Partida Rol por web

Asiente hacia Kisidan dando gracias por su respuesta. Sigue atenta a la conversación, frunciendo un poco el ceño "Cuanta información y caos en tan poco tiempo... después se me olvidara algo, seguro.Y veo que aquí hay pocos altruista piden una recompensa por "salvar" el mundo...La verdad es que a mi el dinero también me vendría bien, últimamente escasea así que mejor no juzgar". Mira al grupo cuando empiezan a presentarse como líderes de los dos grupos.

- Para ser un líder hay que ser fuerte, decidido y tener nervios de acero, ya que si la misión o el grupo están en peligro, es responsabilidad del líder que todo se salve, incluso a causa de su propia vida... si creéis que podéis con esa carga...adelante confío la misión y mi vida en vosotros. 

Mira la copa de vino y sonríe un poco "maldito viejo..." da un trago largo hasta dejar la copa vacia y vuelve a mirar al resto. -No tengo nada de especial, se usar algunas armas y el némesis.

Ser un noble desde luego eliminaría cualquier necesidad de buscarse la vida. Pero bueno, ya lo habían convencido de todas formas.

-No tengo nada en tu contra- respondió a Huracano -quizas los que más sepan sobre las armas deberían liderar los grupos, suponiendo que ninguno de los presente tienes amplias capacidades de mando y táctica, claro está-

-De cualquier forma ya sabeis que me gustaría ir a Alberia también pero tenemos que discutirlo.
Yo soy duelista, pero digamos que mi voluntad es demasiado poderosa, seguramente de un modo parecido al suyo- volvió a señalar a Huracano -Poseo tanto sutiles capacidades mentales como un buen dominio del entorno y de mi mismo, telenosequé las llaman los más expertos-

-Nada, dice Nemesis como aquel que dice espada en, Narsharz, creo que mejor al grupo uno, valla a ser que cometas algún error y me perjudique a mi-luego sonrio y digo:

-Es broma, vamos te garantizo que mi volutad es inquebrantable amigo.

- Infiltración, espionaje y, si se tercia, asesinato y combate abierto, aunque personalmente no me gusta luchar ni matar si no es estrictamente necesario... Lo cual no quiere decir que se me de mal -comentó Nüll con indiferencia- Por cierto, ¿que es Némesis? -preguntó con curiosidad cuando habló Huracano

Viendo toda la cantidad de información en tan poco tiempo decido aportar mi pequeño granito de arena. Realmente no creo que yo posea un don especial, sólo soy usuario de lo conocido como Ki, aunque también poseo un arma de primer nivel, un arma imposible, Sagittarius. Coloco dos de las bolas de plomo que llevo en el bolsillo en mi mano derecha y otra en la izquierda, uso la energía y las proyecto hacia una pared (procurando que no se rompa ni la pared ni las bola). También cabe destacar que...soy líder de un gremio de mercaderes, conocido como el gremio de los varitas rotas; realmente no es más que una tapadera para ocultar nuestro verdadaero propósito, el exterminio del sol negro. Mientras pronuncia ésas últimas palabras aprieta los puños como si la rabia lo recorriera de arriba a abajo; después de unos segundos se relaja y continúa: está bastante extendida la organización, es una buena fuente de información realmente, por si necesaria fuese. Organizad los grupos como queráis, aunque preferiría no acompañar ni a Tusabi ni a Nüll...no es nada personal.

Nüll resopló ante aquel comentario. Claro que no era nada personal; eran los típicos prejuicios a los que llevaba enfrentándose desde que tenía memoria

- No muerdo, ni contagio la lepra, ni voy así porque me guste, ¿sabes?

-Aramil entonces, ¿vienes a nuestro grupo?-dije a Aramil ya que Nüll al mencionar espionaje, me dio a entender, que iría con el primer grupo.

-Lautrec, si vas al primer grupo, entonces, ni me molesto en discutir lo del lider, contigo, y sera telequinesis a lo que te refieres-dije aclarando el tema,no me sentía ofendido, ni de lejos, sabia que había mas como yo,y siempre me considere mejor.

Kisidan responde mis preguntas, dejando nada a mi imaginación. Como le dije, no tenía problemas en ayudar, aunque ahora estoy un poco más... Tranquilo, respecto a todo esto.

Todos comienzan a hablar sobre sus habilidades personales tan abierta y tranquilamente que comienzo a pensar que soy el único "normal" sentado en esta mesa. Está bien, después de todo, estaba acostumbrado a escuchar sobre "el poder de los dioses recorriendo la sangre de los mortales."

Sophia sugiere que vaya en la misión de Samael, lo cual no me parece mal. Las tácticas nocturnas eran estrategias de ninjas, soldados sin honor que utilizan el subterfugio y las mentiras. Lo mío era más... Abierto.

