Partida Rol por web

Ra Fandu paso a la carrera por delante de la sala de invitados y siguió el pasillo circular abriendo la puerta de la sala de carga donde estaban escondidas de ojos curiosos las cajas de Ikrausita-r40.

Tiro de una lona y allí apiladas y con los indicadores en rojo estaban las cajas.

- Mierda.-

Dijo al tiempo que el piloto y la droide llegaban a la zona de almacenaje.

- Bien los indicadores están en la esquina superior derecha, hay que abrir el menú dandole al botón de sup. y luego bajar en la lista hasta encontrar terme. y a partir de ahí jugar hasta que la barra este en medio y en amarillo mínimo. Vamos.-

Dijo el técnico de sistemas, que se rasco fuertemente el pelo bajo la mandíbula. La teoría era fácil, pero la maña para lograr que cada contenedor se quedara en un punto de no combustión era otra cosa. Aun se preguntaba cómo era posible que un impacto enemigo hubiera obligado al sistema de refrigeración subsidiario dejar de alimentar aquella parte de la nave. Le parecía, inaudito.

Agachado frente a uno de los paneles de control, Iri sonrió con nerviosismo. En sus manos estaba que la Última Galgari, su cargamento y todo el pasaje se convirtieran o no en polvo estelar. Sería todo lo contrario a una muerte memorable, pensó. No es que tuviera prisa por acabar sus días, pero desde que su carrera profesional se viera truncada y alejada de sus planes originales, había albergado la secreta obsesión por alcanzar la gloria. No necesito llegar al poder, pero quizás acabar mis días sin preocuparme por quien se acerque por mi espalda.

—Sí, sí —hizo un gesto a Ra para que se callara un momento—. Conozco estos paneles, pero acuérdate que estos sistemas no estaban actualizados y teníamos que hacerles un bypass... ¿dónde era...? Acércame un destorn— antes de terminar la frase, el chadra-fan ya le había acercado la herramienta, pendiente de los movimientos de su capitán— Gracias. Vale, ANKy, sigue mis pasos. Primero desatornilla ese panel lateral. Tienes que encontrar un cableado que si los juntamos y empalmamos aquí...

Hablaba en voz alta para asegurarse de que la droide le seguía, pero también para asegurarse de que no se equivocaba. Era igual que cuando estudiaba las regulaciones pandoranas, tan complejas y excesivamente burocratizadas. Repetir en voz alta, como si lo presentaras al Senado.

—¿Seguimos teniendo de esa cinta...? Gracias —cerró el panel con un manotazo demasiado fuerte que le hizo aguantar la respiración y luego volvió al control digital—. A esto me refería, ahora sí tengo acceso al terme y...

Ellassar empezó a trastear la consola de control de sensores que tenía junto al cañón. Lo puso a máximo rango con la esperanza de poder localizar "cualquier" cosa con tiempo. Ciertamente en ese espectro, no obtendría una información precisa de que se acercaba, pero si la distancia y podría calcular la velocidad de acercamiento y el tiempo de reacción restante.

Oido Capi.

Como lo cierto es que la situación era un poco preocupante, decidió armar un torpedo. Posiblemente sería detenido o desviado antes de impactar, en caso de ser lanzado, pero eso le daría unos segundos más de reacción.

Ellassar lo sabía bien... si te lanzan torpedos, misiles o algo "gordo", sueles centrarte en evitarlo antes de seguir tu curso de acción predefinido... Es lo que se llama "espíritu de Supervivencia" y es intrínseco de toda raza viva.

Abriendo el canal de comunicaciones a la sala común preguntó:

Como Jefe de Seguridad de esta Nave, he de hacerles esta pregunta, por nuestra seguridad y la suya.

Cabe la posibilidad de que alguno de ustedes, tenga un rastreador activo, o que la Unidad R2 tenga activada una baliza silenciosa, en tal caso los habrían seguido a ustedes y siguen en peligro. Por cierto, en caso de ser conscientes de ello, que sepan que también siguen en peligro. He activado un dispositivo al que llamo "Seguridad del Hombre Muerto". Si yo muero, BUMMM, si muere alguno de mis compañeros, yo decido si BUMM, en definitiva, no estoy de humor para juegos. Me tomo muy en serio mi trabajo.

