Partida Rol por web

Los pozos de Bendal-Dolum

Episodio 1 - Expedición a la jungla

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13/06/2008, 09:28
Gordon Lockley

-Todo claro, entonces. Ya que no desean nada en particular, iré a cerrar los últimos tratos con las peticiones del señor Patterson, y a cerciorarme de que el barco está en su sitio esperandonos para la partida.

Patterson. Espero que su salvaje haya comido una buena cantidad de tortas de maíz, porque va a tener mucho que cargar.

Dice el caballero con una risa grosera, acompañada de una sonrisa cómplice de Morgan y Franklin.

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13/06/2008, 10:13
Harald Parker

Aunque no comparto totalmente ese desprecio por los indios que usan como porteadores, trato de no exhibir demasiado disgusto. No creo que sea el más indicado para hacer apuntes, y menos viendo las claras preferencias que tienen algunos de mis anfitriones y algunos de mis compañeros de viaje. Entre licenciados y hombres de Dios, yo, un bibliotecario más bien mediocre, prefiero pasar desapercibido por el momento en lo que a opiniones se refiere. Lo que sí me arranca una sonrisa y un comentario es saber que tendremos un lugar donde reposar y organizarnos un poco.

Bien, me alegra saber que tendré dónde dejar toda esta ropa que he traído en mi ignorancia —dijo, medio riendo—. Además, como ha dicho el señor Grey, más de uno necesitaremos reponernos de la falta de costumbre en el navegar.

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13/06/2008, 10:56
Mortimer Sterndale

Desde luego Mortimer no parece el tipo de hombre que necesita ayuda con su equipaje.

-La misión está en un pueblo, rio arriba. Mientras halla espacio en el barco para un baúl más, del resto me puedo encargar yo. Sólo tendremos que detenernos unos minutos, no les haré perder mucho tiempo -asegura dirigiéndose a sus compañeros de viaje.

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13/06/2008, 12:41
Emma Dresden

-Es un placer- contrariaente a mi personalidad, contesto de forma escueta a la bienvenida. De alguna forma pudiera paracer que el viaje me ha afectado, aunque no haya motivos para ello. ME mantengo junto a Vincent y lo más alejada de Gray que me es posible con una visible incomididad ante la presencia de sel perro.

Notas de juego

Lo del trauma no es broma. Algún día lo entendereis.

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14/06/2008, 22:31
Leonard Lake

Yo también hago como que no he escuchado los comentarios un tanto racistas del Sr. Lockley, sobre todo teniendo en cuenta que es más que probable que tengamos múltiples encuentros con los nativos del lugar. Por la cuenta que nos trae, más valdrá llevarse bien con todo el mundo.

Un vez que consigo colocar mi mejor cara de intrépido aventurero me dirigo a nuestros espero que experimentados anfitriones:

-Dr. Franklin, Sr. Lockley, Sr. Patterson: es un placer para mí el poder conocerles al fin en persona. Confío en su experiencia y buen hacer para que esta expedición sea un éxito rotundo.- Después, ya con una cara menos intrépida, me dirijo al profesor profesor Morgan, con el que había coincidido en la Universidad de Arkham, mientras él estaba finalizando su tesis en arqueología y yo seguía con la mía en geología.-Me alegra volver a encontrarme con usted después de tanto tiempo. Es para mí un privilegio poder formar parte en la expedición de un profesor tan respetado como usted.

Volviendo a referirme a mis compañeros, añado-A pesar de lo que puedan estar pensando, estoy convencido de que tanto mis compañeros como yo cumpliremos por completo todas sus expectativas y les seremos de gran utilidad en este proyecto.-Cuidadosamente estudiando sus caras, prosigo-Por mi parte, les informo que espero poder cumplir mis objetivos ciéntificos sin que se aperciban siquiera de ello. He traído conmigo todo lo que necesito para ello (salvo quizá un machete o similar que sin duda podría serme de utilidad)
Para finalizar, interpelo al señor Lockley-Asumo que el señor Lockley ya habrá hecho su previsiones, y nos proveerá de víveres y material para acampar donde sea preciso, por lo que no debemos preocuparnos de ello, ¿me equivoco?

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16/06/2008, 17:38
Gordon Lockley

-En absoluto. Todo está previsto, menos... eso -dice el hombre señalando al perro que os ha acompañado durante el viaje, un bonito ejemplar de sabueso checo de pelo áspero que permanece parado, junto a su dueño, en una posición de firmes que deja evidencias de su buena cuna-. Tendré que comprar también comida para el chucho, no quiero que acabe comiendose la nuestra. Por cierto, no lo quiero rondando cerca mía. Espero no tener que decir esto más veces

Dice mirando a James Sullivan con cara de muy pocos amigos.

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16/06/2008, 17:45
Howard

El perro en cuestión no parece echar mucha cuenta de las palabras del tratante, y permanece en su posición con un aspecto realmente tranquilo y sosegado.

