Partida Rol por web

Trix acelera veloz y perdemos a uno de los perseguidores que nos disparaban sin piedad. Solo uno de los perseguidores queda y este acelera rápidamente para darnos alcance mientras sus cañones fallan por poco contra nosotros.

Apunto los cañones y disparo con ellos, pero estos fallan, perdiéndose en la infinidad del espacio. Escucho las palabras de la transmisión y apoyo las palabras de Zendra pues eso es lo que entiendo:

- Trix, esa transmisión no proviene del caza, sino que de alguna estación espacial que está más adelante. Ellos quieren acabar con el caza si lo acercamos lo suficiente."

Sigo apuntando al escurridizo caza, que se mueve mucho más rápido de lo que yo soy capaz de apuntarle. El sistema de disparo de los cañones es algo pesado y sumamente tosco, no entiendo como las personas pueden impactar con algo tan primitivo. Aun así, lo sigo intentando pues no hay nada más que pueda hacer en este momento.

El caza sigue acercándose maniobrando entre la chatarra orbital. Los haces de luz roja de sus láseres cruzan el espacio e impactan otra vez contra la nave haciendo que el panel se ilumine con nuevas luces amarillas y rojas.  Las alarmas vuelven a pitar brevemente mientras una luz roja intermitente inunda la cabina de mando y los puestos de artilleros.

El computador de la nave sitúa averias en el casco y pérdida de presión en la parte posterior. La pantalla marca las zonas amarillas de la nave que han sido impactadas y no pinta bien. 

Entre las luces y los sonidos de alarma, la voz del droide os trae otro mensaje de la estación Munos:

"Mi amo dice que si aguantáis un poco mas los sistemas automáticos casi lo tienen en su retícula de impacto"

Los escudos han caido , disparad o nos convertiremos en chatarra espacial . 

El caza se acerca aun más a nuestra posición y es muy difícil perderlo. Intento apuntar con el cañón, pero mi disparo se pierde en el infinito apenas aprieto el gatillo. La verdad es que no estoy hecho para estas armas primitivas.

Miro lo cerca que se supone debemos estar de la estación espacial y he hecho de que si nos impactan una vez más tendremos serios problemas e incluso podríamos ser acabados. Me preparo para activar los sistemas de protección ambiental que me compré para sobrevivir en el espacio en caso de que lo necesite.

Las maniobras efectuadas por vuestra piloto para evitar los restos de chatarra hacen que sea mas dificíl aún dispar a un blanco que no para de moverse por entre los restos. La energía de los escudos es nula y el casco no aguantará mucho mas. Pero de pronto una ráfaga escarlata de láseres impacta en la parte posterior del objetivo rojo marcado en la pantalla como Enemigo 2 y su señal desaparece inmediatamente del radar. Pronto comprendéis que ha sucedido, una torreta de vigilancia oculta entre la chatarra, y completamente automatizada. 
Los refugios de piratas suelen ser sitios esquivos y bien protegidos. Este tenía las dos cosas.

Mientras la estación espacial toma forma y sus luces os indican su situación visual, veis como el segundo marcador rojo en el radar correspondiente a la etiqueta Enemigo 1, desaparece de la misma manera que su compañero. Un escalofrío os hace pensar en vuestra misión y cómo conseguir salir de allí de una pieza si acabáis con la vida del Mynock. 

La voz del droide vuelve a sonar por el comunicador.-Tienen preparada la Plataforma 3 para su amarre. Por favor, acceda con cuidado.-

A medida que os acercais podeis discernir la pantalla de energía azul de acceso al hangar. Un hangar con forma triangular, al igual que la estación, y con las aristas cortadas por las tres pantallas de energía. Una nave tipo lanzadera está ubicada en uno de los tres lugares de aterrizaje destinados para tal efecto. Como comitiva de bienvenida, un droide protocolario C-3PO y un Sullustan con un traje de trabajo y manchado de grasa de arriba a abajo os esperan.

Un haz destruye finalmente a nuestro perseguidor y nos deja paso libre hacía nuestro destino. Una estación espacial escondida entre la chatarra, casi como la guarida idílica de los piratas espaciales. Por lo menos ya no tenemos un atacante sobre nosotros intentando matarnos. Me relajo, suspirando ante el peligro inminente de ser despresurizado ya un poco disipado.

Me levanto de los cañones y me voy al puente, desde donde miro las torretas escondidas y a quienes nos reciben. Miro al resto del grupo y comento:

- "No sé como lo haremos, pero deberemos desactivar las defensas antes de intentar irnos o nos desintegrarán antes de despegar. No debemos dar pasos en falso o perderemos todo, vidas incluidas. Recuerden el plan y nuestra coartada. No nos mostremos como somos a menos que estemos frente al Mynock o no tengamos más alternativas. ¡Que la Fuerza nos acompañe a todos!"