Serían tan amables de contestar? gracias!!!

Espero que Brec, intente percatarse de si alguno de ellos miente mala manera... Bueno en el caso de que sea R2 no se si notaría nada, quizás un "escozor" en los oídos por el piiiii ññiiiii, mooo que emite esa unidad...

Iri pronto se vio rodeado de sus compañeros: ANKy, Ra Fandu, Brec. Comenzó a abrir uno a uno los cinco cajones de almacenamiento de Ikrausita y a revisar los conectores, las placas de agrinium (una aleación basada en aluminio usada para crear velas solares o armaduras de droides, y que era altamente resistente a todas las formas de radiación). El empalme de los cables era un continuo, y los niveles de energía, tras unos minutos de tensión y al tiempo que ANKy tecleaba unos códigos en el panel interno de los cajones, fueron descendiendo. Si bien es cierto que Ra se preguntaba por el motivo de los problemas de refrigeración de la Galgari ante los impactos láser (tal vez hubiera que hacer una revisión a fondo), Ellasar no se separaba de la torreta láser, y comenzó a hablar a los invitados por el sistema de megafonía. Entonces respondieron.

No lo creo, "encargado de la seguridad" -añadió Yalla, hablando en alto en el salón de la Galgari para responder con claridad-. Éste droide lleva un tiempo conmigo, y antes de adquirirlo le hice un escaneado completo. En todo caso, hay más lugares en esta nave donde esconder un rastreador que en este droide... -respondió la twi'lek-.

Lo cierto es que Yalla tenía razón. En aquella nave modificada algunas veces y dedicada al transporte no sería descabellado llevar una baliza, silenciosa o no, en algún lugar de la misma. De hecho, muchos proveedores solían incluir balizas dentro de los contenedores de sus mercancías alguna de ellas para conocer las rutas de sus transportistas (como vosotros), o incluso en algún lugar de la nave.

Finalmente, cuando lográsteis manipular todos los cajones, las sirenas que inundaban de luz roja todas las salas y el pasillo de la nave se desconectaros. Lo niveles de temperatura, después del susto, se habían reestablecido. Tal vez os pensárais tomar una ruta más concurrida o una carga con menores preocupaciones en los próximos encargos... El caso es que regresásteis todos, excepto Ellassar, al comedor*. Allí esperaba Yalla, Girad y R2-M3. Una vez allí el trandoshano os habló con cara de preocupación, si es que eso era posible.

¿Alguien puede explicarnos qué ha ocurrido? -preguntó Girad al notar el cese de los pitidos y las luces de emergencia-.Menudo viaje movidito, ¿a qué sindicato debéis créditos? -masculló entre pitidos típicos de R2-M3-.

Ra, cuando puedas, podrías venir a la torreta, estoy preocupado por  una cosa. Necesito de tu mente privilegiada, y como no de tu incontinencia verbal... Gracias!!!

Si todo está normalizado, alguien podría venir a controles y poner este "pajarito" en marcha? esto de ser un tiro al blanco fijo, me pone los "cuernos" de punta.

Brec, la cena no se habrá quemado con este desajuste en el viaje, verdad?

Señorita Ril, tiene usted toda la razón. Pero mi obligación era preguntar. Por contra y supuestamente, tenemos un técnico super capacitado y un Capitán extremadamente experimentado, que en caso de tener una baliza silenciosa en la nave, deberían de estar IN_FOR_MA_DOS. Detalle que pienso averiguar de inmediato que pueda sacar mi bonito culo de esta torreta.

Será posible que les hayan metido una baliza en la carga, y sean tan estúpidos de no cerciorarse? pero de que circo han salido estos chicos?

—Hablando de incontinencia verbal —respondió Iri por el canal secundario. Tampoco le interesaba que sus pasajeros tuvieran toda la información—. Llevamos en piloto automático un buen rato, déjame a mí lo de pilotar que yo no me meto con lo de la seguridad. Teníamos un trato, ¿recuerdas?

Habían conseguido salvar la carga y la nave, pero aún quedaban muchas preguntas sin responder. Ahora que no tenían a un pájaro buscando agujerearles el casco, debían llegar a su destino, reparar la nave y largarse de allí.