Cuando Aramil pronuncia mi nombre en ese contexto, inmediatamente lo miro con desprecio. Si pretendía prejuzgarme por las marcas que llevo, entonces definitivamente era alguien en quien no iba a confiar*. Entonces le digo:

Mi nombre es YATUSABI, mocoso, y francamente me importa un bledo si te interesa venir conmigo o no. - entonces dirijo mi mirada a los demás. Ya que había hablado, iba a decir algo más.

No se qué pensarán ustedes de mi, y no me interesa. Lo único que deben saber sobre mis habilidades, es que no saco mi espada a menos que tenga que matar a alguien con ella... Y siempre que la saco, alguien muere por su hoja.

Entonces me relajo sobre la silla, luego de un sorbo de cerveza, y vuelvo a decir:

Personalmente, las tácticas "encubiertas" - y miro a John Arryn, robándole de alguna forma su expresión - No son para nada mi estilo. Lo considero algo sin honor. Además, con una armadura como ésta - mientras señalo el casco que reposa en la mesa - Es algo casi imposible, incluso para mí, que la uso como segunda piel.

Me ofrezco para ir a la misión de Samael, ya que lo "nocturno" no se me da. Así que, chico... - digo mirando a Aramil - Hoy los Kamis no han escuchado tus plegarias.

---!!!Pelota!!!- digo mientras la cojo bastante contento y me pongo a juguetear con ella, esta vez lejos de Kisidan, o como lo llamaba yo, el hombre que se pasó tomando el Sol, los demas hablan aunque yo no lo hago mucho, me dedico a  tararear en voz baja mientras la muevo de un lado para otro

-Por mi sin problemas, Yatasubi-digo mirando a Aramil ya que el pobre tendría que ir con alguno de los que no querría si o si.

Interesante... Esto  parece  una  fiesta  de  pijamas  pero  en  lugar  de almohadas  y  hablar  de  los  chicos  que  nos  gustan, tenemos  espadas  y  hablamos  sobre  nuestras  habilidades.

- Por  mi  parte, mis... Talentos, son  parecidos  a  los  que  tiene  el  caballero  Novodar, aunque  seguramente  nuestro  campos  sean  diferentes. De  manera  que  si  él  va  a  Alberia, supongo  que  yo  debería  ir  con el  grupo  a  hablar  con  Samael. 

Por  un  momento  miro  a  Huracano  directamente.

- Y  si  vamos  a  ir  a  ver  a  Samael, me  niego  a  que  Huracano  sea  el  líder. No  vamos  a  jugar  a  la  comba  con  nuestra  vecina, sino  que  vamos  a  hablar  con  Samael. - Aquí  le  miro  más  fijamente  a  Huracano. - Y  me niego  a  que  nuestro  líder  sea  alguien  que  use  sus  habilidades  sin  que haya  una  buena  razón  para  hacerlo, ya  sea  crear  una  pelota de  la  nada  o  hablar  mentalmente  con  alguien. 

Y... Parece  que  yo soy  la  única  que  se  dio  cuenta.

- A  parte  de  hablar  con  el  señor  de  Alberia, el  grupo  que  se  dirija  hacia  allí  también  podría  ir  al Bosque  de  Glenda. Como  ha dicho  Fénix, él  cree  que  allí  se  puede  encontrar  algo...

Vuelvo  a  tomar  apuntes.

- Según  esto, el  grupo  que  iría  a  Alberia  sería  el  compuesto  por  Null, John, Etien  y  Lautrec  por  el  momento. Mientras  que  el  grupo  que  irá  a hablar  con  Samael  será  el  de  Huracano, Fénix, Yatusabi  y  yo. Nos  quedaría  sueltos  Aramil  y  Nars-harz... Ya  que  Aramil  ha  dicho  que  está  una organización  que  pelea  contra  sol  negro, puede  que, para  un  primer  contacto, se  venga  con  nosotros, puede  que  Samael  conozca  su  organización  y  se  fien  de  nosotros  con  menos  problemas. Y  Nars  que  vaya  a  Alberia...

Echo  un  vistazo  a  la  lista...

- Aunque  creo  que  así  los  grupos  están  un  poco  descompensados... En  nuestro  equipo, el  único  que, creo, que  lucha  en  el  cuerpo a  cuerpo  es  Yatusabi, mientras  que  el resto  nos  mantenemos  en  la  distancia. Sin  embargo  en  el  otro  equipo, menos  Etien, el  resto  sois  de  cuerpo  a  cuerpo. De  manera  que, bajo  mi  punto  de  vista, podríamos  cambiar  a  algunas  personas. Más  que  nada  por  tener  un  grupo  capaz  de  hacer  frente  a  todo  tipo  de  situaciones.

