Partida Rol por web

El lobo estaba cerca de Kurt y la trato de lanzar una dentellada, sin embargo, este estuvo ágil y consiguió tirarse al suelo hacia un lado y rodar para evadir el ataque del lobo sin sufrir daños, todo esto sucedia mientras Kyara se ocultaba entre unos arboles cercanos

Esto es una mierda.

Si es que no era una maldita buena idea acercarse a los bichos. Esto pasa por hacer caso a un puñetero espíritu del bosque que sólo habla entre vagos enigmas.

Estamos rodeados de dientes y pelo. Las peleas no son nuevas para mí, pero las peleas con puñeteros lobos que van a tirarse a la yugular sí son nuevas para mí.

No tardan los putos comemierda en tirarse a dentellada limpia contra nosotros. Veo de refilón abalanzándose hacia una de las hermanas, justo mientras otro me embiste. Instintivamente pongo el antebrazo delante, mientras me echo hacia un lado. Eso no evita que me lleve un arañazo.-¡Mierda!-bramo mientras caigo de culo al suelo. Sin darme cuenta, mi otra mano coge algo de nieve. Sé que no sirve de nada, pero mis manos cogen automáticamente lo que haya en el suelo cuando caigo en una pelea, para lanzárselo a los ojos al rival.

Estoy ahí, en el suelo, cuando los demás empiezan a combatir. Yo voy a necesitar un segundo. Es complicado concentrarse aquí, pero tengo que hacerlo, por Lia y por los demás.

¿Cómo mierda era la frase final? Joder....ni kite, yamata...lamada...¡anata o kongan! Eso, joder.

Me incorporo un poco, agachado con una rodilla en el suelo, cierro los ojos e intento visualizar la energía saliendo de mi pecho, intentando que todo lo demás se desvanezca con las palabras que recito. Me concentro sólo en esas palabras y en la imágen en mi cabeza.-Anata wa watashi no soba de, doko demo watashi to d?butsu to y?jindearu ch?jitsuna konpanion, anata wa, watashi no ichibu watashi no honshitsu no ichibuda to watashitachi o torikakomu subete, anata wa dansei to karera no saidai no d?meikuni no hogo-shadearu, nakama Shinazo wa shinaide kudasai watashi wa jibun jishin o mamoru tame ni watashi ni kite, anata o kongan-y de algún modo, a pesar de la adrenalina, lo consigo. El brillante y semitransparente perro naranja sale de mí al tiempo que noto como el suelo cambia, congelándose.

Rápidamente, señalo a uno de los lobos* y ordeno al perro.-¡Ataca al cuello! ¡Cúbrenos! ¡Ábrenos paso!-después, acabo de incorporarme, y comienzo a ladrar.-¡Tenemos que salir de aquí! ¡Avanzad hacia las cuevas mientras los echamos! ¡No les deis la maldita espalda o estamos muertos! ¡Tenemos que poner la cueva detrás nuestro!-hacerlo será más chungo que decirlo, a la vista de como resbala esto.-¡Kurt, usa tus poderes rompeárboles para colocar a los lobos que puedas en el mismo lado! ¡Rodeados no duraremos!-busco con la vista a Lia en todo momento para comprobar que no tiene ninguno encima.

Cuando Chris termino justo a su lado aparece un perro el cual parece escuchar lo que dice y se lanza a por el lobo, es entonces cuando una encarnizada lucha entre los dos animales surge, de hecho lo sorprendente para algunos es que parece que la pelea entre los dos canes está bastante igualada entre los dos animales.

Mientras tanto dos de los lobos parece que deciden desaparecer del lugar volviendo atrás. El otro lobo que queda se lanza a por Kurt logrando engancharse al brazo del chico y mordiéndole con gran fuerza. Kurt siente entonces un intensísimo dolor y sabe que la herida es bastante fea.

Mi primer ataque es un desastre, pero al menos sirve para echar hacia atrás a uno de los lobos. Todo sucede demasiado deprisa para andar fijándome en lo que tengo alrededor, pero oigo la voz de Chris hablando de replegarnos. Me giro para ver si los demás empiezan a ponerse en marcha, y veo cómo un lobo se engancha con sus fauces al brazo de Kurt.

