Partida Rol por web

Henry escuchó, con mucha atención, asintiendo alguna vez con la cabeza. Básicamente, memorizaba los datos más relevantes e importantes. Aunque aquello fue más un parte de guerra que un informe propiamente dicho. Su próxima misión iba a ser en la Antártida, en una base que le resultaba completamente desconocida. Una situación demasiado similar a la anterior como para no plantear una seria duda. 

-¿A que se dedicaba esa base?- Pregunta Henry, sin variar demasiado su expresión. 

hijos de puta susurro volviendo a mi castellano natal al ver la situacion en España, ver como han caido sitios de donde son amigos, no puedo evitar imaginarme alli, con una de estas preciosidades bien armada con un par de ametralladoras pesadas

Meneno la cabeza, centrandome en la mision actual, me gustaria pero somos un grupo especializado, y hay que ver esto en su conjunto, y confiar en los compañeros que van para alla

¿actividad enemiga en la zona, señor?

Eso es alto secreto Morrison - le contestó veloz - su misión es asegurar la base, no recabar información ni investigar en la misma - luego dirigió su mirada al Español - Nuestros satélites no detectan nada en las inmediaciones, pero tampoco podemos observar en el interior de la base, fue preparada expresamente para evitar el espionaje enemigo. Así que estamos ciegos y sordos.

-Con todos mis respetos, el último "alto secreto" ha costado dos hombres.- Contesta, sin variar su expresión. Antes, quizás se hubiera callado, pero ahora no. No podía partir con un cuarto de la información. No otra vez. -Necesito saber, al menos, contra que nos enfrentamos, o que podemos encontrarnos. No puedo preparar una misión a ciegas.-  

Dejo caer el dossier que llevaba entre las manos provocando que la carpeta provocara un sonoro golpe - Lo entiendo Morrison, y me jode más a mi, que a usted. Pero hay cadenas de mando inflexibles, hay secretos irrevelables y que no solo dependen de mi que sean contados ¿Entiende? - se le notaba algo cabreado por el asunto, no solo por la pregunta de Morrison, sino por lo que conllevaba no poder revelar información al respecto - En esa base no hay nada peligroso... solo un secreto que es de vital importancia que siga siéndolo... Ya saben sus ordenes, asegurar y limpiar. Nada más.

- Señor, con todos mis respetos, debo hacerme eco de la pregunta del teniente Morrison. - Riley había permanecido en silencio hasta ese momento, sopesando la información y dejando que sus compañeros hicieran las mismas preguntas que él tenía en mente. Pero llegados a ese punto, necesitaba acotar un detalle. - Y me veo en la obligación de decir que esta no va a ser una misión de limpiar y asegurar. Solo puedo conjeturar, claro está, pero he pasado suficientes años en una compañía de reconocimiento como para saber que las misiones en las que se trabaja a ciegas nunca son lo que parecen. - Su expresión era de gravedad. Como todos sabían, Riley había perdido a todo su pelotón en un accidente en Líbano. Y por si fuera poco, a dos de sus compañeros de su nuevo equipo de operaciones. - Me gustaría poder contar con un modelo de infiltración para esta misión, señor, una armadura Stealth. Los modelos Marine son perfectos para funcionar en terreno abierto y muy versátiles gracias a su configuración, pero si tenemos que asegurar una base, preferiría poder contar con un modelo que nos permitiera un avance rápido a la hora de verificar el interior.

Tendrá esa armadura Blaze - dijo visiblemente cabreado, aunque no sabríais decir ninguno por que esta así, si por vosotros u otro motivo - ahora retírense, Loken, conmigo - y sin dar lugar a replica saludo militarmente y se marchó por otra puerta seguido de Loken el cual os dedico una sonrisa de animo y se marchó...

Vosotros no tardáis en salir de allí y en cuanto lo hacéis alguien os chista... aunque no muy disimuladamente... no es muy difícil saber de donde viene el sonido; es un habitación al final del pasillo que esta entre abierta y que de dentro no sale nada de luz.

- ¡¡chhhhhhhhhhhhhhst!! ¡¡CHHHHHHHHHHHHHHHHHSSSSSSSSSSST!

Saliendo de la reunión con un mal sabor de boca, Henry se dirige hacia donde está el equipo, para ir preparándolo todo, cuando oye algo, o mejor dicho, alguien, que reclama su atención. Extrañado, va para allá, con decisión y sin pensarlo dos veces. 