—ANKy, revisa la nave de arriba a abajo con un escáner. Quiero descubrir si nos han seguido o tenemos una baliza. Y en ese caso, quién es el responsable —la droide era la más apropiada para encargarse de la tarea. Ra tenía trabajo de sobra después del ataque y Brec era mejor gestionando seres vivos. Quedaba su oficial de seguridad—. Estamos fuera de peligro por ahora, Ellassar. Si no tienes nada mejor que hacer, yo echaría un cable a ANKy. 

Tras echar un último vistazo a las cajas, regresó a la cabina. Quería lanzar unos cuantos informes de diagnóstico y no perder de vista el rádar.

Afortunadamente habían logrado esquivar el ataque, y por el momento estaban a salvo... del ataque, pero no de la inestabilidad de su carga.

- Por favor, permanezcan en sus asientos - dijo a los dos pasajeros - Es más seguro que no se muevan de esta zona.

Inmediatamente fue a ayudar al piloto de la nave en la tarea de estabilizar la carga. Ayudó en lo que pudo, no era experta en la materia pero hizo lo que pudo junto a sus compañeros. En momentos cruciales de vida o muerte el ingenio se agudiza. Una vez solventado, volvió con los demás a la zona donde habían permanecido los pasajeros, los cuales querían respuestas.

Cita:

Hizo una sonrisa, algo de broma para bajar la tensión no era malo.

- ¡Cualquier cosa quemada siempre sabrá mejor que cualquier plato que puedas hacernos! - respondió con una sonrisa a Ellassar.

Luego volvió a centrarse en Girad y Yalla.

- De momento no podemos descartar ninguna opción. Puede ser que fueran tras nuestra carga... o tras nuestros pasajeros.

Miró fijamente a ambos, esperando percibir alguna señal en sus facciones que denotaran sorpresa o todo lo contrario. Igualmente, dada las circunstancias, debían averiguar la verdad lo antes posible. Se concentró en la Fuerza y en ellos, intentando indagar en su mente, lo justo para escrutar en sus pensamientos si mentían o no decían toda la verdad.

El Chada escucho el parloteo de Enlazar y se rasco la cabeza.

- Allá vamos. Un millar de cosas que hacer, de nuevo.-

Y es que solo 24 horas antes, la nave había pasado por su anterior crisis de “arreglos”, reproches, y malos humos, aquello era un no parar. Cada vez que aquella nave tenia un problema, había que volverse loco.

Lo bueno es que no le faltaba trabajo.

Paseo por el pasillo circular y hizo un alto para mirar a los pasajeros.

- Descuiden, esta todo en orden. Esto es una tartana antigua, y a veces, y mucho mas cuando nos disparan, hacen faltan más de dos manos peludas para mantenerlo todo en su sitio. Me encargare de arreglarlo todo lo antes posible. Mientras tanto, disfruten con el resto de la tripulación, a mi, seguramente no me verán en bastante rato.-

Con aquello se dio por despedido de los clientes y empezó su trabajo, y había mucho trabajo qué hacer dentro y fuera de la nave. Pero por dentro era por donde metería mano primero.

Empezó a bajar las escalerillas de la torreta al tiempo que decía.

- Que cuerno se te ha roto ahora Tikaroo, cielo.-

Había ayudado con la carga y ahora parece ser que sospechamos que aquellos "intrusos" que habían contratado el viaje habían colado a bordo alguna especie de baliza para que nos siguiesen en pleno vuelo y nos asaltasen. La verdad es que mis circuitos no veían ninguna lógica en aquella argumentación pero dado que cosas peores habían visto mis ojos, tampoco objeté.

- Está bien, está bien... ahora revisaré la nave - fui directamente a coger el escánner y pasarlo por todos los sitios de la nave - ¿y si la baliza la han pegado al casco? - que lo fácil sería colocarla fuera, aunque con el caos de desorden que normalmente teníamos en la Galgari, podríamos estar viajando con una colección de rastreadores y no habernos dado cuenta.

Antes eché un ojo, estancia por estancia, por si "algo" no encajaba y pudiera advertirme alguna señal de que la trampa estuviera allí, a la vista de todos y a la vez camuflada a la percepción de cualquiera.

 Llevamos en piloto automático un buen rato, déjame a mí lo de pilotar que yo no me meto con lo de la seguridad. Teníamos un trato, ¿recuerdas?