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16/06/2008, 17:46
Jeremy Morgan

-Bien, creo que ya está bien como sesión de bienvenida. He hecho este trayecto y sé que lo que más desean ahora es un buen aseo, algo de comer, y un mejor descanso. Síganme.

Las palabras del director de la expedición os parecen las más acertadas del día, y le seguís por la pasarela de embarque hasta el distrito del puerto. Hay mucha gente en la calle, casi todos de raza negra, o mulatos, con algunos indígenas de la zona, pocos hispanos y, menos aún, europeos o norteaméricanos.

Durante el paseo os tratan de vender hasta la barca de donde habéis llegado, pero entre Patterson y Lockley se encargan de que los locales os dejen en paz. Pronto abandonáis el distrito del puerto, que es, a simple vista el más atestado de gente, y a la vez el de peor aspecto de toda la pequeña ciudad. Os dirigís al centro, caminando, pero es un muy breve paseo y pronto veis el edificio en el que habéis de hospedaros. Es un edificio de dos plantas, no excesivamente grande, y que tiene un cartel que parece decir posada, o algo así. Dentro os recibe un mulato, que habla un más que correcto inglés y que os invita a acomodaros en vuestras habitaciones, una para cada dos personas, y una simple para la señorita Dresden. Os dais cuenta en seguida de que estáis solos en el hotel, o hostal o lo que sea ese antro, ya que ocupáis las cinco habitaciones que quedan libres, unidas a tres habitaciones simples que ocupan Lockley, Franklin y Morgan.

Me he tomado la libertad de organizar las habitaciones, para que no perdieran tiempo:

Enmma Dresden - H4
Allan Grey y James Sullivan - H5
Harald Parker y Vincent Strange -H6
Henry Smith y Leonard Lake - H7
Padre Robert Sunhold y Mortimer Sterndale - H8
Thomas Patterson y Walter Sickert - H9

Nosotros llevamos aquí unos días, y nuestras habitaciones son:

Jeremy Morgan -H1
Dr Dennis Franklin -H2
Gordon Lockley - H3

El edificio por dentro es aún más feo que por fuera. No tiene ni un sólo adorno, y sólo un pequeño crufifijo adorna la pared cercana al mostrador. Tras éste hay unas estanterías, un colgandero de llaves y poco más. Hay dos sillas en el pequeño recibidor de 10 metros cuadrados, y unas escaleras que suben hacia la planta de arriba, donde están las cinco habitaciones dobles, de la H5 a la H9. Las habitaciones simples están en la planta baja, y se accede a ellas a través de un pasillo al que se entra por una puerta situada al lado derecho de las escaleras.

Alegres por poder descansar, aunque sea en un sitio así, vais entrando en vuestras habitaciones y dejando vuestras pertenencias.

Esto no es el lujo al que Allan y Vincent estaban acostumbrados ultimamente.

Notas de juego

Os dejo entre hoy y mañana por si alguien quiere hacer algo. Si no veo acciones actualizo mañana para darle otro tirón. Recordad que ya está cada uno en su habitación, así que marcad sólo de destinatario a vuestro compañero, si queréis dialogar, y mensaje privado si queréis hacer algo, lo que sea.

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16/06/2008, 18:12
Harald Parker

Una vez tenemos nuestras habitaciones asignadas y estamos dentro, deshago el equipaje que tengo y me libero del abrigo, así como del bombín que he tenido que llevar en la mano. Mirando la ropa que tengo, decido que tengo aún que ponerme a buscar cuál será la más adecuada visto el tiempo que hace. Con un suspiro resignado, me doy la vuelta para al menos conocer un poco más a mi compañero. Le tiendo la mano, con una sonrisa amable en la cara.

El señor Strange, ¿verdad? Harald Parker, un placer.

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16/06/2008, 18:21
Allan Grey
Sólo para el director

Notas de juego

En cualquier momento que Allan tenga para hablarle con discrección a Vincent, a la oreja y en voz baja, le suelta.

-Señor Strange ¿Cree que podría acompañar al señor Gordon Lockley en busca de las provisiones, y asegurarse de que nadie... seamos francos: las envenena? Se que debe de estar agotado después del viaje, pero temo porque alguien aproveche la ocasión. Aunque solo sea para librarse del perro.

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16/06/2008, 18:31
Allan Grey

-Señor Strange ¿Cree que podría acompañar al señor Gordon Lockley en busca de las provisiones, y asegurarse de que nadie... seamos francos: las envenena? Se que debe de estar agotado después del viaje, pero temo porque alguien aproveche la ocasión. Aunque solo sea para librarse del perro.

Te dice Allan al oído en un momento dado del trayecto al hotel.

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16/06/2008, 18:32
Director

Notas de juego

Mensaje llegado a su destino.

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17/06/2008, 15:00
Director

Vincent acepta tu sugerencia y se va con Gordon.

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17/06/2008, 15:01
Director

Aceptas la sugerencia de Allan y vas con Gordon, quien no pone demasiados problemas a este hecho. Lockley te lleva por el distrito del puerto, de nuevo, donde compra algunas chucherías brillantes, que te dice que son peticiones de Patterson, para tener cosas extrañas para los nativos, que les llamen la atención, para poder comerciar con ellos en caso de encontrarlos.