¡Sueltale, joder! -Grito mientras salto hacia él y le lanzo un zarpazo- ¡Nada de destrozar árboles, volvamos a las cuevas!

Ben da un fuerte golpe al lobo que hace que este suelte a Kurt, sin embargo, puede ver como la herida de este es bastante fea y sangra, a Kurt el brazo le duele horrores y prácticamente no puede moverlo, mientras tanto el lobo herido en un costado ha caído pesadamente al suelo

Gracias a Chris, con su perro, entretiene a uno de los lobos mientras pelean. Otros dos se alejan pero cuando miro al que queda, este se está abalanzando sobre mi y ya no me daba tiempo a esquivarlo, con mi brazo por delante, este se engancha a el con gran fuerza. No puedo contener un grito cuando noto sus dientes clavarse sobre mi.

Ben le da un golpe mandándolo al suelo y al ver la herida, veo que está bastante mal, pero no por ello puedo quedarme quejándome sin hacer nada. Me entran unas ganas enormes de acercarme a el y aplastarle la cabeza contra el suelo, pero por otra parte creo que no es buena idea empeorar las cosas, ya está en el suelo y me daría bastante pena hacer eso. Me vuelvo a mirar el brazo, sujetándolo con la otra mano.

-Tsk...¡Venga, vamos dentro! Esperemos a que se vayan-Miré a Nyara-Haz tu pista de patinaje en la entrada. Venga, os cubro.

Retrocedí un par de pasos hacia la entrada a la cueva, pero sin dar la espalda a los dos lobos que aun había, esperando a que los demás empezaran a correr hacia la cueva, no iba a irme yo el primero.

-Ayúdame Ben...-Mascullé sin mirarle con un poco de rabia, apenas pudo oírme el ya que estaba a mi lado, al fin y al cabo tenía el brazo bastante jodido y no era plan de quedarme ahí solo esperando a que los demás entrasen.

Ahora mismo tenía algo de miedo, quería largarse hacia el castillo, y lo iba a hacer, pero no quería dejar a su hermana allí, así que optó por alejarse un poco de las cuevas, intentar guiarse por ese olfato que aún no controlaba y, por último, informar a su hermana.

Nya, estoy fuera, haz mutis por el foro y sal de ahí, me he ido por esta zona.

*insertar zona cercana y camino seguido por Kyara*

Los dos animales que se marcharon parece que no hay rastro de ellos, mientras que el lobo herido parece no querer seguir y se marcha, el lobo que luchaba contra el perro invocado parece que nota que está en una gran desventaja y el animal decide marcharse también.

Todos están mas o menos bien cuando los lobos se terminan marchando, el único con una herida bastante fea es Kurt

-Con el calor que sale de la cueva el hielo no se creará-replicó Nyara llevándose una mano a la sien  como si tuviese jaqueca. Maldijo a su hermana en su fuero interno, preparándose para ensartar a esos bichos pero antes incluso de poder liberar el hormigueo los animales se retiraban y no pudp evitar pensar en si eso era también cosa de su hermana.

pfuf... joder, Kurt-la herida desde luego no era agradable de ver. Tanteó en las costuras de la blusa, no tenían vendas a mano y la única que podía prescindir de parte de su ropa sin sentir el frío era ella.

-solo tengo dos mangas así que hasta que vuelva habrá que conformarse con ello-con el quejido de la tela al rasgarse desde las costuras del hombro, Nyara se desprendió de las mangas sin inmutarse por la falta de abrigo pese a que desde la enorme sisa de la blusa se entreveía la ropa interior.

Tendió una de las mangas a Lia y después se acercó al alemán como si fuese él quien mordiese.-Estira el brazo, si sigues sangrando te olerán desde tu casa...-tenía vagas nociones de primeros auxilios y, a falta de otra cosa, tendría que usar su manga para "ponerle un parche" antes de contar con lo necesario para las heridas de Chris y Kurt.