Ese es el problema Capi, que somos un blanco perfecto ya que dado que volamos en una dirección fija y velocidad constante, calcular donde disparar sin posibilidad de fallo, es muy fácil hacerlo. Si hasta un Colmilludo de Tatooine podría hacerlo!!!

Estamos fuera de peligro por ahora, Ellassar. Si no tienes nada mejor que hacer, yo echaría un cable a ANKy. 

Oído Capi, sospecho donde puede estar esa baliza...

- Que cuerno se te ha roto ahora Tikaroo, cielo.-

Hombre, ya has llegado... ehh como? Cielo? te has golpeado la cabeza peluda Ra?

(Sonrisa profident, mostrando mi afilada línea de dientes)

Oye, me temo que en esas malditas cajas que llevamos, pueda estar metida una baliza silenciosa, a fin de controlar el lugar donde se encuentra la carga... Tu no te aseguraste, antes de entrarla en la nave, de que estaba "limpia", verdad?

Alguna teoría de donde podría ponerse esa baliza, en una de esas cajas?

-Uffff. De verdad que eres majo. Pero, eres consciente de la cantidad de naves de contrabandistas de esta zona de la galaxia, y que sin motor hiperespacial somos, evidentemente, objetivo de cualquier que "patrulle" la zona en búsqueda de blancos fijos. 

Chico, no sé que manía te ha dado con lo de la baliza, como si fuera imposible detectar una nave pasando por un sector especial. 

En fin. No, no he revisado nada de eso, me dedico a reparar, buscar problemas de seguridad es cosa tuya, si quieres. 

Pero déjame recordarte que llevamos unos seis parsecs con esa carga, me parece un verdadero problema esperar ha encontrarnos aquí, porque si alguien siguiera esa carga, difícilmente iban a predecir que nos íbamos a quedar sin el hipermotor. 

No se digo yo.- 

Y por fin dejo un espacio de silencio, porque muchas veces el diminuto Ra Fandu olvidaba que los demás podían hablar también. Era el momento de Devaroniano de escapar de aquella parte de la nave, sino, le tocaría escuchar otra perorata del mecánico, que por otro lado, tenia ganas de cháchara. 

Yalla no dijo nada ante la nueva respueta de Ellessar, que permanecía en la cabina de artillería, pero no parecía dispuesta a hacer ningún tipo de revisión, ni tampoco dejar que nadie la hiciera, en su droide astromecánico. La twi'lek comenzaba a pensar que no había sido buena idea contrataros, pero no dijo nada, sino que se limitaba a mirar a Girad. Por su parte, Iri volvió a la cabina de pilotaje, ofreciendo órdenes a sus compañero para revisar la Galgari.

Girad, en esos momentos, levantó los músculos sobre sus ojos, pues Brec, quien les había acompañado en casi todo ese rato de travesía, dudaba ahora de ellos.

Sea como sea, señora -respondió el trandoshano-, ustedes han aceptado un dinero, y a nosotros como pasajeros tras entregaros las armas en señal de buena disposición. ¿Y si diéramos la vuelta a la tortilla y fuera yo el que reclamase de vuelta los créditos que os he pagado por un mal servicio de viaje? No lo pienso hacer, claro, puesto que no es el estilo de uno... Me conformo con que dejen de dudar de nosotros... de una vez -añadió Girad-, pues supongo que no es la primera vez que llevan pasaje o carga de dudosa reputación en sus bodegas...

Al trandoshano le sorprendía que, en la época de terror en la que estábais, aquel grupo de transportistas se sorprendiera de las prácticas que cualquier contrabandista aceptaría sin dudar o precuparse, pese al riesgo.

Pese a la retahila del trandoshano, notaste que algo muy concreto rondaba la mente de Girad. Sus pensamientos estaban centrados en esa nave, en ese ataque, en... en cómo ocultar algo. La Fuerza fluía por sus pensamientos y tú la captabas, y supiste en ese instante, mirando al trandoshano, que éste sabía del carguero atacante en ese viaje. De hecho, Girad sabía que esa nave venía a destruirle. ¿tal vez esas prisas por marcharse de la estación de asteroides tan rápido?

