Partida Rol por web

-Es lo mejor. Somos muchos, y así todos podremos descansar más tranquilos-y continué-. Lo que yo no entiendo por qué una cueva no es un buen escondite. Sólo habría un lugar hacia el que mirar y defendernos si lo necesitábamos. Estando al aire libre, estaremos más desprotegidos, de todos modos, aunque estemos escondidos.

Los miré, y continué.

-En caso de que alguien nos ataque, lo que no deberíamos hacer es separarnos, ni echar a correr solos por el bosque. Éso sería aún peor. ¿Qué os parece trazar un plan? Podríamos buscar palos, piedras.. Todo lo que se nos ocurra para defendernos.

Me quede pensando las palabras de Jessica.

No es mal escondite Jess, pero tendriamos que encontrar una, y por aquí no parece haber paredes donde pueda haberlas... Además habria que ver lo profunda que es y ...si está vacia

De pronto me imagine una cueva en el suelo de la salía un horrible sonido, una mezcla entre un gañido de coyote y un rebuznar de un asno y empece a notar ese frío en la espalda...

No creo que encontremos ninguna cueva

Me encojo de hombros, en el fondo de los fondos me da igual si nos metemos en una cueva o nos tiramos en medio del campo, igualmente vamos a acabar muertos, y eso no me gusta nada.

El grupo comienzo a andar, yo trago saliva y los sigo, no comprendo como todos pueden estar tan "contentos"... si no fuese porque se que solo me pondría en un apuro, rompería a llorar ahí mismo.

-Pues yo sí que lo veo como mal escondite. ¿Qué pasa si el espectro ese o alguna otra cosa aparece y se da cuenta que estamos en la cueva? Se va a poner en la entrada y no nos va a dejar salir. ¡Nos va a atrapar y zas! -soltó aire dejando caer sus hombros al hacerlo-... Me gustaría convertirme en un conejo para así esconderme en una madriguera, con todas las entradas y salidas que tienen nadie me podría dejar encerrada -susurró y siguió caminando.

Mire a Zaina cuando nos intentaba llevar al norte y le dije:

Creo que sería más acertado ir hacia el este... el sol salé por allí... veremos antes la luz del día... y podremos movernos antes por la mañana...

Mientras espero su respuesta le digo: La idea de dormir en los árboles no es para nada mala... no necesitamos uno que nos cobije a todos... sino un grupo de ellos donde podamos subirnos todos

De acuerdo, vayamos al este-digo nerviosa. Era una buena idea, ademas lo que yo pretendía era avanzar siempre en la misma dirección. Estaba completamente agotada y la idea de dormir en el árbol se me hacía muy tentadora, pero no estaba segura de que todos pudiesemos subir a los árboles y no quería que si alguno no podía subir se sintiese mal.

Los árboles siempre estan ahi-digo sencillamente- busquemos un rato más, sin no encontramos nada, nos subimos ya

No hacía más que escuchar a unos y a otros decir hacia donde debíamos ir o donde debíamos pasar la noche y lo cierto era que empezaba a cansarme de tanta historia y, girándome, empecé a andar hacia donde apuntó Zai que se suponía que era el este:

Dormir en los árboles.....bah, con lo que me muevo por las noches acabaría en el suelo hecho papilla...ni que fuéramos monos.

Sin decir palabra empecé a caminar con las manos en los bolsillos mientras miraba a un lado y a otro viendo a aquellas luces que no dejaban de perseguirnos y observarnos.

Los chicos se dirigieron al este con resolución. Mantener la cabeza fría y elegir una dirección concreta había sido un gran acierto. Caminar sin rumbo de noche en un bosque, es una manera segura de perderse sin remisión... aunque bastante perdidos estaban ya. No obstante, si continuaban andando en dirección este, acabarían saliendo forzosamente del bosque antes o después.

Sin embargo, poco a poco, se dieron cuenta de que empezaban a tiritar. Siobhan, que era la más pequeña y llevaba un vestidito de verano sin mangas, incluso empezó a castañetear los dientes. De sus bocas comenzó a salir vaho. Se dieron cuenta, con un escalofrío de terror, de que aquél frío no podía ser normal. No en una noche de verano.

De fondo, la luz de los cientos de hadas se hacía azulada, como si ellas también quisieran transmitirles esa sensación de frío intenso. Sus voces seguían resonando en la distancia, entonando su inquietante canción.

Una vocecilla aguda les hizo mirar hacia arriba. Las dos hadas de antes les seguían y les señalaban.

- ¡Míralos, pobrecitos! -canturreó una-. ¿Tenéis frío, quizá...? ¡Jijijijiji!

Mientras caminaba con los chicos, no podía dejar de observar como las hadas nos seguían de cerca. Además, poco a poco, noté como la noche comenzó a tornarse fría y aun más oscura cuando ya podía ver mi propio aliento saliendo por mi boca en forma de vaho. Los brazos se me erizaron un poco y de vez en cuando sacaba una mano del bolsillo para frotármelos y conseguir algo de calor. Las pequeñas hadas se habían vuelto de un color azul eléctrico lo que me daba aun más sensación de frío e incluso escuché el castañeteo de dientes de una de las chicas.

Bufando un poco, como si quisiera quitarme el frío por la boca, me giré y les dije:

-Soy el único....¿o esto tampoco os parece muy normal?-

Al decir esto escuché de nuevo aquella vocecilla nerviosa de una de las hadas burlándose de nosotros y, sin miramientos le grité:

-¡ Cállate anda !- ,luego me dirigí a los chicos y dije susurrando, -Tenemos que seguir moviéndonos chicos, a ver si entramos en calor, como nos paremos nos vamos a quedar aquí como pajaritos.....tsk, lo que daría por una buena manta.-

No puedo dejar de temblar de frío. Por un momento pienso en encensder otra hoguera, pero el tiempo que nos llevaría buscar ramas y encenderla...Además tengo un hambre que me comería un jabalí entero.