Parece  que  todo  el  mundo  pasó  por  alto  mi  comentario  de  hacer  tres  grupos  en  lugar  de  dos... 

Si, creo que es mejor que equilibremos todo ésto. Giro la cabeza y miro hacia Nüll y YATUSABI realmente no es por vuestra apareiencia, que no me importa, es por...vuestras vestimentas, padezco desde pequeño una alergia grave a ciertos tejidos y vos seguramente los vistais, haciiendo referencia a las vendas. Mirando a Yatusabi y con la cabeza un poco inclinada (reverencia) digo:

Mi intención no era ofenderle, entre tantos nombres en tan poco tiempo y otros asuntos que tengo en mente mi memoria quebró y su nombre olvidé momentáneamente, no volverá a pasar, creáme, Yatusabi-dono.

- Oh... Bueno, si te refieres al lino, entonces si, estos vendajes son de lino. Pero sinceramente, no creo que vayamos a tener que abrazarnos, ¿no? -comentó con cierta sorna, intentando rebajar el tono de su enfado anterior- Por cierto, aquí la gente habla de cosas raras como si fueran de conocimiento general... Némesis, Sol Negro... Si voy a trabajar con vosotros no estaría mal que os explicarais un poco. Aunque podemos dejarlo para más tarde.

-oh, la chica no se fa de mi, vale coge tu el liderazgo, o quien quiera, la verdad así me quito responsabilidad-mi sonrisa no se fue ni mi orgullo se vio afectado.

-y a recalcar diré, que aquí llegue, con la idea de confiar en vosotros, en cada uno que viene y por ello no me importa ser yo mismo, y usar mis habilidades libremente, en la calle no suelo usarlas, pero te entiendo, para alguien como vosotros puede ser raro que alguien confié en vosotros por que sí, y como así soy yo, confiare en todos y cada uno de los aquí presentes-sin mas me senté en una silla 

Lo normal sería que no os contara nada sobre mí, pero teniendo en cuenta que tenemos un encargo tan importante, creo que cuanto antes confiermos entre nosotros y nos conozcamos mejor para el grupo; al fin y al cabo, estamos hablando de salvar e mundo, señoras y señores; un león no caza conejos, sino presas más grandes. Por éso os he dicho todo lo que tengo, pero si insistís en saber mi historia sólo diré unas pocas cosas que os pueden ser útiles, realmente recordar esto me hace entristecer y enfurecer por igual. Calla durante un momento y prosigue: Hijo de un cargo militar en aquella época y criado en una familia numerosa, mi padre tuvo problemas con el juego hasta tal punto que jugó con nuestras vidas, como venganza por éso y de que mis hermanas y hermano menor fueran raptados, hice que resbalara por el bosque y terminó muriendo. Ahora sólo con mi madre tuve que ayudarla y, simultáneamente, buscar a mis hermanas. Unos años más tarde la raptaron a ella y me vi obligado a infiltrarme en el sol negro; un tiempo después, obtuve un grado importante en su gerarquía. Usé su poder contra ellos y destruí aquel campamento. En aquel sitio se practicaba la fusión entre la magia y el hombre, cosas demasiado atroces ví y cometí en aquel lugar. Depués de su destrucción me dediqué a hacer fortuna y fundar el gremio de los varitas rotas. Ahora ya sabéis todo sobre mí, espero que éso haya bastado como explicación de los problemas con el sol negro. Ahora, callado, se centra en su copa, mirándola fijamente y pensando sobre todo aquello sucedido.

- Bueno... No estaba preguntando por tus razones para enfrentarte a ese "Sol Negro". Es que no se que es el Sol Negro y seguramente no sea el único -aclaró Nüll

- Sol  Negro  es  una  organización  que, de  primeras, se  encarga  de  comprar  y  vender  todo  tipo  de  artefactos  y  objetos  sobrenaturales.

Digo  mirando  a  Null.

- Sin embargo, la  otra  cara  de  la  moneda, es  que  se  trata  de  una  organización  que  usan  métodos  nigromanticos  para  crear  no muertos  de  diferentes  características. 

Nüll miró a Sophia durante unos largos segundos, y luego hizo lo mismo con Aramil. Parecía que de repente se había puesto bastante tenso.

- Ajá... Interesante... Aramil, creo que tendríamos que hablar tu y yo, más tarde.

--- ¡¡¡Pues yo quiero que sea Huracano!!! me gusta su color- digo con una sonrisa mirandole de arriba a abajo-Bueno, ¿nos vamos ya? Quiero conocer a ese tal Samael

Realmente a Lautrec le apatecía viajar al norte, pero si tenía uqe hacer otra cosa por el bien común no podría oponerse. Por el momento cayó, y espero a ver como reaccionaban el resto ante estos grupos, que ya empezaban a chirriar un poco, decían que la composición no era equilibrada.