Tras unos comentarios acerca de las posibles balizas de seguimiento, así como del pequeño rifirafe de Ra con alguno de sus compañeros (la verdad es que todo el peso de la nave, también literalmente, lo tenía para sí y su constante mantenimiento), ANKy y Ellassar se pusieron manos a la obra para realizar un escaneo de la nave. Si las cajas de Ikrausita-r40 tenían en su interior algún tipo de baliza era algo improbable (pues el compuesto, como habías comprobado ya, era muy inestable como para llevar "sorpresitas"). Tal vez fueras las propias cajas las que fueran las propias balizas, o que el rincón más profundo (o tal vez no) de la Galgari tuviera que ver con ese seguimiento (sin contar a los pasajeros y su droide, claro).

En definitiva, aquella cuestión era un problema realmente menor al lado del hecho de que casi habíais explotado en el espacio, quedando desintegrados, sin contar tampoco de vuestra ausencia en esos momentos de escudos deflectores... Ra, por su parte, se marchó a la zona inferior de la nave a realizar su correspondiente mantenimiento.

Mientras revisaba cada rincón con el scaner, y cada caja de ese maldito cargamento (con que solo una caja fuera una baliza, ya era suficiente), abrió un canal con Iri...

Oye Capi, la tensión dentro de la nave está aumentando. Nosotros dudamos en parte de los pasajeros, que pueden ser culpables o no, y ellos no están por la labor de comprobar si llevan un chisme encima que delate su posición.

Por contra, nosotros no podemos garantizar que no seamos nosotros quienes llevamos algo que nos delate, y por tanto su estancia en la Calgari es un peligro... Si queremos que esto no vaya a más, y que no redunde en contra de nuestra reputación, deberemos suavizar las cosas.

Yo propongo devolverles las armas. Aquí a dentro no les servirán de mucho, sobre todo si el ataque viene de fuera, y tal como estamos sin escudos, nuestro menor problema es un par de pasajeros con armas...

Que te parece?

- Cierto - asintió tras las palabras del trandoshano - Hicimos un trato y nuestro deber es cumplirlo, y dejando de lado la índole de la carga de otros servicios que hayamos podido hacer, eso no significa que nos tengamos que dejar matar por no conocer toda la información necesaria para hacer bien nuestro trabajo. Si nos esconden información, no podemos estar preparados y garantizar la seguridad de la carga o pasajeros. Si hubiéramos sabido del peligro que entrañaban, habríamos tomado más precauciones.

Hizo una pausa, mirando fijamente a Girad y Yalla.

- Casi morimos todos y todo por no saber la verdad sobre quienes son ustedes. Creo que nos dejamos deslumbrar por un trato sustancial, pero nadie regala dinero a cambio de nada. Tenemos pocas opciones, pero creo que deberían sincerarse y explicarnos porque esa nave nos atacó y porqué los quieren muertos. De hecho si les matan a ustedes me sabrá mal, por supuesto, pero no quiero que ninguno de mis compañeros muera por culpa suya.

—Pues... —el devaroniano escuchó cómo Iri resoplaba mientras meditaba la respuesta—. Creo que por ahora lo vamos a dejar así. No es que hayamos dado una imagen muy profesional y quiero evitar que tengan la tentación de asaltar la nave. Llámame paranoico pero si sólo nosotros vamos armados, mejor que mejor.

No le gustaba la idea de que permitieran que les registraran, y eso se sumaba a la lista de cosas que no le gustaba de aquel encargo.

—Sigamos con el plan original y no les pierdas ojo de encima. Si vuelvo a ver alguien que se acerca sin identificación, me mantendré alejado y listo. A ver si a Ra le da tiempo a reparar lo justo para no quedarnos varados en mitad del espacio de repente...

Ra Fandu empezó a silbar y toquetear cosas aquí y allí hasta que ahora, con calma y tranquilidad todo era mucho más sencillo. En unos pocos minutos había vuelto ha hacer funcionar el sistema de refrigeración y podía centrarse en el resto de los mil detalles que quedaban por arreglar de la nave.

Tenia la sensación de que sus compañeros harían lo de siempre y seguirían discutiendo sobre quién o que tenia la culpa, cuando en el espacio profundo, un ataque era el pan de cada día para casi todo el mundo.

No le preocupaba en exceso. Si no pudiera dormir por ello, seguramente jamás habría salido de su planeta. Y prefería estar donde estaba ahora, sin duda.