Partida Rol por web

Al moverse junto con Anastacia. Al ingresar a la cocina se dan cuenta de que esta no es precisamente lo que se supone que es, sino algo completamente diferente.

No solo que la cocina es mucho más grande que el edificio completo visto desde afuera, sino que, además, en una de sus paredes hay una inmensa cantidad de monitores, controles, perillas y teclados. Los monitores, bastante pasados de años, algunos con el típico color negro y verde, pasa información rápidamente, otros un poco más parecidos a televisores de los años 60 modificados, con imágenes en blanco y negro, solo uno o dos monitores son a color, y en los mismos alcanzan a ver imágenes suyas segmentadas en distintas etapas del poco tiempo que han pasado en este lugar.

Anastacia va de un lado para el otro, fijándose en algunos relojes que marcaban vaya uno a saber que, y corría hacia un teclado y empezaba a escribir algo en uno de los monitores viejos.

- No, no, no, no! Esto no está bien, para nada bien. ¿Porqué ahora? ¿Qué hay de diferente ahora? - es lo que escuchan repetidamente por parte de la mujer.

Observa todo aquello fascinada, ¿cómo era posible que fuese más grande por dentro?*, miara todas esas pantallas con curiosidad, a pesa de que no entendía nada - es totalmente de los 70...- seguía caminando por todo aquello, sin atreverse a tocar nada por miedo a que explotase - quizás somos nosotras- dice de manera inconsciente, cuando se da cuenta de ello se tapa la boca con ambas manos ¿Será eso verdad?

Observé a mi alrededor sin entender absolutamente nada. Tampoco sabía qué eran todos aquellos botones y lucecitas, parecía una nave espacial o un avión o algo extraño. Quizás Esther tenía razón y lo que estaba sucediendo lo estábamos provocando nosotras mismas. Pero ¿qué podíamos hacer al respecto? Realmente no creía que pudiésemos hacer nada, pero nunca estaba de más preguntar.

- ¿Qué ocurre? ... - dije con preocupación - ¿podríamos hacer algo al respecto? ¿Debemos hacer algo? ¡Dinos algo Anastacia, no estás sola aquí!

La mujer seguía viendo los monitores y tipeando cosas en los teclados.

- ¡ESO ES! - dice en un respingo de alegría - Apareció una habitación nueva. Hay que encontrarla y desconectarla para que la energía vuelva a su flujo normal y pueda reiniciar el pueblo, sin esa energía nada podremos hacer y los Autones ingresarán aquí y todo estará perdido.

Se da vuelta y las ve a ustedes dos.

- Ven esa puerta - dice mostrando una al final de la cocina - ahí hay un pasillo con varias puertas. los tubos en la pared están llenos de cables, observen cual habitación ha aparecido y rompan el tubo, tengan cuidado que tiene energía. Hasta donde se esta la cocina - dice mostrando donde están - La librería y una habitación.... Un momento - dice tomando una bocanada de aire y calmándose - Bajo ninguna circunstancia pueden desconectar la habitación ¿Está claro? ¿Me ayudarán?

Miré a Anastacia y la escuché atentamente, al fin había dicho algo. Solo teníamos que desconectar una habitación que había de más... pero no sabía muy bien cómo se suponía que íbamos a saber cual era la nueva...  en fin, era hora de hacer algo al respecto. Sonreí y me crují los dedos de las manos. 

- Vamos allá.

Miró nerviosa a la mujer y frunció los labios - si, si te ayudaremos- dice mientras sacude la cabeza afirmando - ¿eso arreglará esto? -  miró a Alice y dibujó una tímida sonrisa - entonces vamos ¿no? - esperó a que la chica se moviera para ir tras ella. 

Anastacia las ve con ojos grandes de agradecimiento.

- Sí, si no estoy equivocada desconectar una de las habitaciones me da la energía suficiente para reiniciar el tiempo en el lugar y eliminar a los Autons.... al menos por un tiempo. - se vuelve hacia las consolas - Recuerden, la habitación no. El resto no me importa.