Riley también se levanta, decidido a seguir a Morrison hacia los hangares de las armaduras. Iba en silencio, caminando un paso por detrás de su viejo compañero de academia y con el ceño fruncido.

Iba a asaltarlo con un par de dudas que le rondaban la cabeza cuando alguien, en el otro extremo del pasillo, les chista para llamar su atención. Si tener muy claro si acercarse o no, al final el joven oficial toma la decisión de seguir a su superior. La curiosidad también le llamaba a él... Y estaba casi seguro de que el misterioso personaje sería su viejo y extraño amigo... Loco...

Saliendo de la reunion con la cabeza no solo en la mision, sino en los avances que nos han contado sobre la situacion en españa, y por ellos precisamente con unas ganas de pegarle a algo bastante importantes

Nos chistan y directamente voy para alla, en parte con ganas de que sea alguien con alguna gilipollez o con ganas de tocar los huevos

En cuanto entráis al cuarto alguien cierra la puerta tras vosotros; os giráis y veís a un tipo extraño que siempre deambula por la base farfullando sin sentidos... ese tipo, Blaze lo conoce a la perfección, de hecho fue el único superviviente.

- ¡Tsssseeeeejajajajajajajajajjajaj! - empezó a reír con fuerza enseñando hasta la campanilla y las muelas del juicio - ¡Vaya caras habéis puestos! ¡Panolis! ¡Tsseeejajajajajajjajaa! - y volvió a reír mirando al techo poniendo los ojos en blanco, y fue tal la intensidad de su carcajada que se mareo un poco dejándose caer en el suelo sin parar de reír hasta que empezó a llorar - mierda, ya estamos, esto es de nenas - se secó las lagrimas y las miró con furia... de hecho, hizo un gesto brusco para que cayeran al suelo y las piso - ¡Cerdas! - os miró y se quedó algo "pillado" - ¿Que hacéis aquí? - preguntó confuso, pero no os miraba a vosotros sino a punto distante en el infinito...

Henry arquea una ceja, viendo las reacciones, que denotan un comportamiento ligeramente delirante. Luego mira a sus compañeros, esperando que sean estos quienes inicien una conversación. En cierto modo, prefiere no decir nada, ya que, de lo contrario, podía lanzarse a su yugular, o reír de forma histérica de nuevo. En cualquier caso, era mejor no comprobarlo. Así que únicamente mantuvo su postura, moviendo únicamente los brazos para cruzarlos tras la espalda, y carraspeo, fijando su vista en el extraño individuo.

Blaze sonríe y niega con la cabeza. Aquel tipo estaba loco. Rematadamente loco. No como una regadera, sino como la sección completa de jardinería de Harrods. Sin embargo, también era un genio en su trabajo. Poseía una especie de sexto sentido o algo similar que lo hacía idóneo para misiones de reconocimiento y era el mejor piloto de motocicletas que había conocido nunca. Era tan bueno que hasta los altos mandos mandos le perdonaban ciertas cosas. Habían estado algún tiempo sirviendo en la misma unidad y habían trabado algo parecido a una amistad. Y había sido el único, junto a Mórrison y él mismo, el volver entero de Beirut.

- ¿Qué hay, Loco? - Pregunta en tono amistoso, adelantando un puño a modo de saludo - Tu nos has llamado, nos has chistado cuando pasábamos por el pasillo...

¿Que yo qué? - preguntó a priori llevándose la mano a la cabeza pensativo, parecía confuso, que no sabía ni donde estaba ni quien era... pasaron unos segundos bastantes angustiosos para que el sub oficial, pero de repente se le iluminó la cara y sonrió ampliamente... - TSSSSSSSSEEJAJJAJAJAJAJ - se rió como al principio y se giró cogiendo una carpeta que tenía detrás de el entre unas cajas del aquel almacén.

Se acercó a Blaze y se la tendió - el viejo esta preocupado, y como sabe que me salto las normas... y a el se le cayó esa carpeta... - y silbo graciosamente con las manos a la espalda moviéndose de un lado a otro como un niño pequeño.