-Ya te he oíd... ay, eso no era para vosotros-dijo como si la hubiesen pillado pensando en voz alta-No muevas ese brazo para que no se afloje el vendaje.-se mordió el labio inferior y miró a Kurt-y no hagas tonterías, aún estoy enfadada contigo por ese plantón mañanero de hace unos días-se recogió un rizo tras la oreja, incómoda y miró a Chris y Lia-¿necesitaréis ayuda para andar?-cosas desinfectantes, vendas, algo que le sirva de apoyo a Chris... aguja e hilo... madre mía, me faltan manos para traer toda la enfermería.

Ya te he oído... los lobos se marchan de aquí, ponte en alto por si acaso, voy en cuanto termine con el vendaje de Kurt... tendremos que traer cosas de la enfermería, esta herida es horrible, Kya. Chris no sé si podrá andar solo o necesitará apoyo pero también necesitará atención, mis mangas no son unas vendas maravillosas.

Tan de improvisto como comenzó, el ataque acaba, y los putos lobos se van a tomar por culo por donde vinieron. Yo estoy de pie mirando como se alejan, vigilando por si decidiesen darse la vuelta y volver, mientras aprieto la herida con la otra mano. No vuelven.

-Ven.-ordeno al perro. Defendernos es una cosa, darles caza es otra muy distinta. Mientras se acerca, lo observo con nuevo respeto. No parecía tan fiero, pero se la ha metido bien por el culo a ese lobo.-Bien hecho.-le digo, aunque en realidad tengo la sensación de que no hace falta que le diga nada. Pero me gusta expresarlo en voz alta.-Quédate cerca hasta que entremos a las cuevas. Ladra si ves algo.-

Después, observo a los demás. Todos están bien, menos Kurt, que tiene el brazo hecho mierda. Bueno, mejor eso que la yugular. Nyara por lo menos parece tener alguna idea de tratar heridas. Bien, eso ayudará hasta que...en fin, hasta que haya algo mejor. Miro por último a Lia. Se nota cómo se me alivia la cara, porque todo ha pasado, pero no porque estuviese preocupado por mi seguridad. No puedo evitar alargar mi brazo bueno para acariciar su cara. No quiero levantar más timidez, así que símplemente la miro, y con la mirada basta, de momento, para transmitir lo que ella sin duda sabe que se me pasa por la cabeza.

-¿Ayuda para andar?-replico-No, no, esto es una mierda.-digo girándome a Nyara, refiriéndome al arañazo. -Es feo y sangra y me toca los putos huevos, además de que me ha jodido la chaqueta, pero estoy bien.-entonces señalo a Kurt.-A tí tenemos que meterte en dentro pero ya.-

Todo aquello sucedía y ella sin poder concentrarse en las malditas espirales. Cuando dos de los lobos se alejaron fue un alivio, pero aun así quedaba Kurt herido de gravedad. La improvisada pista de patinaje no ayudaba a desplazarse, pero por suerte ella pesaba tan poco que con movimientos pequeños conseguía moverse. Alargó el brazo para tomar la manga ed Nyara y ayudarla a atender a Kurt. Buscó preocupada con la mirada a Chris pero con el gesto atento por su parte se sintió aliviada.

Vio como Nyara se mantenía impasible ante el frío mientras atendía a Kurt y recordó cómo ayudó a Makoto en el castillo. Se giró de nuevo a Chris para mirar su herida. No era tan grave como la del alemán, pero tenian que evitar que se infectara.Escuchó a Chris negarse a necesitar ayuda a caminar, señalando su brazo. Cuando lo hizo lo tomó y vendó con la otra manga de Nyara todo lo bien que pudo-Estáte quieto... no me hagas enfadar, ¿eh?-bromeó sin mucho ánimo, visiblemente preocupada por la herida. Por suerte la italiana llevaba su chaqueta, así que una vez dentro de la cueva podría conseguir más vendas para Kurt con su camisa o lo que pudiese.

