discusión entre los chicos tal vez sería mejor ser educada para no suscitar sensibilidades.

 Quedé a la espera de la respuesta del chico, que esperaba positiva para mi, antes de ponerme la chaqueta y volver con la comida para Kat y para mi.

Aunque Lia había estado hablando con Makoto y Rina en la mesa había estado atenta a la poco afortunada intervención de Kat. Pero por suerte TJ pudo contenerse y tras mascullar unas advertencias se dedicó a algo más productivo. Era bueno saber que al menos, por ahora, no habría necesidad de que corriera la sangre. Suspiró aliviada, viendo como Vicky se acercaba a atender a la rubia.

Tras un gesto con la cabeza a Makoto disculpándose, se levantó para acercarse a ella a palmearle la espalda mientras Vick iba en búsqueda de algo de comer. Le apartó una silla con gesto conciliador y luego se quedó de pie, repasando a los presentes con la mirada.

-Faltan Kurt y Roxanna... ¿venían los últimos?-preguntó para desviar la atención residual del conflicto a otro tema. Ni TJ ni Erik merecían ahora que los atosigasen. Si querían pegarse, de hecho, era su problema: era algo que había asumido-Kyara y Nyara estan por el castillo. Si hay que hacer reunión como ha dicho Himiko, para cuando lleguen los rezagados si no han vuelto habrá que ir a buscarlas, igual que Chris-comentó de forma retórica.

Miró a Himiko, sentada con su libro ajena a todo, y se obligó a apartar la mirada. Sintió los ojos comprensivos de Makoto sobre ella, cómplice de lo que sentía la italiana. Pero lejos de montar dramatismos, se alegró de que almenos todos los presentes estuvieran a salvo, considerando los lobos y los osos. Justo se volvió a sentar en la mesa con Mako y Rina que Chris entró. Le saludó con una sonrisa cansada.

-Justo a tiempo para la terapia de grupo. Himiko quiere contarnos algo cuando estemos todos-aclaró, apoyada en la mesa.

Himiko se pone en pie dejando el libro en la mesa y comienza a hablar patusamente pero sería:

- Únicamente lo explicare una vez puesto que no es necesario que lo explique más veces, cuando termine de hablar podéis preguntarme y veré si considero necesario responder.

La niña da un saltito y se sube en lo alto de la mesa, mira a todos y dice:

- Realmente no me importa lo que pensáis hacer ni lo que vayáis hacer, podéis deambular por el castillo como deseéis, sin embargo, la biblioteca está prohibida hasta que no os diga lo contrario y por supuesto en mis aposentos que son los antiguos aposentos del director también está totalmente prohibido entrar sin mi permiso, el que entre sea por el motivo que sea terminara como esos soldados, no me molestéis demasiado y yo os dejare hacer lo que queráis

Mira de reojo a TJ y Erik:

- Como si os queréis matar entre vosotros, tenéis comida, yo no la voy a tocar como vosotros tampoco tocareis la mía, no, no os voy a ayudar a cazar al igual que tampoco necesito vuestra ayuda para eso.

Da unos segundos para que todos puedan asimilar lo que ha dicho y añade:

- No habéis sido transportados ni nada por el estilo al futuro, han pasado realmente 300 años en los que todos vosotros habéis estado dormidos aquí en el castillo y yo os he tenido que proteger pero como suponéis eso se ha terminado ya... sé que algunos aun no habéis despertado... no es mi problema

Mira durante unos segundos a todos y a continuación a Lia, y dice:

- Esto que voy a contar Lia ya lo sabe, pero si quieres puedes volver a escucharlo.

Se queda unos segundos callada, como para dar oportunidad a Lia y a Chris que había entrado a marcharse si así lo deseaban:

- En cuanto a la que buscáis, la ultima como vosotros la llamáis, solo la he visto una vez y de lejos... todos vosotros poseéis magia o poderes sobrenaturales, y en este tiempo eso no existe... y antes de que lo digáis, no, yo no soy como vosotros, yo soy un vampiro, eso es otra cosa cuando nos conocimos algunos de vosotros y yo, mi sangre estaba despertando al igual que la de vosotros, pero... por explicarlo de cierta forma mis habilidades no tienen nada que ver con la magia ni con la esencia sobrenatural, lo explicare de forma sencilla.

Vosotros cuando usáis vuestras habilidades os cansáis y con descansar os recuperáis cierto? yo soy diferente...yo necesito la sangre de otros para vivir y con esa sangre puedo desarrollar mis habilidades... bien la ultima como la llamáis es como vosotros, pero como multiplicado por mil y encima ella produce magia...

Himiko coge un vaso de agua y lo llena hasta el borde mientras dice:

- Imaginaos que el vaso es vuestro cuerpo y el agua vuestra digamos energía sobrenatural, esencia, ki, magia o como queráis llamarlo, si lo usáis cada vez hay menos

La vampiresa empieza a mover el vaso que va derramándose hasta que apenas queda la mitad, entonces lo gira y el agua cae

- Si la usáis toda se agota, pero por suerte vosotros descansáis y podéis hacer esto

Coge una jarra llena de agua y llena de nuevo el vaso

- Ahora imaginaos que esta jarra es inagotable, eso quiere decir que siempre habrá energía sobrenatural cierto?, pues esa jarra es la ultima...