La carpeta tenia, con letras rojas y sellado doblemente un cartel que rezaba... - "ULTRASECRET"

- ¡Ja! ¡Muy buena, amigo! Muy buena...- Blaze toma la carpeta con una amplia sonrisa. Ese era Loco y así es cómo funcionaban las cosas con él. Nunca sabías por dónde podía salir. Aunque jamás se hubiera imaginado que Silvayn fuera de los que se saltaban las normas para crear casualidades como aquella.

- Muchas gracias, colega, esto nos va a venir muy bien.

Mi parte ya esta hecha - dijo con un tono muy diferente, por un segundo pareció no estar nada loco sino más bien daba la impresión de ser un militar hecho y derecho... Se volvió a girar, saco un book electrónico y se lo tendió a blaze - lo necesitareis - y sin más, con el rostro preocupado y la mirada fija en el horizonte se cuadró y se marcho dejándoos ahí a los tres

Henry devolvió el saludo, aún algo asombrado por lo ocurrido. Observó al "Loco" marcharse, y luego se volvió hacia Blaze.

-Bien, ábrela, a ver que nos dice.-   

Riley devuelve el saludo con marcialidad, pero no puede evitar volver a sonreír al viejo sargento de su perdida unidad. Pocas veces lo veía cómo realmente era, pero merecía la pena cuando lo hacía.

- Veamos qué contiene la carpeta que nos ha hecho llegar el viejo... - Murmura mientras abre y muestra el contenido para que los tres presentes le puedan echar un ojo.

Era una carpeta con un pequeño disco que parecía contener un video.

El contenido de la carpeta eran datos sobre un juicio, un caso ocurrido hace unos veinticinco años y algo, por el final, una pequeña reseña de la condena del mismo.

Al parecer los cargos fueron diversos crímenes lesa humanidad, saltarse la ética, la moralidad, experimentar con seres humanos, extinguir varias especies de lagartos, robar material nuclear y almacenar uranio enriquecido… la lista era bastante larga y todos los crímenes tenían que ver con ese tipo de asuntos.

El juzgado se trataba de, al parecer (ya que en vuestra vida lo habíais oído) del eminente doctor alemán Viktor Körbl. El juicio no fue público, fue totalmente en secreto llevado a cabo por tres jueces, uno militar, el presidente del tribunal de la Haya y un juez elegido en representación del mundo científico.

Había varias instantáneas de aquel sujeto, y no guardaba ninguna correlación con lo que es un ser humano… era grotesco…

En lo relativo a la sentencia se dictamino encerrarlo de por vida, dada la incapacidad total para ejecutarlo, en una prisión de máxima seguridad implantada en el sótano de una base militar de la UE en la Antártida, “IJ – 00” a lo que las siglas responden a “Ice Jail”.

Al no haber más información sobre el papel decidís introducir el disco en el aparato que os dejo loco…

Impactante, chocante, vomitivo, repulsivo… grotesco… nada más ponerlo se auto reprodujo el video y se trataban de retazos de algunas investigaciones… y lo que visteis en la base Árabe no tiene nada que ver, ni punto de comparación… No quedaba claro que era cada cosa, solamente eran seres humanos completamente cambiados, destrozados, sin brazos o piernas, algunos sin torsos y se les iban implantando partes metálicas que estaban impregnadas de lo que parecía ser sangre coagulada… los gritos de dolor, la angustia de aquellas personas…

El video dio un salto y mostraba al doctor antes de su juicio, mucho antes… era joven, atractivo y en la entrevista no paraba de hablar de ciborgs, de la vida eterna, de un nuevo campo que se debía investigar a toda costa por mucho que los grupos ético morales lo prohibieran… después salió una noticia en la que se informaba que se abolía esa rama de investigación, pero eso no fue un impedimento para Viktor.

Luego mostró diferentes partes del juicio… Viktor, o lo que quedara de él, ya que aplico su propia investigación a sí mismo (después de perfeccionar la técnica y acabar con la vida de unas setenta personas) estaba en un cajón herméticamente cerrado y congelado de cuello para abajo, justo después de esa reseña apareció el video de la operación que se hizo para lograr contenerlo… esa tarea fue realmente compleja, dado que parecía tener una fuerza, agilidad y resistencias muy superiores… tanto o más que a los recién apodados “K “ que os enfrentasteis.

Ya no había más contenido, esa era toda la información que había… pero sin duda fue algo muy revelador y preocupante; porque si realmente se le consideraba “inmortal” al no poder ejecutarle, estaba, la humanidad al completo, en peligro.