-Vamos bien. Deberíais ir primeros, el resto os cubriremos...-miró de reojo los lobos que quedaban, magullados. Lo sintió en el alma y deseó que el espíritu del bosque captase aquel arrepentimiento. Miró a Ben, ¿Nada de romper árboles pero sí matar lobos? habría sido mejor dejarlo aturdido y no herirle. Suspiró-Vayamos rápido, antes de que todo empeore...- cerró los ojos pensativa, para sí.

Respiró hondo y se concentró. Habló sin pronunciar nada, apenas gestualizando los labios y concentrándose, visualizando cómo las palabras que articulaba salían de su boca como las corrientes azules. Como si aquello fuera un mensaje espiritual, ya que al fin y al cabo, ella misma era un espíritu de la naturaleza, del viento.

Gran espíritu del bosque... si existe la posibilidad de que me escuches, o sientas, por favor... Perdónanos por lo que ha ocurrido. Aunque fuese en defensa propia no deseamos el sufrimiento de ningún ser vivo del bosque. Que los lobos sobrevivan y puedan volver con su manada... Que se restore la paz y el silencio en tu bosque. Perdónanos, te lo suplico. Si puedes salvar la vida de éstos lobos, por favor, no permitan que mueran por un error nuestro. Si no puedes, por favor, muéstrame cómo hacerlo yo... Te lo imploro...

Las palabras silenciosas arrastraban consigo un sentimiento de culpa y arrepentimiento enormes.Sabía que si volvian a la cueva y pasaban las horas se sentiría terriblemente culpable por aquel lobo, tirado y herido.

Lía siente un susurro que le habla en el viento, como si el mismo viento le hablara

El ciclo de la vida es cruel y feroz solo el grupo o el las fuerte sobrevive, la caza puede fallar el cazador puede morir y convertirse en presa es parte del ciclo natural

El zarpazo al lobo me causa cierta satisfacción, pero también miedo y desasosiego. No esperaba darle tan fuerte, no era mi intención matarle sino sólo que soltara a Kurt y desistiera de atacarnos. No parece que haya muerto, pero la herida era bastante fea, más de lo que esperaba.

Y luego está lo otro. El, en cierto sentido, placer que me ha proporcionado golpearle. ¿Es acaso parte de mi naturaleza esta violencia, tal como dijera mi reflejo en la cueva? ¿Acaso estoy destinado a volverme alguien peligroso?

Con esas ideas en mente me quedo plantado, guardando al grupo mientras atienden a los heridos, para asegurarme de que esos lobos no regresan. De vez en cuando me giro a observar a Kurt y Chris, pero especialmente a Kurt. Justo antes de que los lobos huyeran, tras liberarle de la presa de ese lobo, pude oír cómo me pedía ayuda. Pero ¿ayuda para qué? No me quedó claro, lo único que yo podía hacer es seguir protegiéndole.

A él y a todos los demás, piense lo que piense de ellos.

Tomé una decisión, que ni tan siquiera se si habría secundado o no, en base a una corazonada. No se mucho de espíritus y demás, y no se hasta qué punto el espíritu con el que habló la Kitsune, es responsable de esto. ¿Que sea espíritu del bosque implica al mundo animal y vegetal? No se si dañar a un lobo es dañar al bosque, en realidad. Lo que sí se es que destruir un árbol sí lo es.

Tengo que hablar con Rina. -Digo una vez parece claro que los lobos no van a regresar. Veo la mirada de desaprobación de Giulia. Sin más, otra para la larga lista. Hace tiempo que dejé de buscar imposibles. Han sido cinco días muy largos, toda una vida de lecciones. Ya no soy el que era, ni me afectan igual las opiniones de ciertas personas. Le doy una palmada en la espalda a Kurt al pasar a su lado, una vez retraigo mis garras y escamas, y si se vuelve le guiño un ojo con complicidad. Me alegra que esté bien, dentro de lo que cabe- Nos vemos abajo, cuando os decidáis.

No me quedo a esperar a que organicen las cosas a su manera. Ya estoy cansado de eso. Para empezar, no debieron irse sólos cada uno a su bola. Bastante poco ha pasado para lo que podía. Pero bueno, sólo lo siento por quienes tengan que cargar con las consecuencias de hacerles caso.