- No es eso lo que se escucha por las calles...-te comenta negando con la cabeza.- Pero yo no soy quien para meterme en esos asuntos. Si quieres verle esta en el hospital San Michel
- ¿Como que no es lo que se escucha? ¿Y que se escucha? - Le pregunte casi ordenandole que me respondiera a las preguntas que le hacia, dejando claramente la direccion del hospital en mi cabeza, pero no tocando ese tema de manera directa, pues aun no sabia si iria alli, hacia muchos años que me habia desentendido de aquello...
- Creo que he hablado ya demasiado.- dijo disculpandose con un gesto.- Tal vez, si te interesa, debieras hacer algunas preguntas pero te aviso de que seran incomodas de contestar y no quiero que mi nombre aparecca como artifice de tu interes.
- Eos no contesta a mis preguntas anteriores, le dije de forma clara sin apartar la mirada de el, intentando entender un poco la situacion y quitarme Abraham de la cabeza....
- No corresponde a mi contestar esas cosas, no quisiera ser el causante de disputas entre tu y el señor de esta ciudad, comprende mi posicion... -Te pide y despues lo piensa un poco.- Se dice que te busco por cielo mar y tierra durante años, cuando se acerco demasiado la policia le incrimino en un asunto muy feo y a estado muchos años en prision siendo inocente. Eso se dice, pero yo no he dicho nada.
- Creoq ue ya he tomado copas suficientes - comente levantandome y mirando al chico con indiferencia - Que tengas buena noche - sin mas sali de alli pero no llame al chofer, si no que pedi un taxi, tras ello entre en el y le di una direccion cerca del hospital, vigilando que ningun coche me siguiera. Tenia que ver y oir que sucedia con mis propios ojos y esas respuestas solo em las podrian dar mi padre y abraham.
El taxista te avisa que esa zona se a convertido en un "vertedero humano" donde los drogadictos campan por un parque cercano y los sin techo pasean en busca de un banco donde dormir. El hospital a sufrido unos recortes presupuestarios bastante notables y los descorchones en la fachada dan cuenta de ello.
En un rincon encuentras a Harry-rata, un vampiro delgado, con aspecto de vagabundo. Sabes que es uno de los oidos de tu padre en los barrios bajos. Tambien ves una chica que te suena de las orgias, casi no la reconoces con ropa puesta, intentando "ligar-comer" con un tipo de aspecto tipico de pandillero.
Que hubiera vampiros por alli me daba la ventaja de la seguridad y la desventaja de que mi padre se enteraria incluso antes de que llegara a casa. Peor de perdidos al rio...
Entre y pregunte en recepcion por el para dirigirme a su habitacion.
La recepcionista te da su numero de habitacion. En gran medida porque te reconoce, es humana pero de las que les gusta ser mordidas secretamente.
Cuando llegas arriba encuentras la habitacion vacia, su ropa esta tirada por toda ella, su olor no a cambiado.
Llebas un rato alli cuando le escuchas llegar. Abre la puerta y se queda mirandote con una ceja arqueada y una mano en el bolsillo, por la forma sabes que lleva una pistola escondida.
Esta mucho mas envejecido, cansado, astiado...
-¿Que se le a perdido aqui, señorita?.- pregunta agrio.
Una sonrisa triste pero feliz se dibujo en mi rostro... Me acerque a el y acaricie su mejilla - ¿Ya no me reconoces Abraham? Has envejecido... pero no has cambiado nada... - Murmure mirandole a los ojos, dejando que viera los mios y los reconociera mientras mis ojos se humedecian.
Abraham dio un paso atras, desconfiado.- Señorita, no me gustan los juegos, menos las adivinanzas y si la envia quien me imagino le aseguro que solo le quedan tres segundos para tener otro agujero en el cuerpo, de modo que le recomiendo que se marche.
Lo mire y no pude evitar reirme y sin ningun miedo me acerque y lo abrace - Ya no recuerdas a Xiana? A esa niña a la que le diste una guarida una mascota y defendiste su segundo dia de colegio - Le dije apartandome un poco y mirandolo con una sonrisa - He crecido mucho pero sigo con la misma cara de pilla - Me rei mirandolo y esperando que no me pegar un tiro.
Abrahan te sujeta la cabeza con las manos mirandote y despues te abraza con fuerza.-Eres tu, por todos los demonios, ¿donde te habias metido? Te he buscado durante todo este tiempo. Estas preciosa pequeña... y viva.- dice como si eso fuera algo que le preocuparar mucho.
- Yo... bueno.. tube que irme con mi madre... por mucho que la odie y odiara no queria que le hicieran daño, y tras lo que paso... - Respire profundamente y lo mire con decision - Yo... ya he podido comprovar lo que sucede en este mundo estos años las criaturas de las que me hablaste, y... todos pareciais quererme para algun fin, asi que... me mantuve apartada de todo, cerca, muy cerca pero sin intervenir - Le explique esperando que me entendiera, ademas viendo mi aspecto y ropa estaba claro que tenia dinero - Me hablaron de mi don... y de porque me querias a tu lado, tranquilo no te culpo, y te agradezco todo lo que hiciste por mi.
¿Por que te queria a mi lado? ¿Tu don? ¡De que estas hablando!.- Exclama mirandote a los ojos, sabes que no miente, no tenia ni idea de lo que eras capaz.- ¿De que estas hablando?
- Puedo notar a las criaturas, buena so malignas, puedo incluso ver sus mentes, mi sangre es como un manjar para ellos, pero por suerte jamas me han probado, me encargue de conseguir una buena seguridad - Sabia que mi padre me habia mentido, hacia años que lo sabia, pero, estaba mas segura alli que con Abraham y el y sus seres queridos tambien asi que no habia escogido mal.
- ¿Y como has podido pensar que yo sabia todo eso?.- te pregunto con interes.- ¿Eso es lo que te han dicho?Xiana, esos seres son demonios, no debes creer una palabra de sus mentiras. Escuchame bien, puede que no te tocaran aun pero llegara un dia en el que te pediran algo a cambio de todo lo que tienes ¿o piensas que te lo dan por cariño? No, Xiana, si ellos conocen tu don querran explotarlo.
- No eres mi padre Abraham, fuiste bueno conmigo, pero se cuidarme sola... hace tiempo que estoy sola, que no tengo familia... - Le dije seria sabiendo que tenia que ser realista - No conocen todo lo que puedo hacer, solo lo que les he dejado ver - Le dije para que se quedara mas tranquilo - Solo he venido a despedirme, despedirme y darte las gracias por conseguir hacerme sonreir cuando era una niñas mas que asustada... - Le mire y sonrei intentando que pudiera pareciar que estaba bien, que ya no era aquella niña muerta de miedo.
- Espero por tu bien que asi sea.- dijo Abrahan. Su mano palpo algo que colgaba de su cuello y lo arranco tendiendotelo. Era una especie de amuleto, una pequeña bolsita negra de terciopelo atada con una cuerda del mismo material.- Quiero que te quedes esto...por si acaso. Te protegera si lo necesitas.
Lo coji y le sonrei recordando algo de golpe - Por cierto... recupere a Blue... Ha tenido dos camadas y ahora es un perro viejo y mimoso - No sabia si se acordaria pero era lo mejor que habia echo por mi.
Me puse el colgante y lo perdi en medio de mi camiseta - Debo irme... Prometo volver a verte - Le dije con una sonrisa en el rostro, poniendome de puntillas y besando su mejilla.