Partida Rol por web

- Mejor entrar y pasar a cuchillo a todos esos cobardes- sugirió Fornax irguiendo la cabeza- su escondite muestra claramente su debilidad. Si preferir, Fornax también puede romper cabezas.

El forjado empezaba a olisquear ese momento que claramente antecede a una batalla y la excitación empezaba a hacer presa dentro de sí.

Hurin se da la vuelta rápidamente al escuchar algo a vuestra espalda, hacia vosotros se dirigen dos humanos que portan la insignia de la casa Deneith, una humana con media cabeza rapada que porta un espadón y un hombre alto y apuesto que no parece portar armas, se sacuden tierra de la ropa por lo que han debido pasar un tiempo ocultos en algún agujero o algo similar.

Cuando el hombre habla lo hace con un marcado acento de Karrath.

- Quienes sois? Soy Kion de la casa Deneith y tengo que detener a las personas que se encuentran en el granero, son miembros de un peligroso grupo conocido como la garra esmeralda y han cometido crímenes sin justificación incluso en medio de una guerra - os mira atentamente - si sois colaboradores suyos pagareis y si no es así esplicaros inmediatamente.

Queda poco para la hora del encuentro y ahora tenéis un nuevo contratiempo.

Saludos, Kion, de la casa Deneith. Por lo que decis, somos aliados.

Yo soy Arraman el rojo, a vuestro servicio y estos son Erebor, Fornax, Hurin y la mediana es Kharen, nuestra clerigo. Hemos acudido para soprender a estos canallas, pues se supone que este es el lugar de encuentro con un grupo de hobgoblins que pretendian hacerles un recadito. 

Los hobgoblins se encontraron con nosotros y hemos venido a fastidiarles los planes a sus empleadores.

- Bien- interrumpió Fornax impaciente- Si ya estar todos ¿ya poder ir a aplastar cabezas?

El forjado desenganchó la gran hacha del arnés e hizo crujir un par de huesos mientras observaba a la desvencijada granja con ansiedad.

Inmediatamente había preparado una flecha en el arco pero ante la falta de hostilidad de pareja, más allá de la que pudiera entenderse en sus palabras, pronto dejé de apuntarles.

- Debéis sumar intento de secuestro a los cargos. El capitán Destir o el conde Duran ir’Bakker podrían daros más detalles, si lo consideran oportuno.

No quería desconfiar de ellos, pero tampoco tenía motivos para lo contrario.

- Hemos localizado un grupo en el cobertizo y dos de guardia en el granero. Da la impresión de que no querían ni cumplir su trato con los hobgoblins.

Teorizo a juzgar por su disposición.

El Deneith os mira con interés:

- Así que perteneceís al regimiento del conde Duran, entonces doy por echo que sabéis defenderos bien, sois sigilosos o preferís entrar sin contemplaciones? No tengo problema con ninguna opción, pero al menos quiero llevarme a un detenido.

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- Es la hora de patear culos- rió Fornax- mejor entrar de frente y reventar cabezas que esconderse como cobardes.

El forjado había ganado presencia hinchándose como un pavo ante la perspectiva del combate que, sin duda, ya se avecinaba. Algo parecido a una sonrisa salvaje inundaba su rostro.

Arraman sacó un pedazo de cuero y lo apretó en su mano mientras pasaba la otra por encima mientras canturreaba en un idioma desconocido. Al cabo de un segundo, una armadura fantasmal los recubrió al mago y a su familiar, parpadeó un par de veces y desapareció.

-Listo! Estoy de acuerdo con atacar pero os aviso de que yo iré primero a por los dos separados del resto. Fornax, si vienes conmigo, te agradeceré un poco de protección. Sospecho que ellos serán la clave del combate.

- Fornax cuida- aseguró el forjado- tú no preocupar, Fornax aplasta cabezas antes de que amigos llegan.

- No tan rápido - interrumpo el entusiasmo del mago y del forjado - El granero tiene una sola entrada, más que entrar a saco, deberíamos forzarles a salir y dar cuenta de ellos conforme lo hagan.

Les señalo esperando que la lógica de tener que enfrentar a menos enemigos de golpe se impusiera.

- Debemos llegar cuanto antes si, pero controlar la puerta antes de que salgan es nuestra prioridad.

-Creo que deberíamos dejarle el granero a Kion y sus hombres, Húrin. Nosotros deberíamos acabar con los dos del cobertizo rápidamente y luego acudir a apoyarles cuando hayamos eliminado la cabeza de la cobra. Pero, si quereis que nos separemos, entonces pongámonos de acuerdo con alguna clase de señal para coordinar el ataque.

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Ya hay mapa

INICIATIVAS:

Arraman 17

Kion 11

Kharen 10

Fornax 9

Hurin 9

Erebor 4

Arraman examinó bien el campo que se extendía ante él. La hierba alta y la disposicion de los árboles le ofrecían un mínima oportunidad de avanzar a escondidas, así que se movió a media velocidad hasta alcanzar la protección del árbol. Él no ganaba nada corriendo a la carga pero estaba convencido de que Fornax se lanzaría a la carrera hacia el pequeño cobertizo y entraría avasallando. 

Aquello funcionaba mejor para el mago. Los dos individuos se centrarían en él y así Arraman podría sorprenderlos con un conjuro.

Si haces tirada sin penalizador entonces te mueves a la mitad de tu movimiento, si quieres moverte la distancia que puedes (30") tienes que tomar -5, aparte has colocado tu token a 35", ya por poner la puntilla (cada cuadro son 5").

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Arraman se acerca al montón de heno, consigue moverse sin hacer casi ruido aunque se tumba algo torpemente sobre el irregular terreno.

Kion manda a su ayudante a dar un rodeo y buscar la parte trasera del granero, a continuación imita la maniobra del mago y se mueve por el centro, donde Arraman fue bastante discreto, Kion es inaudible, una escarabajo sería más fácil de escuchar.

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