Sin parar de temblar y castañear los dientes digo lo obvio:

-No podemos parar a dormir o descansar...Hay que salir de aquí. Cory tiene razón

Mientras caminaba, comprobando cada poco tiempo la dirección no paraba de frotarme los brazos y las piernas. Cada vez estaba más cansada, más hambrienta y tenía más frío.

-Nos siguen ¿Porque no deja de seguirnos?-susurré

Nadie contradijo a Cory y Zaina, así que simplemente siguieron caminando, cada vez más deprisa, mientras las hadas les seguían de cerca. Tiritaban cada vez más, y pronto empezaron a dolerles los dedos del frío. Luego dejaron de sentirlos, y se asustaron de verdad. No se podía ver muy bien alrededor, pero en los matorrales y los arbustos comenzaron a ver algo que parecía... ¿escarcha?

Se miraron unos a otros. Era imposible que hiciera tanto frío en verano. Aquello era tan antinatural como las propias hadas que revoloteaban sobre sus cabezas en círculos.

- ¡Jijijiji! ¡Pobrecitos, van a quedarse como pajaritos! -coreaban las dos criaturas al unísono.

Seguíamos caminando sin saber muy bien a donde dirigirnos y además me preocupaba bastante el hecho de que las plantas a nuestro alrededor fueran adquiriendo una pequeña capa de escarcha, algo que me hizo pensar en que, aunque intentáramos encender fuego, la humedad de lo que teníamos para hacerlo nos lo impediría totalmente. 

Hasta ahora había pasado un poco de todo, sabía que estábamos en problemas pero tampoco quise darle tanta importancia como los demás, sin embargo ya empezaba a preocuparme de verdad. Miré a un lado y a otro a ver si daba con algún tipo de refugio natural o algo que nos pudiera servir y tan solo veía oscuridad, maleza y por supuesto las malditas hadas....

Por un instante me detuve y, haciendo hueco con las manos, me eché el aliento en ellas para calentarlas un poco al tiempo que decía:

-Chicos o hacemos algo o de verdad que ni siquiera vamos a ver al espectro.-

Al decir esto, me eché al suelo y comencé a hacer algunas flexiones para activar el cuerpo mientras discutían que hacer. Confiaba en que la pequeña Zaina viera algo que a mi se me pasaba y poder montar un refugio provisional y, a pesar de llenarme las manos de tierra, no tenía otra forma de entrar en calor.

El frío se acentuaba, las hierbas así lo mostraban con una pequeña capa helada... las palabras de Cory cada vez demostraban más su madurez... aunque no sus actos... en vez de pensar se pone a hacer musculitos...

Miro al rededor en busca de algo que nos pueda servir para hacer una guarida improbisada... mi imaginación volaba junto a las historias que a diario leía en mi casa... seguro que habría algo con lo que poder guarecernos esta noche... ¿pero el qué?

Me quedé pensativa unos momentos y finalmente comente en voz alta:

Podemos quedarnos en alguna raiz levantada, o algun arbusto espeso y abrazarnos todos y quedarnos muy juntos...como los ratones o los conejos. Hariamos turnos cambiando el que está en el centro.

La cosa no pintaba nada bien, y yo sabía que ese frío podía ser fatal...

Y quizas...podría encender otra hoguera...aunque si el espectro existe, seguramente lo atraerá

Escuché a Zaina y me detuve en mi precario intento de entrar en calor. Aquello no resultaba por lo que, la única opción que se me ocurría para entrar en calor era encender de nuevo una hoguera por mucho que nos costara:

-A ver chicos, Zai, tiene razón pero si no queremos congelarnos tenemos que hacer otro fuego.-

Al decir esto busqué con la mirada algunas ramas o lo que fuera que nos sirviera para montar la fogata. Mientras que, dando un par de pasos me acerqué a Zaina y le dije:

-Esta vez déjame que te ayude a encenderlo, entre los dos podremos hacerlo más rápido.- ,luego me giré al resto y dije, -Tenemos que buscar lo necesario para encender fuego chicos, vamos.- ,luego sonreí levemente y dije en voz alta hacia las hadas, -¿Alguna de vosotras quiere ayudar?-

De acuerdo, asentí entre los dos iremos más rápido. Yo te enseñaré...os enseñaré a todos por si acaso nos despistamos.

Miré a las hadas con desconfianza y continue hablando- vayamos cogiendo ramitas, y cuando encontremos un sitió bueno para descansar os enseño como se hace.

Me puse en camino agachandome para coger ramitas mientras con la mirada buscaba algún agujero en el suelo, algún arbol hueco o con las raices levantadas....cualquier cosa que pudiese servirnos de refugio hasta que amaneciese

Dos pequeñas estalactitas cuelgan de mi nariz, hago memoria y no recuerdo una situación en que haya pasado más frío que ahora mismo.

Me preocupa el tema del calor, pero tampoco era buena idea encender un fuego, según tengo entendido cuando algo está muy frio si lo acercas al calor, explota. Vi que pasó una vez con un cristal de un coche, y no quiero que me pase con las manos.

-Tened cuidado, si acercas algo frío a algo caliente, puede explotar, ¿Por qué no hacemos como los pingüinos? Si nos juntamos mucho mantendremos mejor el calor mientras buscamos una cueva que esté más resguardada.