Las dos avanzan hasta la puerta al final de la cocina. 

Al abrirla se encuentran en un pasillo que, si no supiesen que están en un edificio de no más de 40 metros cuadrados, aparenta algo completamente normal y sin nada que sobresalga de lo habitual. A excepción de las tuberías que se desplazan por el techo.

Esta tubería es un caño grueso que está en el medio del techo y tiene ramificaciones en cada una de las puertas que hay en el pasillo en tubos más pequeños que se pierden detrás de las paredes. 

El pasillo está bien iluminado, con lámparas bastante viejas pero con una luz potente que les permite ver sin inconvenientes.

En total hay 6 puertas, sin contar por la que ustedes están ingresando. Hay 3 de un lado y 3 del otro.

Entré en el pasillo y me paré, miré a Esther, había 6 habitaciones, tres en cada lado. Lo único que parecía que podíamos hacer era que cada una registrase las tres de cada lado, pero no me fiaba mucho.

- Lo suyo sería que cada una registrase las 3 habitaciones de un lado... pero... dijo que hasta donde ella sabía había aparecido una habitación y solo había una cocina, la librería y una habitación ¿eso es que han aparecido tres salas nuevas? No sé si deberíamos separarnos... ¿tú qué opinas? ¿nos separamos y revisamos cada una 3 de cada lado? ¿o mejor vamos juntas?

Miró nerviosa al pasillo, para después volverse y mirar a Alice. Dibujó una pequeña sonrisa que reflejaba algo de temor - no me hace mucha ilusión separarme, pero así iremos más rápido - miró las 6 puertas de nuevo- creo que acortaremos el tiempo y podremos darle más ventaja a Anastacia - deja caer los hombros y suspira un poco- ¿cuál eliges?- mira a la chica de nuevo, esperando su decisión. Debían moverse rápido contra los autons.  

Me encogí de hombros y señalé el lado derecho, empezando a revisar las tres habitaciones con precaución y a la vez detalladamente para poder averiguar cual era la nueva o las nuevas y qué debíamos hacer. Realmente no entendía nada, pero esperaba que tuviésemos suerte.

La primer puerta que abren da a una inmensa biblioteca, a ojo pueden calcular que es una habitación de uno 15x15 metros, alfombrada, en gran parte, de color rojo en el piso, mientras que en todas las paredes se puede apreciar una cantidad incontable de libros, desde el piso hasta el techo hay estanterías llenas.

En el final de la habitación hay una sola luz que está iluminando algo que, desde donde están no alcanzan a distinguir que es.

No entendía muy bien lo que estaba pasando. Pero preferí quedarme fuera y mirar desde la puerta el resto de habitaciones antes de decidir en cual tenía que entrar y cual tenía que desconectar.

- Ehm... ¿tú también ves lo mismo que yo? Creo que todo está doble... - Dije girándome viendo que Esther estaba observando la habitación del otro lado del pasillo.

Cuando Esther abre la puerta lo que encuentra es un cuarto bastante grande, tan grande que, en el medio se puede apreciar, completamente llena, una piscina de tamaño olímpico, en el extremo opuesto a donde se encuentra la muchacha se alcanzan a ver los vestidores y los trampolines.

Un leve vapor sale del agua, con lo que se puede notar que el lugar esta climatizado. 

Miré de nuevo la habitación, esperando que realmente no hubiese nada más extraño... Pero anoté que esa era la biblioteca y me giré, esperando que Esther me contase si había encontrado algo extraño.

- Bueno, por mi parte aquí tenemos la biblioteca, vayamos a ver las siguientes y luego podremos decidir cual desconectamos ¿te parece bien?

-¿Una piscina climatizada?- miró a Alice extrañada y pasó a la siguiente puerta- aparte de ver una piscina enorme al otro lafo, no hay nada extraño ¿y en la tuya? - se encoge de hombros un poco- ¿vamos a abrir la siguiente?