Luego compra comida en conservas para el perro, lo cual cuesta mucho trabajo de encontrar, y al final os vais a una orilla del río, donde hay un pequeño embarcadero y donde descansa el más pequeño aún navío que ha de llevaros corriente arriba. Allí sube las nuevas provisiones, uniendolo a lo que ya hay. Tiendas de campaña, mantas, comida en abundancia, agua, algunas armas y un poco de todo.

A la vuelta te comenta que está harto de ese lugar, que el calor es insoportable y más aún los negros y los indios.

No te cae muy bien el tipo, no. Unas horas después llegas a tu habitación y caes rendido.

Notas de juego

Penejotizado para no parar la partida.

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17/06/2008, 15:04
Director

Todos caéis dormidos como si fuera la primera vez que lo hacéis. El calor hace que las sábanas se os peguen, y el zumbido de los mosquitos es muy molesto, pero de eso os dais cuenta por la mañana, ya que la noche pasa como en un suspiro.

Una vez todos despiertos, os reunís en el "recibidor" del "hotel" y os ponéis en camino, con idea de tomar algo antes de partir, en alguna taberna del distrito portuario.

Todos vais ya vestidos de faena, con vuestro equipaje, el que vais a tener que cargar durante toda la expedición, a cuestas. La caravana es bastante impactante, y muchos de los lugareños os miran con curiosidad, otros con miedo y algunos con risas, mientras pasáis.

Pronto llegáis al distrito del puerto, el cual bordeáis hasta llegar a la zona de éste donde se encuentra la desembocadura del río Belize. Allí entráis en una taberna en donde desayunáis copiosamente. También allí es donde Morgan saca un fajo de billetes que haría enloquecer a los locales si lo vieran, y reparte 750$ para cada integrante del equipo, excepto para Miguel, el indígena que se os ha unido y que permanece siempre pegado a Patterson.

Los nervios de la partida se mezclan con el sofoco del calor y eso hace que todos estéis empapados en sudor. El desayuno se desarrolla en un ambiente distendido con un doctor Franklin pletórico, que no deja de hablar sobre las maravillas que encontraremos, acompañado siempre por la sonrisa y el asentimiento del director de la expedición.

Una vez saciado el apetito, Lockley os lleva a un pequeño embarcadero donde se encuentra un más pequeño aún bote motorizado donde se encuentran vuestras pertenencias. El "navío" se llama Sweet river.

Morgan saca un mapa, en el que aparece la ruta seguida por el anterior grupo, y su última posición conocida.

Imagen hospedada en la web

El ascenso del río resulta bastante penoso, y hacéis multitud de paradas, con objeto de rastrear las orillas en busca de indicios de la expedición anterior. La jungla se muestra en toda su extensión, y los manglares se os antojan casi como un infierno en vida. El calor, los insectos y las penalidades del viaje os están pasando factura. Son siete días, con sus siete noches, los que empleáis en remontar el río. Alguno está ya desfallecido.

Notas de juego

Hago una pausa por si alguien quiere hacer algo durante este trayecto.

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17/06/2008, 15:27
Emma Dresden

-Este calor es sofocante... No sé como el profesor pudo realizar semejante viaje- hablo mientras me abanico con el salacot -¿Nos queda todavía mucho para llegar?- aunque en alguna ocasión pudiera haber desfallecido, mantengo el paso de Vincent lo más alejada del perro que llevamos

Notas de juego

Posteo sencillito para que el master ni piense que está solo ;P

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17/06/2008, 16:23
Walter Sickert

Walter mira un poco por encima el equipaje para enterarse si al fin han agregado los machetes o no.

Notas de juego

Si los machetes están se calza uno en la cintura.

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17/06/2008, 16:25
Director

Notas de juego

Apúntate un machete en tu equipo.

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17/06/2008, 17:02
Thomas Patterson

El día de la partida Thomas se reune con sus compañeros , pero al llegar va acompañado de un extraño personaje , es Miguel el guia nativo , como a Thomas le gusta llamarlo .

Señores y señorita , este es Miguel , no se esfuercen en hablar con él , no habla ingles , solo algo de español y su propio idioma .

Durante el viaje al escuchar a la señorita protestar por el calor , no puede evitar hacerse el gracioso con ella .

Lo peor no es calor señorita , dice Thomas , son peor los mosquitos , algunos alcanzan el tamaño de colibrís , casi se les puede disparar asegura sonriendo .

Luego le cuanta la queja de la señorita a Miguel , y este no puede evitar contestar .

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17/06/2008, 17:17
Miguel

Miguel es un indio maya, no es de Belize, sino de la jungla guatemalteca, donde coincidió con Patterson. Es un muchacho solícito que hace lo que le dicen sin rechistar, siempre que sean cosas básicas. Cualquier cosa que no entiende se gira hacia el explorador y le pregunta en una mezcla entre idioma indígena y español.