Recojo todo mi equipo y mantengo mi sable de luz escondido para que no sepan quien soy y que es lo que significa. No quiero que algún pirata idiota vea mi sable de luz y entienda que hay una gran recompensa que cobrar si me delata a los Siths. Si pagan la mitad de lo que los rumores indican, se puede comprar un carguero y aun quedaría para vivir cómodamente el resto de la vida.

Justo en el momento en que Roorh habia confirmado su objetivo en el  punto de mira, un certero disparo  proveniente de las defensas de la base escondida entre la chatarra; terminó con su perseguidor. Un gruñido de fastidio fue la respuesta del wookie mientras dejaba caer de un banzado los mandos del cañon.

Cuando escucho  como su compañero humano  descendia y regresaba a la cabina, decidió  seguir sus pasos ya que, en la  torreta poco mas podía hacer. Descendió pausadamente la escalerilla metalica mientras la nave  se colocaba para  entrar en el enorme hangar que los aguardaba.

Al oir las palabras de Kazer, el wookie respondió con un escueto gruñido de afirmación, y se dispuso a recoger sus enseres. Una vez dispuesto, espero a que la nave se posase y terminase la secuencia de anclaje.

- ruur wooorrarr  gurooor raaaarroor roorar ruuur ...-
 

Zendra asintio antes las palabras del jedi. Tan solo esperaba que alguno de sus compañeros tuviera la habilidad mecanica suficiente para reparar los escudos.

- Estoy de acuerdo pero yo no tengo ni idea de como repararlos. Alguno de vosotros es buen mecanico?

Espero a que todos hablen ya que comenzaron a preparar el asunto antes de tiempo , y cuando la Zeltron ve que hay un momento de tranquilidad los manda callar para luego activar la radio y comunicar su llegada . 

Comentad eso luego , ahora voy a comunicar por la radio nuestra entrada . 

Aquí la piloto de la Zimbrera , preparándonos para el atraque por la puerta número 3 . 

Desconecta la radio y procede a realizar las maniobras pertinentes con cuidado para acceder con la nave al atraque . 

El carguero se posó con un ruido metálico pero suave sobre la cubierta de aterrizaje. El aire despresurizado inundó la rampa de salida y las dos figuras se os acercaron mientras bajábais. El Sullustan comenzó a hablar en su idioma e inmediatamente fue traducido por el droide.

-Bienvenidos a Desguaces Orbitales Munos. Soy Kieb Dublul, mecánico y dueño de esta empresa.- 

Me cubro con mi capucha y bajo de la nave para ver de frente al Sullustan y al droide. Le saludo con una inclinación y le respondo una vez que mis compañeros están a mi lado:

- "Hola Kieb, yo soy Kazer. La guapa es Trix, la lista es Zendra y el peludo de mal genio es Roorh. Estamos acá por indicación de Qui'Rell."

Me quedo de pie, esperando a que el droide traduzca mis palabras, mientras miro al pequeño mecánico por debajo de mi capucha. Miro a los lados para saber si hay más gente cerca y si hubiesen defensas automáticas que estén apuntándonos en este momento.

El hangar parece vacío, a excepción de unos pocos droides de mantenimiento y herramientas dispuestas para el trabajo. El sullustan saca una extraña llave y comienza a desmontar el morro de la nave mientras sigue hablando. Los dorides de mantenimiento recorren la nave por debajo, por encima y por los lados con unos instrumentos que poseen una pequeña antenita.-Estoy encantado de tenerles aquí, aunque tardaré un poco debido a la naturaleza del trabajo, claro está. ¿Son de este sistema?.- 

Escucho sus palabras mientras miro lo que hace, hasta que veo que se pone a desmontar la nave, momento en el que le detengo y le pregunto:

- "Hey, hey... ¿Que le haces a nuestra nave?"

Pienso que quizás el Sullustian pensó que esta es una nave robada para desensamblar y vender por partes o lo que sea que hagan con las que consiguen a base de piratería, pero el hecho es que es nuestra nave y debemos tenerla en el momento en que queramos largarnos de acá.

Habia dejado hablar al jedi ya que no era muy dado a  ser tan "diplomatico" como el resto del grupo. Roorh reacciono como solo un wookie podia reaccionar cuando el  pequeño sullustan se disponía a  desmantelar la nave. Ni corto ni perezoso, el enorme wooki se plantó de un salto ante el sullustan y lo agarró sin problema del cuello. Con un ligero movimiento de su brazo,  alzo al sullustan en el aire y, con cara de pocos amigos, gruñó:

- ruuuur rooorarr ruoooor grooooar rooooar ruuuuur....-

Zendra se desplazó hasta quedar a la vista de aquel sujeto que ahora colgaba un metro en el aire.

-Mmm... el wookie ha dicho algo sobre el sabor de los Sullustian. Yo de ti, contestaria rapidito, amigo. Venimos de un largo viaje y nos hemos dejado su pienso en casa.