Al acercarse a Kat y palmearle el hombro aprovechó la cercanía para hablarle más bajo.

-Un poco más y tengo que mandar por los aires a TJ para que no te pasara nada-delató Lia, que había estado más atenta al conflicto de lo que había parecido-Intenta relajarte, ¿vale? Ahora que estamos aquí podremos descansar un poco...-era algo así como si le diera ánimos. No sabía cuán cierto era lo que decía, ya que tanta gente junta, en una situación adversa como aquella y con altos grados de frustración nunca era un ambiente tranquilizador. Pero al menos el castillo suavizaría el ambiente.

Estaba negando cortesmente con la cabeza a la pregunta de Lia, indcando que no necesitaba más ropa que la que llevaba cuando Himiko alzó la voz desde el comedor, haciendo que Mike se asomase desde la puerta de la cocina para escuchar atentamente lo que tenía que decirles.

-Disculpe, Himiko... ¿dice que estamos en el año dos mil trescientos y pico?

Tenía mil preguntas en la cabeza después del discurso de la "vampira", pero sin saber por que aquella pregunta fue la que encontró el camino hacia sus cuerdas vocales.

Me puse la chaqueta que Mike había dejado libre al ver que no la quería, cogí un par de latas de comida y volví para ofrecer a Kat la suya, forzando no muy bien media sonrisa tratando de ayudarla a tranquilizarse, y sentarme con prisas, justo a tiempo para atender a las palabras de Himiko.

Aunque sus explicaciones parecían bastante claras, aún tenía dudas y cabos sueltos, y parecía que si en algún momento podría atosigarla a preguntas era ahora.

-No incumpliré tus normas, pero... ¿Cuánta gente falta por despertar?¿Y por qué estábamos en el bosque si se supone que nos estabas protegiendo? - Dejé la pregunta que consideraba más importante en último lugar, temiendo que la respuesta me decepcionara. Sería lo más probable por lo que acababa de contarnos, pero con magia de por medio nunca se sabe, o eso esperaba. -¿Entonces no... No puedo volver a casa?- Y todo lo que eso conllevaba, mi familia, mis amigos, mi trabajo, mi cómoda vida... A encontrarme en aquella situación y con esa gente. Todo parecía tan surrealista... Aunque igual estaba soñando en un coma y todavía no me he enterado, no sé qué sería peor.

TJ seguía echando leña al fuego, sin admitir su error. La mirada de Erik era rotunda y perdida en su cólera. Kat intentaba intervenir para calmar el asunto. Pero aquello fue peor, el joven no parecía disminuir su tensión ni entrar en comprensión.
- Le va a levantar la mano - pensaba mientras escuchaba las palabras que cruzaba con la muchacha. Si sin dudas lo haría, aquello era una amenaza una advertencia, era capaz y sería capaz de hacerlo. - Es una amenaza - pensaba sobre aquel muchacho que se alejaba tras el llamado de Ben.
Todos parecían observar y comentar lo que sucedía, pero aun así ninguno era capaz de poner en orden y linea al muchacho americano. Ignoraba todos los comentarios, las discusiones y a todos los presentes en aquel lugar; su mente no podía dejar de pensar que más que una ayuda aquel era una amenaza. - Es capar de agredir a una dama, dejar a otros a la merced..El es una amenaza - se repetía una y otra vez en su cabeza. Apretó sus dientes y exhalo fuerte, su cara estaba roja y su mirada perdida en rabia;- Mmmm - bufo un poco, pero aun así la situación lo superaba.
Acto seguido fue por dentrás de TJ y del grupo que se dirigía al refrigerador industrial para dejar al ciervo.

Cuando T.J. se volvió, a Katarzyna ya se le habían ocurrido al menos tres respuestas, entre ingeniosas y desafiantes, para responderle, pero la tensión del momento hizo que simplemente se quedara mirándole, sin dar un paso atrás.  Luego se dejó llevar por Vicky, que prácticamente la sentó y Giulia le susurró algo.  Por temor, esperó que terminara la vampiresa de hablar, tras lo cuál les susurró a las chicas:

- Tranquilas, sé que son chicos "revoltosos"  -  hizo hincapié en la última palabra.
- Pero ninguno me haría nada.  -  No pudo dejar de esbozar una leve sonrisa algo orgullosa y presumida.

Los localizó a los dos con la vista, como si su sola mirada pudiera evitar más peleas.  No se las iba a permitir, desde luego, pero mejor sería teneros controlados.

Mientras Himiko habla TJ siente algo en su espalda, un dolor punzante e intenso, el chico nota como algo frio penetra en su cuerpo, todos pueden ver como Erik esta justo detrás y se aleja mientras TJ siente ese fuerte dolor, los que están a su lado pueden ver como el chico visiblemente parece dolorido y se inclina un poco, incluso pueden ver como su ropa en la espalda tiene sangre y en cierto punto de la espalda tiene una herida de corte.